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Su estómago se sintió vacio y empezó a tener náuseas, cada día que llegaba a ese portón para entrar a la escuela le invadía un miedo que cada vez se hacía mucho más grande. Aún que estuviera apuntó de vomitar lo poco que desayunó, solamente suspiro y entró a el lugar.

Sintió las miradas expresando asco de todos, también escuchaba varios murmullos, que cada vez lo tensaban aún más. Tal como siempre, solamente bajo la cabeza y aguantó sus lágrimas, esperando estar solo de la nada.

─ Tranquilizate Evan, todos los días son iguales... ─ Habló bajo para si mismo, suspirando por segunda vez en el día.

Se podría decir que esta acostumbrado a todo esto, pero apesar de eso siempre se sentía horrible seguir viviendolo.

De un abrir y cerrar de ojos llegó a el salón donde le darían clase de matemáticas. Al ya no sentir la mirada de nadie se sintió más tranquilo, sacando todas sus cosas para perfeccionar la tarea de esta clase.

No era el mejor estudiante, pero si sacaba buenas notas, pues al no poseer con quien pasar el rato, sentirse cansado en todo el día y no tener cosas que hacer, su escape era estar solo en su habitación haciendo sus deberes, leyendo o dibujando, tratando de estar tranquilo.

Después de un rato llegó la profesora, quien dejó las cosas que traía en su escritorio, se aclaró la voz para empezar a hablar.

─ Buenos días jóvenes, ¿son el grupo 2-F no? ─ Preguntó la mayor, todos afirmaron que si, a lo que la maestra buscó y agarró la lista del grupo. ─ Bien, creo ver que el día de hoy se nos une un nuevo estudiante, me lo comentaron en la dirección. ─ hizo una pausa. ─ ¿Se podría levantar y decir su nombre?

Uno de todos los adolescentes del lugar se levantó, recibiendo la mirada de todos los que había ahí mismo, hasta la de Evan.

─ Me llamo Gregory. ─ aclaró su garganta. ─ Gregory Glamrock.

─ Bueno, Bienvenido Gregory Glamrock, esperó que estés cómodo aquí, puedes sentarte. ─ el jóven tomo asiento al escuchar a la maestra, quedándose mirando a la ventana.

La clase solo siguió como todos los días, siendo aburrida para todos, pues ese día no era muy interesante. La mayoría de alumnos solo se dedicaron a molestar desde lejos a Evan, tirándole hojas de papel, lápices, basuritas, lo que sea, el solo no le tomaba importancia, mirando su cuaderno puesto en su escritorio.

Desde lejos, Gregory miró cada una de las acciones de sus compañeros, dejándolo en duda, obviamente empezando a desconfiar de los que molestaban de esa manera al de pelo castaño oscuro.

La clase dió su fin, todos salieron desordenadamente del aula, haciendo a la maestra gritarles desde dentro. Todos dieron camino a su siguiente clase que era Biología y al llegar notaron que no había ningún profesor, así que se quedaron dentro del salón, viendo si este llegaba o no, pero al parecer no vendría ese día. Igualmente, todos los alumnos se quedaron en la aula pues se les era más cómodo estar en ese lugar, todos se dividieron en grupos, dejando a la misma persona de siempre sola.

Pero al parecer, Gregory había captado la atención de la mayoría en el lugar, provocando que muchos de acercarán a hablarle donde se había sentado, el castaño al ser sociable no tuvó muchos problemas en realizar una plática amable con los demás. Sin embargo, no podía dejar de ver al chico de ojos impares quien estaba solo en la esquina del salón, ¿No le gustaba socializar?, ¿tenía miedo de hacerlo?; Esas dudas lo carcomian por completo, así que lo mejor era quitarse estas mismas preguntando a las personas que ahora mismo le hablaban.

─ Perdón por interrumpirlos, pero tengo una duda. ─ Hizó una pausa, todos lo miraron en esta. ─ ¿Quién es el?, ¿por qué esta solo? ─ Señalo a Evan desde su lugar, todos los que estaban con el voltearon a ver dónde señalaba Gregory, riéndose al momento, sin duda el castaño se confundió más.

