capitulo 65

Sus brazos ligeramente temblorosos se aferran al cuerpo de Agares, quien no tardó en sentir un suave y muy ligero estremecimiento desde su estómago hasta su pecho al instante en que, la débil respiración y los labios de los dos adolescentes, cayeron sobre su cuello. Abriendo un poco mas engrande sus ojos.

Sin ser la intención de Aarush y Elisha mientras escondía sus rostros a cada lado del cuello de Agares, sus labios fueron a dar a esa palida piel. Agares rápidamente se percató de la humedad proveniente de los labios de ellos dos, acausa de las lágrimas que en su momento se derramaron de esas miradas preocupadas.

Sorprendido y confundido por el raro desarrollo de tal acontecimiento que sin notarlo, le parecía agradable esa calidad sensación invadiendo principalmente su corazón.

‹¿Qué está pasando aquí? Ni siquiera tengo tiempo de procesar toda la información que ha llegado a mí, no puedo cuando estás dos personas siguen aferradas a mí, sintiendo y escuchando los fuertes latidos de su corazón...¿Son sus corazones, verdad? Oh, ¿esos latidos también provienen de mi corazón? ¿Por qué?›

Agares ante el cuestionamiento se empezó a sentir un tanto extraño, queriendo alejar lejos de él a Elisha y Aarush. Tal vez de esa forma dejaría de sentir esa rareza en él. Sin embargo, sus manos en vez de empujarlos se hundieron lentamente en las hebras de los diferentes cabellos, provocado una ligera agitación en los corazones ya frenéticos de los dos adolescentes.

Solo que con ese toque también vino un leve escalofrío erizado su piel, para ese momento Agares escucho que la respiración de los dos chicos aun pegados a su cuerpo, se fue volviendo mas fuerte y con ello su corazón dio un vuelco enorme al sentir los suaves labios de ellos dos, nuevamente acariciando su cuello.

Agares sin darse cuenta y sin poder evitarlo trago grueso, acción que fue escuchada por los dos adolescentes, los cuáles tenían una mirada un poco extraña con la intención de seguir lo que estaban haciendo.

—Chicos...esto... ¿Dónde están Brianna y Bianca?—Ella... también es nuestra hermana. ¿Como se los diré a mis padres? ¿Brianna como reaccionara?

—Ellas se fueron a otra habitación, tenían que llevar a observación a Bianca.—Informó Aarush.—Brianna fue con ella, dejándote a nuestro cuidado luego de que ella estuviera cuidado de ti por un buen rato.

—¡¿Cómo está Bianca?!—Estoy en un dilema.

Si ella muere entonces el contrato atado a ese loco que quiere tenerme a toda costa, se dará por terminado. Sin embargo, hay un sabor amargo en mi boca de solo pensarlo... No quiero que muera, no se merece eso a pesar que su actitud en un principio era un poco rara.

—Ella está estable.—Fruncen el ceño.—¿Te gusta?—Interrogan con sus miradas fijas en él, estremeciendose por tal penetrante miradas.

—¿Qué? ¡No!—Froto sus brazos con repelús.—Ni siquiera se me había pasado ese pensamiento por mi cabeza.

‹¡Llevamos la misma sangre por Dios! Y aunque no la llevará no siento nigún sentimiento por ella...en cambio cuando veo a Elisha y Aarush no puedo evitar pensar; que lindos, adorable, sexys...¡¿Qué mierda estoy pensado en una situación como está?!› Agares se asustó por sus últimos pensamientos.

—Bien por ella entonces.

—¿Eh?—Por un instante creí ver un tipo de brillo extraño en sus ojos, ¿vi mal?

—No es nada.—Ese par de ojos azules se encuentra con los rojos.—No vuelvas asustarnos de esa manera.—Dijo un preocupado Elisha.

Cuando lo vi desvanecerse en mis brazos fue como ver mi mundo teñirse de negro, desesperación y aquella ansiedad me cortó el flujo de respiración. La presión en mi pecho se sentía tan sofocante, como si ya hubiera vivido algo como esto.

