capitulo 60

El ambiente en esa sala no parecía del todo agradable, cada una de esas personas tenían una mirada oscura. Frustrados por algo en específico, nada iba como querían que fuera.

—¿Siguen sin haber señales de esa mujer?—Preguntó fríamente.

‹No la hemos dejado de buscar ni por un día, no sé donde demonios se metió o si alguien le está ayudando. Pero, ¿quién a parte de mí es tan poderoso como para lograr ocultarla?› Dereck a desplegado a toda su gente por cada rincón del país y el mas cercano pero sigue encontrar rastros de Michelle.

—No, jefe.—Responden al unísono.

—La última vez que alguien la vio fue en el aeropuerto, pero según la información recoleta ella no subió al avión. Desde entonces es como si la tierra se la hubiese tragado.—Informó Ciervo.

‹Cuando me meteré que mi jefe tenía dos hijos, mellizos, eso fue un verdadero shock casi para todos. Mas para mi ya que recordé que fue ese mismo niño quien me acuso de verlo tocado delante de todas las personas, (ese momento cuando ciervo quería llevarse a Ryu) y de esa manera se llevó con el a Ryu.

Solo entonces entendí que lo perverso e inteligencia ya vine en la sangre, es hijo y copia de mi jefe. Sin embargo, si tan solo le hubiera prestado mas atención en ese momento entonces, le hubiera informado al jefe que vi un niño idéntico a él. De esa manera su búsqueda interminable terminaría ahí.

Es mas fácil hablar con la señorita Brianna, sus expresiones son mas dulces y relajadas, no da miedo. En cambio cuando vemos al joven maestro Agares es como ver a nuestro frío jefe, ambos tienen las mismas expresiones y con solo una mirada te paraliza.

No sé cómo esos otros dos jovenes maestros, lo ve con expresión extraña en sus ojos, por eso mismo mi jefe los envío a sus casas hace un año atrás. No quería que dos cerdos se comieran a su repollo, pero de igual manera esos dos jovenes maestros suelen venir seguido y estudian juntos.› Si eso sorprendió a ciervo, el enterarse que también son hijos biológico de Laín le produjo un cortó circuito en su cerebro.

—¿Sigue sin contactar a su familia?—Cuestiona Laín.

‹Descubrimos que fue esa mujer llamada Michelle, la que conducía el auto en aquel entonces. La culpable de que mi hijo, Elisha y yo por poco dejáramos este mundo.

Mientras investigamos encontramos el auto abandonado, pero no había rastro de la persona que conducía y ni algo que nos dijera quién era. Lo que no esperamos era que su esposo fuera hablar con los Reynolds, contándole todo lo que sabía y que su pequeña hija fue testigo de ello.

Al principio quiso justificar de todas las formas posibles a su esposa, sin embargo entre más hablaba se fue dando cuenta que no había y nunca habra justificación para sus acciones. Pidiendo que de de por favor no crucificaran a su pequeña, que no la vieran feo y mucho menos quisieran vengarse de Michelle por medio de Bianca.

Que su hija ya tenía suficiente dolor acausa por Michelle, Bianca no puede dormir sin despertar a mitad de la noche, ella tiene un trauma severo con ese accidente y de como su madre la abandona, creyendo que ya no podía soportar verla tan enferma. Que ella era causa de todo lo que sucedía, que si no estuviera enferma quizás la vida de sus padres sería mejor.

En verdad lo lamento por esa niña, ella sigue en el hospital recibiendo terapia. A la espera de ser operada, con el pasar del tiempo su corazón se fue volviendo mas débil hasta el punto de no poder mantenerse en pie.

Tanto Dereck cómo yo no queríamos que nuestros hijos, vayan a visitarla (suelen ir tres veces a la semana) después de lo que ha pasado cada vez que estaban a su alrededor, sin embargo Bianca no podía ser culpada por como la crío su madre.

Y nuestros hijos no tienen rencor por ella y como padres, nosotros no podemos hacer que odien solo porque nosotros no nos cae bien alguien. Todo es por culpa de esa malnacida, ella es quien debe de pagar.

Esa maldita mujer también es la que terminó convirtiendo la vida de Dereck en ese infierno, en busca a nuestros hijos. Después de dos años y medio “hablando” con Brandon, logramos descubrir como era la nueva apariencia de aquella desgraciada.

Desde entonces no hemos parado de buscarla y mantenemos vigilados a Manrique y a su hija. Pero eso no está dando los resultados que uno quisiera, Michelle no sea dignado a aparecer.›

—Sigue sin contactar a su esposo e hija.—Responde la pregunta de Laín.—Tampoco se ve nada sospechoso a su alrededor, nada fuera de lugar.

