Cap.7: "Quien te viera así diría que eres la chica más angelical que existe en la Tierra".

Yoon Hana.

Si no te quisiera tanto ya te hubiera partido esa cara hermosa que tienes.-dijo Hara y pidió dos botella de Soju.

Agarré el vaso y comencé a tomar descontroladamente. Dejé que el ardor del líquido me quemara la garganta. Era una sensación agradable.

Hey! Hey! Bebe despacio o antes de terminar la botella vas a estar borracha como una cabra, eres poco resistente al alcohol Recuerdalo.-gritó e hice un mohín de disgusto.

Aish! Deja ya de graznar como un maldito pajarraco. Me mareas.-dije en un siseo.

Ah! De acuerdo. ¿No vas a hablar? Entonces...Entonces me voy. -chilló y se levantó de un salto de la pequeña banqueta.

La agarré del brazo y se sentó dándose por vencida.

Dime. ¿Ya vas a hablar?- puso cara de haber masticado una aspirina y cruzó los brazos como pidiendo que soltara todo de una vez.

Luego de dudar un poco en si decirle o no, decidí contarle mi situación.

Mi padre...Mi padre quiere mudarse a casa de la madre de Taehyung y vender la nuestra.

Pero...¡Pero eso es una locura!-exclamó exaltada.

Lo mismo pienso por eso me le opuse.-dije.

¿Qué le dijiste Hana?-preguntó porque me conoce muy bien.

Yo...yo le dije que no me iría de ningún modo porque a mí no me gusta vivir pegada a nadie, que no soy como él, arrastrado y sanguijuela. Entonces...Entonces me quiso pegar, me levantó por primera vez la mano y yo me marché.

¡Ay amiga! Tú no cambias-suspiró. -Hasta yo te pegaría si me dijeras eso. Como dije antes: la forma en la que hablas no es broma.-dijo y soltó un suspiro pesado.

Minutos después ya estaba completamente fuera de mí. Estaba borracha como una cuba.

Hey! Hara! Soy una escoria...Una maldita escoria en esta sociedad de mierda.-dije en voz alta y rompí a llorar y reír como psicópata. No estaba muy consciente de lo que hacía. Simplemente quería gritar.

Hara! ¡Amiga! -seguí llorando y pataleando.

¿Por qué nací? Debí haber muerto el día que me intenté suicidar. Así Jackson no estaría en esa condición por mi culpa.-grité y se hizo más profundo mi pesar.

Eras inmadura y no sabías como afrontar la situación. No fue tu culpa. Cuando decidiste que querías vivir, resbalaste y caíste. Fue un accidente. Eso bien lo sabes. No te culpes más.-dijo Hara en un intento para calmarme.

¡No! Yo tengo la maldita culpa.-grité.

••Flashback••
Hace tres años...

Estoy jodidamente hastiada de esta vida. Mi madre...mi madre me abandonó con apenas días de nacida. Me acabo de enterar de esto hoy, pues escuché a mi padre hablando con el señor Siwon.

Mi padre me odia. Soy solo una carga para él.–grité mientras lloraba desgarradoramente.

Corrí todo lo que pude hasta el puente del río Han  muy decidida a terminar con mi existencia, así no molestaría a nadie más ...pero antes de lanzarme llamé a Go Hara para despedirme. Al menos ella merecía tener mi adiós. Esta no contestó, así que llamé a mi novio Jackson.
«Nunca le he dicho que le amo. Aunque sea la primera y última vez que lo haga, lo voy a hacer hoy.»

Él contestó al tercer tono.

¡Jackson!-dije y se me formó un nudo en la garganta.

¿Qué te sucede amor?-preguntó preocupado.

Yo...Yo- intenté que me salieran las palabras pero nunca fluyeron porque rompí en llanto.

¿Qué te pasa? Dime. ¿Dónde estás? ¡Dímelo!-gritó desesperado.

Río Han...-fue lo único que atiné a decir pero luego me arrepentí.

No vayas a cometer ninguna locura. ¡¿Me oíste?! No te muevas de ahí. Estoy cerca.-dijo desesperado y sentí que comenzó a correr por la agitación en su voz.

