Él se contempla por los caminos en ruinas, suspiros se hacen presente en miradas curiosas con una cicatriz camina cegado por el odio que acumula su corazón, desesperación se veía en sus ojos vacíos. Nadie comprendía sus aptitudes segadas por maldad que era más allá de lo normal, dentro de su soledad un resentimiento lo condeno a vagar por las llamas de la oscuridad, solo era un muchacho joven sin conocimiento del mundo en que vivía, no se le puede culpar por sus acciones nunca tuvo un mentor que le guiara para él todo estaba solitario sin ninguna alma que lo detuviera, solo quería vivir un día más de su miserable existir y sin embargo sus maneras de sobrevivencia estaban equivocadas. Ese chico sufría tanto hasta dejar de pensar por sí mismo, las voces que vivían en su cabeza tomaban forma adueñándose cada vez de un cuerpo sin alma todo parecía carecer de sentido. Los golpes iban acompañados de gritos desgarradores solo era una de las tantas luchas que tenía entre el mismo, muchos espectadores observaban como ese pobre chico se perdía entre la ira que lo consumía, comiéndose cada parte de su humanidad hasta dejarlo con esa expresión fría. Si alguien lo hubiera apoyado o entregado amor todo sería tan distinto, varios pudimos evitar que la locura se apoderada de su mente frágil y solo lo dejamos pasar creyendo que lograría hacerlo solo, no se saben cuan equivocado se puede estar hasta que pasa lo peor. Una tragedia viene detrás de otra, pero todas relacionadas entre sí, una risa se escucha por las calles rodeadas de lamentos, un sujeto se oculta entre las sombras fingiendo no ser culpables del daño que causo, era tan joven solo un chico que no conocía nada más que un mundo lleno de devastación, tratábamos de entender que pasaba por su mente o si tenía un rastro de sentido común, pero solo encontramos heridas tan profundas como el mar que no tenía fondo. Estaba tan dañado que hasta su sonrisa perdía brillo, no quedaban muchas opciones ya no tenía salvación y solo tiramos de la palanca mientras escuchábamos por una última vez sus gritos de agonía, su cuerpo se había marchado con las almas de inocentes que asesino en un acto suicida para acabar con aquel tormento que llevaba consigo por un largo tiempo y ahora aquel chico perdido encontró el final del camino que había recorrido en su dolorosa vida sin sentido.