Escape De La Ciudad
Y aquí habla Mori-Chan con el ¿Sexto? Eh si el ¡Sexto! Capítulo de esta historia, que la verdad es una buena forma de quitarse el estrés, bueno a la historia.
-Vaya que sorpresa- Personaje Hablando-Dialogo.
-Vamos apúrate- Recuerdos.
-Debo tener cuidado- Personaje Pensando-.
-Asalto de Sangre- Técnica de personaje.
################# Cambio de escena
#################
No esperaba mucho y aun así le decepciona, gente pobre y muerta de hambre, demasiados ladrones, abuso de poder, niños en la calle deambulando, de hecho ya la habían intentado robar al menos tres veces.
Tal vez se deba al hecho de que esta caminando por los lugares más alejados del centro, pero en serio, esto es demasiado, incluso había visto como asesinaban a alguien en plena calle y nadie le presto atención.
-Está claro que entre más cerca del centro, es mejor la situación económica y por ende la seguridad- eso estaba claro, por lo cual solo tenia que cuidarse de las personas, pero antes de seguir avanzando fue jalada a un callejón y amenazada con un cuchillo en su cuello.
-Haber anciana, dame todo lo que tengas- el que le amenazaba no era más que un mocoso de 15 años y otros de al menos 13 años.
Slash *Tump* *Tump*
El chico observaba aterrado el como de un simple movimiento la mujer asesino a sus compañeros, mientras intentaba desesperadamente, quitarse la cuerda invisible que le estaba ahogando, que en realidad era una de las colas de la peli-blanca, que no se veían debido a la ilusión.
Crack
Desaciendose del cadáver siguió su camino cómo si nada hubiera pasado, no le importaba el haberlos asesinado, había visto su aura y a pesar de no estar al 100% vio que estas eran completamente oscuras.
Ademas de que probablemente en el momento en que les diera lo que quería la matarían sin siquiera pensarlo dos veces, cruel pero cierto.
#################
Ya había pasado un rato desde de que entro a la ciudad y se dio cuenta de que tardaría más de lo esperado, por lo que tendría que quedarse y descansar en algún lugar, pero para eso tendría que acercarse más al centro, algo que quería evitar.
-¡Oye tu, adonde vas!- se volteo a ver como un hombre tomó del hombro a una niña y la jalo, no dejándola alejarse.
-No me has pagado completamente- el hombre tenía una sonrisa maliciosa, mientras decía esto.
-Pe-Pero se s-supo-ne qu-ag- la niña no pudo continuar debido a que el hombre le apretó el hombro.
-¡¿He dicho que ese no es toda la paga, algún problema?!- ella simplemente estaba por irse ya que no era su problema, pero se detuvo cuando la imagen fue cambiada.
-¡Qué ese no era el trato!- exclamó molesta una rubia, mientras miraba a un hombre sonriente frente a ella.
-Pues los tratos cambian, ahora largo- el hombre en ningún momento, quitó esa maldita sonrisa de suficiencia, como si fuera intocable.
-¡Tuuu, esto no se quedará así!- saliendo del local donde estaba, dejó al sonriente hombre que la miraba con burla.
#################
Todo estaba en llamas, con docenas de cuerpos regados por el suelo y los escombros, otros estaban crucificados por estacas de color rojo negruzco/sangre y otros o lo que quedaba de ellos, parecía que una pequeña circunferencia llena de estacas de diferentes tamaños había estallado desde el interior sus cuerpos.
Mientras aquel hombre de la molesta sonrisa, se estaba arrastrando, sin un brazo, intentando alejarse de aquel que había hecho todo esto.
-Te lo dije, que no iba a quedar así- hablo una voz femenina, mientras una silueta levantaba una especie de espada.
-¡No, por favor!- este rogaba en un intento de que no lo matará.
-Dulces sueños-
Volvió a la realidad, justo a tiempo para ver al hombre intentar golpear ala niña, pero antes de que lo logrará esta y lo golpeó con su bastón, que en realidad era su Katana, por lo que tubo que golpearlo con el lado sin filo.
-Ah, maldita sea mi conciencia- maldijo internamente la Kitsune.
Dejándolo casi inconsciente y en el suelo, todo mientras la niña miraba incrédula.
-Vamos pequeña, dejemos a este patán- dijo empezando a caminar, todo mientras la niña le miraba como pez fuera del agua.
