Ya han pasado unos cuantos años desde que se deshicieron de ese mal llamado Ryu, desde entonces los días han sido mas feliz que nuca para todos los involucrados, e incluso fue un milagro o verdaderamente suerte, alivió que Claudia y Nahir al despertar hayan olvidado completamente todo relacionado con Ryu, e incluso el hecho que los señores Reynolds en su momento adoptaron los mellizos, así como el hecho que sus mejores amigos hayan tenido hijos.

Todo eso se borro o lo encerraron en un lugar muy profundo en sus mentes, los mellizos y los demas se sientieron mal al enterarse que los habían olvidado, sin embargo tanto ellos como Elisha y Aarhus se pusieron en los zapatos de ellos dos.

Fue tan grande el shock para Claudia y Nahir el enterarse de todo, escuchar quién sabe que cosas de la persona que habían considerado su amado hijo desde siempre que los llevo a bloquear todo recuerdo relacionado con él, fue su única forma de seguir respirando de una manera u otra.

Quizás muy el fondo no quieran sentir odio por Ryu, ni llorar mas lágrimas de las que ya habían derramado por lo que era mejor vivir tal cual; como si Ryu nunca existió en sus vidas. Sin embargo, el cariño por los mellizos como por sus sobrinos seguía en sus corazones. Aunque los hayan olvidado cuando fueron abrazados por ellos dos, sintieron el mismo cariño, calidez.

Por lo que sus amigos decidieron que todo se quedará así, diciéndoles que ellos dos se involucraron en un accidente lo que los llevó a terminar en coma por unos días, desde entonces los mellizos, Bianca, Aarhus y Elisha suelen ir a quedarse a su casa un dia a la semana porque hay ocasiones en las que inconscientemente extrañan a su hijo.

-En un par de años seremos nosotros tres en estar ahí de pie, sosteniéndo tu mano.-Susurran seductores cerca del oído de Elisha, estremeciendose al sentir las manos de los contrarios en sus caderas, todos pícaros frotando sus palmas sobre los firmes y muy redondos glúteos.

-¡Agares, Aarush!-Exclamó muy bajito, esos dos actuaron como si no hubiese escuchado nada, siguiendo haciendo lo que estaban haciendo, masajeando las caderas del contrario.

Simplemente Aarush y Agares no podían mantener sus manos quietas, no cuándo Elisha se ve tan sexy con ese esmoquin azule negro, remarcado su espléndidos atributos.

‹Les pedí estrictamente que no fueran hacer algo como esto; justo hoy que es un día muy importante sin embargo, lo que les dije entro por un oído y salió otro. Lo bueno que estamos al fondo de la fila de padrinos de boda, y los invitados no están viendo a nuestra dirección si no que a los novios.

Y es que últimamente estos dos se encuentra muy cariñosos, no pueden estar un momento sin que sus manos se encuentren en alguna parte de mi cuello...no me desagrada, me gusta solo que este no es el lugar como para estar entrando en calor.›

Elisha apretó sus dientes fuertemente, temía dejar salir algún ruido extraño entre más sentía las manos de esos dos, apretando suavemente sus caderas.

-Elisha...

-Quieren morir, ¿verdad?-No podía dejar que eso siguiera así.-Bien, me equivoqué en tocarlos de esa manera unos minutos antes.-Susurró un poco avergonzado, entendiendo que sus dos pícaros novios se estaban desquitando lo que Elisha les había hecho, y es que el de ojos azules se puso atrevido.

Antes de que ellos fueran a formarse a un lado y frente de los novios en el altar, Elisha se sentó a horcajadas en el regazo de ambos chicos, frotándose sobre sus medios durmientes dragones. Sin embargo, solo fue por unos segundos ya que la ceremonia estaba por empezar.

Elisha agarra con fuerza las manos de los dos contrarios, tirando con fuerza de ellas al mismo tiempo que ruega que su rostro no deje ver ningún sonrojo, todo a causa de esas manos traviesas de sus novios.

-De igual manera solo esperen, cuando esto termine los haré pagar.-Susurro entredientes aún mantenido su sonrisa.

Los dos jóvenes solo sonrieron ampliamente, conteniendo su deseo de besar ahí mismo a Elisha, pero tenían que comportarse de por sí aquella mirada roja de Dereck suele estar por unos segundos sobre sus caras, fulminando a Aarhus y al de ojos azules cuando es Agares, el atrevido junto a Aarhus. Por lo que los tres enderezan su espalda al mismo tiempo que sus manos se entrelazan entre ellos tres mirando hacía al frente a esa sonriente pareja.

El cielo pese a estar nublando nunca se vio tan majestuoso como en este preciso instante, siendo testigo del acto mas maravilloso que hubiese podido ocurrir ahí bajos los grandes árboles de manzanos, árboles que fueron adornados sus troncos con esas olorosas y bonitas gardenias al igual que ese sorprendente y tan bello altar en formar de arco.

