v e i n t i c u a t r o


Veintinueve semanas.

La campanita del local sonó cuando ambos salieron del establecimiento, dejando atrás los olores a químicos, colorantes, shampoo y demás, sintiéndose totalmente fantásticos y renovados, porque nada mejor que un cambio de visual, y más ahora que Taehyung se estaba sintiendo un poco extraño estando en su estado, perdiendo un poco de su autoestima al notar muchos de los cambios de su cuerpo, no se trataba nada más de su panza sino todo en general, había sido un golpe duro.

—A YoonGi seguro le va a encantar
—comentó su compañero mientras sacaba de su abrigo las llaves de su auto, desbloqueandolo.

—¿Tú crees? Quizás ni se dé cuenta —
dijo el embarazado, sin borrar la sonrisa, todos en la peluquería estuvieron alagandolo, no sabía si le dedicaban aquella atención por su estado, pero se había sentido lindo.

—Entonces me avisas y yo lo pateo por no darse cuenta —amenazó el mayor —le diría: es que vamos, mira a tu marido, es hermoso, sino estuvieras tú yo le hubiera hecho ese bebé.

—Ahg, callate hyung, no es agradable imaginarse eso —Taehyung frunció su nariz, luciendo adorable.

Seokjin entró primero, y esperó que Taehyung también entrara al auto para ponerlo en marcha, dejando el anterior tema de lado, ambos eran muy pasivos como para siquiera pensarlo.

Taehyung sabía que hace un tiempo, cuando Jungkook visitó su casa, se había descolocado demasiado, lo cual le provocó estrés y terminó tratando mal a uno de sus mejores amigos, y entendía que no estuvo bien, así que en modo de disculpas había invitado a Jin a la peluquería, luego de hablar de la situación con debida madurez ambos procedieron a realizar los respectivos cambios que querían en sus cabellos, el embarazado había investigado y además consultado con su doctor, con el fin de que lo que iba a hacerse no causara algún daño a su cachorrito y ahora volvían a casa.

—Hey, abrochate el cinturón —reprochó Jin —¿a caso quieres que me multen o algo por el estilo?

Taehyung bufó sacando su teléfono, a veces provocaba darle unos buenos puños a su amigo, pero con amor.

—Pensé que dirías algo como "¿a caso no piensas en tu seguridad?"—respondió el menor, Jin seguía con sus ojos puestos en la carretera pero se reía —
¿no crees que ya lo intenté? Pero no me cierra ¡el cinturón de este auto es muy corto que le pasa!

Jin soltó una de esas carcajadas limpia vidrios en tanto seguía al pendiente del volante, procuraba ir con suficiente precaución, más aún con el incidente del cinturón.

—O estás muy gordo —bromeó el omega mayor, quién recibió una mirada para nada dulce del menor, hasta pudo sentirla dejando de reír.

—Tengo siete meses ¿que esperabas? Estoy a nada de explotar, no sabes lo que pesa, aparte que esta aplastando mis órganos vitales, a veces me quedo hasta sin aire, y ni hablar de cuando está muy despierto ¡juega cerca de mis costillas! Tú no quieres saber como se siente pero es horrible...

—Hey, hey no te alteres solo bromeaba — se apresuró a decir, no quería que luego lo tomara personal y comenzara a darle un discurso de como estaba sufriendo, que acabaría en un "pero vale la pena, espero que ya te toque a ti"

—Ya veremos si bromeas cuando sea tu turno.

Jin casi sintió escalofríos, no había nadi que repeliera tanto el embarazo como él, miraba a una gran parte de su circulo de amigos volverse padres y no, no deseaba un pequeño humano haciéndole la vida imposible, aunque claro, le agradaba la idea de convertirse en tío.

—No llames malas vibras —regañó en cuanto paró en un semáforo rojo.

Tae sonrió y acarició su barriga, era una acción que realizaba por simple inercia, ni siquiera lo planeaba y ya estaba haciéndolo, pensaba en que quizás Jin odiara la idea pero podría ser un buen padre y más rápido de lo que se esperaba darle un primito a su inquieto bebé.

Poco después fue dejado en frente de su querido hogar, dejandolo sorprendido al notar que el auto de YoonGi se encontraba allí ¿ya estaba en casa? Eso era verdaderamente rápido, con un poco de esfuerzo salió del auto debido a su prominente panza despidiéndose del mayor, tomando camino hacía su casa, solo fue empezar a caminar cuando sintió los movimientos de su querido retoño, inevitablemente el niño estaba muy inquieto esos días, el espacio le estaba faltando y quería salir lo antes posible, pero no lo tenía permitido aún, así que debía aguantarse.

—Pensé que estabas dormido —susurró colocando su mano en la espalda, definitivamente era agotador llevar a un bebé dentro de sí, lo había deseado demasiado, nunca imaginó que podría resultar doloroso hasta cuando se movía demás.

Amaba a su bebé, sin dudas era un cachorrito muy inteligente, pero a veces buscaba refugio en lugares donde causaba mucho dolor, cerca de sus costillas, o muy abajo en su vientre, ya entendía porque amaban tanto a los hijos.

🌼🍃🌼🍃🌼🍃🌼

El omega entró en silencio, pues su hogar siempre se mantenía silencioso así que no deseaba romper con esa aura, dejó su abrigo en el perchero, y sus zapatos los acomodó en una esquina, últimamente debía llevar zapatos de los más cómodos y faciles de quitar, porque agacharse suponía un gran reto estando como estaba. Finalmente se adentró en su hogar, sintiendo un poco del aroma a alfa, bastante reciente, por alguna razón le hizo feliz, su esposo estaba en casa, quizás podrían compartir tiempo juntos.

Primero entró a la habitación pero no había rastro del alfa, así que hizo un puchero lamentandose.