—Ya veo.—¿Cómo puede desaparecer por tanto tiempo?

‹No creo que haya cambiado de rostros porque nos encargamos de advertirle a todos, tanto en la superficie como bajo mundo que todo aquel que le hiciera un cambio de aparecían a esa mujer, que se fueran preparado para ir a conocer a su creador.› Laín suspiro un par de veces, esta igual o más frustrado que Dereck.

Tiene que sostener la mano de Dereck todo el tiempo o iría por la cabeza de Brandon, de esa forma se sentiría un poco más relajado. Sin embargo, Laín no se lo permite.

Laín no quiere que Brandon muera, aun no puede permitir que descanse en paz, no. Laín quiere que Brandon siga sufriendo por muchos años más, por lo menos 11 años. El mismo tiempo que sufrieron los mellizos en ese convento y el tiempo que sufrió Dereck buscado a sus pequeños hijos.

—Sigan buscado su paradero y vigilando a su esposo.—Ordenó Dereck.—Tarde o temprano irá con ellos, también verifiquen quien entra al hospital, las personas que van vestidos de doctor y enfermera e inclusive los pacientes.

—¡Sí, jefe!—Cada uno se dispersó dejando en la sala solo a Laín y a Dereck.

—¿Acaso tengo que hacer un pacto con el diablo para encontrarla?—Apoya su cabeza en el pecho de Laín.

Si Agares lo escuchará es probable que se asustara si es que no le cubre lo boca a su padre, dándole una mirada molesta. Sería como repetir la misma mala decisión de la primera línea, donde Dereck se enteró por su padre que podía ser un trato con un ser perverso, pero que estuviera preparado para lo peor.

Eso no le importó a Dereck, él solo quería saber el paradero de su pequeño secuestro y salvarlo. Es por eso que hizo un trato donde le daba su vida pero tenía que encontrar a Agares, vivo.

Sin embargo cuando lo encontró era demasiado tarde, el contrato no se logró cumplir y eso fue muy desagradable para es ser, porque quería el alma de Dereck. Estaba tan podrida y llena de oscuridad que era una cosecha digna de saborear, por lo que cambió los terminos del contrato solo para obtener la alma de Dereck. "Si seguimos con el mismo acuerdo te diré quién tiene el corazón de tu hijo."

Ese ser perverso uso la debilidad de Dereck para obtener lo que quería. Tanto el alma de Dereck cómo la de Agares, a quién encerró en su reino en la primera línea.

—¡Ni lo pienses!—Laín tiro de ese cabello plateado.—No hablas de esas cosas tenebrosas, ¿sigues pensando en lo que confesó Brandon? Que Michelle hizo un extraño contrato con alguien misterioso.

Brandon no les confesó todo al pie de la letra como lo hizo Michelle con él, se guardo el hecho de que esa persona era un adolescente y que Bianca es hija de su hermana, también calló el hecho de que los mellizos fueron la ofrenda para que Michelle pudiera quedar embarazada. Brandon estaba esperando el momento adecuado para usar eso a su beneficio.

—No quería hacerlo, pero no queda de otra que ir hablar con ese viejo de mi progenitor. Asi tenga que hacerlo recuperar la cordura a puros golpes lo hare, pero de que me dice que está pasando me lo dice.

Dereck mantiene bajo tierra al anciano Handerson, tuvo que sacarlo del hospital donde se encontraba ya que, lo que expresó Brandon sobre esos tenebrosos tratos, le dio mala espina. Poniéndose mas alerta y agregado otro problema a su vida.

Estos últimos dos años y medio atras para Dereck, y Laín. No han sido como hubiesen querido. Sí, han sido felices con sus dos pequeños. Sin embargo esa felicidad no se puede disfrutar al cien si tienen que mantenerse alerta, ansiosos y preocupados de que cunado menos se lo esperen ataquen contra ellos, por eso y mas no podían mantenerse relajados.

—¿Te acompaño?

—No, iré solo.—Besa suavemente la frente de Laín.—Tú cuida a los pequeños, esos mocosos no tardarán en venir a la casa.—Se esta refiriendo a Elisha y Aarush.—No bajes la guardia solo porque te traen donas.

—Que las acepte no significa que les esté dando mi aprobación.—Subio al regazo de Dereck.—Ellos lo saben muy bien, a pero tu bien que también te comes la tarta de manzana que también suelen traer.

—No puedo desperdiciarla así no tenga buen sabor.—Llevas sus manos dentro del pantalón de Laín.—Ninguna puede igualar tu sabor.

