Bueno aqui va, y como lo pidieron...Bienvenidas a mi intentó de fic xD (agregaré algunas conversaciones para el seguimiento, unas serán originales y otra de mi parte)

Haber nadado en una piscina con pétalos de sakura, había sido una de las sensaciones más gratificantes. Quizá la idea era originalmente en la piscina de Iwatobi, pero eso no importaba cuando uno ya estaba dentro del agua. Era relajante al parecer, bueno si le quitaran los constantes gritos de Rei provocados por las sorpresas de Nagisa o los constantes lanzamientos de agua por parte de Rin.

-Haru, se hace tarde, deberíamos ir partiendo a nuestras casas- Mencionó Makoto mientras salia del agua.

-Tan pronto...quiero nadar un poco más con Rin-chan- Quejándose Nagisa lo siguió

-Nagisa, somos los últimos en la piscina, Makoto tiene razón- Apoyó Rei mientras realizaba el mismo acto que los otro dos.

Los tres miraron hacia la piscina pero Haru seguía en "libertad" y al parecer Rin lo dejaría en ella- Ustedes vayan, después lo envió- Asintieron y se dirigieron a las duchas.

Cuando los minutos se convirtieron en una hora, Rin decidió romper la calma que habían creado, ya que ambos estaban flotando en silencio. Sacó a Haru de la piscina ar-regañadientes, y empezaron sus típicas discusiones sin sentido, Makoto tenia razón después de todo cuando estaban solos se comportaban de una manera, bastante infantil.

Rin, revisó su celular, los chicos ya se habían ido a sus casas y lo comprendía era bastante tarde. Le propusó quedarse, aunque estarían muy apretados, pero prefería eso que dejarlo salir a esas horas, Rin no sabia pero tenia un mal presentimiento de algo. Haru aceptó, así que cuando Sousuke lo vio en el cuarto simplemente lo miro con curiosidad, y con la mirada de Rin captó: El chico pez se quedaba

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Los días habían pasado sin problemas alguno, ambos equipos se habían juntado varias veces ya, como si quisieran formar recuerdos y todos estaban bien con eso, pero Rin sentía que no todo estaba bien, había algo que le incomodaba y no era dejar a sus amigos aquí en Japón.

-Rin, ¿Ocurre algo?

La pregunta de Sousuke le había tomado por sorpresa y aunque quisiera, su amigo ya había empezado a reír por el pequeño salto que había realizado, simplemente lo golpeo para no avergonzarse más.

-No es nada, solo...quizá, estoy pensando demasiado-

-Eso no es muy normal en ti- Okey ahora si Rin lo mataba

Después de esa estúpida pelea con su amigo decidió ir a la casa de Haru, hablarian de sus futuros como nadadores y como ganarían todas las medallas juntos, compartiendo el podio y nadie podría bajarlos de ahí, porque ambos habían nacido para ser libres en el agua.

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Rin se había quedado en la casa de Haru, aguantando la cena y el desayuno de caballa. Claro que le costó sacarlo de la bañera, ya que eso entraba en la oferta de hospedaje, incluso llego  a caer en ella mojándose por completo, Haru soltó una risa oculta y Rin no pudo evitar la suya. Como hacia Makoto para sacarlo de ahí, después le preguntaría.

Ambos querían ir a nadar, después de todo solo quedaban algunos días antes de la partida de Rin. Así lo hicieron hasta que Makoto los llamó para salir todos juntos; habían planeado con todos los demás una salida como despedida para el pelirrojo, irían a diferentes partes y sacarían muchas fotos, era un plan pequeño, pero perfecto.

La salida había sido perfecta, todos estaban felices y ahora irían al paradero para ir a la casa de Haru para realizar una especie de fiesta para Rin.( La casa del ojiazul había sido elegida por el mismo tiburón).

-Vamos, Haru, será divertido.- Dijo mientras se apoya en su amigo- Cuando vayas a Australia, haremos lo que quieras

Haru solo miro a Rin con desgano y soltó un suspiro- Has lo que quieras- al terminar de decirlo, Rin se cargo sobre el un poco más acariciando su mejilla contra la otra, realmente lo extrañaría aunque no se lo diría. Cuando llegaron al paso peatonal, Rin se soltó para entrar en la conversacion de Makoto y Sousuke y fue en ese momento que todo paso muy rápido.

Rin estaba a mitad de camino para alcanzar a los dos grandullones del grupo cuando una camioneta a toda velocidad se dirigía a él. Haru no lo pensó, y saltó protegiendo a RIn y recibiendo todo el golpe. El sonido seco de su cuerpo inconsciente al  caer varios metros del lugar y la sangre fluir de su cráneo, fue la escena más horrible que Rin, Makoto y todo los demás habían visto.

