❈│❛LLEGADA❜

Hogwarts, Ubicación desconocida
15 de Septiembre de 1992

Pasaron aproximadamente 5 minutos después de que se leyó la lista para que las personas mencionadas comenzaran a llegar.

Contrario a los estereotipos, Slytherin no solo albergaba a los sangre pura; de hecho, una cantidad significativa se encontraba en Ravenclaw y Hufflepuff, así como también había muchos en Gryffindor. En términos porcentuales, alrededor del 50% de la escuela era de sangre pura, un 20% eran mestizos y un 30% eran hijos de muggles.

Debido a esto, tanto grandes familias de sangre pura como mestizas arribaron a la escuela, junto con padres de estudiantes que a su vez eran hijos de muggles, y unos cuantos squibs con hijos que tenían el gen mágico. Sin embargo, hasta ese momento, ningún Muggle había llegado, sin importar si su hijo asistía a Hogwarts.

Cuando un padre o madre llegaba, se dirigía de inmediato hacia su hijo. No se les había explicado por qué estaban siendo convocados, lo cual les preocupaba. A diferencia de las creencias de muchos, los más inquietos eran los sangre pura; nadie deseaba que su hijo y heredero estuviera en peligro.

Fueron los propios estudiantes quienes se encargaron de explicar a sus padres la razón de la citación. En especial, aquellos que seguían las tradiciones más antiguas quienes estaban encantados de que Lady Magic quisiera ofrecerles su ayuda.

Diez minutos transcurrieron, y casi todos los estudiantes de Hogwarts ya se encontraban en sus respectivas mesas, compartiendo charlas con sus padres, cuando las puertas se abrieron nuevamente. Entraron el actual Ministro de Magia, Harold Minchum, junto con su asistente Afton Brandwell, su Subsecretaria Principal Dolores Umbridge y el subsecretario menor Cornelius Fudge. También se presentaron la Curadora en Jefe del barrio infantil de San Mungo, Olympia Lancaster, y el Jefe del Departamento de Protección Infantil Mágica, Erick Brown. En realidad, nadie comprendía por qué los dos últimos estaban presentes en ese momento.

Tras ellos, aproximadamente quince o veinte Aurores los acompañaban. Entre los más reconocidos se encontraban Kingsley Shacklebolt, Alastor Moody, Amethyst Sawey y Esaiah Jagsun. También estaba la joven de 25 años que trabajaba con ellos, conocida como Amelia Bones, una prodigio entre ellos y que sostenía el título de Lady Bones, título que pronto pasaría a su hermano menor.

Apenas cruzaron por completo las puertas del comedor, una larga mesa apareció junto a la de los profesores, claramente obra de Lady Magic, quien también había ampliado el comedor y el resto de las mesas para asegurarse de que todos pudieran estar all

-¿Qué está pasando Dumbledore?, ¿Por qué nos hiciste venir aquí y porque estan estas personas tambien?- Exigió saber el ministro completamente serio-

El director con su habitual calma los hizo acercarse y les explicó la situación. Algunos, como Umbridge y Fudge, no estaban muy contentos con la idea; no creían ni por un segundo que la magia misma se tomara la molestia de ayudarles. Sin embargo, con una mirada de Minchum, ambos se quedaron callados mientras que otros estaban agradecidos y sorprendidos. Después de una breve charla, también tomaron asiento en su correspondiente mesa. Claro, no antes de que Amelia fuera a saludar a su hermano Edgar y a su cuñada Miranda, así como a su hermano mágico James y su cuñada Lilianne.

No pasó mucho tiempo después de eso cuando las puertas volvieron a abrirse, revelando a varias parejas de sangre pura que parecían rondar entre los treinta y treinta y cinco años. Todos usaban sus clásicas máscaras de Lord's y Lady's indiferentes, pero a pesar de ello se podía ver la preocupación en sus ojos. Los Malfoy, Parkinson, Snow, Greengrass, Zabini, Rosier, Avery, Zabini y Highsmith se dirigieron a sus hijos en la mesa de Slytherin, junto con Tadeus Nott, Bartemius Crouch Sr y el abuelo de Severus (Con quien no tenía mucha relación, o mejor dicho, nula) Elián Prince.

Los Mckinnon, Lupin y Pettigrew caminaron con preocupación pero seriedad junto a Lady Augusta Longbottom hacia la mesa de Gryffindor.

