—Quiero ir a clases de baile

En el momento en el que Hanabi dijo esas seis palabras, decidí prestarle atención a lo que decía. ¿Desde cuando le interesaba el baile? ¿Y por qué me lo decía a mi?

— Y quiero que me lleves— Terminó feliz.

—Olvídalo Hanabi, dile a Hinata que lo haga, o no lo sé, hazle un chantaje sino— Dije desinteresado.

— Es que ya no tengo con que chantajearla— Se tiró en la cama— Ahora que ella y Naruto son novios, no puedo hacerle tratos porque todos ya lo saben, y Hibata no va a ayudarme —Dijo con un tono dramático.

Odiaba cuando mi prima menor se intentaba hacer la víctima conmigo para conseguir lo que quiere. Y lo peor es que le sale bien.

— ¿Y qué te hace pensar que yo si lo voy a hacer?

— Bueno querido Neji —Se paró y se colocó frente a mi —Estoy muy segura que a mi papá le gustara saber que en lugar de ir a tus "clases de arte", vas con tu amigo Lee a hacer artes marciales —Dijo juntando sus manos y sentándose en mis silla giratoria mientras daba vueltas sonriendo maliciosamente —Creo que que va a agradar al noticia, si quieres, le puedo ir a decir ahora querido primo—.

—No puedo creer que una niña de doce años me está intentando chantajear

— Si, pero lo está haciendo bien

—¿Como sabías lo de las clases de artes marciales?— Pregunté serio.

— Estoy en todas partes, soy como Anonymous, pero con mejor gusto en moda— Dijo con un intento de risa malévola al final.

Siempre supe que Hanabi era raro, pero no sabía que tanto. Y mucho menos que eso sería un problema para mí.

Por otro lado, si llevaba a Hanabi a las benditas clases de baile en frente, alguien debería hablar con la profesora, y tal vez podría descubrir que es lo que me intriga de ella. El porque siento que necesito saber su nombre. Conocerla. El porque la miro dar clases.

Suspiré derrotado ante mi prima menor.

—Solo no me hagas quedar mal cuando te vaya a inscribir en frente mañana— Dije cerrando los ojos un poco molesto.

—¡¡SIII!! —Gritó ella aturdiendome los oídos. —Mi papá no de puede enterar, me mataría y a ti también— Paró unos segundos para pensar— Si nos ve salir juntos, puede sospechar, ya sabes como es, así que podemos decir que vamos a la casa de amigos, o luego podemos pensar otras excusas

—Bien, pero tú pondrás de tu parte para pagar las clases ¿oíste?

— Si tranquilo, no eres el único al que chantajeo— Dijo con orgullo. Caminó hasta la puerta, se detuvo en el marco y me miró — Neji

—¿Ahora qué?

—Gracias

No sé porque me agradecía si me estaba casi obligando.

— Si si, sal de aquí

— Bien, te dejo seguir espiando chicas por la ventana— Canturreó.

— Cierra la boca Hanabi

Ella salió de mi habitación, y salí al balcón. Vi que la castaña se despedía de las niñas, y salía al balcón unos segundos a tomar aire. Parecía algo cansada, pero aún así sonreía. Suspiró. Salí del balcón, pensaba que tal vez podía verme, y si mañana iría a hablar con ella, no quería que pensara que la acosaba ni nada de eso.

Salí y crucé la calle para encontrarme con el cartel con los números de teléfono para inscripciones. Saqué mi celular, y lo anoté.

Estuve veinte minutos mirando la pantalla del celular, hasta que por fin decidí enviar el mensaje que tenía escrito desde hace un rato largo.

Escuela de Ed. Artística

Hola, mi nombre es Neji Hyuga

Me gustaría saber si podía inscribir mi prima

Hanabi Hyuga en la sección
De baile para niñas de 9-13 años

Hola, si! No hay ningún problema
Pasen mañana a las 16:30 para
Hacer la clase de prueba en la calle ******** n° ****

Ahí estaremos
Gracias

¡A usted! Ahora le comunico a
La profesora de baile.

Bien, ya había acordado ir a inscribir a Hanabi, y que haga una prueba para la clase de baile. No pegue un ojo en toda la noche.

