Táctica|전술

Al día siguiente Lisa se levantó y fue directo a la cocina. Sabía perfectamente que Jeon no quería que lo haga. Pero ella creía que a esas alturas todo el mundo debía saber que cuando le decían algo, ella haría lo contrario por simple diversión.

Llevaba una camiseta larga de los Ramones,un short y estaba descalza. El cabello enmarañado en las mañanas como siempre y un aliento horrible. Sin mencionar sus ojos, que estaban achinados por el sueño.

Como pudo y siendo consciente de su estado lamentable, bajo las escaleras. Cruzó la sala principal como un zombie y al llegar a la puerta en donde Jin seguramente ya se encontraba cocinando... vió a Jisoo salir repentinamente de esta. Quien gracias a la manera bruta en la que abrió la puerta provocó que Lisa cayera de trasero al suelo.

¿Pero que carajos?

—¡Señorita Lisa!—Chilló sorprendida por verla mientras la ayudaba a levantarse. Luego de esto Jisoo arreglo su ropa y su cabello y le explicó que tenía órdenes de Jungkook. Los cuales tenían que ver con ella sentada en la gran mesa del magnate.

—Ni que fuera estúpida como para...

Pero no pudo terminar cuando Jisoo la sujeto fuertemente del brazo arrastrandola.

—Señorita debería dejar de buscar problemas, porque con el señor Jungkook usted los encontrará—le aconsejó. Sin embargo Lisa no pensaba hacerle ni un mínimo de caso

—Siento lo de anoche, por cierto.

—Usted no fue quien debió arreglar la inundación a las 3 de la mañana.-alzó una ceja hacia ella y luego agitó la cabeza como un perro—como sea, buena suerte.

Dicho eso abrió una puerta, la empujó hacia allí y volvió a cerrarla.

Lisa miro a sus espaldas pensando que Jisoo estaba loca.

Sin embargo se encogió de hombros y comenzó a inspeccionar el lugar en el que la había metido.

La luz iluminaba el lugar junto a los grandes ventanales que daban vista hacia los jardines de la estancia. Las paredes eran totalmente blancas y había una especie de candelabro en el techo, solo que más pequeño que el que estaba en la sala principal de la casa.

Había una gran mesa similar a la de negocios,solo que esta era para cumplir la dieta de los alimentos, como era de obviar.

Lisa vio que en esta habia dos sillas,mas específicamente una en cada extremo. Y como era de esperarse,le dio lo mismo y se subió arriba de la mesada. Sujeto una manzana del centro de mesa y la mordió.

Gimió sintiendo que estaba más duro que los panes que YoonGi le cocinaba.

La vio con más detenimiento.

¡Una maldita manzana falsa!

Justo en el mismo momento que ella miraba ceñuda a esa cosa rara,Jungkook entraba a la estancia con un teléfono celular en la mano.

El,a cambio de ella, esta vez llevaba un pijama azul y pantuflas del mismo color. Al ver a Lisa alzo una ceja.

—Luego te llamo, Taehyung.—dijo para luego cortar—bajate ya mismo de la mesa y deja esa manzana falsa por el amor de Dios. ¿Que acaso no eres capaz de darte cuenta por ti misma que es real y que no?

Lisa infló las mejillas enojada. Se habia avergonzado a si misma. Sin embargo luego de eso decidió ignorarlo y seguir discutiendo con el.

—Dime quien en toda Corea pone manzanas falsas en el maldito frutero. Es algo que no voy a entender.

—Mi madre lo hacía cuando era pequeño—se encogió de hombros. Lisa se quedó unos segundos pensando—por cierto ¿Que cosa rara traes puesta por camisa?

Lisa abrió la boca indignada.

—¿Cosa rara?—repitió—amigo, tu no sabes lo que es la vida.

—Y tu no sabes lo que es buena ropa—por primera vez Jungkook río con gracia mientras abría su computadora en medio de la mesa y se sentaba. Todo lo que decía lo hacía de manera tan natural que parecía una simple conversación de dos amigos.

Pero no.

No eran amigos.

Y se odiaban.

—Bajate ahora mismo de la mesa, Lalisa.

—Nop.

Jungkook despegó la vista de la computadora y apoyo sus brazos en la mesa mirando fijo a la rubia.

—Que te bajes.

Lisa tambien se inclino mientras sonreía.

—No.

Jungkook comenzó a tener un maldito tic nervioso en el ojo. Estaba tan acostumbrado a que hicieran lo que pedía sin rechistar que el simple hecho de que se negara a bajarse de ahí le resultaba de lo más estresante.

Sin embargo Jin llegó con un platillo y con una sonrisa de oreja a oreja destensando el ambiente, como siempre.

—¡Ya llegó por quien lloraban!

—Jin...hoy no.

Jin miro con extrañeza a Lisa.

"¿Y a este que le pico?" Pregunto modulando los labios

"No lo sé,le vino" Respondió Lalisa.

De repente cortaron la conexion de miradas cuando Jungkook totalmente indignado golpeo la mesa. Asustandolos por el repentino ruido.

—¡¡Estan conspirando contra mi frente a mis narices!!