Sobre ese mismo altar de pie yacía esa radiante pareja vestiendo sus sofisticados trajes, blancos, de dos piezas. Desprenden una contagiosa felicidad, belleza como eso príncipes de cuentos de hadas. Esos dos príncipes eran nada menos que Dereck y el amor de su vida Laín.

Ellos dos se miran fijamente mientras sus manos temblorosas se entrelazan, nerviosos así como extasiados de tanta alegría, inclinado suavemente sus rostros cerca del otro en buscando de los labios del contrario y así poder sellar su ceremonia de bodas, promesa con beso luego de darse el "sí, si acepto" frente y rodeados de las personas importantes para ellos dos, sobre todo sus bellos hijos. Los mellizos sonreían ampliamente y con los ojos brillantes al ser testigo, el presenciar la unión y felicidad de sus padres.

Ellos dos desde hace unos años dejaron ser solo dos adolescente para convertirse en dos espléndidos, muy hermosos joven y señorita de tan solo 19 años.

Sus rasgos fáciles habían cambiado un poco con el pasar de los años, Brianna dejo de ser una niña adorable, linda para convertirse en toda una hermosa señorita de despampanante cabellera plateada que caía hasta su delgada cintura, alta y curvilínea.

Con respecto a Agares el también cambio mejor dicho maduro, sea convenido en todo un joven de 19 años. Por donde camine roba mirada y suspiros por su belleza como por su seductor cuerpo con una musculatura definida y unos hombros, espalda que con el pasar de los años se ha ido anchando.

Aagres con solo estar de pie o sentado en cualquier lugar ya reúne gente aunque no se le acercan hablarle, (creen que es modelo o actor) su aura es demasiado fría al igual que su mirada afilada cómo la de su padre. Ya era muy guapo solo que ahora sus rasgos fáciles son distintivos, masculinos, con unos finos pómulos y una barbilla afilada.

Sus dos novios tampoco podían quedarse atrás con respecto a su sensual atractivo, Elisha y Aarush de 21 años son dos jóvenes maestros de belleza despampanante, aparecían muy llamativa con unos cuerpo seductores bien fornidos, hombros anchos y unas sensuales piernas largas.

-¡Muchas felicidades!-Se dió inicio a una lluvia de aplausos, gritos, todos están tan felices por la feliz pareja de recién casados.-¡Qué sean siempre felices!

-Me siento como un padre presenciando la boda de mis hijos.-Expresa un Ciervo llorando sin parar, ya mojó dos pañuelos con sus desbordantes lágrimas.-Por fin podré irme de vacaciones, ya percibo el olor del océano, arella mojada.-Se imaginaba bajo las palmeras en alguna isla paradisíaca.

Estuve esperando tanto por este momento que no puedo contener mis lagrimas, todos tendremos vacaciones mientras nuestros jefes se van de luna de miel por dos meses. El mismo tiempo que sus subordinados tendrán de vacaciones, por nuestros jóvenes maestros no debemos de preocuparme porque ellos dos se quedarán con los Reynolds, estarán bien cuidados, protegidos.

Pienso que los dos novios del joven maestro Agares, son los más felices sobre esto. Podrán disfrutar sin que mi jefe ande de metiche siendo una lámpara entre ellos tres, espero y no descubra lo que estoy pensando o adiós vacaciones.

-Mejor di que por eso estás feliz, por las vacaciones.-Comenta Brianna.

Mis padres no querían dejarnos por tanto tiempo tras irse por dos meses a disfrutar de su luna de miel. Ellos nos querían llevar con ellos dos, pero Agares y yo nos negamos porque esos días son solo para ellos dos, que disfruten de su amor libremente y sin preocupaciones ya que se merecen pasar un buen rato a solas.

-No es así... bueno si, pero eso no quita el hecho de que estoy feliz de que por fin se casaron.

-Todos lo estamos.-Expreso Bianca.-Y se ven muy guapos con esos trajes.

Bianca también se había vuelto muy hermosa de esbelta figura, cintura delgada y unas sexys piernas torneadas, marcadas como su abdomen. Ella ya puede correr, hacer ejercicio, suele ir con Brianna tres veces por semanas al gimnasio.

Su corazón desde la operación hasta el día de ahora no le a dado problemas, no se cansa es como si toda la vida tuvo un corazón sano y como si nunca hubiera estado enferma. Sin embargo, por precaución sigue yendo al médico dos veces al mes para chequeos y descartar cualquier problema.

También ha mejorado mucho su relación con Agares y sus dos cuñados, ya no hay tensión entre ellos y hablan armoniosamente de cualquier cosa así como suelen bromear.

-Los años no pasan por ellos, ellos pasan por los años al parecer.-El señor Dereck y Laín se siguen viéndo igualitos que la primera vez que los conocí, no envejecen.

