-Ven, quiero que me acompañes a los viñedos, hay algo que quiero hacer -dice andrus-

-Esta bien, vamos, pero que es.... -dice renata-

Entonces la pareja sale corriendo hasta llegar al lugar, todo está mejor de lo que andrus había planeado.

-Andrus, ¿que significa todo esto? -pregunta renata mirando todo-

-Ya verás, ven, sígueme -dice andrus-

-Pero que pasa, esto es muy lindo, para quien es todo esto

-Hermosa, todo esto es para ti, porque te lo mereces y mereces mucho más.. Por ahora, es todo lo que pude ofrecerte, pero cuando seas mi esposa, te prometo que verás todas las maravillas que desees- dice andrus abrazando a renata por la espalda-

-Cuando sea que?... -pregunta renata-

-Escucha, hemos pasado por los peores momentos, pero sé que fueron y que serán muchos más los momentos lindos que vivimos y que vamos a vivir juntos . Quiero que estés en mi vida para siempre,un solo día sin ti, para mi es un día perdido, por eso.... Ven súbete aquí -dice andrus acercando una pequeña silla-. Mira lo que va a aparecer en esas pequeñas piedras..- Dice él apuntando al suelo.

De inmediato varias piedras se encendieron con una hermosa propuesta de matrimonio, entonces andrus, se pone en frente de renata, saca el anillo y le pregunta...

-Renata, quieres darme el honor de ser mi esposa, te casarías conmigo?

-Andrus.... Sí, nunca te diría que no, porque te amo -dice renata tirándose encima de el-

Luego de renata decir que sí, el cielo se llenó de luces hermosas celebrando la futura boda, por fin había llegado el turno de andrus para ser feliz. Todo estaba perfecto, solo quedaba disfrutar de lo maravilloso que la vida les estaba regalando.

Después del emotivo momento andrus y renata hablaron con felipe y con martina, toda la familia estaba alegre, prepararon una cena deliciosa, compartieron y brindaron seguidamente por el compromiso.

Tres mese se quedó andrus en Italia, hasta que sintió que ya era el momento de volver, quería que toda su familia conociera a su futura esposa.

-Renata, amor, quiero pedirte que nos vayamos a mi casa por un tiempo, a vivir. Quiero que te conozcan, quiero hacerte parte de todo mi mundo, y sabes que debo encargarme de los negocios. -dice andrus-

-Esta bien amor, cuando tu quieras nos vamos, creo que ya me siento lo suficientemente preparada para conocer a tu familia. -responde renata abrazando a andrus-

-No sabes lo feliz que me pone que aceptes mi propuesta, vas a ver que te van a adorar. y te entenderás muy bien con mis hermanas. Podemos irnos mañana temprano si te parece -dice andrus-

-Claro que si cariño, iré a empacar mis cosas entonces -dice renata-

-Vamos, yo te ayudaré, ademas debo empacar también lo mio.

Mientras organizan el equipaje llegan martina y felipe al cuarto de renata.

-Veo que aceptaste la propuesta de andrus -dice martina-

-Sí, creo que es tiempo de conocer a mi otra familia -dice renata-

-Te voy a extrañar mucho renata, quiero que me prometas que te vas a cuidar y que no te vas a olvidar de mi.

-Como me voy a olvidar de ti hermana, te quiero mucho. Yo también voy a extrañarte mucho, será un cambio muy fuerte, pero con andrus, sera todo más fácil -dice renata tomando la mano de andrus-

-A demás ustedes pueden ir cuando quieran, las puertas de nuestra casa estarán siempre abiertas para ustedes. Serán bienvenidos cuando deseen. -dice andrus-

-Créeme amigo,allá estaremos mas pronto de lo que tu te imaginas. No creo que martina soporte mucho tiempo sin ver a su hermana -contesta felipe-

-Cuando quieran pueden ir -reitera andrus-

-Bueno, los dejamos para que terminen de preparar todo, creo que mañana les espera un día largo -dice martina-

al terminar de preparar los equipajes andrus y renata se disponen a dormir para levantarse muy temprano.

Rápidamente amanece y el momento de partir ha llegado.

-Ay hermana, no sabes la falta que me vas a hacer -dice renata abrazando a martina-

-y tu a mi, cuídate mucho, pronto estaré por allá -dice martina-

-Bueno amigo, una vez más gracias por tu ayuda, no sé que hubiese hecho sin ti, eres como un hermano para mi -dice andrus a felipe-

-Tu también eres como mi hermano, y sabes que siempre vas a poder contar conmigo -dice felipe abrazando a andrus-

Todos se despiden y andrus y renata se marchan.

Al llegar nuevamente a su casa, amelia y alana salen a recibir a la pareja.

-Hijo que bueno que ya llegaste, (dice amelia), y tu pequeña, no sabes el gusto que me da conocerte, ven dame un abrazo -le dice la mujer a renata-

-Señora, no sabe lo mucho que me agrada poder al fin conocerla, es para mi toda una dicha -dice renata-

-Que bonita eres, mucho más de lo que andrus nos decía... Yo soy alana, una de las hermanas de andrus, se que nos vamos a llevar muy bien -dice la joven-

-Alana, que bonito nombre, gracias por ser tan amable, estoy segura que nos llevaremos muy bien -contesta renata-

-Pero pasen, no se queden ahí parados, vamos a comer algo, imagino que deben venir hambrientos después de semejante viaje-

-Si madre,la verdad si, ha sido un viaje agotador -contesta andrus-

Entonces todos entran a la casa y se sientan a compartir una buena cena. El recibimiento que le hicieron a renata fue lo mas bonito, ella sintió como si fuera parte de esa familia hace mucho tiempo.

-Andrus nos ha hablado mucho de ti, y créeme renata.. Tu has salvado a mi hijo, y yo te estoy muy agradecida, Tu eres lo mejor que le ha pasado. -dice amelia-

-muchas gracias señora, pero debo decir que su hijo también me ha salvado a mi. Yo creí que no iba a enamorarme nunca, y mireme aquí, dándolo todo por el -responde renata-

-Bueno, ustedes son la pareja más hermosa, y me alegra que una mujer como tu sea la dueña del corazón de andrus. -contesta amelia-

-Madre, hay algo que queremos contarte -dice andrus-

-Si claro, díganme...

-Pronto deberás preparar otra boda porque hace unos meses renata aceptó ser mi prometida -dice andrus tomando la mano de renata-

-Pero que dicha, por fin te casas no sabes lo feliz que me hace recibir esta noticia -dice amelia levantándose de la mesa para abrazar a la pareja-

-Si madre, sabia que esto te alegraría mucho- dice andrus-

-Señora, no sabe lo feliz que me pone el que usted acepte nuestro compromiso, yo a su hijo lo amo de verdad y juro hacerlo feliz siempre -dice renata-

-Lo sé pequeña,-dice amelia-, de eso no me cabe la menor duda, eres un ángel y yo ya te quiero como si fueras de esta familia. Sé que ustedes dos serás muy felices.¿ Y cuando piensan decirle a tu hermana helena?

-No todavía madre, queremos esperar un par de mese, primero queremos organizar nuestra casa, viajar, encargarnos juntos de los negocios....- Dice andrus-

-Eso esta muy bien.- dice amelia- yo iniciaré con los preparativos cuando tu me lo pidas.

-No se preocupe señora, queremos algo sencillo..... -dice renata

-eso no, ustedes van a tener la mejor boda, no mas bodas sencillas en esta casa -dice amelia-

-Bueno madre, tienes mucho tiempo para planearla y que todo salga perfecto, como a ti te gusta- dice andrus-