─ El es Evan Afton, aunque muchos le decimos Cry Baby, Bebé llorón, llorón, que se yo, ya depende los gustos de la gente. ─ Explicó uno de los chicos, este encogió sus hombros para seguir hablando. ─ Es alguien muy, pero muy sensible que se asusta por cualquier cosa sin importar que ya tiene casi 14 años, se la pasa llorando todo el día, literalmente. ─ Se escucharon risas bajitas, por parte de muchas chicas y chicos que escuchaban atentamente esto. ─ En fin, es obvio que lo hace para llamar la atención, se me hace exagerado para creerle todo un cuento de que tal vez tenga problemas en casa, personales y esas cosas. No te preocupes, el no suele acercarse a nadie, así que no podrá hablarte.

─ Deja veo si entiendo, ¿se burlan de este chico por ser sensible? ─ Gregory al escuchar todo lo anterior se sintió asqueado por el tipo de gente con la que estaba hablando.

─ Yo no lo llamaría así, todos aquí saben que lo hace para hacer sentir mal a todos, actúa como si tuviera problemas, pero eso no es verdad. El es alguien infantil que no sabe tener una madurez de alguien que tiene su edad, ya no es un niño de mami que tiene pesadillas en la noche y tiene que dormir con sus padres, no, es un idiota llorón de secundaría con ya casi 14 años, que tiene que ser hombre y dejar de ser marica de una vez. ─ Las palabras de el compañero salieron sin filtro alguno, dejando a Gregory confundido. ─ Vamos Gregory, sabes, el es una molestia para todos, debería de serla para tí también, te aseguro que si le digo hola sale corriendo mientras llora.

─ Están tratándolo como mierda, ¡no deberían tratar a un ser humano de esa manera! ─ Exclamó el de ojos avellana, algo molesto por la actitud poco empática de sus compañeros.

─ Solo de damos lo que se merece, y tendrás que acostumbrarte, a menos que quieras terminar como el. ─ Habló alguien más, Gregory miro a todos y rodo los ojos.

─ Ajá.

...

"Es estúpida la razón por la cual se burlan de Evan" pensó Gregory, que se encontraba en otra clase, pues la hora de Biología había terminado hace rato. El maestro de español hablaba y hablaba explicando un tema, pero apesar de que el adulto no paraba de hablar Gregory no podía parar de pensar en el chico sensible. Sentía que debería de hablar con el, esta seguro que no quiere llamar la atención, parece literalmente no hablar con nadie, tampoco está comentando sus problemas a todo mundo, ni comparando los suyos con otros, así que estaba seguro que Evan en ningún momento quería llamar la atención. El apodo que sus compañeros le habían seleccionado era horrendo, ese apodo aunque no quisieran que sonará como burla, lo es, es burla de que es sensible y asustadiso, cosas que muchas veces el hombre más valiente puede tener.

Pensó y pensó, pero no llegaba a nada. Solo podía ver al chico desde lejos.

Después de unas 2 horas, se dió el típico receso de 20 minutos, por parte de Evan se fue al lugar más solo de la escuela, o por lo menos el que el creía que era el más solo. El maestro de esa clase le prohibió quedarse en el salón, así que no le quedó de otra. Estaba sentado en el piso de aquel lugar mencionado antes, mientras comía un sándwich, estaba tranquilo, pero escucho un ruido, alarmando al castaño oscuro que volteó a todos lados, pero al no ver a nadie algo desconfiado siguió comiendo.

Hasta que una piedrita chocó en su cabeza, provocándole un dolor algo bajo al instante. Esto lo tensó, ya suponía lo que pasaría gracias a esto, sabía que había niños escondidos a punto de hacerle burla o hasta golpearlo. Se levantó y asustado miró a todos los lados, sin aún ver a nadie.

─ ¿¡Q-Quién está ahí!? ─ Su voz tembló, el castaño oscuro escucho una risa que provenía de un arbusto, del cual salió un chico y después de el otros salieron de su escondite.

─ Hola, hola Llorosito o mejor, Cry Baby. ─ Habló el "líder" del grupito, aquél dialogó hizo temblar a Evan.

