O2. Trato.
-Mi nombre es Park Jimin.
Los jadeos de asombros no fueron retenidos por los miembros de la guardia real. Nadie conocía al chico, pero ese omega se había atrevido a siquiera responderle al capitán, quien habría replicado nuevamente de no ser por las duras palabras de su rey.
-Yo no obligo a nadie a arrodillarse ante mí, y mucho menos a formar parte de mi manada, omega Park - el alfa líder delineó con sus ojos el rostro del chico. Jimin, por su parte, empuñaba sus manos a tal grado de que estas tomaban un tono carmín debido a la presión -Pero no estás aquí como un simple invitado de honor. Los cargos por los que se te imputan es por robo en el mercado central del pueblo, además de agredir a un integrante de la guardia real. ¿Qué tienes que decir respecto a eso?
Min esperó que el castaño bajase la cabeza e intentara excusarse, pero se mantuvo firme, justo como hasta hace momentos.
-Soy totalmente culpable - sentenció el chico con simpleza, como si no fuera nada en realidad. Incluso había un deje de burla en su tono de voz -Me robé unas cuantas manzanas y uvas del lugar durante meses para llevarlas a uno de los lugares más pobres del pueblo, donde lamentablemente no llegan los suficientes abastecimientos. No podía comer en paz en mi casa al pensar en todos los niños que irían a dormir sin haber probado bocado alguno, majestad. ¿Cómo se sentiría usted con eso?
-Un robo es un robo, así tengas que justificarlo con la tardanza que han tenido algunos alimentos en llegar a algunas partes de Daechwita - intervino JaeWook.
-Podría decir exactamente lo mismo. Yo robo unas simples frutas, pero otro tipo de delitos están escondidos detrás de muchas máscaras de justicia.
-Capitán, le he dado una orden. Silencio - Yoongi lanzó una severa mirada al hombre -Doy por terminado el día de juicio, retírense de la sala y déjenme a solas con el joven Park.
-Pero, majestad...-
-He sido claro, JaeWook. Sigan con su entrenamiento.
Las personas fueron saliendo una a una, el capitán fue el último, tardando unos segundos al llegar a la gran puerta de salida. Cuando se vio solamente en compañía del castaño, suspiró, frotando su frente suavemente antes de volver a hablar.
-Creo que puedes ver con facilidad lo difícil que es ser rey, por lo que entenderás que me has tomado totalmente desprevenido con las cosas que insinuaste hace un momento - empezó Yoongi, manteniendo su mirada fija en los ojos de Jimin, quien sintió con relámpago en su estómago seguido del aullido de su lobo, pero supo disimular muy bien.
-Ser un rey significa preocuparse por todo un pueblo completo, no solamente por las partes más resaltantes, líder Min - la suave voz del chico fue música para los oídos de Yoongi, quien relamió sus labios al dar una calada del exquisito aroma del chico frente a él -Como usted dijo, el día de juicio ha acabado, y aún no he escuchado mi sentencia.
-En estos momentos me interesa más el hecho de que me expliques de que hablabas hace unos momentos. Puedo entender perfectamente las razones por las que decidiste robar aquella comida, pero de una forma u otra he llegado a la conclusión de que hay un problema que debo solucionar, ¿Me equivoco? - preguntó Yoongi mientras estiraba su mano hasta el suelo, en donde un vaso de cristal repleto de agua reposaba. Cuando dio el primer sorbo, notó como los curiosos y anhelantes ojos del Omega se detenían en la copa que contenía el líquido, y no fue difícil llegar a una conclusión -Debes estar sediento...
Ignorando la negación de cabeza que obtuvo, se puso de pie y caminó hasta el chico, quien lo miraba atentamente.
Park sentía sus manos temblar con cada paso que el pálido daba. Intentó negarse, claro que lo hizo, pero la sed lo estaba consumiendo hasta el punto de sentir un leve ardor en su garganta debido a la sequedad se esta. Como un vagabundo recién llegado del desierto, tomó el vaso e ingirió el agua de este sin detenerse. Al terminar, tardó unos segundos en despegar sus labios del cristal, para después pasar sus manos atadas por su boca, secando sus labios.
