Jose era un pequeño muy dulce y jugueton, se pasaba todo el día jugando y riendo por toda la casa, sus padres lo amaban muchísimo y el lo sabia.
Un día en su cumpleaños a Jose le obsequiaron una pelota azul, era una pelota muy bonita y el lo volvió su juguete favorito, todas las tardes salia a fuera de su casa a jugar con ella.

En cierta ocasión vinieron los primos de Jose y el salio a jugar con ellos a partido, el era el arquero y su primo seria el que patearia la pelota, su primo dio una gran patada a la pelota, haciendo que cayera en el techo de "la loca de la esquina".

Jose pidió a su primo que fuese por ella, pero el se negó y simplemente se fue abandonando al pobre de Jose, el armandose de valor pensó en contarle a sus padres lo sucedido, pero por temor a que lo regañaran no quizo, entonces Jose sin saber que hacer se sentó en la puerta de la loca de la esquina a llorar.De pronto sintió que alguien toco su mano, era su madre, ella traía una paleta consigo

_Jose, ya me contaron tus primos lo que sucedió no te preocupes yo hablare con la vecina_asi su madre tomo a Jose de la mano le hizo disculparse con ella por haber lanzado la pelota a su techo, Jose se dio cuenta que la vecina no era mala, ni mucho menos loca.

Desde ese dia Juan hizo dos cosas.Se volvio amigo de la vecina y no volvio a separarse de su pelota.