Colgué y me intenté calmar. Estaba pensando más claro así que no quería dejar de vivir. Todo por él, lo amo de verdad y no voy a desaprovechar otra vez la oportunidad de decirle que le amo con la vida. En el intento de bajar resbalé y caí al vacío.

Luego de caer sentí que alguien entró al agua. Cuando estaba en tierra abrí los ojos, vi un cuerpo flotando.

Nadé lo más rápido que pude hacia él y cuando vi su rostro le reconocí al instante.

¿¡Jackson!? ¡No! ¡No puedes morir así! Dejame decirte cuanto te amo aunque sea solo por una vez.–diije abrazándolo mientras que mis manos acunaban su cabeza ensangrentada. Posé un beso sobre la cumbre de su cavidad craneana mientras lloraba amargamente. Dejando de un lado mi debilidad nadé sosteniéndolo con dificultad hasta la orilla.

¡Jackson! ¡Jackson!.Respóndeme.-grité poniéndolo sobre el césped.
Al parecer alguien había visto lo sucedido porque la ambulancia llegó muy rápido.

Luego de esto, lo montaron en una camilla y lo metieron al van blanco con luces naranjas y rojas. Su cabeza sangraba pero aún respiraba.

¡Vas a estar bien!-dije y me subí al vehículo.

Su corazón se paró en varias ocasiones de camino al hospital pero siguió luchando por su vida.
«Él es todo lo contrario a mí, lucha por vivir mientras yo quiero quitarme la vida.»-pensé y sentada en el asiento comencé a llorar caudales. Me sentía tan avergonzada de mí misma, por ser débil.

Los doctores salieron del salón y me dieron la noticia que no quería oír.

Hicimos todo lo posible...pero...el paciente está en coma. Puede que nunca despierte. Caí en bruces sobre el suelo.

¿Está bien señorita?–preguntó la doctora, quien se agachó para ayudarme.

Su padre llegó en ese momento.
¿Qué dijo usted doctora? ¿Mi hijo está en coma? ¿Por qué? ¿Qué le sucedió–grito energúmeno.

Fue mi culpa. Él me salvó cuando caí al río. Lo siento.-dije y agaché la cabeza.

¡¿Lo siento?! ¿Con eso resuelves todo? Devuélveme a mi hijo.-gritó mientras me sarandeaba de un lado a otro y yo no hacía más que llorar y pedir perdón.

Señor debe calmarse. Venga con nosotros.-dijo la doctora y lo separó de mí.

¡Nunca jamás te vuelvas a acercar a mi hijo escoria! No das más nada que problemas. Te querías suicidar ¿No? Era mejor que hubieras muerto, así mi hijo no estaría en esa condición. ¿Qué rayos vio en ti como para que se lanzara al agua a rescatarte ¡Es lo único que tengo!–gritaba y lloraba mientras se alejaba.

Aquello me dolía como la mierda. Me quedé hecha un lío en el suelo mientras mis ganas de morir se hicieron más agudas
••Fin del Flashback••

En la actualidad...

¡Go Hara! Compra otra cerveza. Quiero beber hasta que mi hígado se pudra. De todas formas, si muero no va a hacer ninguna diferencia.–dije.

Hey! No digas eso. Tú eres importante para mí y para tu padre. Sin ti yo no sé que haría amiga.–dijo y me levanté para abrazarle pero me dio un mareo, perdí el equilibrio, y caí al suelo.

¡Hana!–gritó.

Estoy bien. Estoy bien.–dije desde el suelo y le mostré una sonrisa soñolienta.

¡No! No estás bien. Estás totalmente beoda.–dijo.

Hara sacó mi teléfono y llamó a alguien, pero antes de que supiera quién era ,todo se volvió borroso y me quedé dormida.

Kim Taehyung.

Lisa y yo estábamos practicando sexo en su casa y entró una llamada a mi teléfono. No la iba a atender pero al ver el nombre de Hana en la pantalla dejé de besar a Lisa y atendí el teléfono.

