Incluso desde antes de que Miles llegará a casa, la Navidad nunca estuvo muy presente en casa de los Von Karma. Manfred siempre estaba ocupado y Franziska no parecía importarle mucho.

Además, la pequeña Franziska jamás se le ocurriría pedirle a su padre que sobrepusiera a su hija por encima del trabajo. ¡Para nada! Los Von Karma no son así. Pero con el paso del tiempo, eso trajo cierto complejo a la pequeña Franziska, quién no recuerda cuando fue la última vez que celebró la Navidad.

Y cuando Miles llegó a casa...

–¿Comprendes porqué a tu hermano no le gusta estás fechas?–Le había preguntado su sirvienta mientras le servía el desayuno un veinticinco de diciembre.

–No es mi hermano–Se limitó a responder la niña.

–¿Comprendes porqué al joven Miles no le gusta estás fechas?–Vuelve a preguntar la sirvienta, mirando con preocupación a Franziska.

–Claro que si, no soy tonta, a su padre lo mataron ¿Y qué? ¿Debería importarme?–Muestra una sonrisa engreída, es una mocosa que va a la primaria pero ya sabe cómo no mostrarse débil.

–Franziska... tú tienes un padre ¿Cómo te sentirías si te pasara lo mismo que a Miles?

La pequeña Franziska levanta la mirada, está molesta porque esa sirvienta se pasó de la raya.

–¿Me estás amenazando? ¡Se lo diré a mi padre sino me dejas en paz!

Incluso en la actualidad, Franziska recuerda el rostro asustado de aquella sirvienta. Si ahora mismo le preguntaran "¿Cómo te sentirías si te pasara lo mismo que a Miles?", La fiscal del látigo respondería sin dudar: dolería mucho pero seguiría hacia adelante, porque soy una Von Karma.

Franziska nunca dejará de tenerle cariño a su padre. Quizás por eso mismo relaciona la Navidad con él, y por ende, no quiere celebrarla.

Nosotros los Von Karma no somos así...

Franziska toma un trozo del pastel de zarzamora, mientras que Maya trataba de asimilarlo todo. Hay mucho silencio.

–¿Es por eso que no quieres participar?–Pregunta la médium–¿Porqué crees que le estarás fallando a tu padre?

–Si, básicamente ¿Te parece ridículo?–Hay cierta soberbia en sus palabras, pero Maya cree que sólo está fingiendo, como tratando de no llorar.

–Me parece exagerado ¿A tu padre no le hubiera gustado que dejaras atrás el pasado?

Franziska aparta su pastel y mira fijamente a Maya, ya no hay soberbia ni superficialidad, sólo melancolía.

–Mi padre vivía en el pasado todo el tiempo, jamás estuvo del todo en el presente, por algo murió en la cárcel.

También es verdad. Es irónico, Manfred presionaba a su hija para que siguiera hacia adelante, hacia un destino prometedor; pero el propio Manfred siempre estuvo atado al pasado, al rencor de viejas experiencias. Por todo ese cúmulo de dolor Miles perdió a su padre.

–¿No será más bien que te sientes culpable?–Dice Maya.

–¿Por quién? ¿Por mi padre y Miles? Uno de ellos está muerto y el otro sigue viviendo en el pasado ¿Porqué debo ser la única que olvide lo que pasó?

–Porque eres fuerte, y firme hacia ti misma.

Eso sorprende a la fiscal, Maya continua hablando.

–Sé lo que es tener un apellido pegado a tu espalda, y yo también me pongo triste al recordar cosas del pasado, pero ahora tengo una familia, con Pearly, con Nick...y tú formas parte de el, Franziska ¿No quisieras una noche como mínimo para olvidarte de todo? ¿Olvidar que eres una Von Karma, y estar con nosotros que te queremos mucho?

La fiscal del látigo baja la mirada hacia el pastel de zarzamora. Uno noche como mínimo...una noche siendo Franziska solamente...

–¿Has... guardado un nombre para mí?

–¡Claro!–Saca un papel y se lo da–No sé que nombre tendrá.

–Bien...pero si yo me meteré a esta tontería lo justo es que Miles también.

–No te preocupes, Edgeworth también participará–Aunque no sabe bien cómo lo convencerá, pero ella igualmente sonríe–Bien, entonces te vemos el veinticinco.

–Si, ahora déjame trabajar.

Maya se despide y cierra la puerta al salir. Franziska suelta un suspiro cansado, de verdad que son unos insistentes. "Pero ahora tengo una familia y tú formas parte", supongo que ya es tarde para retractarse.

Decide desenvolver el nombre: Larry Butz.

¡Vale, ahora sí que quiere retractarse! ¿¡De todos porque tenía que ser este imbécil!?

Será mejor que Franziska se lo tome como un reto para no explotar de la irá.

Continuará...

Nos vemos en el siguiente capítulo!! (^^)