Karma asintió y Karasuma se retiró.

Le restó importancia a las palabras del mayor por esta vez y continuó siguiendo el rastro de pequeños pétalos por el suelo que llegaban a otra aula del campus.

Observó al frente viendo a Nagisa allí con un cuchillo en su mano lleno totalmente de sangre.
Se sorprendió, aunque no quisiera creerlo para nada, muchas cosas apuntaban a que Nagisa fuera el asesino. Su actitud, presencia y atención en algunos de los casos. Especialmente su ausencia los últimos días.

Su temblor aumentó y sus ojos ahora tenían una mirada aterrorizada. No quería creerlo.