Ya transcurrieron un par de horas desde que les habían entregado aquel enorme departamento al joven y a su Pokémon.
Se habían puesto a limpiar y a ordenar la sala y la cocina para más tarde salir al mercado, al más cercano posible que tuviesen por el sector, a comprar de todo lo posible para abastecerse. Su amigo y compañero que era un Dragonite, feliz le ayudaba con la nueva mudanza. 

Desde hace ya unos seis años, en una de sus "alocadas" excursiones por los valles donde vivía, se encontró a un Dratini en un gran canal. Al inicio no se llevaban para nada bien dado que el Pokémon, se escondía constantemente evitando ver al joven, el cual extrañado debido a que escuchaba los chapoteos e intentaba curiosear un poco más y llegar al fondo del porque ese comportamiento del Pokémon.
Pasaron las semanas, continúo yendo él hacia las mismas localizaciones, poco a poco fue ganando su confianza, al parecer el pequeño Dratini tanto odiaba como temía a los humanos o a especies de gran tamaño para él.
Sin pensarlo dos veces apenas pudo acceder a una pequeña confianza,no dudo en hacerle entender que no le haría daño, a modo de intentos de caricias o interacciones amables para que el Pokémon pudiera socializar con mayor calma con el joven.
Aunque le llevo tiempo, en plazo de dias e incluso semanas, comprendio cada vez mas el sentimiento de "odio" que se le habia formado al dratini. Al notar como este nadaba en el rio, tenia varia marcas de rasguños y cortes pero estos estaban cicatrizados puede que no haya tenido mas que mala suerte y haya caido en combate contra no solo humanos, sino tambien contra otras especies de pokemons que se llegaran a aprovechar de su pequeño tamaño. Pero su reaccion al ver al joven era cada vez mas distinta, ya no se escondia, no le chapoteaba para que se largara, no le gruñia de manera intimidante, o cualquier otro truco para alejarlo, esta vez como que decidio darle una "oportunidad" de confianza y probar que pasaba si este se acercaba a el sin temor, aun desconfianzdo en totalidad de el, los pokemons no son tontos cuando ya has pasado por una mala experiencia o tienes miedo de vivir una, (no quieres arriesgarte de ningun modo cierto?)el solo queria ver el accionar del joven y al primer movimiento que considerase hostil reaccionaria.
Salió del lago de un simple salto dejandole ver al joven el resto de sus cicatrices, las cuales ocultaba con algo de verguenza pero se le hacia dificil. el joven le dejo un "pokelito" en el suelo y se alejo unos centimetros esperando a ver que pasaba. Noto claramente que el Dratini no comeria nada hasta estar seguro de que el joven estuviese bien alejado para sentirse seguro y degustar con un poco de timidez aquello que le habia dejado, no se habia
acostumbrado a comer algo mas que no fueran bayas que caían de los arboles cercanos o las algas que yacían e el fondo del lago.

Eso si aunque le llevo su tiempo probo y acto Seguido, devoro el pokelito como si el hubiese estado famélico, (o como cuando te traen tu comida favorita y te mueres de ganas por comer sin importar nada) fue con tanta rapidez que se le habia manchado un poco la cara con el relleno dulce pero no dudo en relamerse para no dejar rastro alguno mientras se revolcaba en el cesped del borde. Enserio le habia encantado. Con el tiempo continuaron las visitas y todo fue a mejor, como pudo la confianza se fue restableciendo y ahora los momentos donde antes luchaban por quien alejaba o se acercaba mas al otro, se volvieron breves instancias de miradas curiosas y uno que otro gesto que expresara amabilidad. El miedo se iba perdiendo (como cuando decides
enfrentar lo que te causa terror aunque al inicio lo creyeras imposible, o realmente no fuera... tan malo..cierto?)

–Drago?...Eh Drago, necesito tu ayuda Porfavor–decía mirando a su gran amigo el cual se quedo embobado mirando una foto, que
estaba en una de las cajas que aun no habian desocupado por la mudanza. Apenas pudo volver en si se volteo rapido y con un leve
meneo de su gran cola le presto total atencion.–puedes ir a dejar todas las cajas que ya hemos desempacado a la vuelta del pasillo, asi liberamos total espacio y podremos relajarnos un poco antes de salir de compras al super.

Sin decir ninguna excusa y solo asintiendo llevo la pila de cajas vacias que estanban acumuladas al lado de la puerta principal del departamento, espero a que el joven le abriera la puerta y salio encaminandose por el gran pasillo hacia el centro del piso (donde generalmente estan los ascensores) para llegar a la puerta de servicio donde uno puede descargar la basura.
Sin problema usando su fuerza aplano con sus patas superiores las cajas y asi las deposito una a una, intentando ser lo mas cuidadoso posible.
Una vez acabo, miro por la ventana y noto que ya se empezaban a formar grandes cantidades de nubosidad en el cielo, cosa que le daba una gran felicidad, tanto que sus alas se abrieron y dieron pequeños aleteos, mientras que su enorme cola daba golpeteos en el suelo que resonaron por la mayor parte del piso.
Se devolvio muy feliz al departamento.
Tomo al joven de su brazo con su pata, teniendo cuidado de no lastimarlo, lo llevo a la gran ventana de la sala.

