Coramora, 29 de Julio del 2009.

—Lo estás haciendo mal—habló la Profesora Martínez deteniendo a Axel—. No estás afinando, ¿y los ejercicios que te he enseñado?

—He estado un poco ocupado—le dijo—. Las clases me tienen el horario y las tardes muy llenas—mintió, no podía decirle que realmente se la pasaba ensayando en la casa de T.J.

La Profesora Martínez asintió pensativa.

—Comprendo, quizás deba hablar con tus padres y comentarles la situación.

—No, no es necesario—la detuvo—. Ellos están muy ocupados en sus cosas, no hay que molestarlos con algo tan pequeño—ella lo miró con una expresión seria para luego sacar su teléfono de su bolsillo trasero.

—Entiendo, de igual forma les mandaré un mensaje de que necesitas más tiempo para el canto—le dijo—. Quizás tu padre quiere que seas un buen abogado pero yo quiero que seas un buen cantante.

Axel sonrió, era la primera vez que la Profesora Martínez lo estaba apoyando, no se contuvo y saltó a abrazarla.

— ¿Usted cree que puedo llegar a ser un buen cantante? —la Profesora Martínez intentó separarse del agarre del chico.

—Sí, pero para eso debes practicar—le dijo—. Los estudios son importantes pero tus sueños lo son más.

— ¿Y si es un sueño que va en contra de lo que tus padres quieren? —ella lo miró seria y se soltó de su abrazo—. Mi padre...

—Tu padre deberá entender que tú tienes tus propios sueños y que no siempre giran en torno a él—le respondió—. Si pasas tu vida viviendo el sueño de alguien más, un día vas a despertar y te darás cuenta de que no se disfruta como realmente debería.

Axel asintió sabiendo que ella tenía razón, pero se le era muy difícil contarle a su padre que realmente no quería ser un abogado sino un cantante. Toda su familia había estudiado leyes, él no podía ser la excepción a ello.

—Ahora regresemos con la canción—le dijo y colocó la pista en la radio—. Los grandes artistas practican durante horas, pero siempre sin superar su límite, ¿entendido? —él asintió—. Perfecto, Da capo entonces.

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Coramora, 05 de Agosto del 2009.

—La fecha de la audición final es para el festival de la flor—habló Axel llegando a la mesa en donde Griffin, T.J y Gino se encontraban sentados. Jenny les había preparado cuatro batidos y habían decidido pasar la tarde allí.

— ¿Cuándo es el festival de la flor? —preguntó Griffin, T.J se encogió de hombros al no saber.

—Veintiocho de agosto—respondió Gino—. Siempre lo hacen el último viernes del mes—explicó. Los tres chicos asintieron—. Mía y yo peleamos...

— ¿Qué? ¿Por qué? —habló Axel.

—Quizás intenté hacer un movimiento no de amistad y ella puede que se haya molestado un poco con ello—suspiró.

—Es una tonta—comentó T.J, Gino frunció el ceño.

—No es ninguna tonta—respondió—. Sólo que yo no debí haber intentado besarla.

—Oh vale, quizás tenías que haberte quedado en la friendzone mientras que ella buscaba a alguien más—le dijo negando T.J—. Gino, tú y yo no es que tengamos la mejor relación pero créeme que era lo mejor que podías haber hecho.

—Quizás me hubiese gustado permanecer en la friendzone pero seguir estando cerca de ella—suspiró—. Cree que estaba ebrio, no piensa que quizás sí quería besarla realmente.

—Entonces no aferraremos a esa ebriedad para acomodar la situación y luego cuando se arreglen, tú vas a confesarte con ella pero hablando no intentando robarle un beso—explicó Griffin—. Ya sabemos cómo reacciona con eso y no necesitamos otra escena.

—Deberías salir con otras chicas—le dijo Axel—. Puede que con ellas la cosa sí funcione.

—Pero yo la quiero a ella.

—No siempre se tendrá lo que se quiere Gino, más cuando de personas se trata—comentó—. No se puede obligar a una persona a quererte, eso sólo nace.

