El debate

(Escuchar canción en multimedia)

Sarah y Dianne vuelven a sus asientos después de hacer un debate muy entretenido sobre la legalización de las drogas. Como era de esperar, el tema del debate es aleatorio y de igual manera el compañero. La maestra nos dio una serie de artículos sobre diez temas distintos, para que tuviéramos noción de los temas que podrían tocarnos. Sinceramente no me pongo muy nerviosa cuando estoy frente a todos mis compañeros, me encantan los debates. Pero bueno, esta vez estoy en otro cuerpo, quizás siendo Adrian me sienta diferente.

—Amanda Callum —llama la maestra mientras mira su lista de asistencia.

De manera inconsciente me pongo de pie pero de inmediato recuerdo que por ahora estoy en el cuerpo de Adrian, por lo que me vuelvo a sentar de manera rápida.

—Muy bien Cassavets, ya que te pusiste de pie ven aquí, debatirás con Amanda —sentencia la maestra mientras golpea su escritorio con la pluma que tiene en la mano.

De reojo veo como Adrian en mi cuerpo pone los ojos en blanco. Muy bien, quería debatir con cualquiera, menos con Adrian. Pero da igual, el momento ha llegado. De repente comienzo a sudar pues me siento demasiado nerviosa. Las manos me sudan y comienzan a picarme las axilas. Ay no, en un minuto estaré bañada en sudor. ¿Por qué a mí?

—¿Estás bien Cassavets? —cuestiona la señorita Parks mientras me ve sudar—, ¿te sientes enfermo? Puedes ir a la enfermería si quieres.

—No se preocupe señorita Parks, estoy bien —digo mientras balbuceo. Rayos, me estoy volviendo loca de nervios. Que alguien me ayude.

—Muy bien, entonces el tema del debate es el uso de animales en los circos. Amanda tú estás en contra y Adrian a favor. Comiencen con el debate, tienen un minuto para explicar su postura y a partir de ahí comenzamos. Adrian. —De reojo veo como Adrian en mi cuerpo se tensa por la situación.

Pero tengo que decir algo, aunque sea una estupidez tengo que hacer. Rayos, ¿por qué me ataca el pánico justo ahora? Así que comienzo a hablar.

—Está bien —digo mientras balbuceo y el sudor baja de mi frente o más bien de la frente de Adrian. Tranquila Amy, tú puedes—. Hola buenos días, mi nombre es Amand... Adrian Cassavets, y yo estoy a favor del uso de los animales en los circos porque son un buen método de...

—Se acabó el tiempo Cassavets, sigues tú Callum —grita la maestra desde el fondo del salón.

Miro a Adrian en mi cuerpo y noto lo molesto que está conmigo, vaya que le arruinaré la calificación si no digo algo.

—Buenos días compañeros de clase, yo soy Amanda Callum y estoy en contra del uso de los animales en los circos porque es maltrato animal, creo que no hay duda en que son alejados de su hábitat natural y son expuestos a constante estrés por los ruidos y la gente que los mira, además que...

—Se acabó el tiempo Callum, sigues Cassavets. Por favor intenta decir algo. —De repente todos en el salón se ríen de mí y Adrian en mi cuerpo se pone rojo de furia.

—Sí... eh... yo estoy a favor porque como... eh... como medio de... mmm... como medio de entretenimiento es bueno... es bueno para las... las, ¿personas?

—¡Sigues Callum! Adrian si no lo intentas reprobarás. —Vuelve a enfatizar la señorita Parks.

—¿Estás bien Aman... Adrian? —susurra Adrian con un poco de molestia en sus voz.

—¡Callum! —grita la maestra desesperada.

—No me digas nada —le susurro a Adrian mientras lo veo fijamente a los ojos, creo que esto me pone muy nerviosa. Entonces Adrian carraspea un poco y vuelve la mirada a la clase.

—Muchas gracias señorita Parks, pues a diferencia de mi compañero, yo no estoy de acuerdo. El que los animales sirvan como medio de entretenimiento no es algo ético, es preferible llevarlos en abrigos o en bolsas. La piel de los animales es más útil que el animal en sí —comenta Adrian en mi cuerpo mientras lanza una carcajada.