¿Quién es amor? ¿Por qué lo coges cuando la estamos pasando tan bien?-–ronroneó Lisa y mordió el lóbulo de mi oreja.

Calla Lisa. Es mi madre. Ella nunca me llama a menos que sea algo importante.–mentí mientras tapaba con una mano la bocina del móvil.

Dime.-dije reincorporándome sobre el colchón.

Hey! ¿Eres Taehyung el hermano de Hana?–preguntó una voz que no era la de Hana.

Sí ¿Por qué?–pregunté mientras Lisa me miraba fijamente.

¡Soy Hara! La amiga de Hana. Verás...Ella está borracha, se ha caído al suelo, no puedo levantarla y nadie se me ha acercado para ayudarme. He intentado levantarla pero no puedo.

¿Dónde estás? Voy para allá enseguida.–dije.

Me dio la dirección y colgué, acto seguido me comencé a vestir con rapidez.

Hey! ¿ A dónde vas? Aún no hemos terminado lo que estábamos haciendo.
Tengo un problema en la casa. Debo volver.–mentí.

Terminemos primero lo que empezamos.-suplicó y comenzó a tocarse para provocarme.

No puedo Lisa. Debo irme ya. Es urgente. –Me lamí el labio y tragué saliva para lograr contenerme.

Entonces llévame contigo.-dijo suplicando.

Te dije que es un problema familiar. Tú no tienes nada que ver con eso.–dije enfadado sin necesidad y terminé de vestirme.

Me voy.-le anuncié.

Ella intentó seguirme pero la detuve.
Descansa amor.-la tomé por los hombros. - Te prometo que para la otra habrá revancha. Hoy me tengo que ir. Es necesario.-dije y le besé los labios y la frente.

De acuerdo. Recuerda que lo prometiste.–gritó y cerré la puerta.

¿Ya te vas? Creí que pasarías la noche aquí.–dijo la madre de Lisa.

No. Debo irme. Algo sucedió en mi casa.-expliqué y me largué.
Espero que todo vaya bien.–la oí gritar antes de cerrar la puerta tras de mí.

***
Hey! ¡Aquí!–gritó una chica trigueña.

Miré hacia el asfalto y exactamente, ahí estaba Hana, acostada como si el suelo fuera una cama. Estaba echa un ovillo en el pavimento.

Está muy borracha.–dijo su amiga cuando me acerqué.

La levanté y la senté en la silla pero seguía rendida.

Ayúdame a ponerla en mi espalda.–le pedí a su amiga.

Woah! Eres muy guapo. Incluso más que en las fotos.-dijo.

«¿Hana hablaba con su amiga de mí? ¿Tenía fotos mías?»

Muchas chicas me lo dicen.-respondí.

No es de extrañar.-dijo.

Bueno ahora que la dejo en buenas manos me voy. Tengo planes con Namjoon, debe estarme esperando.-dijo.

Así que tú eres la novia de Namjoon hyung. Namjoon no es bobito, vaya que eres muy sexy.-dije.

¿Lo conoces?-preguntó extrañada.

Sí. Es uno de mis mejores amigos.-respondí.

Un gusto conocerte...Ahora debo irme. Adiós.-sonrió la trigueña y se fue dando bronquitis.
Al parecer Rapmon la tenía comiendo de su mano.

Adiós.-me despedí y monté a Hana en mi auto.

Mientras conducía escuché como hablaba dormida. Era su costumbre.

Jackson! ¿Estás bien? No... No ...Todo es mi culpa. Soy excremento de vaca. Un puto y jodido excremento de vaca.–dijo señalándose y abriendo un ojo.

Me dio gracia su acción.
Tú y tu boca sucia.–murmuré.

¿Quién es Jackson?-pregunté para mí mismo por lo bajo.

Hey! ¡Hana! Hasta el excremento de vaca es útil. Sirve para fertilizar la tierra.-dije y sonreí mirando hacia la carretera.
Luego la miré de forma efímera.

¿De veras?-hizo aegyo por primera vez en su vida y se acurrucó a mi brazo mirándome con ojitos de cordero.

Hey! Estoy conduciendo, no puedes acurrucarte de esa manera a mí.- le indiqué.