Los Rosewain no tardaron en ir a la mesa de Ravenclaw junto con los Fraser para revisar a Amberlynn y Pandora, quienes ya habían cambiado de mesa para evitar malentendidos.

Mientras que Maira y Kilian Fortescue se dirigieron a la mesa de Hufflepuff hacia Alice, junto con otros padres angustiados.

Los siguientes en llegar fueron los actuales Lord y Lady Weasley, Molly y Arthur, con sus hijos William (Bill) de 8 años, Charles (Charlie) de 6 y Percival (Percy) de 2 años, además de la noticia de que la mujer tenía 7 meses de embarazo esperando gemelos. Detrás estaba el medio hermano mayor de los Prewett, Lord Elliot Ashdown, y al lado de Arthur se encontraba su madre, Cedrella Weasley de soltera Black. La familia (Sumamente ruidosa) caminó hacia la mesa de Gryffindor, específicamente hacia los gemelos Prewett, los herederos Gideon y Fabian, quienes les explicaron el porqué habían sido llamados. Cedrella también saludó a su sobrino Barty Crouch Sr con un asentimiento.

Habían pasado 15 minutos, y nuevamente la puerta fue abierta, esta vez dando paso a una numerosa familia que inspiraba respeto y miedo. En la cabeza estaba el Lord de la familia junto a su esposa, Arcturus y Melania Black, quienes se movían con elegancia, serenidad y con un gran porte de perfectos nobles sangre pura.
Solo unos pasos detrás estaba su prima Cassiopeia (Quien le dirijo una pequeña sonrisa a su sobrino James, hijo de su hermana Dorea). Detrás de Arcturus y Melania estaba su hijo Orión Black, acompañado de su esposa y prima segunda Walburga Black. A sus lados caminaban los padres de Walburga, Cygnus II y Alphard; Pollux e Irma Black.

Tras ellos se encontraba el hermano de Walburga que aún pertenecía a la línea familiar, Cygnus Black III junto a su esposa Druella Black de soltera Rosier. Atrás de Cygnus se ubicaba su hija mayor Bellatrix y su esposo Lord Rodolphus Lestrange, junto a sus muy preocupados padres Amaia y Hadriel Lestrange. Cerca tambien se encontraba la hija del medio de Cygnus; Andromeda con su esposo Edward Tonks y su hija de 6 años Nymphadora. Todos se dirigieron sin dudarlo a la mesa de Slytherin, junto a Regulus y Narcissa. 

Varios pasos más alejados estaba de aquella familia se encontraban Alphard Black y su tío Marius Black que al igual que Sirius habían sido quemado del árbol familiar, Alphard por ayudar a Sirius y Marius por ser casi un squib, así que ellos decidieron dirigirse a la mesa de Gryffindor. Alphard con su sobrino Sirius (A pesar de ser primo de James, no eran tan cercanos) y Marius con su sobrino James (Cassiopeia tambien envió un asentamiento a su hermano Marius y a su sobrino Alphard, a diferencia de Pollux que ni siquiera observó a su hermano menor y mucho menos a su hijo).

Varios segundos después, luego de haber informado rápidamente a la familia Black, la puerta dio paso a otra familia reconocida, que a pesar de ser sangre pura y seguir las vías antiguas, se podía apreciar que la mujer portaba una pequeña sonrisa cálida.

Ellos eran Lord Charlus Potter, junto a su esposa Dorea Potter de soltera Black, quien es prima de Arcturus Black (el Lord de la familia) y Cedrella Weasley, hermana de Cassiopeia, Pollux y Marius, y tía de Walburga, Alphard y Cygnus. Ella dirigió a toda su familia Black una sonrisa un poco más grande y fue respondida con un asentimiento.

Los dos no dudaron en ir hacia la mesa de los Leones, y cuando estuvieron más cerca, Dorea se adelantó y se dirigió furiosa a sus hijos, porque así consideraba a los Merodeadores.

-¡¿QUÉ HICIERON AHORA, JAMES CHARLUS POTTER Y SIRIUS ORIÓN POTTER-BLACK?! - Exclamó casi gritó con enojo, llamando la atención de todo el comedor.

-¡Nada mamá! / ¡Nada Mamá Rea! - Le respondieron asustados e indignados.

Walburga no quiso admitirlo, pero no pudo evitar sentir cómo su corazón se encogía al escuchar cómo su hijo llamaba "Mamá" a otra, sin importar que fuera su tía, pero ella sabía que era su culpa.

