Capítulo 18: De vuelta a la realidad

Abro los ojos lentamente, sintiendo una mano sobre de mi cintura y un cuerpo pegado al mío.

Delicadamente cojo su mano y la levanto para poder salir, pero John comienza a moverse y a volver a atraerme hacia él.

-Hola, nena. -Susurra contra mi cuello, enviando corrientes eléctricas por cada parte de mi cuerpo.

-Mhm... hola.

-Estaría así toda la vida -Dice girandome hasta que quedo frente a él. Lleva una de sus manos a mi mejilla y la acaricia.

-Yo también. Cuando estoy contigo me siento... a salvo.

Sonríe mientras quita la mano de mi cara y la lleva a mi cintura, atrayendome más a él. Paso un brazo por su espalda, envolviendolo en un abrazo.

Joder, amo esto.

-No te arrepientes de lo que pasó, ¿verdad? -Dice y esta vez en su tono de voz no pude apreciar ningún rastro de frialdad.

Niego antes de abrazarlo con fuerza.

-Por supuesto que no me arrepiento, John.

-Syd....

-¿Si? Um... si es alguna queja simplemente ahorratela.... Quiero estar así un rato más.

-Yo también, créeme, pero es que tu teléfono está parpadeando.

Me pongo de pie -enojada con el mundo por interrumpir este momento- y agarro el celular. Es una llamada de un teléfono desconocido. Contesto, extrañada.

-¿Si? -Contesto de mala gana.

Contengo la respiración cuando escucho la voz al otro lado de la línea.

-Sydney, cariño, ¿Estás bien? ¿Dónde.... Dónde estás?

No puede ser él.

Oh, no...

-Nolan -Digo en un susurro. Tengo un nudo en la garganta. Me giro y veo a John, el cual me mira con curiosidad. Salgo corriendo de la habitación y me encierro en el baño -¿t-todos e-estoy meses donde has estado? ¿Cómo estás? ¿Qué...?

-Syd... -Su voz suena tranquila en comparación con la mía. -Es largo de explicar. Quiero verte, cariño. Te... echo de menos.

-Pero... ¿Cómo? ¿Cuándo? Nolan yo....

-Syd, te lo contaré todo. Pero... -Su voz se corta -quiero verte. Lo necesito. Eres lo único que tengo en este mundo. Estos meses han sido muy difíciles. Te quiero a mi lado, cariño.... ¿Dónde estás? Estoy en casa y me preocupé al no verte.

-Yo.... Tuve que salir de casa. Estos meses han sido muy duros para mi.

Se queda en silencio unos segundos.

-¡No, eso no! -Grita y arrugo mi entrecejo

-¿No qué? -Pregunto extrañada.

-Esto... Se me quemó la comida -Susurra y una sonrisa se forma en mis labios -Te necesito ya o terminaré muriendo en un intento de cocinar algo.

Suelto una risita baja.

-Vale -Digo al fin -Volveré a casa -Y justo en ese momento, como si de magia negra se tratara, escucho como tocan la puerta del baño.

-Te estaré esperando, preciosa. Te amo.

De repente, la puerta del baño se abre, haciendo que me sobresalte. Rápidamente cuelgo la llamada.

-¿Te irás? -Pregunta John frente a mi. Todo de él emana furia. Bajo la mirada -¡Dime Sydney! ¿Te irás?

-S-si.

-Joder, mirame -Niego -Mirame Sydney.

-¡Basta John! Tengo que...

-¿Cómo consiguió tu número? Es un teléfono nuevo. -Abro y cierro la boca, es cierto, ¿como....? -Ibas a caer en una jodida trampa.

-No, pero él....

-¿A caso no te pareció raro eso? ¿O qué de repente te llamara?

Subo lentamente la cabeza para encararlo.

-No, ¿Sabes por qué? Hace meses que no lo veo, John. El hecho de que me haya llamado el que pensé que sería el amor de mi vida después de tres meses de estar secuestrado, me cegó.

No me había dado cuanta de lo que había dicho hasta que con el ceño fruncido, dijo:

-¿Que pensaste que sería el amor de tu vida?

-Si bueno.... Ya me entiendes.

-No, no te entiendo -Da un paso hacia adelante, quedando a escasos centímetros de mi.

-¿Crees que me haya traicionado? -Cambio de tema. Él me da una sonrisa torcida.

-Puede.

-Quiero que me lleves a Fuller Park.

-No, no puedo dejarte ir, Sydney, no puedo perderte, no de nuevo.

Mi corazón se acelera con esa simple frase e involuntariamente una sonrisa se forma en mi rostro, aunque la disimulo bajando la cabeza.

-Solamente.... Quiero saber que pasa. No creo ver a Nolan de la misma forma que lo veía meses atrás, John. Estoy segura de eso. Hay algo que... no te dije -Digo jugueteando con un hilito de la camiseta.

-¿El qué? -Pregunta desconfiado.