Pero...¿De qué me sirve explicarle eso si ella está completamente alcoholizada?

Mi corazón martilleaba fuertemente contra mis costillas al sentirla tan cerca. Era una rara sensación para mí.

La llevé a mi casa porque si el señor Yoon la ve en esa condición me mataría a mí, y luego a ella.

Entré a casa y ahí estaba Lisa sentada cruzada de brazos, y a su lado estaba mi madre.

«Mierda»

Omo! ¿Qué le sucedió a Hana?– preguntó mamá preocupada.

Aigoo! Pobre Hana.–dijo Lisa fingiendo preocupación. Bien sé yo que ella y Hana no se soportan. Además, se le veía en su mirada fulminante, que pronto me iba a matar.

Subí a mi habitación y acosté a Hana en mi cama, luego bajé.
Sabía que tenía una conversación pendiente con Lisa. Debía darle explicaciones.

Fuera de casa...

Taehyung! ¡Me mentiste! Así que era ese el problema tan urgente ¿No? ¡Hana! Esa hermanastra tuya me tiene harta. Seguro está fingiendo. La odio.–gritó liberando su frustración.

Mira Lisa. Deja de inventarte cosas en la cabeza. Mejor vuelve a tu casa. Hablaremos de esto mañana.-le dije.

Me mentiste Tae, me mentiste. No confías en mí. Podías habérmelo dicho antes.-masculló.

Y tu tampoco en mí, mucho menos me haces caso. Te dije que te quedaras en tu casa.-le dije alzando el tono de mi voz.

Hice bien en no confiar en ti, pues me doy cuenta cuando estás mintiendo. ¿Tú piensas que no te conozco?-preguntó ella.

¡Detente de una vez!- grité sosteniendo mi cabello entre los dedos de mis manos.

Hablamos de esto mañana.-dije tomando una bocanada de aire para calmarme.

¿Me has gritado?-preguntó y acto seguido comenzó a llorar.
Ella sabe que las lágrimas de una persona son mi debilidad.

¡Oh Vamos Lisa! No llores. Para la otra te prometo que te diré la verdad. Es que no quería que hubieran peleas entre tú y Hana. Entiéndeme por favor.-dije sedado.

De acuerdo. Volveré a casa. Mañana hablamos.-me dijo entre hipos.

¡Espera! Yo te llevo.-le dije.

Terminamos besándonos en el auto, acaricié la piel sensible debajo de su falda, pero Hana vino a mi mente y me detuve. No sé ni por qué. No podía besar a Lisa pensando en Hana.

Lisa. Entra ya a tu casa. Es tarde.- le ordené.

No. Yo quiero seguir con lo que dejamos a media por culpa de tu hermanita de pacotilla.-dijo sonando despectiva.

¡No hables así de ella!–la fulmine con la mirada.– Aunque no sea hermana de sangre la considero parte de mi familia y yo no permito que nadie hable mal de mi familia. ¿Entendiste? -le dije bien serio.

De acuerdo, ya lo sé. Lo siento.

Agachó la cabeza y salió del auto. La vigilé hasta que estuvo dentro de su casa. Luego me fui.

Llegué a casa, subí las escaleras, entré a mi cuarto y vi que Hana estaba acurrucada a mi almohada con los dedos de los pies engurruñados por el frío.
La arropé y acomodé uno de los mechones rebeldes de su cabello detrás de la oreja.

Quien te viera así, diría que eres la chica más angelical y tranquila en la Tierra.–dije en voz alta y me quedé mirando fijamente hacia sus labios.
Nunca me había fijado en lo perfectos que son. Minutos después me hallaba sobre esos labios carnosos que me habían hipnotizado por un momento. Al percatarme de lo que estaba haciendo me alejé por acto reflejo y entré al baño.

¡No! ¡No Taehyung! ¿Qué acabas de hacer? Ella es tu futura hermana en ley. No puedes hacer esas cosas. No la cagues Taehyung.–comencé a repetirme constantemente mientras me miraba fijamente en el espejo.

«Esta chica rara se está metiendo cada vez más dentro de mi piel.»