Siempre lo tengo en la punta de la lengua
Quiero decirte eso pero tal vez sea tonto
Se que no es el momento adecuado
Dejaré que sea un pensamiento pasado

Sé que aún algo hay ahí
Pero preferimos ignorarlo
Como el mundo ignora a los vagabundos
Porque somos como de dos mundos
Tan opuestos que giramos a observarnos
Y la curiosidad no se llena
Y a la vez la admiración se hace plena

Y odio admitirlo
Tanto como tú lo odias
Y amo sentirlo
Como tú amas pulirlo

Rasgando las telas oscuras
Dandole paso a la luz en la piel
Descubriendo las cosas por segunda vez
Como un adolescente llorando como un bebé

Y odio admitirlo
Tanto como tú lo odias
Y amo sentirlo
Como tú amas pulirlo

No eras una roca
Eras un diamante
Duro pero brillante
Escondido en una montaña
Solo sale si uno rasquetea lo suficiente

Pensaba llevarte en mi pecho
Pero mi cadena se partió
Déjame llevarte en mi anillo invisible
Donde mi promesa es concebible