Se dice que las brujas no existen
menos los hombres lobo
que el coco es mentira
que los vampiros son un mito..
¿Pero y los demonios?
ellos son reales
habitan entre nosotros
¿estas dispuesto a sobrevivir?...

- ¿le gusta el letrero Mitsuri-sama?- preguntaba emocionada Makomo

- esta muy lindo, quedó perfecto para la entrada, ¿puedes decirle a Iguro que lo cuelgue en la entrada?-

- claro que si-

Makomo salió feliz y Tanjiro solo observó a la chica irse, él, además de sus amigos y Makomo, se habían encargado de ayudar en la decoración de la casa de los demonios.

Mientras que Shinobu y Kanae se estaban encargando de los trajes, todos esta saliendo bien, todos ayudaban.

Los dulces, disfraces, la casa, todo estaría listo pronto, incluso Tanjiro había sido solicitado para ayudar a limpiar después del evento.

La dedicación del Kanroji a los detalles era única, se estaba esforzando porque todo saliera bien, eso incluía tener a Giyu.

Tanjiro no podía negar que estaba nervioso, pensó en preguntarle a Makomo por el ejecutor, pero prefirió no hacerlo, ahora solo le faltaba esperar la noche siguiente para verlo.

Muichiro y su hermana lo habían acompañado a comprar sus disfraz, se vestiría como hombre lobo, algo sencillo, mientras que Nezuko se había decidido por uno de bruja.

Claro que Nezuko asistiría un rato a la mansión, pero sus compañeras de la escuela la habían invitado a una fiesta, la cual iría, con la condición de no tomar nada.

Cuando casi anochecía, la casa estaba terminada, desde las telarañas, las maderas sueltas, las luces, calabazas y detalles, todo estaba listo, la casa de ese año, se llevaría los mejores sustos de las personas.

-¿porque tú noviecita aún no nos ha sacado, si no viene pronto, le diré su nombre al tipo que está afuera?-

Daki ya estaba cansada, Shinobu no era indispensable para ella, si con eso se podía ir y ver pronto a su hermano, la traicionaría.

- no harás eso, se que pronto vendrá, solo esperará una oportunidad y créeme, nos vengaremos de todos cuando esto pase, además no ha sido tan malo-

Douma ya estaba desesperado, también quería irse, hablarse entre susurros y tener hambre, además de estar al lado de Daki, no era el mejor lugar para estar, pero sabía que su mariposa no le fallaría, de hacerlo, sabía que Muzan la eliminaría y Shinobu no quería morir, no sin antes hacerle daño al hombre que la rechazó en el pasado, Douma sonrió, la maldad de Shinobu, era casi tanto como la suya, ya que ambos querían o habían hecho daño a alguien que no se los había causado directamente.

- ¡dulce o truco!-

- que buenos disfraces chicos, todos pongas sus calabazas y yo y este demonio les daremos sus preciados dulces- decía el oyabun sonriendo, a su lado, Gyomei portaba su traje de demonio, las chicas habían hecho un trabajo magnífico, en especial con el par de brazos de mache, parecían demasiado reales, que los niños pensaban que el saiko-komon, en realidad tenía cuatro brazos.

Los más grandes, que entraban a la casa, salían pálidos y algunos llorando.

Tanjiro llegó en el momento en que una pareja de chicos salía corriendo asustados, gritando que un demonio los quería devorar.

- Tanjiro, me alegra verte, terminaremos pronto y recogeremos, te tocará ayudar a Giyu a recoger los adornos del segundo piso-

Tanjiro no pudo decirle que no a la sonrisa de Kanroji, además se veía muy bien, parecía un demonio adorable, a diferencia de su esposo, quien parecía que te arrastraría a los confines del infierno y te haría arrepentirte del miedo con esas serpientes en su cuello.

- oyabun, me retiro, tengo que ir y cuidar de ese asunto-

- puedes retirarte Gyomei, espero que pronto tengamos avances-

El saiko-komon se retiró y la mayoría ayudó, pero fue Tanjiro quien se impresionó demasiado, si bien no había visto a Giyu, en ese traje de demonio, que dejaba ver casi todo su torso y esos cuerno que parecían fluorescentes, además de esos pupilentes de esclerótica negra, se veía imponente.

Pero resistió, lo más que pudo, no le dio sus mirada de amor ni nada, solo hizo su labor, estaba punto de terminar la labor con éxito y escapar, cuando el ejecutor estaba a punto de irse, dejó caer de una bolsa el tessen.

Cuando Tanjiro lo vio, se le hizo conocido, al tomarlo, Giyu lo observó.

- ¿porque tiene usted el tessen de la señorita Shinobu?-

- ¿que dijiste?- Giyu no sabía cómo reaccionar

- si, es el tessen que el señor Urokodaki le vendió a la señorita Shinobu, bueno, era un regalo para alguien, pero lo puedo reconocer facilmen..-

Giyu se acercó y lo abrazó, las murallas de Tanjiro se derrumbaron, ese hombre con un simple abrazo, podía hacerlo flaquear.

- gracias por esto, prometo compensártelo-

Y así como lo abrazó, Giyu se fue, dejando a un Tanjiro confuso.

Himejima estaba llegando, cuando escuchó la voz de alguien.

- Gyomei, señor, ¿quería pedirle un favor?-

- ¿que ocurre Shinobu?-

- podría quedarme a ayudarlo, Kanao estará con unas amigas y Kanae saldrá con Sanemi, no quiero estar en casa sola y pensé que podría ayudarle-

Gyomei lo pensó, sabía que estaba mal, pero Shinobu era amable y buena chica, así que aceptó.

Cuando llegaron a la puerta, el mayor le dijo que solo vigilarían, nada más.

La chica asintió, platicando un poco, cuando una llamada entró en el celular del saiko-komon

- espera un segundo Shinobu- dijo Gyomei atendiendo la llamada y dándole la espalda a la chica

- si ¿qué pasa Giyu?-

- es Shinobu señor, la traidora es ella-

- pero que...-

Más palabras no pudieron salir de la boca de Gyomei, ya que una daga había sido clavada en su espalda.

- buenas noches señor- sonrió Shinobu

Por el celular se escuchaban las palabras de Giyu y ella prefirió cortar la llamada, abrió la cerradura y sonrió.

- hora de irnos-

- ya era hora mariposa, estaba comenzando a entumirme-

- perdón por tardar, pero los demonios nos movemos mejor de noche- dijo con una sonrisa macabra...

Espero les guste

Los kiere y ama inukagban

Rakel😘😘😘😘😘😘😘😘😘😘

Es que vi estas imágenes y de inmediato se me vino el especial, de hecho había pensado en otro modo de que Shinobu fuera descubierta pero vi esto, venía halloween y pues aproveché.