-Puede que Nolan y yo... nos hallamos pedido un tiempo antes de que todo esto sucediera. Por lo que... juntos no estamos. Hace unos meses atrás pensaba que se podría arreglar, pero ahora... no quiero que eso suceda. -Digo mirándole con el rabillo del ojo y una sonrisita de suficiencia se forma en sus labios.

-Meh, ya eso lo sabía. Lo habías comentado de vez en cuando. Pero... te veías tan emocionada hablando con él por teléfono -Se cruza de brazos y mira para otra dirección.

¿En serio solo se quedó con eso después de lo que dije?

-Bueno, lo que pasa es que me impresionó mucho su llamada -Lo miro directamente

¿Por qué tenía la necesidad de darle explicaciones?

-Ya....

-¿Ya?

-Irás, pero le dejarás las cosas bien en claro, ¿vale? Espera aquí -Sale del baño y segundos después entra nuevamente, espera, ¿eso es una pistola?

-¿Q-qué haces?

-Debes tomarla por si intenta hacerte daño.

-John, no creo....

-Sydney, ¿a caso no lo entiendes? No te puedo perder y tengo la sospecha de que ese idiota oculta algo más.

-¡No le llames idiota!

-¿Por qué lo defiendes? -Dice elevando el tono de voz.

-Ay cállate -Le paso por un lado y salgo del baño.

Me detiene por un brazo y me gira hacia él:

-¿Qué me calle? ¿Me has mandado a callar?

-Si. -Le digo seria.

-Puedo demandarte por desacato a la autoridad. De seguro que en una celda no podrás ir a ver a idiotas.

-Ok, como quieras -Digo soltandome de su agarre de un tirón.

-Pero....

-¡Te dije que te calles! Me duele la cabeza.

-No, no me callo.

-¿Qué quieres? ¿Que te calle? -Le dedico una mirada asesina y el muy idiota me sonríe.

-Pues si -Dice con malicia.

-No es gracioso.

Pongo los ojos en blanco y voy hacia el armario. Busco entre su ropa algo decente que me quede bien, o al menos que me sirva, aunque sin éxito alguno.

-Nena, venga ya, ¿te enfadaste? -Dice abrazandome por detrás y besándome el cuello.

-¡No me llames nena, idiota! -Me aparto de él tan bruscamente que casi caigo. -¿Por qué tu ropa es tan grande? Es injusto, nada me sirve -Me cruzo de brazos y veo que él sale de la habitación. Perfecto, me dejó sola.

Miro a un lado y veo el arma sobre la cama. Tuerzo los labios y la agarro.

Joder, esto si que pesa. No lo recordaba así...

La agarro con ambas manos y apunto en dirección a la ventana. Sin intenciones de disparar, claro.

-¡No hagas eso! -Dice John quitandome el arma de las manos.

-¡Hey! No iba a hacer nada. Simplemente la estaba mirando, idiota.

-¿Puedes dejar de callamarme idiota?

-Me quitaste el arma de las manos. Yo... Simplemente la estaba mirando. Eres muy... -Pienso un insulto rápidamente -malo.

No, basta. Creo que antes me caías mucho mejor.

-Nena, con esto no se juega -Dice señalando el arma- y menos si no sabes usarla.

-Si se usarla, John. Mi padre... Mike me enseñó cuando cumplí los 12 y se me daba muy bien. -Digo orgullosa.

-Tienes 19, hace mucho que no tocas un arma... Para usarla bien, claro.

-¿Qué tu sabes? -Digo alzando una ceja

-Que hace segundos atrás te veías tremendamente sexy con el arma en tu mano.

-Eso no viene al caso, John -Pongo los ojos en blanco como por decimoquinta vez al día.

Al paso que vas, parecerás de 70 a tus 24 años.

-No será al tuyo, pero al mio sí.

Aguanto la sonrisita que quiere aventurarse a aparecer en mi rostro. Antes de que pueda reaccionar, acorta la distancia entre nosotros y me da un corto beso en los labios.

-John... mhm... -Digo tambaleandome por la repentina muestra de cariño que ha tenido conmigo. No creo que me resulte muy fácil acostumbrarme a esto -Debemos centrarnos, ¿vale? -Asiente con una sonrisa de angelito -Hace años que no disparo bien, aunque aún me acuerdo de los pasos -Digo recordando a Chic -El problema de la última vez que lo hice fue que me tomó desprevenida.

-Claro, se que eres muy buena disparando -Ironiza.

-¡Déjame en paz! ¿Que traes allá atrás? -Digo señalando algo que sobresale del bolsillo trasero de su pantalón.

- Tus cambios de tema de conversación me dan años de vida -Enarco una ceja y me cruzo de brazos -Es un vestido. Toma. -Dice suspirando.

-Pero.... ¿De quién es? -Frunzo el ceño, mirándolo con mala cara.

-De mi hermosa y sensual amante -Sonríe y mi furia aumenta.

-Idiota. Ahora, sal de la habitación, me cambiaré.

-Pero si te he visto an...

-¡He dicho que salgas de la habitación!

-Vale, vale -Dice alzando las manos en señal de rendición y saliendo del cuarto.

