7
«Felices diez años, Deku-kun.
Ten, hice este pastel con ayuda de mi mamá y te compré una figura de All Might para tu colección.
No tienes por que agradecerme, lo hago porque soy tu mejor amiga. Oh, bueno, si insistes, espero un pastel de mochi para mi cumpleaños.
De acuerdo, cumpleañero, pídeme lo que quieras. Estoy aquí para hacerte feliz.
Oh, ¡¿tienes un deseo?! Dime, dime, haré lo que me pidas.
¡No, me niego! Deku-kun siempre será Deku-kun para mí y eso no va a cambiar.
Te lo dije el día que nos conocimos en este universo: tú serás un gran héroe y todo héroe necesita un seudónimo que represente su persona e ideales.
Tú serás el héroe que nunca se rinde, el que es perseverante y salva a todos con una sonrisa. El héroe Deku...
Oh, siempre lo olvido. El idiota de Bakugo cree que Deku significa inútil.
Bueno, nunca me cansaré de decirlo: tú no eres inútil; tú eres el héroe de "¡Puedo hacerlo!".
Eh, ¿p-por qué lloras? ¿Dije algo malo? ¡Lo siento mucho!»
Izuku no cometió el mismo error de invitar a todo su salón y que no viniera nadie a su fiesta de cumpleaños. Ahora, lo único que le hacía feliz era que su madre y Ochako estuvieran con él en este día.
Aunque estaba acostumbrado a llorar por dolor, fue la primera vez que creyó que sus lágrimas valían la pena, ya que, sentía mucha felicidad dentro suyo y no sabía como expresarlo más que con llanto.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top