‹Mi padre tampoco ha envejecido, es más, parece sue con cada año va rejuvenecido quizás sea porque ahora ya no tiene preocupaciones con respecto a mi salud. Él ya puede vivir sin miedo a quel día de mañana muera, en su momento eso fue una gran carga pero hoy ya no.

Solo le suplicó a Dios cada día que mi papá conozca una buena mujer, que lo quiera mucho y lo haga eternamente feliz. Aunque no importa si en vez de una mujer le envía un hombre mientras mi papá sea feliz eso ya es más que suficiente.› Bianca cuando se enteró que su mamá había muerto lloró, no pudo evitarlo. Pero, su padre y sus abuelos estuvieron con ella, diciéndole que todo estaría bien.

Ella también de alguna manera se sintió aliviada de que haya muerto, porque así no volvería hacer daño a nadie y mucho menos buscaría la manera de llegar a ella para llevársela lejos de las personas que le importan a Bianca.

-¿No tienen pensado atrapar el ramo?-Preguntó Ciervo, viendo como todos los solteros como parejas se van reuniendo cerca de los recién esposos.

-No.-Brianna se cruza de brazos.- Ni siquiera tengo pareja...

-¡Y no tendrás!-Exclaman cada uno de los integrantes de su familia, habían escuchado desde esa distancia.-¡Viviré siempre con mis padres y adoptivos!-Grito con una sonrisa en sus labios, viendo como todos ellos sonríen y suspiran aliviados.

-Eso también va para ti, Bianca.-Dijo su padre al mismo tiempo que habló Agares.

-Sí.-Sonrió ampliamente.-Papá, pero tú si puedes ir.

-¿Qué?-Se señala asimismo.-¿Yo?

-Sí, vaya señor Romero.-Animan los señores Reynolds junto a sus amigos.

-No...eso...

-Tío, no tenga miedo.-Brianna con la ayuda de Bianca empujan a Manrique.

-Tío, lo sentimos mucho pero ese ramo será nuestro.-Los jóvenes se dirigen de esa manera en señal de respetó, han convivido tanto tiempo que también le han tomado cariño a Manrique.

-Ni siquiera me moveré.-Les asegura.-Así que vayan por ese ramo.

En eso Dereck le susurra algo al oído a su esposa, seguramente le estaba diciendo que lo tiré tan lejos como pueda para que las polillas (así les dice Dereck) de Aarush y Elisha no logren atraparlo.

-Deja de estar celoso de todas maneras ya llevan una sortija.-Declaró Laín, pellizcando las mejillas de su esposo.-¿Sigues sin aceptarlos?

-Sí, y será siempre así.-Fue firme.

-Mentiroso.-Susurra bajito.-Los aceptaste como tus yernos desde ese día en que fuimos a salvar a nuestro Agares.

-Que absurdo.

-Te amo.-Solo sonrió.

-Y yo te amo a ti, mi esposa...

-¡Papá, padre, dejen de susurrar y lanze ese ramo!-Brianna los saco de su mundo.-Darse prisa que tengo hambre.-Todos soltaron una pequeña risita.

-Bien, aquí voy.-Da la vuelta.-A la una, a las dos y a las tres.-Lanzo ese ramo de tulipanes blancos.

-¿Eh?-No comprendía del porque ese ramo está en sus manos.-¿Esto?

-¡Felicidades serás el próximo en casate papá!-Bianca corrió abrazar a su papá.

-Pero ni siquiera me moví solo cayó.-Mira a los tres jóvenes.-Pueden tomarlo...

-¡No!-Retroceden.-Eso es de mala suerte, es suyo.-Se miran entre ellos.-Nosotros podemos darle uno más grande y hermoso a Elisha.-Besan el dorso de sus manos.

-Eso sera cuando tenga unos treinta años.-Dereck abraza a su pequeño Agares, pese a que tiene 19 años sigue siendo su niño.

Los invitamos y familiares solo dejaron salir una suave sonrisa, corriendo hacia a ellos con la intensión de darse un abrazo grupal y captar tal momento e inolvidable en sus vidas.

Fin...🥺🥺😭

Nota🤍

Feliz días, tarde para todos ustedes.✨❤️❤️

Hemos llegado al final de está hermosa historia, otro final que termina en boda (🤭🤭) se siente como si fuera ayer que empecé a escribir el comienzo de lo que se volvería una historia de 80 capitulos (al principio creí que serían unos 60-63) cada capítulo lo escribí con emoción, entusiasmo y darle un final a mis escritos siempre me provoca tristeza.(⁠༎ຶ⁠ ⁠෴⁠ ⁠༎ຶ⁠) pero también muy feliz porque logré darle un fin.

Nunca me cansaré de darles la gracias por llegar conmigo hasta aquí, y sobre todo por sus comentarios y todo ese apoyo muchas gracias.🙇🤍❤️❤️ Se les quiere.

No vemos con los extras, se vienen cosillas entre esos tres jóvenes hormonales.😌🤭🔥🔥

Att; Yessi.A