-Debo admitir, Lady Potter, que esta vez ambos tienen razón, no han hecho nada - Comentó Minerva alzando la voz para ser escuchada. - ...Por el momento - Agregó al ver la sonrisa de ambos chicos por ser defendidos.

Dorea tomó un suspiro para calmarse antes de volver a hablar. - Bien niños, si no han hecho nada me gustaría una explicación de por qué estamos aquí - Habló más calmada tomando asiento junto a James al tiempo que saludaba a su hermano Marius y a su sobrino Alphard.

Era un poco extraño, pues Walburga era su sobrina, y Sirius al ser su hijo era técnicamente su sobrino nieto, así como James era extrañamente primo de Walburga y tío segundo de Sirius. Todo un enredo. Por eso preferían simplemente ser madre e hijo en el caso de Dorea y Sirius, y hermanos en el caso de James.

-Sí, realmente yo también deseo una explicación - Comentó Charlus, sentándose junto a su esposa cerca de Sirius.

Y así, en unos pocos minutos, la familia Potter ya estaba enterada de lo sucedido. Decir que estaban conmocionados y emocionados era poco; estaban casi eufóricos de saber que la Diosa a la que le daban homenaje se preocupaba por ellos.

-Oh Lily querida, lamento no haberte saludado no te había visto, es un placer volver a verte- Exclamó Dorea con felicidad al ver a la novia de su hijo-

Por supuesto James no había perdido la oportunidad de presentar su novia a sus padres en Yule, y ellos habían quedado más que encantados con la chica, especialmente por la verdadera naturaleza de Lily que solo pocas personas cercanas sabían. También habían conocido a la familia de Lily sin importar que sus padres y hermana mayor fueran muggles, todos se habían llevado de maravilla (A excepción de Petunia que había estado reacia a juntarse con más magos y se había quedado en casa), y por supuesto les agrado mucho la pequeña Rosbelle Evans, a quien James y los Merodeadores querían como una hermanita.

-Igual para ti Rosbelle pequeña- Agregó con una sonrisa causando un pequeño sonrojo en ambas hermanas, especialmente en Lily quien había sido llevada a sentarse junto a James-

-También es un placer volverlos a ver Lady Potter, Lord Potter- Hablaron al unísono, algo a los que muchos ya se habían acostumbrado-

-Oh no, ya les dijimos, nada de Lady o Señora, Dorea está bien, después de todo estoy segura de que seremos familia muy pronto, ¿no James? - Comentó Dorea como si nada, haciendo que la pareja Potter-Evans se atragantara con su propia saliva y se sonrojara, mientras sus amigos no perdían la oportunidad de burlarse.

-Y yo soy solo Charlus, ¿entendido chicas? - Agregó el Lord con diversión por tal escena, mientras ambas pelirrojas asentían con vergüenza.

Antes de que Sirius, Marlene o incluso Remus pudieran burlarse, las puertas se abrieron por última vez, mostrando a las únicas personas que faltaban en la habitación, para gran sorpresa y disgusto de muchos puristas. Seis muggles cruzaron las puertas con mucha confusión.

Jonnathan y Dahlia Evans se encontraban al frente, luciendo sumamente confundidos hasta que dos cabelleras pelirrojas se acercaron con gran emoción, sus hijas Lily y Rose.

Tras ellos se encontraban dos chicos, una hermosa joven de piel pálida, cabello negro, labios gruesos y ojos marrones, con un cuerpo del que muchas chicas tendrían envidia. A su lado, su novio la agarraba por la cintura, estaba tan serio que podría pasar por un sangre pura si no fuera Muggle. Tenía cabello castaño con pequeños rulos, ojos verdes y un cuerpo bien proporcionado. A pesar de eso, ambos no parecían mayores de 18, quizá 19 años.

Más apartados de los cuatro se encontraban dos chicos más, quienes a diferencia de la otra pareja de jóvenes se veían mayores, quizá 20 años. La chica era, a diferencia de sus hermanas, rubia, pero aun así tenía los ojos verdes (A pesar de ser verde olivo y no verde brillante) y un buen cuerpo. Era, si quitaba la expresión de asco de su rostro, muy hermosa. A su lado, su pareja tenía la misma expresión de odio y desagrado. Si bien no era muy agraciado el joven tampoco era feo. Tenía unos kilos de más que lo hacían ver relleno mas no gordo, ojos azules poco expresivos, cabello rubio cenizo casi castaño y no era muy alto.