—¿Seguimos hablando de comida?

—Sí, tu eres mi comida.—Bruscamente y apasionadamente besa los labios de su amado Laín.

Mientras ellos disfrutan darse caricias, pasando un buen momento a solas. Sus adolescentes hijos que para ellos dos, siguen siendo sus pequeños bebés. Yacían esperando a Elisha y Aarush no muy lejos de la mansión, siendo protegidos en todo momento.

En el patio trasero no muy lejos de la lujosa e inmensa mansion yacía un “pequeño” invernadero de dos pisos construido de puros cristales gruesos y reforzados antibalas. Y no precisamente habían flores en su interior no, era como la casa del árbol para los mellizos.

Tienen muchas cosas desde una sala de juegos, videojuego hasta una piscina de más que de quince metros tanto de largo como de ancho, piscina con la función de controlar la temperatura del agua. Y este preciso instante la estaban usando, nadando en aguas con una temperatura frío medio.

—Agares, ven.—Brianna invita a su hermano a que nade un poco, se via muy linda con su traje de baño, verde, con revuelos, de dos piezas—El agua esta exquisita.—Ella se encuentra sentada en un flotador en forma de flamenco, con sus pies chapoteando en el agua.

‹No hay nada mejor que unas agradables vacaciones, ya necesitamos descansar después de estudiar tanto, también hemos aprendido defensa personal entre otras cosas. Papá (Laín) expreso que sería bueno que aprendemos a disparar, no quería enséñanos algo como eso pero era por nuestra seguridad.

Al principio me daba un poco de miedo y mis manos temblaban al sostener un arma, tenía que hacerlo con la ayuda de papá. Pero con el pasar de los día me fuí acostumbrado y hasta me parecía divertido. En cambio Agares, él fue diferente.

En el primer intento lo hizo por si solo y con una mirada sin emociones, vacío el cargador en el objetivo enfrente de él. (Agares dibujo al sistema y lo puso como su objetivo disparando con mas ganas) fue tan genial de verlo, siempre he sabido que tengo un hermano genial.›

Sus padres al principio se preocuparon de que Brianna de alguna manera aunque no lo quisiera, se sintiera celosa ya que, Agares a demostrado grandes destrezas y habilidades que a Brianna le acostado aprender un poco por ser temerosa.

Sin embargo se preocuparon por nada, a los ojos de Brianna su hermano es el mejor de todos y como tal tiene que ser habilidoso, también le encantaba alardear con su gente lo sensacional que es su hermano. Para Brianna su hermano estará primero siempre y sus padres lo sabían bien.

—Bri, deja de tomar esa agua.—Expreso, mirando la revista en sus manos. Cambiando de hoja al no encontrar nada interesante.—Esta sucia sin importar que se vea cristalina.

Agares reposa tranquilamente sobre una espaciosa silla libanesa, sin camisa y vistiendo solamente uno corto shorts hasta sus definidos muslos.

Si Dereck se entera que su pequeño está esperando de esa manera a los otros dos adolescentes, él como todo padre sobreprotector vendría a vestirlo con una comisa que le llegase hasta los tobillos.

‹El sol del verano se encuentra en su punto máximo, tan caluroso que solo deseas estar todo el tiempo metido en la piscina y los helados se derriten en las manos.

El verano de este año había llegado muy violento, pero ni asi las personas dejan de ir a la playa. ¿Sientes calor pero vas al mar donde el sol se siente todavía mas? No le encuentro lógica a eso.

Lo bueno de nadar en dinero es que puedes construir un lugar donde no sientas ni frío ni calor, nuestros padres nos regalaron este invernadero en nuestro cumpleaños número 12.›

Ese solo fue uno de los tantos regalos recibidos, cuando los mellizos se mudaron con sus padres. Dereck les mostró y obsequio cada uno de los regalos que había comprado en cada cumpleaños de sus hijos, regalos que hasta por fin podía entregarles después de tanto tiempo.

—¡No estoy bebiendo agua!—Refuta enojada.

—Dijiste que estaba exquisita.

—Solo fue un decir...¿te estás burlando de mi?—Sus mejillas se enrojecen por el enojó.—Solo esperará que llegué junto a ti, esta hermana mayor te dará mucho cariño.—Levanta su puño.

—Uy, que miedo.—Sonríe.

Es divertido burlarse de mi hermanita, sin importar que ella sea la mayor a mis ojos seguirá siendo la menor. Nuestras interacciones sean vuelto casi iguales que cuando hablaba con mi hermana mayor Berenicee, y en su momento me sorprendí mucho.

