Jungkook apura el paso en dirección al pasillo, con intención de salir al patio e irse a sentar junto a su árbol.

—Jungkook— escucha que gritan detrás de él.

Acelera el paso queriendo ignorarlo lo máximo posible cuando siente como lo sostienen del codo haciendo que se detenga.

No hace falta girar el rostro para saber quién es y actua por instinto cuando le enseña los dientes a Taehyung y se aleja unos pasos gruñendole, advirtiéndole que no se le acerque.

—Jungkook...

Se sentía a la distancia el olor a caramelo que desprendía del alfa. Su omega se removió enojado con ese estupido alfa por ser tan insensible y solo aparecer así.

—Largate.

Taehyung abre los ojos sorprendido e intenta tomar nuevamnete la mano al omega —¿qué sucede?

—Que te largues, Taehyung

—Jungkook ¿estás bien?— pregunta Yugyeom pasándose tras el azabache ya que lo vio salir corriendo del comedor.

Jungkook voltea hacia Yugyeom y rompe a llorar abrazandolo fuertemente y refugiándose en el pecho de su amigo. Café y eucalipto creaban una buena combinación para la tranquilidad de su lobo, haciendo que se sienta inmensamente protegido en ese momento.

"Yugyeom no nos va a abandonar" se repetía a sí mismo.

—¿Qué le hiciste imbecil?— Yugyeom gruñe con su voz de mando a Taehyung haciendo que este retroceda unos pasos y que Jungkook se refugie más en él.

—Yo... no lo sé. Sentí dolor en el pecho y...

—¿Por qué hueles a otro omega?

Taehyung expande enormemente sus ojos —Oh no, Jungkook lo siento muchísimo, olvidé mencionarlo. Es Jimin, lo prometo, iba a presentartelo. Él es como mi Yugyeom ¿si? Te lo prometo, perdóname por favor.

Yugyeom abraza más fuerte al azabache en su pecho y continúa mirando mal a Taehyung hasta que Jungkook se libera lentamente de sus brazos y acaricia su mejilla para tranquilizar al alfa.

—Está bien, Yugy, gracias— dice mientras se seca las lágrimas y deja un beso en su mejilla.

Al omega le invadió un alivio enorme y a su vez lo dejó más sensible que nunca. Jungkook ya no quería luchar más contra sus instintos y simplemente dejó a su lobo tomar el control.

—¿Le crees?— pregunta Yugyeom y Jungkook asiente para luego voltear y refugiarse en los brazos de Taehyung.

No soportaba el olor a otro omega más allá de confiar en el castaño, por lo que frotó su nariz insistente por todo su hombro y cuello y comenzó a hacerse más fuerte su aroma de lo normal.

—Lo siento Jungkookie, lo siento muchisimo— decía Taehyung mientras alzaba al omega haciendo que este rodeará su cadera con sus piernas. —¿quieres ir junto al árbol?

Jungkook asiente y se abraza más fuerte al alfa.

Yugyeom no apartó su mirada lobuna de Taehyung hasta que este desapareció de su vista.

—Creo que no le caigo bien a tu amigo— dice Taehyung bajando a Jungkook junto al árbol.

Jungkook se resistió un poco pero luego de que Taehyung lo soltara y se sentara, simplemente se sentó sobre este y lo rodeó con todas sus extremidades nuevamente.

—Él solo me está cuidando.

—Lo sé, Jungkook, lo siento muchísimo, luego voy a disculparme con él.

Jungkook negó sobre el cuello de su alfa y siguió frotando su nariz por todo sus hombros, cuello, mandíbula ¿y si probaba con su lengua?

Abrazando aún más fuerte a Taehyung, todo lo que su cuerpo le permitía, enterró su nariz nuevamente y comenzó a dejar besos cada vez más húmedos, terminando por literalmente lamer toda la zona.

—Me gustas mucho.— comenzó a murmurar mientras continuaba con sus besos húmedos.

Taehyung estaba inclinando más y más el cuello, dejándose llevar por la situación placentera de sentir a su omega de esa forma. Sus manos comenzaron a recorrer cada parte de la espalda de Jungkook, especialmente la baja, donde la dejaba un rato largo y luego se atrevió a más y las dejó apoyadas sobre su cadera.

—Alfa, me gustas mucho.

