I
Barrio Sesamo 💙
Car💞🤤: Vale chicos, estoy a punto de llegar al hotel.
Car💞🤤: Buha, es que lo veo des de aquí, es to grande.
Car💞🤤: Loco que emoción.
Agus😏: tio, que estaba sobando.
Marcos💛: Hahaha, hermano te va a encantar, este sitio es gigantesco, un día de estos nos despistamos y nos perderemos.
Chadd💛🤞🏼: Ostia chicos, acabo de ir a la piscina, aquí cunde mucho hacer algunas fiestas.
Jack❣️: Se lia, se lia.
Car💞🤤: acabo de entrar loco, este silencio no me mola nada.
Paolo🍑🤤: Coño tu espera a que repongamos fueras, que los españoles damos mucho el cante.
Edgar🍑: Sin mencionar que la chica loca aún no ha llegado.
Ares♥️🤤: No llames el mal tiempo hermano, se respira una calma.
Car💞🤤: Nena no das señales de vida, eso es muy extraño viniendo de tu parte.
Ezan💙: Déjala, debe estar cazando a su próximo lio o algo así.
Ezan💙: Sin duda tiene un don para enganchar a los chicos.
Jack❣️: jajajaja lo sabemos.
Agus😏: Niña no nos abandones loco.
Car💞🤤: Al final con quien comparto habitación?
Car💞🤤: Porque aquí no hay nadie.
Chadd💛🤞🏼: Con la capitana, no te puedes quejar.
Car💞🤤: Brutal, esto se lía que te cagas.
Yo: chicos, chicos acabo de ver un tío que está to bueno.
Yo: Ha y Paolo amor tengo una candidata para que sea tu novia.
Ezan💙: Ahora aparece ella.
Jack❣️: Tarde como siempre.
Car💞🤤: Nena, vente a la habitación.
Me levanto de la amaca del jardín privándome de las buenas vistas de ese jugador estadounidense haciendo lagartijas, dirigiéndome a la habitación donde supuestamente está Carlos, mi mejor amigo, el loco por el cual haría cualquier cosa.
Miro las escaleras con flojera y al final decido ir por el ascensor, aprieto el piso quinto y observo el numero de las habitaciones hasta encontrar la 8B la nuestra.
Paso la tarjeta que me han dado en recepción por la ranura de esta y se abre, dejando ver a mi mejor amigo deshaciendo su maleta. Pero para cuando se da cuenta de que soy yo ya nos encontramos abrazándonos tan fuerte que es imposible que pase una pizca de aire entre nuestros cuerpos. Aprieto mis manos en su espalda agarrando un poco la camiseta.
-Te he echado de menos idiota -Musito separándome de el un poco.
-Yo también -Deja un sonoro beso en mi mejilla, separándose completamente para seguir deshaciendo su maleta- Es increíble que nos den una suit tan grande, quiero decir, siquiera compartimos habitación.
Y la verdades que tiene razón, después de todo esta suit dispone de una habitación central con armarios un par de sofás y una tela, y dos habitaciones con una cama matrimonial. No me quejo.
-Mejor así, cuando lleves aquí una de tus aventuras de una noche no tendrás que echarme de la habitación -Le digo, haciéndome un moño con el pelo, odio, odio la puta calor que hace- Porque la ultima vez tuve que acoplarme con Ares y Nathan.
-Gracias por eso nena- Me mira sonriendo, enseñándome sus hoyuelos- Pero tu también...
Me pongo a reir tirándome encima del sofá- ¿Luego vamos a dar una vuelta? Quiero conocer a los rivales a los que nos enfrentamos -Sigo hablando mientras observo el techo blanco.
-Claro preciosa, a ver cuando tardas en encontrar un lio que te dure todo el torneo.
-Hoy, en la fiesta de recepción.
[...]
-Tenemos hora de quedada para llegar al hotel a las once de la noche, si no recepción va a cerrar o algo así -Me explica Ares cogiéndome de la mano mientras andamos con todo el equipo por el parque trasero del hotel.
Observo con detenido interés a los diversos jugadores que se esparcen por allí y ella, primero de todo veo a Stok Green el capitán de la selección Sud Africana, con el cual intercambio unas cuantas miradas hasta que el decide saludarme con la cabeza, y yo le devuelvo el gesto con mi mano libre. Según lo que he estado leyendo ese muchacho se especializa en carrera y en regates, dicen que cuando pilla el balón no hay quien se lo robe de nuevo.
Sin duda quiero enfrentarme a el -Pues lo siento, pero yo a las once no vuelvo -Recrimina Paolo terminando de comerse su helado- ¿No hay ninguna otra opción?