─ Math, r-realmente no quiero problemas, por favor. ─  Una carcajada salió de todos en el lugar, mientras que la respiración del de ojos impares se aceleró aún más, sintiendo sus ojos llorosos.

─ Y a mí que. ─ Math levantó una ceja. ─ Tal vez no estariamos aquí si tan sólo no hubieras abierto la bocota la semana pasada. ─ Fruncio las cejas, a Evan le llegó el recuerdo al instante.

─ ¡Exacto!, por tu culpa nos suspendieron 2 días, y mis padres me castigaron. ─ Comentó uno de los chicos.

─ Pero yo-

─ No, nada de "pero yo", la verdad te mereces más que piedritas en la cabeza. ─ Math se acercó lentamente al más bajo, mirándolo a los ojos tratando de intimidar a este, terminando por empujarlo, haciendo que Evan terminara en el suelo con lágrimas saliendo de sus ojos.

Pero una piedrita choco en su cabeza, tal como había hecho el con Evan, molesto miró a sus acompañantes creyendo que fue alguno de ellos, pero todos negaron inmediatamente.

Alguien se puso al lado del más bajo y todos lo miraron confundidos.

─ ¿Qué se supone que haces Gregory? ─ Habló uno de los chicos, el castaño se cruzó de brazos mirando a todos con molestia.

─ Dejenlo. ─ Fue lo único que salió de los labios de Gregory.

─ Pff, ¿bromeas no?

─ No, no bromeó, dejenlo.

─ ¿Porque lo dejaríamos?, este no es tu asunto. ─ Math suspiro, tratando de hacer al lado a Gregory, que ahora se encontraba delante de Evan, pero el de ojos avellanas lo empujó al instante.

─ ¿Que parte de "dejenlo" no entendieron? ─ Ladeo la cabeza.

─ Gregory, dejate de bromas, te aclaramos cual es la situación, el quiere llamar la atención y si sigues defendiendolo terminarás como el. ─ Soltó un suspiro. ─ Es solo un puto niño llorón.

─ Me importa una mierda cual fue la situación, no deberían estar haciendo esto, por si no saben esto es acoso, para ser más específico bullying. ─ Todos veían molestos a Gregory, y este veía a todos igual. ─ ¿Puto niño llorón?, vamos, aquí el puto niño llorón eres tú, que refleja sus inseguridades en personas que son menos fuertes que tú, haciéndoles daño en vez de ayudar. Claro, una persona admirable.

Evan no podía decir ni una palabra, aún estaba algo sorprendido por la actitud de el nuevo, quedando paralizado en todo momento, preguntandose si acaso esto era real.

─ Eres un maldito, pronto te quedaras igual de solo que el, no vengas a rogarnos cuando pase. ─ Se acercó al castaño, ambos mirándose con odio.

─ Creó que ya mencioné que me - vale - mierda. ─ Apuntó de pelear, sonó el timbre para entrar a clases.

─ ¡A la-, ¡toca Química!, ¡tenemos como 5 faltas ahí!, ¡no me pueden suspender de nuevo, mis padres ahora si me matan! ─ Grito uno, todos se alarmaron y salieron corriendo.

─ Esto no se quedará así Gregory. ─ Math comentó por última vez. ─ ¡Adiós Cry Baby!

Gregory rodo los ojos y decidió solo concentrarse en el más bajo, quien estaba aún en el piso.

─ ¿Estás bien? ─ Extendió su mano al otro, pero notó el nerviosismo de este, que aún tenía varias lágrimas en sus mejillas.

─... ─ Solo se escuchó el sonido de la respiración de ambos, una más rápida que la otra. Evan nervioso miro varias veces la mano extendida, hasta que por los mismos nervios solo se levantó y salió corriendo, dejando al castaño confundido.

─ ¡Ey!, ¡Espera! ─ Gritó, viendo al menor correr. ─ Mierda, la verdad es lindo.

Tenía la esperanza de hablar con el, pero al parecer no se podría lograr, no hasta entrar a clases, así que camino hasta el salón de Química, siendo ya algo tarde.