A pesar de correr hacia su familia y amigos, Lily y Rose procuraron no perder mucho la compostura al caminar, manteniendo sus peinados firmes y los guantes bien puestos. No habían trabajado tanto por nada.

Al llegar donde sus padres ambas pelirrojas les dieron un gran abrazo mostrando cuanto los habían extrañado. 

Luego Lily se acercó a su dos amigos Muggles, Jean Mackay y Richard Granger, para tambien saludarlos intentando seguir el protocolo de las vías antiguas pero sin parecer extraña.

Al tiempo Rose se acercó a su hermana mayor con una sonrisa de ilusión, y cuando estuvo cerca se lanzo en un abrazo a los brazos de la rubia, dicha acción se le vio realmente adorable en la gryffindor de sexto año, al punto que hizo enternecer a varios en el comedor, al igual que cierto Slytherin que la veía con un extraño brillo en sus ojos. 

Pero toda ilusión que la menor Evans tuviera se deshizo cuando Petunia empujo lejos a su hermana, mostrando una mueca de desagrado que hizo recordar a los puristas porque odiaban a los muggles. Casi todos en el comedor lo habían visto, y los estudiantes enfurecieron, Rose y Lily Evans eran amigas de básicamente todo Hogwarts, y si no por lo menos eran apreciadas pues ellas jamás habían juzgado a nadie, ni siquiera a los Slytherin que no habían hecho nada contra ellas, de hecho eran unas niñas demasiado tiernas, inteligentes y adorables que a todo el mundo le agradaban, y no podían creer el comportamiento que su propia hermana tenía con la menor.

Lily, sin haber visto el altercado anterior, se acercó sonriendo a su hermana y cuñado (Si hubiera visto lo sucedido no habría dudado en hechizar a Petunia, ella era muy protectora con su pequeña Rosa, como la llamaba) y al estar cerca abrazo a la rubia muy cortamente, antes de que Petunia pudiera apartarla.

-Petunia, Vernon, es un placer verlos- Agregó con una sonrisa cortés y amable-

-Lilianne, Rosbelle- Correspondió Petunia con una pequeña mueca. Rose se sintió mal, ella extrañaba a su hermana antes de Hogwarts y odiaba la frialdad que ahora usaba, aunque Lily no se inmuto, eso era mucho mejor que cualquier cosa a lo largo de los años, pero al parecer sus padres no pensaban lo mismo porque Jonnathan no tardó en hablar-

-Petunia compórtate, deberías saludar mejor a tus hermanas, gracias a tus estudios han pasado meses en que no las has visto-Ante las palabras del Patriarca la mayor solo rodo los ojos y se acercó más a su prometido, ignorando a su padre quien sin más remedio al ver la poca atencion que tenia de su hija mayor suspiro y se volvió a sus hijas menores con una pequeña sonrisa-Chicas, podrían explicarnos que estamos haciendo aquí- Agrego, más como una exigencia que petición-

Algo razonable porque hace tan solo unos minutos estaba en su casa con su esposa, cuando unos hombres con túnicas negras llegan y básicamente los hacen desaparecer, para aparecer confundidos afuera del comedor encontrando tambien a su hija mayor con su prometido, junto a los amigos de Lily.

-Si, de hecho yo tambien quisiera saber que está sucediendo y cómo aparecí aquí sin explicación de un segundo a otro- Agregó Jean con incredulidad y un poco de sarcasmo, su novio Richard a su lado asintió, completamente de acuerdo con las palabras de su pareja-

Las hermanas no pudieron evitar hacer una pequeña mueca, en realidad ellas tampoco sabían que hacían ellos allí, se suponía que los Muggles no podían entrar a la escuela.

Lily sabia que tenia mucho que explicar, especialmente a sus amigos para que pudieran entender la magia, si estaban allí por obra de Lady Magic claramente estaban de alguna manera relacionados con el futuro del mundo mágico, por lo que suponía que el estatus del secreto no aplicaba a ellos en ese momento. 

Así que volteo mirando a su Jefe de Casa, si tenía que explicar, por lo menos esperaba no tener que lanzar todo enfrente de la escuela y sus familias, de por si ya estaban siendo el centro de atencion al ser los únicos Muggles allí.

