Todo por él



La desesperación era algo que puede llegar de repente, algo que llena tu cuerpo y luego sientes como poco a poco llena tu cuerpo de incertidumbre y de miedo.

Tanjiro se encontraba en ese momento paralizado por el terror, su hermana, su preciada y adorada Nezuko y su querido Urokodaki estaban en manos del demente de Sabito.

En el momento en el que por fin sus extremidades lograron responderles, corrió de inmediato, sabía que tenía que ir a informarle a Giyu.

Tanjiro podría ser respetuoso, pero no lo pensó dos veces cuando interrumpió al oyabun y al nuevo saiko-komon en plena discusión.

- debiste tocar antes de...-

Las palabras del oyabun fueron interrumpidas por Tanjiro.

- ¡mi familia fue raptada por Sabito!-

Las palabras fueron dichas entre lágrimas, no había notado en que momento estas habían comenzado a salir de sus ojos, pero no podía pensar en algo menos importante que estuviese ocurriendo.

La cara de ambos se notaba preocupada, fue en ese momento que Giyu hizo algo que nunca se hubiese imaginado.

Se acercó a Tanjiro y lo abrazó, sabía que en ese momento el chico necesitaba apoyo, él también había perdido en el pasado a alguien, se negaba a que Tanjiro sufriese del mismo modo en que él lo hizo.

El oyabun observó la escena, no diría nada, sabía que Giyu había sufrido en el pasado, y ahora se había encontrado a un chico que podía lidiar con todo el pasado del mejor ejecutor y aún así tolerar todo el desastre a su lado.

Tanjiro era el sol que podría salvar a esa luna de colapsar.

- debemos informar de inmediato a todos, no podemos esperar, cada segundo es importante -

- señor, se que lo debemos pero, puede que haya una solución-

Giyu estaba dudando de esa opción, pero con Sabito fuera de control, no tenía opción.

- ¿cual sería?- preguntó intrigado el oyabun

- le daremos a Sabito lo que quiere-

- me niego, puede ser una trampa y...-

- aún así señor, es la única manera de poder dar con el lugar, solo así salvaremos a la familia de Tanjiro y a Makomo, solo le pido clemencia por Sabito, que no sea asesinado, Makomo no soportaría perdernos a ambos-

- Giyu-san, usted no puede...-

Un beso en la frente de Tanjiro fue plantado por el azabache.

- puedo hacerlo, confía en mi, prometo que Nezuko y Urokodaki regresarán a salvos, pero a cambio quiero que cuides a Makomo si algo me pasa-

Una sonrisa sincera y amable fue dada al chico.

- no quiero que nada le pase, yo lo quiero pero...-

Tanjiro sabía que estaba mal que deseara que Giyu no se arriesgara, era cierto que su hermana y Urokodaki eran su familia, pero amaba a Giyu, se sentía tan terrible el solo hecho de dudar en su decisión.

Pero Giyu parecía leer la mente del chico, con ambos pulgares comenzó a limpiar las lágrimas del rostro de Tanjiro y a tocar delicadamente sus sienes.

- se que tienes miedo de decidir, pero tomaré la mejor decisión, te prometo que cuando esto acabe, todo estará mejor-

Las palabras fueron una promesa firme, la palabra de Giyu nunca se ponía en duda, el oyabun sabía que sería riesgoso, pero Giyu tenía razón, la única persona que podía tener éxito en esa misión era el, nadie más.

- prepararemos todo y podrás hacerlo, solo espero que todo salga bien-

Giyu dudaba un poco, estaba nadando entre tiburones y no tenía arpón podría salir, pero no estaba del todo seguro.




Sabito se encontraba preparando un poco de fruta, manzanas y duraznos para su linda hermanita, la familia de Tanjiro podría esperar un poco, solamente habían pasado unas horas y ya se estaban quejando, se notaba la insolencia de esa familia.

Al terminar todo, limpio minuciosamente sus manos y fue con su hermana, su pequeño Makomo, la cual se encontraba llorando.

- deja de llorar, odio que llores- dijo poniendo la bandeja entre sus manos, pero ella solo lo ignoró

- debes comer- dijo Sabito sin obtener respuesta

Cansado de su actitud, decidió irse

- me molesta que seas así de insolente, regresare mas tarde-

- ani-ue ama a Tanjiro y nunca te amará a ti-

Esas simples palabras hicieron a Sabito regresar, tomar la bandeja, arrojarla a la pared y pegarle una bofetada a Makomo

- solo porque eres mi familia no estás muerta por esas palabras-

Sabito se fue dejando a la chica con el labio sangrando, un poco de hambre y dolor la harían recapacitar.



La mañana siguiente Sabito salió a las afueras de Tokio, compró un teléfono desechable y marcó el número de su señor.

- buenas dias mi señor, ¿ya pensó mejor las cosas?- la pregunta de Sabito obtuvo una rápida respuesta

- acepto tus términos, solo quiero a Makomo y a la familia de Tanjiro a salvo-

Sabito quería gritar de alegria, por fin sería feliz, sin saber que Giyu no buscaba la feliz del chico de la cicatriz, todo era por Tanjiro, Giyu iría al infierno por él, todo por él, por el dulce y tierno chico que había cautivado su corazón...








Espero les guste





Los kiere y ama inukagban








Rakel 😘😘😘😘😘😘😘😘😘😘

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top