—Quiero un abrazo —se quejó con voz infantil, pero antes de salir del lugar, se adentró al baño de la habitación, pues si, las ganas de orinar habían aumentado considerablemente.

Luego de salir del baño caminó hacia el estudio de YoonGi, supuso que allí podía encontrarse el mayor, al parecer el cachorrito percibía su emoción y se movía de una manera que hasta tae podía notar los piecitos marcados en su piel.

—Dios mío, ya no puedo esperar para que salgas, antes tenía mucho pánico pero en serio necesitas salir —se quejaba el omega, parecía que en su vientre tenía una fiesta y si no era eso entonces su hijo era un maniático del ejercicio.

Finalmente abrió la puerta que daba acceso al lugar, encontrando efectivamente a su esposo frente a la computadora, luciendo concentrado en no sabía que, también habían varios papeles regados por el lugar, quizás tenía mucho trabajo, lo cual era un poco raro porque hace bastante que había entregado el último proyecto que había planeado, a menos que tenga otros de los que no le había contado nada. Entró y cerró la puerta en silencio, sabía que su hyung era bastante estricto mientras trabajaba.

—Hola hyung —saludó para llamar la atención del chico, de igual manera YoonGi no quitó su vista de la pantalla.

—Hola tae —contestó simplemente, fue cuando se dignó a mirarle en cuestión de solo segundos —sé que es raro verme en casa tan temprano, pero estoy bastante ocupado ahora.

¿A caso lo estaba echando? Taehyung quería pensar que era él que malinterpretaba sus palabras, pero luego de decir aquello, el mayor solo se concentraba en teclear con algo de rapidez, no podía creerlo, es que no había necesidad de volver a aquellos tiempos dónde el alfa lo ignoraba por trabajo, y más ahora que era una bola gigante de hormonas descontroladas, que por nada explotaba.

—¿Quieres que me vaya? —preguntó directamente.

El alfa rodó los ojos, si bien entendía el porqué de su actitud explosiva, nunca se podría acostumbrar a que cada cosa que decía Taehyung le encontrara otra interpretación bastante extrema, como aquella vez que estaba intentando colocarse su sueter favorito pero por obvias razones ya no le quedaba y le sugirió que usara otro, comenzó a acusarlo de decirle que estaba tan gordo que nada le entraba, estaba tan delicado.

—Tae-ah, no estoy diciendo eso, solo que estoy muy ocupado porque debo acabar esto pronto, así que no puedo darte la atención que requieres.

—Eso quiere decir que quieres que me vaya —acusó el omega, claro trataba de entenderlo, tenía un bebé estirandose como si ya tratara de salir, su parte lobuna que ya era bastante necia y las hormonas que les gustaba hacer de las suyas.

—No lo dije, pero si te quieres ir estás en tu derecho —A YoonGi le gustaba jugar con fuego.

Por alguna razón eso le pareció grosero al menor, ¡él solo quería mimitos! Hay que ver que los alfas eran idiotas por naturaleza, a muchos le faltaba sensibilidad.

—Y yo que quería que nos fuéramos a dormir abrazados a nuestro nido, el bebé se calma cuando estamos así, pero al parecer no tienes tiempo para eso —no se crean todo, el omega se había vuelto bastante manipulador.

—Está bien, pero esto es muy importante para mi Taehyung, podemos hacerlo después de que termine, no hay necesidad de ponerle drama a mis palabras, debes entender que no te puedo dedicar todo el tiempo que quisiera ahora, estoy trabajando —Min esta vez soltó el teclado y giró su silla para encararlo, tratando de usar sus palabras cuidadosamente.

—¡Pero siempre dices la misma basura! Taehyung estoy ocupado ahorita voy, y no apareces nunca, estoy siendo un loco hormonal lo sé, pero mientras sigas así mi mal humor irá aumentando y me harás decir más y más cosas estúpidas
—el omega estaba un poco alterado y eso era lo que menos quería.

El alfa bufó llevando una de sus manos para apretar el puente de su nariz, él tenía demasiada paciencia pero cuando estaba con el trabajo encima y su esposo embarazado reclamandole, esta podía ser capaz de desvanecerse.

—Entiendo que estás embarazado y pasas por varios procesos, creo que me he esforzado en demostrarte que valoro tu esfuerzo al llevar al niño dentro de ti, así que no puedes argumentar que nunca te presto atención —tae parecía a punto de objetar pero el alfa le indicó que esperara un momento —No eres un bebé Taehyung, puedes entender que en este momento no puedo.

—A veces te comportas como idiota.

YoonGi masculló algo de lo que solo pudo entender 'exageras' porque salió del lugar para darle cierto dramatismo, y bueno, si estaba molesto, al parecer ni siquiera YoonGi había notado que se hizo la permanente, no esperaba mucho pero que al menos le dijera que se veía bien, sacudió su cabeza, no era hora de pensar en permanentes, estaba odiando tanto la montaña rusa de emociones que tenía que pasar durante su embarazo, no se supone que sería así.

Volvió a la habitación, pero esta vez dirigiéndose a donde estaba su preciado nido, lleno del aroma de él y YoonGi combinados, el lugar le traía mucha paz, solo quería que pasaran un rato en familia, con su alfa diciéndole que era una donita rellena y llenandolo de besos y caricias.

Pero al intentar acomodarse para tomar una siesta notó lo difícil que se le hacía, ninguna posición era lo suficientemente cómoda y su bebé no se estaba portando bien ese día, para nada bien, la espalda le comenzaba a doler.

Quería llorar.

Muchas gracias por leer y muchas gracias a quienes me apoyan en este proyecto 😘❤

¿quién exageró más? ¿Taehyung o Yoongi?

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