Para su sorpresa, y un poco de disgusto, fue Dumbledore quien se levantó con una pequeña sonrisa, Lily jamás había confiado mucho su director, siempre mantenía secretos y honestamente le parecía perturbador el brillo en sus ojos, algo en él jamás le dio un buen sentimiento.

-Veo, mis queridas muchachas, que tenemos mucho que explicar, ¿Por qué no me acompañan a mi oficina para que puedan explicarle a su familia y amigos lo que está sucediendo?-Tras sus palabras Lily y Rose decidieron aceptar, después de todo eso era mejor que hacerlo frente a toda su escuela-


Hogwarts, Ubicación desconocida
15 de Septiembre de 1992

6:48 p.m.

Media hora después, Dumbledore volvió a entrar al comedor con la tranquilidad que lo caracterizaba. Detrás suyo, dos de las mejores brujas de su generación lo seguían con una sonrisa, junto a sus padres muggles, quienes se encontraban sorprendidos de que la magia los tomara en cuenta.

Tras las pelirrojas y sus padres se encontraban Jean y Richard, la pareja aún estaba un poco en shock por todo lo que se acababan de enterar. La magia era real, y había un mundo solo para ellos. Aun así, no entendían por qué estaban ellos involucrados. No fue muy difícil de creer; después de todo, ellos no creían en Dios, realmente no creían en muchas cosas. Ambos estaban estudiando para ser doctores y tenían más fe en la ciencia que en la religión. Además, ambas familias, al igual que ellos, eran agnósticas, así que simplemente intentaron tomar todo con calma para procesarlo correctamente. "Nos adaptamos a las situaciones" era el lema de ambos.

Mucho más apartados de todos, entraban Vernon Dursley y Petunia Evans. Ambos se veían claramente perturbados y no entendían cómo personas normales como ellos estaban relacionadas con esos "fenómenos".

Los seis muggles, siguiendo a las hermanas Evans, se dirigieron a la mesa de Gryffindor. Jonnathan y Dahlia saludaron cálidamente a James y a los Potter, luego hicieron lo mismo con los amigos de su hija que recientemente habían conocido y que se encontraban en ese momento con ella: Marlene, Sirius, Peter y Remus. Alice, Amber y Pandora estaban en sus respectivas mesas.

De igual manera, Lily presentó a Jean y Richard a su novio, a sus amigos mágicos y a su futura familia política. Ambos fueron recibidos con alegría y amabilidad, cosa que agradecieron. Algo que todos apreciaron, especialmente los Potter, era que ambos, a pesar de ser muggles, habían actuado con formalidad, como aquellos que seguían las vías antiguas.

Los dos adolescentes, al terminar la explicación de la magia, no dudaron en pedirle a Lily que les enseñara cómo actuar frente a los magos. Después de todo, no querían actuar en ridículo y debían saber cómo adaptarse a su nueva situación. Al conocer a los amigos de su amiga, así como a su novio y familia, usaron correctamente los términos de Lord, Lady, Herederos, Joven y Señorita. Todo el comedor se dio cuenta de este detalle, ya que ellos eran el centro de atención, y esto hizo que algunos puristas consideraran que quizá no todos los no mágicos eran iguales.

-Buenos mis queridos muchachos, creo que tendremos que esperar un poco para que Lady Magic realice su próxima movida, así que- Antes de que Dumbledore pudiera terminar su discurso todo el comedor escuchó un gran ruido fuera del comedor, como si algo o alguien hubiera caído desde gran altura, seguido de varios gritos y gemidos de dolor, lo que hizo que todos sin falta apuntarán con sus varitas a la puerta del lugar, alertas a ver lo que seguiría, lo que no esperaban muchos de ellos era lo que seguía a continuación.

Gritos empezaron a oírse, gritos que hicieron palidecer a mucho en el comedor.

