Luego de otro día de diversión, los adultos estaban arreglando sus cosas para volver a casa.

-¿Por qué tenemos que volver ya?- dijo Kiri con decepción

-debemos saber si lo que le pasa a tu padre y a tus tíos será temporal- dijo Maggie

-y mañana deben ir a la escuela- dijo Erika

-me gustabas más cuando no tenías memoria- bufó levemente

-pues lo siento nena, vamos, empaca tus cosas- sonrió

-si madre- se fue arrastrando los pies para empacar

-es una chica dulce- dijo Dakota

-a veces se le sale el mal carácter, pero sí- dijo Maggie

-oye... No te pregunté antes porque no quise ser inoportuna pero ¿Qué le sucedió a tu espalda?- dijo Dakota viendo a Maggie

-¿A mi espalda? ¡Ah! Hablas de las cicatrices- sonrió y la pelinaranja asintió -digamos que fui un experimento más, tuve alas un tiempo- ella rió como si fuese lo más casual del mundo

-¿Experimento?- ella miró a ambas

-si, al parecer es requisito en esta familia- dijo Erika -pero no te preocupes, nos aseguraremos de que eso no te pase, estarás bien-

-no me importaría ser un experimento, ustedes son mi familia ahora- ella sonrió

Las otras dos se miraron con una sonrisa, ya sabían que era lo que estaba sucediendo.

-¿Quién dio el primer paso?- dijo Maggie

-¿El primer paso de qué?- respondió inocentemente

-ya sabes- dijo la pelinegra moviendo las cejas -tú y Mikey-

-¡Oh! Bueno...- sus mejillas comenzaron a ruborizarse -estamos saliendo...-

Ambas mujeres gritaron de emoción mientras la abrazaban, sabían que pronto algo iba a surgir y estaban felices por eso.

-las mujeres son raras...- dijo Shane quien las miraba desde lejos

-no puedes vivir con ellas, pero tampoco sin ellas- dijo Raphael

-supongo- sonrió -honestamente no me veo sin mi mamá, o la tía Maggie, Dakota o sin Kiri-

-ellas nos han hecho más felices con su presencia- dijo Donnie

Luego de subir todas las cosas al camión, todos subieron y emprendieron camino a casa, los niños se durmieron y al llegar a la guarida, tuvieron que cargarlos para dejarlos en sus camas.

-¡Ay no!- dijo Erika viendo su teléfono

-¿Qué sucede?- dijo Mikey tratando de comprender

-no puedo ir por los niños mañana, olvidé que había quedado en hacer algo con mi mamá- suspiró

-yo no puedo- dijo Maggie -tengo que ir al ensayo de mis chicos a medio día-

-yo me ofrecería a ayudarlos, pero debo trabajar mañana, si mi hora de almuerzo fuera un poco antes, podría- dijo Dakota

-tendrás que ir tú- la pelinegra miró a su esposo

-¿Yo? ¿Solo debo esperarlo?- la miró y ella asintió

-solo debes esperar a que él salga y volver a casa- dijo Maggie -y Leo deberá esperar a Kiri- sonrió

-supongo que es buena idea ir por ellos, una nueva experiencia- dijo Leo con una leve sonrisa

-iremos con estilo- dijo Raphael con una sonrisa

Ambos asintieron y entre todos guardaron sus cosas en su respectivo lugar, horas más tarde Mikey acompañó a Dakota a su casa y volvió para disponerse a dormir junto a sus hermanos.

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Al día siguiente, ya en la tarde el pelirrojo y su hermana castaña, estaban en sus salones respectivos esperando a que el timbre de salida sonara.

-¿Vendrá otra vez tu mami Shane?- dijo un chico un poco regordete y rubio -el bebé no puede estar sin su mami- rió

-de seguro Shane no tiene papá, por eso solo viene su madre, pobrecito, ni su padre lo quiso- rió otro un poco más alto y delgado

-si, de seguro tu padre sintió asco al verte y por eso se fue- dijo otro un poco más corpulento

Shane simplemente rompió el lápiz en su mano, no iba a pelear porque de seguro iba a dejarlos muy mal.

El timbre sonó y todos tomaron sus cosas para salir, ambos hermanos se encontraron en el pasillo.

