El eterno conquistador (MR)
Teníamos cinco años cuando apareciste con una rosa blanca en mi puerta.
No sabíamos nada del amor, pero ya lo sentíamos a flor de piel.
—Mi mamá dijo que era la más hermosa de nuestro jardín.
Esa fue tu manera de conquistarme, y una huella en mi alma.
—Te daré flores hasta la eternidad —prometiste cuando nos casamos.
Hoy me tienes aquí; frente a tu tumba y sorprendida por tu convicción.
No traigo flores; en cambio, llevo de las que tú me das pues una planta de rosas blancas ha florecido sobre ti. Presumido.
Te las arreglaste para seguirme conquistando.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top