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El llanto ahogado se escuchaba en el Hospital como coro en aquel pasillo, todos estaban destrozados especialmente dos chicos que se culpaban por lo sucedido, uno por no ir a ayudarlo o no darse cuenta del auto, el otro por ser único causante de esa desgracia.

Cuando el Doctor salío, llamó a los padres de Haru para hablarles en privado, pero para Rin solo al ver a la madre de Haru caer de rodillas era suficiente para saber el daño que había causado. Solo quería ir a verlo, solo quería nadar con él, quizá solo estaba herido y se demoraría en sanar pero iba a mejorar, Haru tenia que mejorar, ¿Verdad?.

Cuando la noticia de la inmovilidad de piernas de Haru llegaron finedicnas a los oídos de todos, el llantó se ahogo en un silencio abrumador y un pelirrojo choqueado cayo al suelo, siendo sostenido por un pelinegro, era su culpa, el le había quitado el sueño a Haru, el tenia que haber recibido el impacto.

Para todos, fue muy dificil aceptar tal verdad, pero no se rendirían por su amigo, estarían ahí apoyándolo, animándolo; pero a pesar de todos sus esfuerzos los ojos de Haru ya no volvían a brillar, ni siquiera con la caballa que traía Makoto o las ideas alocadas de Nagisa, Haru había perdido parte de si, llevándose también parte de los demás.

Para Rin fue todo en picada, ya no podía nadar como antes y sus ojos cada vez que se encontraban con el agua le recordaban a su amigo que por salvarlo no podría seguir su sueño. Sino fuera por Sousuke , Rin hubiera cometido muchas estupideces, pero por suerte lo ayudo a entrar en razón. 

Rin decidió llevarse a Haru a Australia, quería que lo acompañase a todas partes, a todas sus futuras competencias, después de todo era el sueño de ambos. Convencer a sus padres había sido un tanto difícil pero Makoto fue su "abogado" apoyándolo en la idea. Hasta el mismo Haru la desechó, Rin estaba loco. Pasar toda una vida llevando a un minusvalido consigo, no era tarea facil y mucho menos en un país diferente, pero lo convenció de la mejor forma posible.

-Cumplamos nuestra promesa, nadaremos juntos y para eso te necesito a mi lado-

Solo necesito oír eso para que el vació en su alma intentara llenarse de nuevo. Bueno después de aquello se fue a vivir con Rin a Australia, el pelirrojo poco a poco logró convencerlo de meterse nuevamente a la piscina o al mar, aunque era bastante incomodó tener que apoyarse de él, el sentir nuevamente el agua sobre su piel le recordaba que realmente amaba la libertad que esta le daba.

Con el pasó del tiempo, ambos habían "Ganado" varias medallas juntos y en las ocaciones en las cuales Rin tenia que viajar muy lejos o seguido, Makoto venía a quedarse varios días para cuidar de Haru, o más bien ayudarlo a entrar y salir de la piscina que tenían en la pequeña casa, ya que Haru se podía cuidar solo. Makoto, le costó aceptar la nueva vida de Haru, verlo sentado en esa silla le dolía, odiaba ver como sus ojos se aguantaban las lagrimas cada vez que veía la natación o cuando se notaba a millas que quería competir con Rin y no se podia.

A pesar de todo eso, agradecía lo que hizo el pelirrojo por su mejor y más importante amigo

-LLegue!!, Buenos dias Makoto, no vienes a felicitar al tricampeón- Rin había llegado de una competencia, tenia la maleta en una mano y la medalla dorada reluciendo en su cuello- Ire a mostrarle la medalla que ganamos a Haru- Se dirigió al salón rápidamente, Makoto lo sabía después del accidente, y los tres meses en el cual Rin intentó nadar por su cuenta en Australia, Haru era su prioridad, siempre llevándolo a todas partes, esta vez no pudo por una mala organización del evento, que no dio el pasaje que le correspondía a Haru y aunque no fuese obligatorio Rin se indigno demasiado.

-Volvimos a ganar Haru- Rin le había puesto la medalla a Haru en el jardín ya que lo había llevado hacia allá.

-Te ví, no lo hiciste tan mal- Rin bufó, Haru jamás cambiaría y se alegraba por eso.

Makoto se acercó a ambos y ayudando a Rin lo entran en la piscina. El pelinegro se afirma de la orilla mientras Rin se quita la vestimenta para entrar, al hacerlo Haru se apoya en él, la vergüenza la había eliminado la costumbre. Mientras tanto Makoto guardaba la silla de ruedas y se preparaba para entrar con sus amigos.

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Perdón por la demora, es que ya saben, soy Chilena y tembló y pff bueno internet falla y todo eso.

Los otros finales, no son tan impactantes como este pero si quieren igual los explico