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Día 24 - Deudas de Cross (Link, Allen)

Link esperaba todo menos una noche de insomnio. Era usual que tuviera que posponer su hora de dormir un poco debido a reportes que solicitaba la Central o el inspector Leverrier, pero las últimas noches habían sido distintas.

Apretó su mandíbula y le dio la espalda a la cama contraria en el dormitorio. Ni siquiera la almohada encima de su cabeza lograba acallar los depresivos murmullos de Allen.

—Me alegra haber salvado un poco de dinero... pero estoy preocupado... —Allen se quejaba mientras dormía con el ceño fruncido y sudor cubriendo su frente. Se sujetaba con fiereza a una alcancía en forma de cerdito. A su costado, Timcampy también se aferraba a una versión más pequeña de la alcancía de Allen. Si, el motivo de la falta de sueño de Link era que Allen no había dejado de murmurar y hablar dormido desde hacía días.

El rubio se dio por vencido y decidió sentarse en el colchón. Empezaba a dolerle la cabeza y su paciencia era cada vez más escasa. Los problemas empezaron luego del regreso de Cross Marian. Ya que tenía que estar todo el tiempo vigilando a Allen, desafortunadamente se enteró de la extraña riña que estos llevaban en cuanto a las deudas del general se refería. Allen se veía más irritado después de que tuviera que lidiar con la nada barata lista de deudas que Marian había dejado regadas por todo Londres.

A partir de ese día, lo primero que Allen hacía al amanecer era contar cada centavo guardado en su alcancía, una que ni siquiera Link podía encontrar ya que el ojigris parecía ocultarla muy bien. La alcancía reaparecía justo antes de dormir... y acto seguido las quejas de Allen durante toda la noche.

—Mi maestro puede percibir la esencia del dinero... él vendrá y tomará el dinero que tanto me costó ahorrar. Puede que esta noche sea la noche —se quejaba entre sueños indescifrables para Link.

—¡El no vendrá! —Link replicó en tono alto, cansado de tanto drama. Su voz pareció no provocar efecto alguno en Allen.

—Esta noche es la noche... Mientras duermo, mi maestro vendrá y se llevará mi dinero.

—Escúchame bien, el general Marian no va a tomar tu dinero así que, ¡duérmete en silencio de una vez! —se exaltó aún más al ser ignorado.

—¿Y qué va a pasar si se lo roba? Mi preciado dinero... me llevó mucho tiempo ahorrarlo —contestó, pero aún seguía en su estado comatoso; hubiera sido extremadamente cómico para algunos, pero para Link era irritante y sin sentido.

—Si tu maestro viene, lo atraparé... así que puedes dormir tranquilo —le aseguró, llevando la mano al puente de su nariz con la esperanza de que hiciera algún efecto. Para su fortuna, los murmullos de Allen cesaron y fueron reemplazados por sonoros ronquidos. Tal parece que Link no había sido el único que estaba teniendo malas noches para dormir.

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Minna-san, perdón por no subir el drabble del día 24 ayer. No tuve tiempo suficiente para completarlo, pero eso no significa que no terminaré el D Gray-Tober a tiempo. Me he retado a mí misma para culminarlo justamente el 31 de Octubre. Agradezco infinitamente a los que leen estas mini historias. Como dato curioso, este drabble está inspirado en el horario de Allen que aparece en el Gray Log.

PD: Por si no lo notaron o no les cayó la respectiva notificación les aclaro; hoy subí el drabble del día 24 y 25 juntos. Mañana continuaré con la programación regular de uno por día.

#DGrayTober

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Los dejo con un Bye Bye Dango... nos leemos mañana ^^

D Gray Tober By: Varela D. Campbell ウァレラ・デェー・キァンベル。