-Si espera una confesión de mi parte, déjeme decirle que no soy alguien fácil de manipular. Yo le digo qué es lo ocurre, ¿Y luego qué?, ¿Los culpables terminarán cortándome la cabeza cuando salgan impunes?. Perdóneme si desconfío, alfa Min, pero usted podría ser tan culpable como las personas detrás todo esto. Me preocupa mi familia, también me preocupa qué pueda llegar a pasar si no se toman cartas en el asunto, y no me basta con un simple voto de confianza para estar tranquilo.
Yoongi tomó el vaso nuevamente y soltó una risita. Había algo en ese chico que le gustaba de cierta forma. Todos solían tratarlo como un mismo Dios, adulándolo, regalándole cosas, resaltando sus virtudes... Pero nadie le había hablado de esa manera, ni siquiera cuando aún era príncipe. Nadie había sido totalmente sincero al dirigirse a él, evadiendo cosas que podían claramente ofenderlo, pero Park Jimin, como se había presentado el chico, había dicho lo que pensaba con una sinceridad abrumadora, rozando lo petulante o insolente.
El castaño no tenía pelos en la lengua, y había sido capaz de notarlo en las pocas palabras que habían cruzado. La mayoría de omegas siempre intentaban persuadirlo, ya sea por su apariencia física o por su estatus como rey, en cambio ese chico de mirada firme parecía querer matarlo, en un principio.
Cautivador, en verdad.
-Cuando me senté en el trono por primera vez, juré ante todo el pueblo tomar sus necesidades como las mías - empezó el alfa sin desviar su mirada de la del contrario -Y para ello, tuve que aprender que lo personal no puede interferir en el reinado. Mis sentimientos no pueden interferir en la buena manera de llevar un reino. Tú quieres seguridad para tí y para los tuyos, puedo dártelo. La confidencialidad puede con todo. Tú buscas seguridad y justicia, yo busco seguridad y paz... ¿No es irónico?
Min se detuvo frente al contrario e introdujo su mano en el bolsillo de su pantalón de vestir, sacando una afilada navaja. El primer pensamiento que atravesó la cabeza del omega, fue peligro, pero antes de que siquiera pudiese reaccionar, las sogas en sus manos estaban siendo cortadas sin problema alguno.
La cara del alfa demostraba total seriedad, lo cual le generaba a Jimin un pequeño deje de seguridad, muy a pesar de no estar dispuesto a admitirlo. En muy raras ocasiones, alrededor de toda su vida, fue capaz de sentirse así. Las dudas sobre si sus decisiones eran las correctas seguían presentes, pero estaba tan desconcertado por el actuar del rey que dio un paso hacia atrás cuando sus manos se vieron liberadas.
Nada había sido como lo había imaginado. ¿No lo estaba amenazando? ¿No iba a matarlo con esa cuchilla para silenciarlo?. Las palabras del mayor de escucharon sinceras, y fueron capaces de penetrar el alma del omega. Antes de ser enjuiciado, había pensado mil formas en las que aquello podía terminar, pero ninguna de ellas rozaba lo pacífico.
-Tú puedes ayudar a un pueblo entero, omega Park. Puedes ayudar a todos los habitantes de Daechwita, y yo puedo ayudarte a tomar la justicia que tanto anhelas - Yoongi alzó su mano, dejándola a un ángulo de noventa grados y avanzó el paso que el era había retrocedido -Entonces, Jimin. ¿Tenemos un trato?
Al comprender mejor la situación, analizando todo desde una diferente perspectiva, lo supo. No había nada que perder.
-Tenemos un trato, líder Min.
.
.
.
Tengo las ganas de decir ¡¡SE PRENDIÓ ESTA MIERDAAAAA!!.
Y...
¡¡SE VIENE LO SHIDO!!.
Aja, equis. Hace unos días me puse a pensar un poco el curso que va a tomar esta historia, y ya tengo un poquito de la idea de cómo irá todo uwu espero que la guste.
Gracias por leer 🌺
-Dovely/DiMo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top