-¡POTTER!- Un chico con voz adolorida fue lo primero en oírse, confundiendo a toda la familia mencionada pues ellos eran los únicos que pertenecían a aquel linaje-

-¡BLACK!- El siguiente grito hizo que a todos les dolieran los oídos, era realmente bastante chillón, claramente de una chica-

-¡¿Y ahora porque me culpan a mi!?- Un chico, diferente al primero debido a su voz masculina y grave se quejo, ahora eran los Black quienes estaban alerta-

-¡¡¡DOREA BLACK!!!- Otra chica bastante molesta grito. Todos en el comedor observaron tanto a la familia Black como a Lady Potter con sorpresa-

-¡HARRIET!-Muchos soltaron una pequeña risita al oír el grito afeminado del que claramente es un niño -

-¡¡¡LILIANNE CASSIOPEIA POTTER BLACK TE VOY A MATAR!!!- Ciertamente Lily se exalto, una chica con su mismo nombre y el apellido de su novio, pero luego, el otro apellido...Los Black estaban confundidos ¿Qué tenía que ver su apellido en todo eso?-

-¡PERSEPHONE!-

-¡MADELEINE!- 

-¡ANNE!-

Varios gritos mencionando nombres de chicas empezaron a oírse, todos con una clara amenaza. 

-¡MALDITA POTTER!- James estaba estupefacto, que el supiera no había más personas en su familia que los que estaban actualmente en el comedor, ¿Quiénes era esos chicos Potter que mencionaban?- 

-¡IDALIA!-

-¿¡QUE DIABLOS CASSIOPEIA!?- Cassiopeia Black se interesó más en la conversación, solo miembros de la familia Black portaban nombres de estrellas y constelaciones, además de que los descendientes de ellos solían usar nombres de ancestros fallecidos en su honor-

-¡HARGIET!- Ese grito era claramente de una francesa-

Todo el comedor escuchó con sorpresa que otros gritos, tanto de chicos como chicas, siguieron exclamando, especialmente por que todos eran dirigidos a las mismas chicas, y en varios idiomas. Algunos...ciertamente no eran muy lindos.

-¡POR SALAZAR BASTA, YA CALLENSE!- Esa voz...todos se sorprendieron con aquella voz. A pesar de gritar, la chica que hablo ciertamente tenía una voz realmente hermosa, era suave, aterciopelada y bastante femenina. Lo que más les sorprendió fue que tras el grito realmente todos se callaran y guardaran silencio-

Luego, la misma voz volvió a sonar, pero esta vez mucho más calmada e inocente.

-Ahora, necesitamos saber dónde estamos, cómo llegamos y que estamos haciendo aquí. Aunque, parece ser que de alguna manera estamos en Hogwarts, solo que se ve...más antiguo, bastante- La última parte ciertamente fue mencionada con asco, cosa que hizo que muchos dentro del comedor se ofendieron, Hogwarts era hermoso y de hecho había sido remodelado recientemente-

-¿Que estamos haciendo nosotros aquí?-Se escuchó una nueva voz, claramente masculina, sonaba sexi y un tanto áspera-

-¿Chicos que..?- Claramente la chica, aparentemente Potter/Black, no pudo continuar la oración, pues había sido cortada por otro de los misteriosos jovenes-

-Eh..Chicos...-La tercera voz en sonar al comienzo, que aparentemente era un chico Black, volvió a hablar, temblorosa y con miedo, cosa que los extraño y preocupo, en secreto, a quienes se suponía eran la familia del chico-

-¿Que sucede Reg?- la chica, que suponían era una de las que mencionaron al comienzo pero que silenció a todos volvió a oírse, estaba preocupada-

-Quizá...quizá quieran ver esto- 

Hubo un momento de silencio, luego fue roto por un grito de horror de una chica nueva en hablar.

-¡ESTAMOS EN EL 92!- 

Los del comedor se confundieron, claro que estaban en 1992, ¿Dónde más podrían estar?. 

Aunque Dumbledore empezó a realizar varias teorías y maquinaciones en su mente, tenía una ligera idea de que estaba pasando.

Tras esa declaracion se vivieron a escuchar múltiples murmullos por algunos segundos. 

Hasta que más gritos volvieron, solo que esta vez no eran con enojo, sino más bien con preocupación y terror.

-¡HARRY!-

-¡LILY!-

-¡Maddie!-

-¡REA!- 

-¡Phone!- 

Fueron más de 20 voces diferentes gritando con preocupación, hasta que la voz de otro chico, bastante sexi y masculina, habló silenciando a todos.

-Ella está bien, fueron demasiadas emociones juntas, despertara pronto- La voz era monótona y seria, pero aun así muchas chicas suspiraron porque era realmente bella, como la de la chica-

Algunos otros se preocuparon, entendieron lo que había pasado y la chica, aparentemente Black, Potter o como realmente se llamará, había quedado inconsciente, cosa que preocupó silenciosamente a dichas familias.

