Portugal estaba entre las piernas de UK, acorralándolo en el escritorio, dándole besos en ese cuello tan bonito... cuando USA llegó y detrás de él, Canadá

—Papá
—Hijo
—Par de suertudos —Canadá los miró feo—. Cómo pueden tener sexo en la oficina y yo no!
—Necesitan algo? —UK no se movió, pero Portugal rio bajito antes de seguir besándolo sin pena ni prisa
—Condones... Es decir, las peticiones —USA miró a otro lado—. Los papeles. Los necesito
—En el mueble de la derecha, querido
—Puedo quedarme a ver? —preguntó Canadá
—No! —gritaron USA y UK al mismo tiempo.
—Desgraciados. Presumiendo que sí pueden tener sexo —Canadá se fue enojado y USA salió de ahí traumatizado