A lo que vino a mí los recuerdos de aquél entonces, cuando por poco me quedo atrapado en unos recuerdos que no sabía que existían, hasta el día de ahora no hablado con nadie sobre eso. Sin embargo, sigo buscando un respuesta concisa.

—Sí, por favor, Agares.—Está vez el que súplica era Aarush.—Estamos aquí contigo, habla con nosotros si las cosas son muy pesadas para ti. Comparte un poco de tu carga con nosotros. ¿No somos confiables a tus ojos?—Cada uno entrelazan sus manos con las del atónito Agares, mirándole fijamente cada una de sus expresiones.—Ten un poco mas de confianza en nosotros...

—¡Confío en ustedes dos!—Aclaró rápidamente.—Claro que confío en ustedes, en mi familia. Mis padres adoptivos.—Sigo estado pendiente de su seguridad, a pesar de que el accidente no paso estos últimos años, sigo estando alerta.

‹He confiando en ellos desde el primer momento en que los conocí, ellos me han ayudado mucho. Gracias a ellos dos, he logrado superar ese obstáculo de tocar otro ser humano sin vomitar. Me han ayudado con ese trauma, ahora los toco y ya no siento ninguna incomodidad...›

El rostro de Agares se sonrojo levemente, todo al recodar ese beso que se dieron ellos tres, frente a la piscina. Ese momento estuvo por mucho tiempo en su cabeza, tanto que con solo ver a los dos chicos inmediatamente sin quererlo su mirada se iba a los labios de ellos dos.

‹En que estoy pensando, eso también fue accidental, ¿verdad? Brianna fue la que terminó empujando sus cabezas hacia adelante, impactando conmigo. Eso fue muy peligroso si lo vemos desde otro punto.

No quise darle tanta importancia porque no quería que nuestra relación, se volvería incómoda. No obstante, últimamente me estado sintiendo extraño con su cercanía. Mi corazón se exalta cada vez que nos tocamos de las manos sin razón alguna, o cuando sus rostros están tan cerca, justo como lo están en este instante.›

—Dices que confías en nosotros, pero siempre te guardas todo.—Señalan al unísono.—No queremos agobiarte y es por eso que no preguntamos, preferimos esperar que seas tú, el que no digas de tus precauciones. Que salgas de tus propios labios sin tener que ponerte en una situación incomoda.

Agares se quedó sin palabras en nigún momento se puso a pesar en eso, que alguien pudiera ver todo atraves de él, puesto que su expresión casi siempre se encuentra inexpresiva. Procurando que nadie descubriera que él no era el verdadero Agares, queriendo ocultar el hecho de que se suponía que se encontraba en una novela.

Quizás inconcientemente sí era sabedor de eso, Agares sabía que esos dos chicos de mirada ansiosa sabían más de él, que el mismo de él. Pero, sus preocupaciones y misión de proteger a toda costa a su hermana Brianna, evitaba que Agares aceptara que esos dos chicos, le tenían un severo y profundo apreció y que eso era uno de los motivos por el cual ellos dos, procuran estar muy atento a cada una de las expresiones en el rostro de Agares.

‹Me siento raro el darme cuenta que indirectamente hice que ellos dos, se preocuparan por mí. Han estado al pendiente de mí y yo solo tenía en mente una cosa, y eso era marcharme de aquí luego de proteger a mi hermana Brianna. Darle la felicidad que se merece.

¿Qué es este repentino sonido en mi agitado pecho? Siento que si sigo mirado sus ojos, algo empezará a salir de los mios.› Agares antes de que se diera cuenta sus dedos yace acariciando los ojos azules y ambarino.

—No era mi intención preocuparlos de está manera, pero hay cosas sobre las que no puedo contar sin parecer un loco.—¿Estaría haciendo lo correcto si les cuento?

‹Antes de saber que era el verdadero Agares, tenía un pensamiento que me repetía una y otra vez cuando sentía que me estaba encariñado con cada uno de ellos.