-Ven que esperas, vamos- esta vez si le hizo caso y empezó a caminar detrás de la "abuelita".
Estas caminaban en un silencio incómodo desde la perspectiva de la niña, mientras a la mujer parecía que simplemente le daba igual, estuvieron así durante un rato hasta que la niña decidió romper el silencio.
-Eh disculpe- hablo en vos baja, pero la "abuelita" la escuchó perfectamente y simplemente hizo un *Mmm*, pero aparte de eso no hubo respuesta y siguió caminando.
-Señora- mismo resultado.
-Oiga le estoy hablando-
-¡Señora!- esta vez levantó la voz obteniendo la atención de este.
-¿Si, necesitas algo pequeña?- dijo con voz suave.
-¿Porque me ayudó?- pregunto volviendo a bajar la voz, esperando saber el porque.
-¿Acaso debe haber una razón para ayudar a un niña de ser golpeada?- esta le respondió con su propia pregunta en lugar de darle una verdadera respuesta.
-Pero nadie a querido ayudarme antes, incluso han intentado hacerme daño- hablo mientras bajaba con tristeza.
-No todo el mundo es igual, pero lamentablemente así son las cosas en la mayoría de lugares, siempre habrá alguien que querrá tener al resto por debajo de ellos- dijo con un aura de sabiduría, al tiempo que levantaba su bastón.
Después de eso volvieron a sumirse en un silencio, solo que este era mas cómodo y se movían a una velocidad estándar, siguieron caminando hasta alejarse bastante del lugar, en donde llegaron a unas calles bastante vacías, al parecer esta zona no era muy concurrida, por lo cual no había problema de hablar con libertad.
-¿Y dime pequeña, desde cuando vives en estas condiciones?- pregunto esta sin mirarle.
-Y-yo desde los s-siete- murmuró con la mirada baja, no le gustaba recordar la causa de su estado, como vagabundo.
-Ya veo- otra vez un silencio incómodo y otra vez a la mujer lo ignoraba.
-¿Y que harías si te ofrecieran no sólo salir de ese tipo de vida?- pregunto de pronto la mujer.
-¿E-es eso una pre-pregunta?- dijo mirándole.
-Yo diría una propuesta- respondió esta vez dejando de caminar y mirándola.
-¿P-pro-propuesta?- pregunto sin entender.
-Aash para que lo entiendas, te estoy ofreciendo viajar conmigo y entrenarte- dijo mirándole a los ojos.
-P-pero no eres mu-y vi-vieja- ante esto le salio una vena en su cien al escucharla decirle vieja, que si, su disfraz era de una mujer mayor, pero aun le molestaba.
-Qué no te engañe mi apariencia, soy más que capaz, ¿así que aceptas?- dijo tendiendole la mano.
#################
En estos momentos se encontraban descansando dentro de una posada, que si bien no era mucho, era mejor que nada y tenia lo necesario, aunque claro primero había utilizado su control de viento, agua y fuego para darle una rápida limpieza.
Se encontraba pensando sobre su "habilidad" inventario y las ventajas de este, aunque su mayor pregunta era........¿Podía meter personas o seres vivos dentro de este?, aunque quería comprobarlo no iba a utilizar a una persona, a menos que fuera un hijo de puta no haría eso.
Mientras la niña se limpiaba se puso a pulir su Katana, aunque cualquiera que le viera, simplemente vería a una mujer mayor limpiar su bastón.
-S-señora ya te-termin-e- ah tendría que hacer algo con su timidez cuando salieran de la ciudad trabajaría en ello.
-A un lado de la cama esta tu ropa, después de que te vistas servire la cena- hablo aún puliendo su "bastón", esta no objeto e hizo lo que le dijo en silencio y la cena paso bastante rápido.
#################
Un par de horas después esta fue despertada por la mujer, que le ordenó que se prepara rápido y en silencio, esta le pregunto porque pero no recibió respuesta.
-Señora p-porqu- esta no pudo continuar debido a que fue interrumpida por un considerable ruido que venía fuera de la posada.
-Shh no hables muy fuerte- susurro la mujer, no había esperado esto, el que alguien notará su presencia, pero al parecer si había sucedido y ya le estaban buscando, pero se preguntaba el como le había hecho para detectar su ●Kitsune Genso● que no sólo cambiaba su apariencia, si no que también ocultaba su presencia, cambiándola totalmente y si llegaba a memorizar la de alguna persona, podía incluso replicarla.