Pero en todo el día Evan evitó a Gregory, se sentaba sumamente lejos de el, cuando Gregory trataba de hablarle aceleraba el paso, intentó no quedarse en ningún momento a solas con el y muchas veces se escondía de el de ojos avellanas para no toparse al pasar.

Gregory no tuvo ninguna otra opción más que aceptar la actitud del otro, sabiendo que el de ojos impares no quería hablar con el, solo que el castaño se preguntaba la razón.

Evan tenía su razón para evitarlo, no quería que Gregory arruinará su vida social por el, alguien que ni conoce. Sobre todo que en algún momento le hagan lo mismo que a él mismo.

...

Pasaron las horas y las clases terminaron por este día, todos los alumnos de aquella escuela salieron del lugar mencionado. Gregory por su parte trato de encontrar por un momento a Evan, para hablar con el, pero al final de todo no lo pudo ver, así que se fue a casa, antes de preocupar a su padre.

Al llegar a su casa, abrió la puerta con las llaves que llevaba en su bolsillo, luego se dirigió a la cocina donde se encontraba su padre.

─ Hola papá. ─ Mencionó con cansancio, entrando a aquella cocina.

─ ¡Superstar!, ¿cómo te fue hijo? ─ Sonrió Freddy, colocando dos platos de comida en la mesa.

─ Bien, parece que le caí bien a los demás. ─ Encogió los hombros, su papá solo soltó una pequeña risa. ─ ¿Qué hiciste de comer?

─ Unos deliciosos espaguetis. ─ Freddy se sentó en una de las sillas de la mesa. ─ Vamos, sientate, esta servido.

Gregory asintió y se sentó en una silla igualmente, ambos comieron en silencio, pero Freddy noto al castaño algo más pensativo de lo normal, así que decidió hacer una simple pregunta.

─ Y bien, ¿algo interesante de tu primer día? ─ Siguió comiendo, dirigiendo el tenedor con espagueti enrollado en el a su boca, mirando a Gregory.

Gregory levanto la mirada y empezó a platicarle sobre todo lo que pasó, hasta que llegó el momento en donde seguía contarle sobre Evan.

─ Parece que todo fue bien, ¡me alegro de eso Superstar! ─ Sonrió, contentó de que todo hubiera salido bien en la escuela, no podría negar que si se mantuvo preocupado.

─ Hay una cosa más... ─ Mencionó el castaño, la sonrisa de Freddy permaneció, volteando a ver a su hijo. ─ Resulta y resalta... Que hay un niño "tímido" en la escuela. ─ Simuló comillas con los dedos. ─ Pero todos le hacen burla, por ser un niño sensible, a mí me comentaron que se la pasa llorando, o que se asusta por cualquier cosa, muchos creen que solo quiere llamar la atención, pero pocos que tal vez tenga problemas en casa, o algo así... ─ Trago saliva. ─ Con esto quiero llegar con que ví a unos niños molestandolo hoy... De echo ese día iba a juntarme con ellos, solo que había ido a la cooperativa de la escuela y no los había visto ir donde estaba el... Y cuando los ví yo-

─ ¿Les seguiste el juego?

─ ¿Qué?, no, lo defendí.

─ ¡Dios!, ¡que susto me diste Superstar!, estaba apuntó de darte un sermón. ─ Soltó una gran risa, haciendo reír a Gregory también. ─ Pero me alegro de que lo hayas defendido.

─ Sí... Solo que después de defenderlo, cuando quice ayudarlo a levantarse salió corriendo, y me evitó todo el día... ─ Gregory volteo la mirada al piso.

─ Oh.. Bueno, pues Superstar, como tu dices, el pequeño es asustadiso, es obvio que tenía miedo en ese momento y no tuvo otra alternativa que correr por el mismo miedo. ─ Habló Freddy con una pequeña sonrisa en su rostro.

─ Tienes razón, es probable que fue eso. ─ También sonrió. ─ Trataré de acercarme a el, la verdad quiero ser su amigo.

─ ¡Así mismo!, da la iniciativa, hijo.

─ Gracias papá. ─ Se levantó de la silla, haciendo esta hacía atrás. ─ Terminé de comer, iré a mi habitación.