—¿Por qué no llegan todavía?—Se pregunta entre susurros, mirando el reloj contra el agua en su muñeca. Un regalo por parte de Elisha y Aarush para el cumpleaños número 13 de Agares.

Fue construido a mano y personificado con los colores de los ojos de los tres adolescentes, y donde iban las manecillas y la fecha en números romanos, ahí esta la foto de ellos tres juntos. Pegados a Agares mejillas con mejilla.

‹Les envié un mensaje hace medía hora.› Agares dejo la revista a un lado, subio sus lentes de sol arriba de su cabeza. Todavía sigue sin creer que ya han pasado dos años y medio desde que llegó a este mundo.

‹En estos últimos años han pasado unas cuantas cosas, una de esas cosas es la desapareció de los padres de Ryu, incluído él. Fue verdaderamente doloroso para todos (menos Dereck y Laín) el saber que fue a él ha quién le estrelle el florero en la cabeza.

La tristeza de los chicos la recuerdo como si fuera ayer, y como si fuera ayer me sigue causando molestia, unas ganas de tenerlo cerca y romperle la cara a Ryu.

Mi boca sigue volviéndose amarga al recordar las expresiones de Elisha y Aarush, fue la primera vez que los vi llorar...› Agares rechino sus dientes al recordarlo.

Hace un tiempo atrás...

De pie frente a la puerta yacía Agares, considerado en tocar o no la puerta cuando sus dos amigos, ya habían dejado en claro que no quería hablar con nadie. Tanto Elisha como Aarush se encuentran devastados, traicionados, ridículos.

Los dos adolescentes que siempre se habían mostrado seguros de si, se derrumbaron en segundos tras enterarse de que Ryu, su mejor amigo. A ese chico que conocían desde tantos años había intentado lastimar a Elisha.

Ellos dos no lo entendían y tampoco querían creerlo, era una decepción dolosa, una tracción horrible que dolía mucho. No podían fingir que no les importaba porque no era así, les importaba demasiado y sus corazones también dolían.

—¿Puedo pasar?—Preguntó con su tono de voz apagado.—Se que no lo conocía tanto como ustedes, pero en verdad lo llegue a considerar un amigo.—Sus manos se vuelven un puño.

No sé porque hizo algo como eso Ryu, sin embargo he estado considerado si Ryu también tiene algo que ver con el sistema, eso me hace sentir inquieto. Sobre todo que ese sistema no ha vuelto aparecer enfrente de mí.

—¿Elisha, Aarush...?—La puerta fue abierta.

Agares se adentro y todo estaba a oscuras, solo se podían ver dos gusanos temblorosos en la cama. Elisha y Aarush mantenían sus cuerpos tapados de pies a cabeza. No querían que Agares los viera a la cara.

—Está bien aveces sentirse debil.—Sube a la cama, abraza a cada uno.—Llorar tampoco es malo, malo es retener ese dolor, coraje que podría carcomer hasta tu alma.—Frota las espaldas de los adolescentes.

Agares hablaba con un tono calmado, pero si puedes ver sus ojos son dos cuchillos con la intención de cortarlo todo. En estos momentos esa aura oscura a su alrededor es tan perversa como la de su padre cuando se enfurece y quiere retorcerle el cuello a alguien.

—¿P-Por qué quería hacerme eso?—Elisha descubrió su rostro, dejado ver esos ojos azules tan dolidos.—¿Q-Qué le hice como para intentar dañarme?

—¡No le hiciste nada malo!—Exclaman al unísono Aarush y Agares.—Nada de eso es tu culpa.

Agares y Aarush sintiendo un desagradable malestar en su estómago, y una punzada en su pecho al ver en ese estado Elisha. Tras limpiar las lágrimas de ese hermoso rostro, ellos dos arrullaron en sus brazos a Elisha. Escondiendo sus frías y despiadadas miradas en el cuello del otro...

—¡Agares!—Le llaman, sacándolo de esos recuerdos.

—¡¿Eh, sí..?!—Sus ojos se abrieron en grande al ver que tenía muy cerca la cara de esos dos adolescentes.—Quiten sus enormes caras de enfrente, me estan tapado el solo.—"¡¿Qué fue ese extraño sonido?!" Se pregunto con su mano en el pecho.

—Te estábamos hablando pero no respondías por eso nos acercamos.

Tanto Elisha y Aarush sonrieron al ver el nerviosismo que provocaron en Agares, acercándose todavía mas lo que llevó a Agares retroceder hacia atrás, tocando con la espalda el respaldo de la silla. Pero de nada le sirvió huir ya que, Aarush y Elisha se acostaron junto a Agares.

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