-¿Cómo te fue?- dijo Shane

-pero que el viernes- ella levantó su mochila que estaba cubierta por un líquido rosáceo -es yogurt...-

-lo siento- suspiró y ambos siguieron su camino hacia el patio de la escuela, ahí se sentaron a esperar a su madre, sin embargo los insultos no se hicieron esperar.

-cara de rata ¿Y tu papá?- dijo una chica rubia -es cierto ¡No tienes!-

-¡Si tengo!- dijo Kiri levantándose de su asiento

-¿Y dónde está? ¿Por qué nunca viene?- rió otra pelinegra

-él está ocupado...-

-de seguro no quiere pasar tiempo con su asquerosa hija- la empujó otra, ella era rubia también y más grande que Kiri

-vamos Shane, que tu papi venga y te defienda- rió el regordete

-mi papá está ocupado- a veces ambos hermanos tenían muchas ganas de gritar quienes eran sus padres y lo que habían hecho por la ciudad

-yo creo que le das asco- rió el más alto

El fuerte sonido de un motor los detuvo, un deportivo negro con rayas rojas se estacionó en frente del patio de la escuela, el pelirrojo y la castaña sonrieron al ver quienes bajaban del automóvil.

Leonardo usaba una camisa gris un poco ceñida al cuerpo, sus tatuajes estaban al descubierto, un pantalón de mezclilla azul y unos zapatos deportivos de color negro.

Raphael usaba una camiseta negra sin mangas, eso hacía lucir sus enormes brazos, con unas cuantas cicatrices y su tatuaje, un pantalón de mezclilla gris y unos zapatos deportivos negros también.

Algunas de las mujeres que esperaban a sus hijos no podían quitar su vista de ellos, ambos eran altos, con cuerpos esculpidos y de buen ver.

-¡Papi!- gritó Kiri y corrió hacia Leo

-hola cariño- dijo Leo con una sonrisa y la levantó del suelo para darle un abrazo

-¡Enano apúrate!- gritó Raphael

-¡Ya voy!- sonrió -¿Ya ven que si tenemos padres?- rió

Shane tomó su mochila y la de su hermana para irse con ellos, los otros quedaron totalmente anonadados por como eran los padres de esos dos.

-¿Por qué viniste tú y no madre?- la castaña lo miró

-ella tenía cosas que hacer- sonrió

-¿Y mi mamá?- dijo Shane

-con tu abuela- dijo Raphael viendo a los otros niños -¿Son tus amigos?-

-no, ellos solo son unos tontos que se la pasan molestando, pero ahora que saben que eres real, ya no lo harán- sonrió

Estaban subiendo las cosas al auto cuando los niños los interrumpieron para verlos más de serca.

-¿Usted es el padre de Kiri?- dijo la rubia

-si, ella es mi hija- sonrió -la mejor hija que un padre podría tener, estoy muy orgulloso de ella-

-bien, no mentiste- dijo y se fue con las demás a esperar a sus padres

-¿Usted es el papá de Shane?- dijo el más alto

-¿No ves el parecido niño?- dijo Raphael un tanto fastidiado

-muy bien torpe ¿Cuál es el truco?- dijo el regordete viendo a Shane

-¿Cuál truco?- dijo inocentemente

-este tipo no es tu padre, simplemente es alguien a quien le pediste ayuda- sonrió triunfante -y dices que Kiri es tu hermana, pero tienen distinto padre-

-¿En serio soportas al gordito todos los días?- Raphael miró a su hijo quién se encogió de hombros -que fastidio-

-está bien si no me creen, al menos yo sé que tengo un padre que se preocupa por mí- sonrió el ojiverde

-cállate Shane- lo empujó y él ni siquiera se movió

-vamonos Shane- dijo Leo -pasaremos con tu madre a dejarle unas cosas y luego iremos a casa-

-está bien- sonrió -Kiri es mi hermana, no importa como sea nuestra conexión, ella es mi hermana- lo empujó y este cayó al suelo -hay que mejorar ese equilibrio- rió

Los cuatro subieron al auto y emprendieron su camino hacia el restaurante.

-¿De dónde sacaron el auto?- dijo Kiri

-solamente le hice una pequeña llamada a Skynah y Max hizo el favor- rió el temperamental mientras conducía

-eres increíble papá- sonrió el pelirrojo