—Okaay, yo me voy. Amargado.

Con esto dicho Lisa se bajo de la mesa y camino hasta la puerta a paso despreocupado.

A Jungkook le salieron chispas de los ojos por un segundo al verla irse.

Una vez que desapareció,Jin miró a Jungkook con pose de madre enojada.

—Nisiquiera ha tocado su plato.

—Guardaselo en el refrigerador,quizás se lo coma a la noche. —le dijo Jungkook tratando de recomponer su postura—recuerda, saludable y con las menos calorias posibles. Debemos prepararla para la reunión.

—Será la chica más desaliñada del mundo pero...es lista—remarcó Jin pensativo

—Por eso la elegí.

—Y bonita para ti.

—Jin, callate y vete.

Jin sonrió pero asintió con la cabeza.

—Como ordene señor.

[...]

Lisa arregló rapidamente su cabello y se cepillo lo dientes. Acto seguido sujeto su mochila y su patineta y salió de la casa rápidamente. Rezando para que no tuviera que volver.

Comenzó a patinar en skate por aquel camino de mármol hasta la entrada de la mansión en donde estaban las rejas automaticas. Se paro en seco recordando que ese lugar tenía más seguridad que la casa del presidente. ¿Como mierda saldría de ahí?

—¿Puedo ayudarla en algo?

Lisa volteo rapidamente viendo a un chico de cabello gris y gafas de sol.

Se encontraba recostado en el capo de su lujosa limosina. Tenía un café entre sus manos y miraba a Lisa de manera divertida.

Era el chofer.

¿Como se llamaba?

Jimon... Jimen..

¡No!

—¡Jimin!—exclamó feliz de haberlo recordado. El mencionado le dio una sonrisa a respuesta—¿Podrias decirme como se sale de aquí?

—Usted no está autorizada. Pero si quiere puedo darle un aventón...después de todo soy el chofer.

Lisa negó a respuesta y abrio la boca para hablar.

—Lo único que necesito es que me hagas salir. Iré por mi misma en patineta a la escuela. ¿Para algo la tengo verdad? Es y será mi medio de transporte, lo siento.

Jimin se quito las gafas y la miro pensativo.

—Usted es una chica complicada, señorita Lisa. No veo el problema de llevarla. Ademas así podre asegurarme de que llegó a su destino sana y salva.

¿Porque todo el mundo le decía "Señorita Lisa"? ¡Que frustrante!

—No exageres. Ni que "Paradise Jeon" Fuera un barrio mala muerte.

—Uno nunca sabe.

—¿Me abres así me voy?

—Con una condición; te dejaré a una cuadra de tu escuela.

Lisa bufó.

—¿No me dejas opción verdad?

El negó.

—Bien. Tu ganas.

[...]

—¡Es un maldito engreído! ¡Me trata como una niña y siempre pretende decirme que hacer! Ahora veo porque solo hablan de sus negocios ¡Porque es lo único interesante y para nada fastidioso que tiene para dar!

Lisa iba refunfuñando y quejándose a todo volumen por ese pasillo. Jennie y YoonGi la iban siguiendo mientras ella contaba a gritos todos sus defectos.

Ambos se echaron una rapida mirada viendo que Lisa jamás había estado tan histérica como en ese entonces.

—¿Algo más que quieras remarcar?—preguntó Jennie casi aburrida

—Mmm—Lisa entrecerro los ojos pensando—¡Ah! Tiene cara de conejo, pero por dentro es un ogro.

YoonGi la miro alzando una ceja.

Jennie bufó.

La sangre ya se le habia subido a la cabeza.

—¿Es en serio? ¿Y eso viene al caso?

—Ay no lo sé—Lisa rascó su cabeza en signo de nerviosismo-¿Ya me estoy volviendo loca verdad? ¿Es eso?

Jennie le indicó que inhalara y exhalara. Ella lo hizo.

—Nuevo plan; debes calmarte y tratarlo bien.

—¿Que? ¿Acaso Lisa te contagio lo idiota? —Jennie y Lisa miraron mal a YoonGi—lo siento, pero tienen que saber esto; si ese cara bonita con dinero te esta tratando tan despectivamente como lo hace ¿Con que motivos deberías tratarlo bien? Lo mataría con mis propias manos, lo juro.

Concluyó YoonGi algo enojado. Jennie rodó los ojos.

—No estoy diciendo ninguna locura. Porque si te trata de ese modo tan mal... Significa que tiene todo calculado. ¿No? En pocas palabras, no te adoptó solo porque se le ocurrió ser buen padre. Algo planea.—concluyó haciendo que YoonGi y Lisa pensaran más de la cuenta—y debes saber que es lo que trama.

—¿Y como hago eso?

—Tratándolo bien.

Lisa negó como un perro rabioso.

—¡Ni de chiste! ¡Antes muerta!

—¿Quieres salir de ahí? Entonces usa todo lo que tengas y descubre que planean.

Lisa se dió media vuelta.

¡No, no, no!

—Esta bien.—aceptó haciendo un gemido—esto es luchar contra mi naturaleza,pero bien.

"Tierra, te doy permiso para tragarme" Pensó antes de ir a su siguiente clase.