Una de las cosas favoritas de Tamaki es descansar su cabeza en tus muslos.

Le encantaba y más cuando le dabas caricias en su cabellera oscura.

Tu igual disfrutabas tenerlo así, ver su cara relajada y su respiración tranquila.

Agradable imagen mental.

- eres un amor....

Dijiste para ti misma.

Un agradable y lindo momento para los dos.
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Hasta que Mirio y Nejire llegaron.

Tamaki se asustó y su bello rostro terminó en el duro suelo.

- a-au......

Eso dejará marca.

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