Me levanté a la mañana siguiente, ese día, supuestamente tenia clases de arte, así que iba a aprovechar para llevar a Hanabi. Ella le dijo que iba a la plaza con unas amigas. Las 16:30 llegaron, y Hanabi fue la primera en salir para que Hiashi no sospechara. Cruzamos la calle, y entramos al edificio. Estaba bien decorado, y se podía escuchar a los otros chicos y chicas de diferentes edades ensayar, cantar y bailar en las otras clases. Hanabi estaba muy emocionada. Se había puesto ropa cómoda como para bailar.

Una niña se asustó y pegó un grito.

—Justo a tiempo— Mire a la izquierda, para encontrar a la castaña. Era muy linda, y mucho más de cerca. Estaba idiotizado con el brillo que reflejaban sus ojos. — Bueno chicas, como les estaba contando, Hanabi Hyuga nos acompañará en nuestra clase de hoy, y si le gusta se va a quedar, y va a bailar con nosotras.

"Por mi que se quede para siempre" Pensé.

— Que bueno que estés aquí Hanabi, esperemos que te guste la clase— Dijo sonriendo.

"Pues eso espero" Pensé.

—¡Claro que si! amm...?

—Tenten— Completó — Bien, empecemos con la clase— Dijo tomando suavemente a Hanabi del hombro— Hasta luego— Me dijo.

—Hasta luego

Me quedé esas aburridas y largas dos horas sentado en la Sala de Espera de ese lugar con unas viejitas algo raras que hablaban de como una vecina se había robado el gato de la otra (basado en hechos reales, yo soy la que lo robó :v). Era muy tranquilo, me hubiera quedado dormido de no ser por la recepcionista, que se acercó a mi.

— ¿Esperas a alguien?

No, estoy aquí por gusto. ¿Que le importaba?. Pero, no iba a ser grosero, así que solo asentí con la cabeza, y mire la puerta de la clase en la que estaba Hanabi.

—Mi nombre es Shion, para que sepa, si necesita algo, acérquese a la recepción— Dijo con un tono coqueto, aunque sinceramente, solo la hizo quedar mal.

—Gracias, lo anotaré— Respondí algo desinteresado.

Lo anotaré en la lista de cosas que no me importan. Gracias.

La chica se fue, y noté como me miraba desde su puesto de recepción. La puerta de la clase se abrió, y un montón de chicas salieron corriendo y sonriendo con sus bolsos estampados.

—¡¡NO CORRAN POR EL PASILLO MOCOSAS!!— Gritó la recepcionista la cual ya me había olvidado el nombre enojada.

Hanabi salió acompañada de la profesora de baile.

—Dime Hanabi, ¿Te gustó la clase? ¿Te gustó venir?— Preguntó la castaña dándole una sonrisa cálida a mi prima menor.

—¡Me encantó! Y creo que a mi primo también le agradó el lugar, pero creo que le gustó más mi pro- — Le tapé la boca con la mano, evitando que hablara sus hablidurías causadas por el exceso de azúcar.

—GRACIAS Hanabi, por decirle tu opinión y la mía a la profesora Tenten, si te gustó, te vamos a inscribir ahora— Dije mirando a Hanabi, disimulando un poco mis ganas de matarla.

—Pues, será un placer tenerte como alumna Hanabi

—Gracias Tenten, créame que también me entusiasma estar aquí, en especial a mi primo por traerme

Sonreí nerviosamente a la oji-chocolate, la cual me devolvió la sonrisa.

—Pues te veo el sábado que viene a las once, hasta luego— Me miró— Hasta luego

—Hanabi, si sigues diciendo tonterías a tu profesora, no te voy a ayudar— Le susurré.

—Solo digo lo que veo, pero si te molesta no lo volveré a hacer— Dijo en tono inocente.

"Definitivamente lo volverá a hacer" Pensé.

—En vez de pensar en la profesora, agenda en tu celular: Sábado 11 A.M: Visita a mi novia

—¿Cómo es que dices tantas tonterías en un segundo?

Esta niña me va a sacar canas verdes, pero bueno, al menos gracias a ella estoy aquí, y hago algo más que verla desde mi ventana. Tenten. Lindo nombre.