Ese pensamiento era; tarde o temprano tenía que irme de este lugar y dejarlos atrás, el cariño estaba demás en esa situación, que si no había cariño de por medio entonces no me haría sentir triste el irme. Porque cumpliría mi objetivo de protegerlos y que vivan felices sin saber de mi existencia al final, ese era mi misión.

Sin embargo, ahora que me pongo a analizar todo mas profundamente, me dio cuenta que solo era un escudo el que tuve que levantar para no salir lastimado porque lo sabía, sabía que al cumplir mi objetivo me iría lo quisiera o no. También porque no podía dejar a mi hermana mayor en ese otro mundo, por mas que quisiera a alguien en este mundo no podía quedarme, tenía que ir con mi única familia, no podía dejarla sola.

Me decía eso día atrás día para no perder mi objetivo, pero muy en el fondo sabía que dolería aceptar que ellos dos son especiales para mí. Que sin darme cuenta ya quería a la familia que creí que no era mía...yo ya era feliz sin saberlo, no. Si lo sabía solo que cría que esa felicidad no me pertenecía a mi.›

—¡Digas lo que digas vamos a creer en ti, así sea un locura encontraremos una manera de hacerla verídica!—Exclaman al unísono.

—Se están escuchando.—Lleva sus manos al pecho, sosteniéndolo por temor a que su corazón se alga.

—Lo hacemos...Agares a nosotros tú...—Elisha entrelaza su mano con la de Aarush, dándose una mirada antes de seguír hablando y volver a mirar a Agares.

‹Tal vez no sea el mejor lugar, pero siento que este es el momento de confesar lo que hay en mí corazón, si no lo hago ahora no se cuando tendré el coraje para hacerlo.› Eran los pensamientos de ambos chicos, presentía que tenían que confesarse ahora o después se arrepentiría por no haberlo confesado.

—¿Ustedes qué?—Los latidos de mi corazón se volvieron mas frecuentes al ver sus rostros, inclinarse mucho mas cerca del mío.

—A nosotros tú nos gustas.

—¡¿Q-Qué?—Todo su rostro se volvió rojo y los latidos del corazón eran muy caóticos.

—Agares, me gustas.—Confesó Elisha.—Me gustas tanto como me gusta Aaruhs.—El nombrado no tardo mucho en sonrojarse tan rojo como se encuentra Agares.

—¡Qué!—Volvio a exclamar en está ocasión con su respiración un poco agitada, su corazón no paraba de palpitar de manera aterradora.

—Me haz gustado desde hace aproximadamente cinco años.—Esta vez fue Aaruhs hablando desde lo profundo de tu su corazón.—Mi sentimientos por ti son tan fuertes como los que siento por Elisha.—Mira al de ojos azules.—Quiero seguír mirándole a los dos por mucho tiempo, estoy enamorado de ambos...me gustan.—Para este momento los tres se encuentra tan rojos como un tomate.

‹¿Qué está pasando aquí? He recibido la confesión de dos chicos, ¿por qué siento que mi corazón está a punto de estallar? Hay unos revoloteos en mi estómago aterradores... ¡Yo...yo les gusto! ¿Gustar, gustar románticamente? ¡¿Cuando se convirtió esto en BL?!›

Elisha y Aarush agregaron un poco mas de presión en el agarre de su mano entrelazadas, el silencio de Agares era una agonía para ellos dos, temerosos a la respuesta. Aunque desde un principio estaban consiente que podrían tener una respuesta negativa.

—Bueno...yo...

‹¿Qué siento por ellos dos? Es un cariño de mejores amigos, o simplemente es algún tipo de apego emocional por todo lo que me han ayudado. ¿Agradecimiento tal vez? No, no es agradecimiento.›

Por la mente de Agares como una película, pasaron todos esos momentos agradables con su familia, principalmente donde aparecen Elisha y Aarush.

