"Ella decidió ir a su clase, el aburrimiento la obligaba. Estando en la puerta miro a Byun Baekhyun, un chico de cabellera castaña, una buena altura, delgado, de sonrisa dulce, él es perfección. Él estaba llevando unos papeles, una montaña de ellos mejor dicho.
—¿Necesitas ayuda con eso, Baek-oppa?— preguntó la azabache.
—Oh, Taeyeon, pues si un poco.— río, mientras le entregaba unos cuantos papeles.
—Si necesitas ayuda, solo dime.— se sonrojo un poco, mientras Baek le daba un codazo como podía."

—Taeyeon, ¿que escribes?— sonó la voz de Tiffany en mi oído, sobresaltándome.

—Nada nada nada.— tape mi cuaderno lo mas rápido posible.

—Taenggoo~ ¿estas escribiendo Baekyeon?— murmuro Sehun en mi otro oído, maldito niño este.
—Sehun cállate carajo.— grité.
—¿Que esta pasando?— preguntó Fanny, por favor que Sehun no le diga.
—BaekYeon es...— le tape la boca corriendo Baek había volteado a ver.
—Baek volteo a ver la concha de tu madre, susurra.— lo regañe, si Baek me entera me tiro por la ventana.
—Bueno. BaekYeon es el nombre del ship entre Taeyeon y Baekhyun.— esta vez si le susurro a Fanny, pero igual escuche, y le di una patada en las bolas causando que muriera lentamente en el suelo, mientras Fanny solo me quedaba viendo fijamente.
—Tae... ¿Tan sola estas?— dijo secamente.
—¡Fanny no digas eso!— le dije mientras le daba un codazo en el estomago.

Baekhyun se reía por a saber que tontería el orejón había dicho, es tan perfecto. Aunque él volteo a mirarme y me sonrió, si estuviera en mi casa estaría gritando. Aunque como pude moví la mano para seudo-saludarlo. Es tan lindo. ¿Como no me voy a auto-shippear con él? Si es tan perfecto. Estoy babeando, raioz.