Me pongo el vestido, (que por cierto, es horrible. Aunque seguramente le quedaría peor a la que lo usó antes, ya que es una idiota...) me peino un poco y salgo de la habitación.

Estás celosa.

No, no lo estoy. Y menos por dos idiotas.

Venga ya, le estás diciendo idiota a una chica que ni siquiera conoces.

Yo no...

-Aleluya. -Dice de espaldas -Hasta que por fin sa... Wuao -Dice cuando se gira. -Estás....

-Apurada, mucho. Vamos, Johnny- Me burlo.

-Te lo permito a ti porque en tu voz suena jodidamente sexy.

No puede ser, ¿ni molestandolo se ofende? ¡Ash!

-Sydney....

Me giro al escuchar la seriedad en su voz.

-¿Si?

-Si algo te sucede yo.... Mataré al idiota de Nolan, ¿Ok?

-No me pasará na...

-¿Ok?

Aprierto los labios al notar que su tono de voz va en aumento y que está muy tenso.

-Vale, relajate -Doy pasos en su dirección -No tienes por qué preocuparte.

-¿Qué no? ¿Cómo puedes decir e...? -No lo dejo terminar, ya que le doy un suave beso en sus labios -¿Eso quiere decir que ya no estás enfadada?

Lo empujó.

-¡No lo estaba! Y... Vamos.

Salimos del apartamento y nos montamos en el ascensor.

-¿Te puedo preguntar algo?

-Lo acabas de hacer -Digo lo obvio.

-Eso no era.... Lo que te quería decir.... O mejor dicho, preguntar, es.... Bueno, ¿Tú tampoco dejas de pensar en lo qué hicimos antes? Quiero decir, como lo hicimos sobre la mesa del cuart....

-Si no te callas juro que abro esta puerta -Señalo la puerta del ascensor -y te tiro por el hueco.

-¿Pero yo que hice?

-En este momento, existir.

Ignoro totalmente sus quejas a partir de ese momento.

Salimos del ascensor en silencio y nos montamos en su auto.

-Estás muy callada -Dice John con tacto cuando estamos a medio camino.

-Me doy cuenta. Tampoco es que sea tonta -Digo mirando por la ventanilla.

-¿Por qué estás enfadada?

-He dicho que no lo...

-Syd, te lo estoy diciendo en serio.

-Yo también.

-¿Estás en tus días....? -Pregunta cuidadoso.

-John -Lo miro -ese tipo de cosas no se preguntan.

-Es que... No lo sé. No quiero estar así contigo.

-No estamos de ninguna manera. Estamos... Normal -Respondo sin más.

-Claro, pero contigo quiero hacer las cosas bien, Sydney. No quiero estar normal, quiero estar completamente bien.

Lo miro de reojo antes de poner una de mis manos sobre la suya, la cual está en el freno de mano.

-Estamos bien, John.


***

Después de largos minutos llegamos a Fuller Park, a mi casa.

Justo ahora nos encontramos en el coche. A una distancia prudente de la casa, para evitar imprevistos.

-Nena, mirame -Lo hago -Estaré pendiente, pero por favor, cuídate. Tienes el arma, si es necesario, úsala. Estaré cerca, te lo prometo -Asiento y me acerco a él, dándole un beso, el cual profundiza -Déjale las cosas claras a ese imbécil, ya no quieres estar con él. -Dice contra mi frente.

-No le llames imbécil -Le doy una mirada fulminante.

-¿Por qué lo defiendes? -Dice enfadado.

-No lo estoy defendiendo. Pero tampoco lo llames así, no te gustaría que te llamara "imbécil"

-No, tú me llamas idiota y engreído -Aprieto los labios, conteniendo una sonrisa.

-Chao, Johnny.

-Joder, me pone mucho que me llames así. No me tientes a dejarte sin poder caminar por días, nena. -Muerdo mi labio inferior sensualmente, provocandolo. -Sydney....

Antes de que me agarrara, abro la puerta del coche y salgo.

-Cuídate -Dice desde dentro del coche.

-¡Que si, pesado!

Sin más, camino hacia casa. Lo que no me esperaba para nada, era lo que me esperaría en esta...

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Nota:

¡¡Hello!!

¡Feliz año nuevo!

Espero que el 2022 esté lleno de cosas buenas para todos. Ojalá que sus sueños se cumplan, bonitxs. Que tengan mucho éxito y amor. Que su crush literario favorito salga del libro y les de un morreo intenso. Pero sobre todo, que sea un año con mucha salud. Que la pandemia no se lleve más vidas inocentes. Que no se lleve a nuestros seres queridos y que nunca, pero nunca, haga que por algo parecido se derrumben. No sabéis lo fuertes que sois al levantarse todos los días y seguir con sus vidas ¡Os merecéis lo mejor!

Creo que la nota fue muy extensa, lo siento si fue así :')

En fin, FELIZ AÑO NUEVO!!

Espero que el capítulo les haya gustado ❤

No olviden votar y comentar, mis chucherías favoritas.

Re casual yo todos los días inventando un apodo nuevo para vosotrxs😳😂

En fin, os quiere mucho,

Brenduski la sentimentaluski <3

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