Gino suspiró, no quería alejarse de Mía; habían sido amigos desde hace más de cinco años y no podía imaginarse sin ella. Quizás no podía tenerla como una amante pero sí como su amiga y él prefería estar de esa forma que no estar en ninguna.

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Coramora, 08 de Agosto del 2009.

«Cuando las flores caen y todo parece perdido,

Yo pienso en ti y parece que todo se tranquiliza,

Quizás eres mi luz y mi sombra,

Quizás eres mi única salida.

Tomo tu mano y me siento en paz,

Como si las cosas malas se hubiesen ido,

Yo a tu lado no me siento tan perdido,

Y no podría pedirle al mundo nada más»

Axel tocó la melodía en piano mientras estaba cantando, Jane permaneció a su lado escuchando lo que éste hacía. Su rostro mostrada una expresión de fascinación y estaba segura que no había escuchado nada más bonito que eso.

Él no se lo confesó ese día, pero esa era la primera canción que le hizo. Había estado al menos un mes componiéndola y sentía que todavía no estaba lista, quizás ninguna canción para Jane pudiese estar lista del todo.

«Permanece aquí conmigo,

Dulce chica divina,

Necesito yo te tu compañía,

Para sentirme con vida.

Permanece aquí conmigo,

Dulce alma mía,

Necesito de tu amor,

Necesito de tu compañía»

—Esto es tan hermoso—confesó Jane—. De verdad que lo es, Axel escribes y cantas hermoso.

—Es para ti, la escribí para ti—le dijo—. Tú me inspiras para escribir estas cosas—ella sonrió.

—No puedo creer que yo haga algo tan bonito—se acercó a sus labios y los besó—. Te quiero.

Axel sonrió, tomó su mano y la llevó a sus labios.

—Jane, te amo—confesó, ella lo miró intentando ocultar la sorpresa que emanaba su mirada—. Sé que es muy pronto pero a veces el amor aparece de forma muy rápida y yo...

—Yo también te amo, Axel—lo interrumpió—. Te amo mucho—Axel la tomó del rostro y la atrajo hacia él para besarla.

Jane se alejó de él para levantarse de la silla en dónde estaba, Axel la miró con el ceño confuso pero se tranquilizó al ver cómo ella se sentó en sus piernas y se acercó nuevamente a sus labios para continuar el beso que se estaban dando.

Axel posó una de sus manos en la pierna derecha de Jane y la otra la mantuvo en su rostro, su piel se erizó al sentir cómo Jane jugaba con su cabello revolviéndolo un poco y una sensación grata en su parte baja apareció. Intentó tranquilizarse para que ello no se no notara, pero era difícil al tenerla sobre él.

—Eres el chico más increíble que he conocido—le dijo al separarse, Axel besó su mejilla.

—Tú eres la chica más increíble que he conocido—ella negó—. De verdad, no miento cuando te digo que si no fuese por ti, no hubiese podido hacer las cosas que he estado haciendo.

—Y yo no miento cuando te digo que eres lo mejor que me ha pasado.

Y a pesar de todo, ella nunca mintió.

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Un voto es un punto para que deje de procrastinar y me ponga a hacer mis informes psicológicos gg

Les tengo un juego, bueno, no es un juego pero es algo así como un concurso. Pondré el nombre de la persona que gane en un capítulo de la historia, ¿qué dicen? Será uno de los participantes del concurso junto a Axel.

Para concursar debes escribir un mensaje de lo mucho que te gusta esta historia y cuál es tu personaje favorito y por qué. Puedes poner el mensaje en mi muro, o en alguna red social y etiquetarme. 

Aparezco en instagram como @imthenewrachel o @simplementegen, en twitter como @imthenewrachel y en facebook puedes encontrarme desde mi página (Genesis Delli) o desde el grupo de lectores (Universo Literario de Sunny Ice). En mi perfil encontrarás todos los links.

Escriban aquí si quieren concursar, así puedo saber si funciona. Besos <3