CAPITULO 10
-Andrus (dice mila), que haces aquí querido, te estaba buscando por todas partes.
-Oh, mila (responde andrus), sólo salí a dar un paseo matutino, aun dormías y sabes que en las mañanas soy algo activo; no quise quedarme en el cuarto sin hacer nada.
-Ya veo.. ¿y ella quien es? (pregunta mila mirando a renata)
-Mucho gusto señorita, me llamo renata (responde ella)
- ¿Eres amiga de andrus? -pregunta mila dando la mano a renata-
-No querida, es solo una conocida. (dice andrus mirando a renata con una sonrisa), Estaba caminando por aquí y sin querer he chocado con ella.
- ¿Como?, ¿apenas se ven y para ti ya es una conocida? (pregunta mila irónicamente)
-Si, así es, nos acabamos de conocer, eso ya la hace una conocida mía. (responde andrus).- y susurrando al oído le dice andrus a mila - noto algo de enojo en tu habla querida. a lo que mila responde -¿Enojo yo?, ¿por una aparecida como ella?. querido, no soy insegura, a demás confió en ti.
-Bueno renata, espero verte pronto. (dice andrus despidiéndose), y por favor discúlpame nuevamente por el incidente de hace un momento.
-Adiós andrus, espero que disfrutes de Italia, hasta luego señorita, que tenga usted un buen día (dice renata).
y terminada la charla renata continua su camino y andrus y mila regresan. Rumbo al hotel pasan por el lugar en el que mila había estado con lucas la noche anterior y andrus logra ver en el suelo el brazalete que mila había dejado allí.
-Querida, esto es tuyo o me equivoco? (pregunta andrus tomando el brazalete)
-Ah.. Pues.. Sí, si es mio, ¿que hace aquí? (responde mila nerviosa)
-No lo sé, eso mismo me pregunto yo. ¿que hace aquí? (dice andrus)
-Supongo que se ha reventado cuando venia a buscarte, habrá que mandarlo a arreglar. gracias a Dios lo encontraste tu -responde mila tratando de disimular-
-Esta bien, ya veremos cuando lo arreglamos, ahora vamos a comer que ya hace un poco de hambre.
la pareja regresa entonces al hotel, toman el desayuno juntos y salen a recorrer Italia. Durante todo el recorrido andrus solo pensó en renata en la tranquilidad que su mirada le había dado, no había visto una mujer tan bella, pero... sabia que debía respetar a mila, pues estaba con ella y el no era de aquellos hombres que pagan con la misma moneda.
pero como sacar de su mente una mirada tan profunda y una sonrisa tan sincera.
tres semanas duró la estadía de la pareja en la bella Italia, cada recorrido, cada lugar era un recuerdo imborrable. Durante aquel tiempo a andrus se le hizo costumbre salir en la mañana y encontrarse por el camino con renata, ambos formaron una muy bella amistad. Renata se volvió la mejor compañía de andrus durante sus paseos matutinos. Por otro lado, mila continuo sus encuentros clandestinos con lucas. Cada noche se veían en la misma parte y hacían lo que sólo ellos dos sabían hacer, darse placer. Andrus no se enteró nunca de la permanencia de lucas en el hotel, y nunca sospecho nada acerca de las caminatas nocturnas de su novia.
-Escucha lucas, creo que estos son los últimos momentos que vamos a pasar juntos, en un par de días andrus y yo nos vamos y no creo que vayas a mi casa. (dice mila)
-Pues que lastima, tan bien que la estábamos pasando (responde lucas). Mira querida, si yo quiero voy por ti a donde sea, con tal de sentirte siempre. Que regresen a su casa no quiere decir que nos vamos a dejar de ver. eso tenlo por seguro.
-Esta bien, confío en que esto se volverá a repetir pronto (dice mila besando a lucas)
y continúan con su acto placentero y satisfactorio.
Ni mila ni lucas se percatan de que hay alguien más cerca, así que sin molestia continúan, no se dieron cuenta de que renta estaba observándolos.
Renata era la encargada de los viñedos, constantemente paseaba por allí revisándolos, y eso lo hacia cuando quisiera. En una de sus muchas inspecciones encontró a mila en brazos de alguien que no era andrus. Cuando los vio, quedó estupefacta, no salia del asombro. lo único que hizo fue tapar su boca para no soltar ningún ruido, un breve momento después salio corriendo, no quería presenciar algo tan cruel como lo que mila le hacia a andrus.
al correr algo se escuchó, lo que hizo que mila y lucas terminaran ahí su encuentro.