─ Claro Superstar, trata de descansar, de seguro estas algo cansado. ─ Freddy sonrió, se levantó de la silla igualmente y agarró los platós para ponerlos en el lavabo.

─ La verdad si lo estoy, gracias. ─ el de ojos avellanas soltó una risa. ─ ¡Te quiero apa!

─ ¡Yo a ti hijo!

...

Su padre siempre llegaba un poco tarde a comer en la casa, este obligándolos a esperarlo para comer en familia, haciéndolos una familia que para el sería feliz, pero eso siempre fue una mentira.

Todos se sentaron en la mesa, comenzando a comer aquella comida hecha por Michael, quien sorprendentemente sabía cocinar demasiado bien.

─ Muy bien, ¿Elizabeth cómo vas en la escuela? ─ Empezó a hablar William, esto tensó un poco a Evan, parecía que ya era hora de darle importancia a solamente las calificaciones.

─ ¡Muy bien papi!, saque 10 en el examen de matemáticas, ¡la maestra me dijo que soy una de las mejore-

─ Me alegro hija. ─ Interrumpió, Elizabeth incómoda trago saliva, para luego seguir comiendo. ─ ¿Y tú Evan?

─ Todo... Esta bien. ─ No habló mucho, no quería ser interrumpido por el.

─ ¿De acuerdo?... Solo esperó que no te duermas en clases. ─ William suspiro y volteó a ver a Michael. ─ ¿Y tú?, ¿mejoraste esos cincos y seis?

─ Pues, saque 7 en tecnología... ─ Michael encogió los hombros, William solamente suspiro molesto. ─ ¿Qué?, algo es algo papá, tampoco es tan fácil sacar diez de un día para otr-

─ Claro que es fácil, ya he tenido esta conversación contigo Michael. ─ El adulto alzó la voz.

─ Una injusta.

─ Cierra la boca Michael.

─ ¿Otra vez sin dejarme opinar?

─ Te estoy pidiendo que cierres la boca, ¿puedes hacerme caso?, eso si que es fácil. ─ Golpeo la mesa, asustando a los dos niños menores.

Todos se mantuvieron en silencio, Evan trato de comer lo más rápido posible, para solo salir de ese lugar horrible. Terminó de comer y lavo su plato, subió las escaleras en silencio y se encerró en su cuarto.

Estaba demasiado cansado, apuntó de dormirse. Mirando el techo sintiendo todos sus pensamientos llegar, pero antes de que llegarán a hacerle daño, cayó dormido profundamente.

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HOLA HOLAAA 🐢🌈

¡Espero demasiado que les haya gustado el primer cap de este remake!, hice mi mayor esfuerzo. Muchas cosas siguen siendo iguales, pero hay algunas que cambié, y mientras siga este remake lo verán.
Como un pequeño spoiler, tal vez cambie cosas del tema de Alejandra. 👨‍🦲

Ahh, y Marco ahora se llama Matheo, aunque le dicen Math, como se mencionó en este cap. ( en la historia original era un personaje x quien le hacía daño en este cap a Evan, para mejorar esto decidí que Math desde acá empezará sus maldades JAJAJA).

Por ustedes hice 3000 palabras en este capítulo, así que espero que hayan aprovechado. 😝

Una última cosita para los que gracias a mi mami se quedaron a leer esto. Tengo un canal de difusión en WhatsApp, ya lo había mencionado en los anuncios pero nadie lo vió JAJAJA, así que para los que quieran entrar el link esta en la descripción de mi perfil, pues aquí ni en anuncios puedo poner links.

Ente canal de difusión lo usaré para informar datos del fic, o poco probable de fanfics nuevos. También de cosas que se me ocurran como historias y cosas que me pasan al día y al igual que mostrarles mi arte.

Ns cuando publicaré otro cap, esperó que pronto, por ahora esto es todito. ‼️

¡No se olviden de votar!

En fin, eso es todo, gracias por leer y no olvides disfrutar tu vida. 🥳💗

¡Hasta quien sabe cuando!

Autor: Zukxs.

Palabras: 3204.