-¡Amenos que! ¡demonios como no me di cuenta!- maldijo en su mente al darse cuenta del porque fueron capaces de notarle.
-Vamos no tenemos tiempo que perder- saliendo por la ventana, procedió a saltar por los tejados con la niña en su espalda, dejándola sorprendida por el hecho de que pudiera hacer tal cosa.
Cayendo en un callejón, procedió a suprimir su presencia y a moverse por las sombras, permitiendole el evitar a los soldados que le buscaban, esperando que eso fuera suficiente.
-¡Oye tu!- por un demonio lo que faltaba.
-¿Diga?- si se daba cuenta tendría que matarlo, pero corría el riesgo de le descubrieran.
-No puede estar fuera de su casa, hay toque de queda- parece que la suerte está contigo, no tendré que matarte.
-Oh perdone no lo sabía- sólo vete ya.
-No hay problema, solo vaya a su casa- assh por fin se fue, creía que nunca se iría.
Cuando el guardia estuvo lo suficientemente lejos volvió a moverse por las sombras, esta vez teniendo más cuidado, pero era algo complicado por el hecho de llevar a la niña en su espalda y el hecho de que había muchos soldados moviéndose de un lado a otro.
-¿Oye que eso?- mierda, escondiéndose rápidamente, vio a dos hombres revisar con la mirada el lugar.
-Estoy seguro de haber visto algo- dijo estrechando los ojos.
-Seguramente fue una rata- hablo el otro desestimandolo.
-Podrías recordarme otra vez el porque el toque de queda- pregunto viendo a su compañero, buscando respuesta a la repentina orden de revisar la ciudad.
-Se detectó una fuerte magia oscura entrando a los territorios circundantes a la muralla exterior y poco después desapareció al acercarse a la puerta, por lo que se cree que esta dentro de las murallas- informó al otro la situación, mientras que la peli-blanca maldecía su descuido, no creyó que su fuga de poder durará tanto y ahora se encontraba en esta situación.
Cuando se fueron empezó a correr lo más rápido que podía con la niña estando en su espalda, tenia que dirigirse rápidamente a la salida.
Sssshhhh
Moviéndose a un lado esquivo varias flechas, dándose cuenta de que era seguida por tres hombres y sabía que no tardarían en llegar más, por lo que maldijo su suerte.
-¡Alto ahí!- no haciendo caso siguió moviéndose por las calles, hasta que se vio obligada a regresar a los tejados, esquivando con gracia las flechas y uno que otro ataque mágico de bajo rango.
-¡Cuidado!- el grito de su pequeño "paquete", haciendo que mirara al frente notando que había una bajada y que seguramente una persona común quedaría fatalmente herida si caía desde está altura.
*Sonríe*
Dando un gran salto se impulso cubriendo más terreno, mientras la niña gritaba aterrada y ahí fue cuando sucedió, todos vieron como repentinamente su apariencia empezó a cambiar y donde antes había una mujer mayor, ahora estaba una hermosa peli-blanca y su bastón se había convertido en una Katana.
Ella había escondido sus rasgos de Kitsune, mostrando a los ojos de los demás una "simple" humana, agilmente utilizo uno de los bordes para impulsarse hacia un lado esquivando los ataques de los guardias y utilizo su arma para desviar algunos.
Mientras que la niña aún no salía de su shock al ver la mujer mayor transformarse en una hermosa chica, cayendo encima de un soldado lo utilizo a el y a otros para impulsarse devuelta a los tejados.
-¡Ahí está!- exclamó en su mente al ver la puerta, empezando a reunir magia en su Katana, preparó su técnica, su objetivo, derribar esa puerta de un golpe.
-¡Será mejor que te sostengas fuerte!- grito a su acompañante.
-¡QUE!- grito aparentemente habiendo no escuchado.
-Colmillo Perforante Del Cielo- murmuró lanzando su ataque a la puerta destruyendo la, aprovechando la capa de polvo para cruzar la, siguiente objetivo el puente y el Reino Hestles.
#################
Fin capítulo, espero y haya sido de su agrado.
Palabras Totales 2071.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top