-Creo que o llegas a las once o llegas a las seis de la mañana -Se encoge de hombros Chadd- O al menos es lo que nos ha dicho el entrenador Sam justo al llegar.
-Bueno, pues nos vamos de fiesta ¿Verdad preciosa? -Inquiere Carlos pasando su mano por mis hombres, distrayéndome de observar a los jugadores. Y deshaciendo mi agarre con Ares.
-Claro, vámonos de fiesta, yo compro el alcohol y tu compras las botellas para hacer las mezclas -Le doy la razón provocando la risa de todos mis compañeros, el corazón me late lleno de gozo, dios, cuanto había echado esto de menos.
Sin duda tomarnos dos semanas de descanso antes de venir aquí ha sido un mala idea. No puedo aguantar tanto tiempo sin ver a mis chicos.
De pronto la hierba para y puedo ver como unos cuantos campos de futbol empiezan a extenderse por todo el terreno. Vaya la federación no ha reparado en gastos esta vez.
Puedo ver como un chico está entrenando solo en un campo, con una especie de maquina chuta balones -Chicos- Llamo a mis compañeros- Os alcanzaré luego -Les indico, y antes de que puedan replicarme yo ya me encuentro corriendo para bajar unas escaleras de tierra y llegar junto al chico, quien ahora bebe agua.
Creo que no me han recriminado porque ya están acostumbrados a mi.
-Hola -Sonrío, y veo como el muchacho se sobresalta de inmediato. Sonriéndome de vuelta.
-Hola -¡Oh! Es Mark Evans, es el nieto de David, que coincidencia mas loca.
Me acerco a la plota que tiene a sus pies y la cojo con la mano derecha- He visto que entrenabas solo, y me han entrado ganas de venir. Soy Carina por cierto, la capitana de la selección Española.
El muchacho me sonríe ampliando aún mas su sonrisa y me estira la mano para apretara -Soy Mark Evans, el capitán de la selección Japonesa.
Le estrecho la mano, y decimos un encantado a la vez.
-Se que es un poco extraño que haya venido así sin mas -Me rasco un poco la nuca -Pero como lo que la federación quiere es que los jugadores se lleven bien entre ellos he pensado, pues porque no ir a saludar.
Mark se rie por mi explicación -No, tranquila yo también suelo hacer estas cosas.
Observo de nuevo el cachivache con el que entrenaba -Dime, ¿que se supone que practicabas con eso?
-¡Ha! intento aumentar mi fuerza de parada, porque juego de portero -Hace un pose extraña haciéndome reír como loca- A demás me he dado cuenta que si no mejoramos es impossible que podamos ganar igual que el año pasado. Tenemos que ser mucho, mucho más fuertes.
-Me gusta como piensas -Le digo sincera- ¿Puedo unirme a ti?
-¡Claro! -Este vuelve a sonreír y nos dirigimos a mitad del campo, por primer vez Mark me recorre con la mirada y repara en mis pies- Oye, no se si podrás jugar bien con esas botas de tacón.
-No te preocupes -Me encojo de hombros restándole importancia.
Empezamos con unos regates, intenta quitarme el balón pero se nota que le falta habilidad. Creo que es uno de esos chicos que se especializa en la portería y poca cosa más, aún que tengo que aceptar que me lo estoy pasando super bien.
De repente el da un chut fallido y hace que el balón se dispare hacia la derecha. Provocando la risa de ambos -Perdón- Musita yendo a buscar la pelota, la cual está en los pies de dos muchachos.
Veo que intercambia unas cuantas palabras con ellos y cuando están lo suficiente cerca de nosotros puedo comprobar que son Edgar Partinus el capitán de la selección Inglesa y Tiago Torres el capitán de la selección Argentina. He, ¡Tiago!
-¡Carina! -Grita emocionado corriendo hacia mi, si, el y yo nos conocemos, pero eso es una historia para otro momento- ¿Como has estado? -Dice abrazándome mientras me levanta un poco del suelo.
-Muy bien ¿Y tu? -Pregunto, justo en el momento en que mis pies vuelven a tocar el suelo- Ya me había dicho Ed que estarías por aquí, pero mis esperanzas de verte el primer día con lo grande que es eso se habían aniquilado.
El muchacho rie, mientras Mark y Edgar llegan a nuestro lado -Edgar, ella es
-Carina, la capitana de la selección Española -Acaba la frase por Mark, quien le mira con los ojos abiertos, provocado una pequeña carcajada en mi.
-Vaya, veo que no soy la única que ha echo los deberes antes de venir aquí -Este niega con la cabeza, brindándome una sonrisa ¿Coqueta? ui, esto se está poniendo interesante, el muchacho en si no tiene nada de feo, y su pelo largo le da un aire interesante.