—¿De qué estás hablando Amanda? ¿Recuerdan el tema?

—Ups, lo siento señorita Parks, a veces soy muy torpe —dice Adrian en mi cuerpo mientras sigue riendo como bobo.

—Con ustedes no llegaremos a nada, vuelvan a sus asientos y están reprobados. Nos vemos al final de la clase —sentencia nuevamente la maestra, aunque esta vez se lleva la mano a la frente muy decepcionada.

Ay no, reprobado, no puede ser. Esa palabra comienza a retumbar en mi cabeza. Estamos reprobados. Vaya tontería.

Adrian en mi cuerpo y yo esperamos a que todos salgan del salón y nos acercamos a la señorita Parks. Yo camino arrastrando un poco los pies mientras Adrian en mi cuerpo me fulmina con la mirada. Rayos, ahora sí que metí la pata, pero, no es mi culpa.

—Muy bien chicos, ¿qué pasó aquí? ¿Por qué se comportaron como unos bobos? Ambos son mis mejores alumnos en debate. ¿Qué pasó? —cuestiona la maestra mientras se quita los lentes y los acomoda en su cabeza. Sin embargo comienzo a sentirme terrible pues ambos hemos reprobado. Me estuve preparando bastante con esto, no puede ser que lo arruiné todo. Aunque bueno, Adrian vaya que se comportó como un bobo. Tonto Adrian Cassavets.

—Señorita Parks, es obvio que Aman... digo Adrian lo hizo a propósito. Se empezó a comportar como un tonto —dice Adrian en mi cuerpo con verdadera molestia—. Yo estaba muy concentrado... digo, concentrada en el tema.

—Es cierto Adrian, tú nunca te pones nervioso. ¿Lo hiciste a propósito? —Ojalá hubiera sido a propósito, pero es evidente que no fue así. Algo dentro de mí se volvió loco, quizás haya sido el estrés.

—Lo siento señorita Parks, yo no quería dejarme en ridículo a mí ni a mi compañera. Es sólo que algo me ocurrió, usted sabe que por lo regular hago buenos debates. De verdad lo lamento mucho, no fue mi intención —digo tratando de evitar las lágrimas, los ojos comienzan a picarme pero no quiero llorar frente a ellos.

—¿No estudiaste? —cuestiona la maestra mientras sigue mirándonos un poco dudosa a ambos.

—Sí lo hice señorita Parks, lo llevo haciendo desde hace muchas semanas. Lamento mucho mi comportamiento. —Y sin previo aviso una lágrima sale de mis ojos. De inmediato noto como el rostro de Adrian en mi cuerpo y de la señorita Parks se ablanda.

—Lamento también mi comportamiento señorita Parks, fui muy inmadura, ¿no habrá alguna alternativa para no reprobar? —pregunta Adrian en mi cuerpo con un poco más de tranquilidad—. Le prometo que esta vez ambos nos comportaremos a la altura.

—De hecho sí la hay, dentro de un mes habrá un concurso de música en la escuela. Mi esposo lo está organizando en la escuela, así que ustedes participarán. Ayudamos a mi esposo y ayudamos a su calificación. Yo los inscribo, además sé que ustedes tocan instrumentos. ¿Están de acuerdo? —Un concurso de música. Vaya que ya estamos fritos.

—Muy bien señorita Parks, estoy de acuerdo —sentencia Adrian en mi cuerpo.

—Yo también señorita Parks. —Y dicho eso Adrian en mi cuerpo se pone de pie para salir del salón. Creo que lo he decepcionado. Ojalá pueda entenderme.

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Nota de la autora:

Ay pobre Amy. De verdad siempre me da mucha ternura y tristeza. Creo que esta vez ambos metieron mucho la pata.

Pero bueno, el concurso de música será su salvación. Por cierto, ¿ustedes tocan algún instrumento? Yo una vez intenté tocar la guitarra pero tengo dedos mega diminutos y nunca pude lograrlo. Aunque quisiera saber su experiencia con instrumentos.

Canción: Not on drugs– Tove lo

Amé esta canción mientras escribía este capítulo. Baby listen please, I'm not on drugs I'm just in love  :(

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