46.

—Maldito idiota. Qué te dije de no dormir! No quiero que te desplomes en medio de una reunión! Descansa adecuadamente!

URSS no solía responder a las palabras de USA. Solo miraba divertido cómo era regañado y detallaba paso a paso cómo el americano se sentaban a su lado para hacer espacio y desayunar

—Sé que te gusto
—No!

URSS entrelazaba sus dedos meñique y anular con los de USA y podía percibir una alteración en el aroma ajeno. Solía  sonreír con ese simple gesto.

—Acéptalo
—No es cierto, maldito! Somos dos alfas en medio de una guerra... Deja de pensar en estupideces
—América

Había un silencio largo después de eso. Sin despegar sus dedos, sin palabras, sin mirarse.

—No soportaría tu traición... —USA era de temple firme, pero sus palabras a veces temblaban—. Me dolería más que nada
—Tu maldición es una tontería
—Por eso... Cállate y aléjate de mí

Retiraba su mano y la ocupaba en tomar los cubiertos.
Pero había algo.
Se negó tantas veces pero no fue suficiente. Nunca lo fue. Y aunque no quiso, terminó accediendo a pequeños errores que ablandaban su corazón.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top