-Mark, todo el mundo está preguntando por ti -Escucho una voz a mis espaldas y veo como Jude Sharp el creador de juego de la selección Japonesa y su delantero estrella Axel Blaze el jugador de fuego llegan a nuestro lado.
-Lo siento, lo siento, ya sabes como me pongo cuando pienso en futbol -Se disculpa rascándose a nuca- A demás he conocido a esta chica y me he puesto a dar pases con ella, se llama Carina
-Y es la capitana de la selección Española -Termina de hablar Jude escaseándome con su mirada y me sonrojo ¿Porque todo el mundo hace eso?
Los chicos empiezan una conversación entre si, la cual la verdad me interesa poco, yo solo había venido a mover un poco el esqueleto, pero por lo que veo me he metido de lleno en un reencuentro de amigos.
Siento una mirada encima de mi, y pillo de lleno a Axel observándome sin pudor alguno, y para cuando se da cuenta de que yo también le miro me sonríe de una forma coqueta, mucho mas descarada que la que me ha brindado Edgar minutos atrás.
A esto podemos jugar ambos, me muerdo el labio disimuladamente y paso mi lengua por donde he mordido, levanta una ceja también humedeciéndose los labios, mierda.
Buha, este chico está como un queso. Su pelo rubio peinado hacia arriba, sus ojos marrones con su notable ascendencia japonesa que me miran como si pudiera desvestirme. Y sus músculos, dios, mejor no pienso en eso.
Es que me lo follaba aquí mismo loco.
¿Soy yo o está empezando a hacer calor aquí?
-Carina es la unica chica de su equipo, Mark creo que te caería muy bien el portero de su equipo, se llama Otto, y ha conseguido llegar hasta esta fase del torneo sin que le marquen siquiera un gol ¿Verdad? -Inquiere Tiago, asiento con la cabeza, sin dejar de mirar al delantero de fuego que tengo delante de mi. La tensión que sentimos el y yo ahora mismo podría ser cortada con un cuchillo fácilmente.
-Si, una vez intente formar un equipo femenino, ya sabéis para librarme de tanta testosterona pero me faltaron diez chicas más -Les explico pero antes de que puedan contestarme algo me interrumpe.
-¡Nena! -Escuchamos de lejos, y nos giramos al instante, perdiendo el contacto visual con ese chico, decidido, me voy a ligar a Axel Blaze y nada podrá impedírmelo. Veo a Carlos junto a Agus parados arriba de la escaleras de tierra haciéndome señas- ¡Sam nos busca será mejor que volvamos a la recepción!
-¡¿Pero porque?! -Chillo.
-¡Dice que ya la hemos liado! -Levanto una ceja sin entender del todo ¿Liarla? ¿Tan pronto? No lo creo, como no sea Jack que se ha puesto a fumar y ha quemado una planta por accidente, aún es muy pronto para liarla. Carlos ve mi semblante y decide seguir hablando -¡Ni idea preciosa!
Me encojo de hombros y me giro para ver a los chicos que acabo de conocer -Ya habéis odio a mi compañero, se ve que ya la estamos liando y solo acabamos de llegar.
-Españoles -Ruda los ojos Tiago y le pego en el hombro de forma amistosa mientras saltamos algunas carcajadas.
-Bueno, nos vemos pronto -Les digo a todos justo cuando me despido con la mano de ellos empezando a caminar hacia mis compañero rozando mi bazo con el de Axel, haciendo que mi piel cosquilleo y se me erizan los pelos de la nuca, oigo detrás de mi algunas despedidas. Pero me pongo a correr hacia esos dos y cuando llego a su altura paso mis brazos pos sus hombros quedado de puntitas, joder son demasiado altos.
-Vale chicos, tengo un plan. Si Sam nos dice que hemos echo algo mal, la liamos aún mas -Les digo, girando delante de ellos y empezando caminar de espaldas sin poder quitar la sonrisa de mis labios.
-Me apunto -Levanta el brazo Agus.
-Y que remedio -Rueda los ojos Carlos sonriendo como loco igual que yo. Y vuelvo a girar sobre mi eje andando normal de nuevo, hasta llegar a la recepción el hotel en donde nos esperan todos los chicos junto a Sam, como no queda ningún sitio, Carlos y Agus se sientan en el suelo, mientras que yo le hago unas señas a Ares para indicarle que me sentaré encima de el, y así lo hago, notando como este me abraza por la cintura.
-Bien -Empieza a hablar nuestro entrenador- Ahora que tengo vuestra atención y estamos mas o menos tranquilos. Vamos a hablar de la fiesta de recepción esta noche.
-¡No!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top