Taehyung cayó en la cuenta de que era el omega de Jungkook quien hablaba, separó un poco al azabache y lo vio con sus ojos de un color azul intenso mientras que sus labios estaban rojos por todo el trabajo que estaba haciendo sobre su cuello.

Ni siquiera lo pensó y simplemente lo separó, dejando que se sentara a su lado. No iba a aprovecharse de esa manera de la vulnerabilidad del lobo de Jungkook, después de todo lo que había pasado ese día era entendible de que este se encontrara así.

—No Jungkookie, quédate allí — le decía dulcemente el alfa y Jungkook asintió con un puchero en el rostro y abrazando sus piernas contra su pecho.

Su alfa lo había rechazado, era todo lo que pensaba. Literalmente lo había hecho. Jungkook le dijo lo que sentía y este lo había rechazado.

Estaba haciendo un esfuerzo enorme por no llorar y simplemente siguió mirando un punto al otro lado de donde Taehyung se encontraba.

—Iba a contarte, lo siento. Hace un mes que sé que Jimin iba a mudarse para la universidad aquí en Seúl y quería terminar el instituto aquí para poder hacer los exámenes de selectividad sin problema. Olvidé mencionarlo, lo siento.

Jungkook asiente y sigue sin mirarlo.

—Sabes, mi mamá y mis tías me prepararon una cena anoche y allí apareció de sorpresa Jimin. Creí que no vendría hasta dentro de una semana.

Jungkook vuelve a asentir y Taehyung comenzaba a ponerse nervioso, no sabiendo cómo despejar la mente del omega.

—¿Tu cenaste con tu madre y tu padre?

—Con mi mamá y mi hermana.

—No sabía que tenías una hermana— dice y Jungkook continuó ignorandolo —¿y tu padre?

—Mi padre no vive con nosotros.

—Oh, no lo sabía, lo siento. ¿Quieres hablarme de eso?

Jungkook se encoge de hombros —Es un hijo de puta, no hay mucho que decir. Abandonó a mi mamá haciendo que ella enfermara.

—¿Era su destinado?— pregunta y Jungkook asiente —lo siento muchísimo.

—No lo hagas. Es mejor que ya no esté. Maltrataba a mi mamá física y psicológicamente.

—¿Lo hizo?— pregunto Taehyung sorprendido —Que hijo de puta, ni siquiera entiendo cómo pudo hacerlo.

—En el mundo hay gente cruel, Taehyung.

—No no, lo digo en sentido de cómo pudo permitirlo su lobo. Mi lobo casi me asfixió hoy cuando sentí que estabas llorando, ni siquiera pudiera intentar hacerte algo malo porque mi lobo no me lo permitiría.

Jungkook lo pensó y se dio cuenta que era cierto. Su lobo tomaría el control y haría que el golpe que Jungkook quisiera darle a Taehyung se convirtiera en caricia. No podría hacerle daño, ¿cómo es que su padre lo hizo?

—Era de verdad un hijo de puta.— murmura y Taehyung asiente —¿cómo es tu familia?— pregunta queriendo cambiar de tema.

Taehyung sonrie dulcemente, pareciendo encantado de hablar de ese tema a diferencia de Jungkook.

—Tengo dos madres. No son destinadas, ellas eran vecinas y crecieron juntas. Dicen que siempre estuvieron enamoradas la una de la otra pero a los 17 recién se atrevieron a confesarse.

Jungkook le sonríe enternecido —eso es muy tierno.

—Lo es, demuestra que no necesariamente tienes que estar con tu destinado. Mi mamá Chae conoció a su destinada en la universidad y hoy son mejores amigas. Siempre me dicen que hay una diferencia enorme entre tu alma gemela y el amor de tu vida, ya que al amor de tu vida tu si lo eliges.

Wow, Jungkook no creyó poder sentirse peor ese día pero así lo fue. Sintió la indirecta que Taehyung le había dado en ese momento. Él lo quería como amigo, era claro, y Jungkook estuvo mal interpretando sus intenciones todo ese tiempo.

Sonríe falsamente al alfa, no queriendo demostrarle lo mucho que le dolía

—Por eso me gusta que estemos así Jungkook, me gusta que seas parte de mi vida.— dice tomándole su mano.

—También a mi— dijo Jungkook, aunque odiaba la idea de que este solo lo vea como su amigo.