Renata no sabia que hacer, era amiga de andrus y sabia que debía contarlo, pero no era ella quien lo hiciera, no quería que andrus la tomara por mentirosa o por entrometida. Así que calló
un par de días después andrus y mila partieron definitivamente de Italia ya de regreso a sus casas. el recorrido por los distintos países había sido inolvidable. al llegar andrus dejó a mila en su casa y luego se fue.
-¡¡ Familia!!, (dice andrus soltando las maletas en la puerta de su casa)
-No lo puedo creer, por fin llegaste (grita helena) y de inmediato se abalanza encima de andrus para darle un abrazo.
-Mi pequeña, es pero que me hayas extrañado tanto como yo a ti. (dice andrus). Adivina que hay para ti en esta pequeña bolsa?
-¡¡No te lo creo!! -responde helena- De verdad me has traído los chocolates que te he pedido, que lindo hermano. te quiero
-Como no iba a traerlos, necesitaba algo para consentirte después de tanto tiempo lejos (dice andrus abrazando a helena).
- Hijo, que bello tenerte de regreso (dice amelia emocionada), como te ha ido, estás mucho más bello que cuando te fuiste. Europa te ha caído de maravilla
-Madre, que alegría volverte a ver, me hacías mucha falta (responde andrus dando un abrazo a su madre) ¿de verdad te parece que me hizo bien el viaje?, yo he sido bello siempre, pero un toque de belleza Europea no le cae mal a nadie
y todos se echan a reír.
-Donde están mi padre y alana? (pregunta andrus)
-Tu padre ha salido un momento por un asunto de negocios y alana está en casa de michell ayudándola a preparar su cumpleaños.(responde amelia)
-Ya veo, bueno, supongo que los saludaré luego. Ahora quiero desempacar y descansar un poco (dice andrus tomando las maletas), ¿quieres venir ayudarme pequeña? -le dice a helena-
-Obvio si, como no voy a querer ayudarte, a demás tienes mucho que contarme (responde helena)
los hermanos suben al cuarto de andrus y dejan el equipaje a un lado. andrus se tira a la cama y le hace una seña a helena para que se siente.
-Tengo que contrate algo que me ha estado incendiando desde que pasó (le dice andrus a helena)
-Que pasó? -pregunta ella-
-Durante el viaje mila me ha engañado (le cuenta andrus a helena)
-¡¡¡¿¿¿Que????!!!!, (responde helena asombrada), pero por qué, cuéntame bien porque no entiendo.
-Ay mi pequeña, no te imaginas todo lo que pasó (responde andrus)
inmediatamente comienza a contar le relato del viaje a su hermanan helena quien cada vez se sorprende más de todo lo que su hermano ha tenido que pasar sólo en este viaje.
-No puedo creer todo lo que me cuentas, y yo que juraba que estabas pasando de maravilla al lado de mila (dice helena).
-Si hermana, el viaje en general fue algo increíble. Grecia tal como tu lo dices es un lugar mágico y ni que hablar de los otros países, pero mi relación con mila está muy deteriorada, aunque ella no lo crea.(responde andrus). Yo le dije que la había perdonado, e intenté olvidar el suceso, pero es algo que me persigue.
-Claro, y con razón... tu quieres mucho a mila y claramente no esperabas eso (responde helena). Pero hermano, si ella se arrepintió y corrigió lo que hizo creo que es momento de que olvides lo sucedido y trates de continuar.
-No sabes cuanta falta me hacia hablar contigo, siempre me das animo (dice andrus dando un gran abrazo a helena). Pero no solo me pasó eso, Conocí a alguien y no he sacado a esa mujer de mi cabeza.
-ay hermano pero que dices... quien fue esa persona? (pregunta helena)
-Se llama renata (dice andrus), y sí, yo sé que estoy con mila. pero lo que ella me hizo sentir durante el tiempo que compartimos no me lo ha hecho sentir nadie, ni siquiera mila.
-¿Y de donde es?.... ¿si sabes que ya no la vas a volver a ver, cierto?. (pregunta helena)
-Si, lo sé. Pero no por eso voy a olvidar lo que sentí. Ella es de Italia, la conocí en los viñedos, Si alguien un día me dijera que una mujer diferente a mi novia me haría revolcar por dentro me hubiera reído. (dice andrus)
-Pues hermanito, ya es hora de volver a la realidad, ella está en Italia y tu aquí. Y recuerda que estas con mila, ahora trata de seguir con la bonita relación que tenían antes.
Después de la charla helena y andrus comenzaron a desempacar y entre risas y juegos se contaban todo lo que habían vivido. y así se fue el resto de día, al llegar la noche andrus muy temprano fue a dormir, y mientras se quedaba dormido recordaba todo lo que vivió con renata. y poco a poco fue cerrando los ojos con la imagen de ella en su mente.
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