Por mas bueno o desagradable que haya sido el momento, ellos dos siempre estuvieron ahí con él, tomándole de la mano. En ocasiones tomando la distancia para no incomodarle, pero siempre a su lado donde ánimos.

Dándose cuenta que su corazón palpitaba locamente únicamente, cuando estaba junto a los dos chicos de hermosas miradas, azul y ambarino. Que su corazón estuvo apunto de explotar al momento en que se besaron, las sensaciones que siento a tocar los labios de cada uno, no era una sensación simple, él quería volver a sentir ese sentimiento.

—¿Qué pasaría si aparece alguien que dice estar enamorado de Elisha?—Preguntó Aarush, queriendo saber la respuesta de Agares. No podía seguir con esa tensión en el aire.—Oh si me besaran.—Añade.

—¡Esos tipos estaría buscando la muerte, ustedes dos son mi...!—Agares se quedó perplejo ante su reacción, las palabras solo salieron de sus labios.

El solo escuchar los ejemplos de Aarush fue lo suficientemente molesto, su sangre hirvió al mismo tiempo que en esa mirada se plasmó una frialdad verdaderamente atemorizante.

Tanto Elisha y Aarush solo sonrieron discretamente, ver a Agares tan territorial fue muy emocionante, les dio esperanzas las cuales creían haber perdido.

‹Mi boca solo se soltó mucho antes de que me diera cuenta, una frialdad recorrió mi cuerpo de solo imaginarme esa escena. Hasta mi paladar se siente agrió...¡Me gustan!› Cubre su boca que no podía cerrarse por la sorpresa. ‹¡Yo...también tengo sentimientos por ellos dos!›

Agares dejó de mirar a la nada, llevando su mirada en dirección a ellos dos, terminando de confirmar que en definitiva sentía algo muy profundo por ellos dos.

—No se mucho sobre lo que significa gustar, pero no puedo imaginarme a ninguno de ustedes con alguien más, de solo imaginarlo siento que me dará una embolia por el coraje.—¿Cuando empezaría esto?—Si este sentimiento que estoy sintiendo es lo que llaman gustar, entonces sí.—Sostiene las manos de Elisha y Aarush.—Me gustan, Aarush y Elisha me gustan.

—El saber que sientes algo por nosotros, ya es lo suficientemente bueno. Estar feliz...

—¡Chicos!—Brianna entró corriendo a la habitación, su llegada hizo que los tres se quedaran con sus labios a medio camino de alcázar los contrarios.—Mis padres, ellos están viniendo...!

—¡¿Qué le están haciendo a mi pequeño?!

—Vine muy tarde.—Susurró, yéndose lentamente.

—¡Son cómo cuervos!—Exclama—Medió me descuido y ya están sobre mi pequeño.—Sin consideración ni gentileza, Dereck los tomo del cuello de la camisa y los lanzo sin importar a donde cayeran.

Dereck solo quería que estuvieran lejos de su retoño. Un retoño preocupado de que su corazón tenga algún problema por el sonido tan aterrador que está haciendo.

—¿Agares?—¿Por qué está tan rojo?

—Padre, creo que necesito que me revise un doctor... urgentemente.

‹En mis oídos estoy escuchando una extraña explosion, como fuegos artificiales en víspera de navidad, y mi corazón hormiguea al igual que algodón de azúcar deshaciéndose en la boca.›

Los dos adolescentes cuando escucharon eso, fueran a la puerta a gritar que necesitan urgentemente ayuda, sin ponerse a pensar que ellos dos, son la causa de felicidad de Agares y por eso se encuentra así de conmocionado luego de descubrir que le gustan dos chicos, que se les confesó.

—¡¿Qué estás sintiendo?!—Sus padres se asustan—¿Dónde duele?—Ambos buscan la causa de la dolencia de su hijo, mientras llaman al médico atraves del interruptor conectado a la camilla.

Agares dejó de lado por momento sus emociones desbordante, no le gustaba ver la expresiones tan desesperadas de sus padres, por no saber cómo se sentía.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top