Dos minutos en silencio fue lo que pasó a continuación, luego, la misma voz del chico Black se oyó, solo que era mucho más suave, baja y tranquila.

-Hey, preciosa, ¿Estas bien?- 

-Yo...Sí- La chica se oía confundida y todos escucharon como carraspeó para encontrar nuevamente su voz - Sí, estoy bien, lo lamento-

-Oye, está bien, sabemos lo mucho que te afecta, al igual que a algunos de nosotros, solo...necesitamos pensar un poco, no te disculpes- Esa voz...era nueva, pero bastante similar a Marlene Mckinnon, a quienes todos voltearon ver, ella se veía tan confundida como el resto-

-Gracias- 

-Vaya Potter, así que no eres tan poderosa como todos dicen que eres y necesitas ayuda de tu séquito para hacer algo tan simple como pensar- A pesar de la burla, que molestó bastante a la familia Potter, muchos no evitaron burlarse en silencio, ese chico había sido quien grito bastante afeminado junto a otro-

-Solo cállate Weasley, por que dudo que quieras empezar a comparar cerebros, siendo que el tuyo es tan pequeño como una nuez- Los Weasley se sorprendieron, ¿Quién era ese chico?-

-Será mejor que aprendas a mantener tu boca cerrada idiota, no querrás ver cuanto más aguanta mi paciencia-Todos notaron claramente la amenaza silenciosa y algunos se asombraron que realmente el chico si se calló-

Varios minutos más de silencio hasta que la misma voz  que parecía ser la líder del grito volvió a hablar.

-Bien... Si queremos saber qué está pasando y si queremos respuestas tenemos que entrar allí- Los del comedor se tensaron y volvieron a apuntar sus varitas hacia la puerta, no se sentían listos para conocer a los jóvenes tras aquellas puertas-

Lo único que se escuchó de nuevo, por varios minutos, fueron jadeos y sonidos de asombros, hasta que apareció un sonido de sus tacones de aguja, eso hasta que nuevamente todo fuera roto por la voz de la misma chica, solo que para sorpresa de mucho, ella...hablaba un idioma diferente, extraño.

Solo pocas personas pudieron notar que era griego, aunque mucho más antiguo, por lo que no pudieron comprender muy bien que estaban diciendo.

-Εντάξει ΥΔΡΑ, ξέρεις τι πρέπει να κάνεις, ανέκφραστη, κουκούλες και σχηματισμός ισχύος τώρα. Κανείς δεν θα μιλήσει αν δεν το πεις εσύ, ούτε θα αποκαλύψει την ταυτότητά του ή λεπτομέρειες για το μέλλον. Κατανοητό;. (Entáxei YDRA, xéreis ti prépei na káneis, anékfrasti, koukoúles kai schimatismós ischýos tóra. Kaneís den tha milísei an den to peis esý, oúte tha apokalýpsei tin taftótitá tou í leptoméreies gia to méllon. Katanoitó?. )-

Para sorpresa de muchos, de nuevo varias voces sonaron, solo que en perfecta coordinación, para decir lo mismo:

-ναι βασίλισσά μου (nai vasílissá mou)-

Tras eso solo oyeron pasos, como si se estuvieran acomodando, hasta que la chica de siempre volvió a hablar, con burla, cinismo y falso lamento que divirtió a Bellatrix.

-Nosotros estamos listos, algo que ustedes claramente no, bien pueden venir si así lo desean pues no es como si realmente me interesara, es más, estaría complacida si el calamar gigante le hiciera un favor al mundo y los llevara hasta al fondo del lago negro para toda la eternidad, pero bien pueden ver que lamentablemente no todos los deseos se cumplen en la vida. Así que si deciden venir ahora, por favor, dejen su actitud de niños atrás y hagan el favor de mantenerse callados, mi cabeza va a explotar si vuelvo a oír sus voces chillonas de niños de primero- 

Y así, sin escuchar otra voz, la puerta fue abierta.








































•≫─────≪•◦❈◦•≫─────≪•

¡BIENVENIDOS!

Como pueden ver, he vuelto con el segundo capitulo de la historia, espero que les guste tanto como a mi, ahora, espero sus opiniones sobre esta...extraña entrada.

¡Voten, comenten y dejen su estrellita!

CANARIO FUERA 💖


•≫─────≪•◦❈◦•≫─────≪•

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top