Abrio las cortinas y le hizo notar las grandes nubes grises que poco a pcoco poblaban el cielo.
Apuntando con su garrita y mirando a su compañero.
–ah mira parece que hoy no tendremos mucho sol, si que eres un suertudo–le dijo entendiendo el mensaje de su pokemon, acaricio con ternura su cabeza y continuo.–te parece si usamos el "tiempo libre" que tendremos y subimos a la azotea a realizar una práctica rápida?.

Su pokemon asintio nuevamente muy ansioso y le abrazo un poco fuerte pero con ternura, moviendo un poco mas rapido su cola, apoyando su cabeza en el hombro del joven, el cual estaba evitando no caerse debido a la gran diferencia de peso que tenian. (Sin embargo a este no le importara)
Aunque eso cambio segundos despues porque el abrazo continuaba y ahora sintio como sus pies dejaban de tocar suelo y era levantado como si nada por su compañero.

–esta bien esta bien jaja, ya puedes bajarme grandulon.–le dijo entre risas.
Rápidamente Drago se calmo y lo solto con cuidado. El joven aprovecho y Se acomodo un poco sus gafas opticas para luego dirigirse a su cuarto.
–No tardo mucho. Ire a cambiarme de ropa y así iremos a la azotea.
Drago pego un pequeño salto de alegria y se sento a esperarlo en la alfombra de la sala mientras miro a su compañero cerrar la puerta del cuarto principal.

Pasaron los minutos pero Drago no dejaba de menear su gran cola esperando en la gran alfombra. Su compañero salio ya con unos jeans azules claros, con leves indicios de rasguños en la parte de las rodillas. Una playera blanca con el dibujo de un titan metalico en el centro. Su tipica Bufanda azul-gricacea, y por ultimo unas zapatillas grandes color rojas. Si el no tenia un buen sentido de la moda.
Entre gruñidos de alegria Drago se levanto y juntos salieron del departamento para subir a la azotea del edificio. Los ascensores como no estaban aun listos para Pokemons de gran peso o de estatura, estos debian de llevarse en sus "Pokeballs" para evitar accidentes.

Ya en la azotea libero a su pokemon, el cielo estaba muy cubierto por nubes que presagiaban lluvia. El joven llevaba una especie de pelota de Tenis en su otra mano, mostrandosela a su dragon, el cual entendio y rapidamente se posiciono agitando sus alas
agachándose un poco sin quitar la mirada de aquella Pelota.

–Muy bien Drago...Aqui..va!.
Dijo lanzando aquella pelota lo mas fuerte que pudo hacia arriba y Drago despego del suelo de un gran salto, aprovechandose de una corriente de aire fuerte que llego para agarrar el vuelo.

Desde que Drago evoluciono acotumbraron a aprovechar los dias nublados para que le ayudase a practicar su vuelo, debido a unos problemas que tuvieron años atras, que Producto de ello a Drago le daba miedo volar. Asi que como pudo le diseño modos y estrategias para hacerle entrar en confianza una vez mas para emprender sin miedo el vuelo.
Ya en el aire Drago atrapo la pelota en su hocico sin problemas, dando una vuelta completa. Su entrenador lo miraba atento teniendo la pokebola en su mano bien firme. Drago agitaba sus alas una vez se estabilizo como pudo aunque la sincronizacion de estas no era muy acertada, empezaba a descender poco a poco a gran velocidad, Alertando ya a su amigo.

–Vamos Drago, recuerda los entrenamientos anteriores!–le gritaba al verlo con miedo de que pasara lo peor, tenia lista la pokeball para
accionarla al mas minimo segundo.–Concéntrate, deja tus alas quietas un momento, y luego planea contando lentamente!.
Drago haciendo caso a sus indicaciones dejo de agitar sus alas descordinadas, aunque fuera cayendo mas rapido, empezo a contar mentalmente

del uno al cinco para asi con cada numero agitaba sus alas para que se movieran al mismo tiempo. Agarrandose bien a las corrientes de viento. Debido al miedo cerro sus ojos pero no dejo de agitar sus alas. Ahora agarraba las corrientes con sus alas. Se estabilizaba en el aire ya, y perdía velocidad para volver a ascender.
–Muy bien drago ! mantente asi por unos segundos y recobraras la altura–le dijo con mucha alegria pero aun con nervios.
Drago por su parte, poco a poco fue abriendo sus ojitos, mientras pataleaba graciosamente en el aire notando su pequeño, aunque para el,
era un gran logro.

Los minutos pasaron hasta que se cumplio la hora y media de entrenamiento que habian reservado como su "descanso". el reloj del joven sonó a modo de alarma.

–Drago! ya es hora de bajar a casa–le decia a su pokemon quien estaba intentando dar volteretas en el aire aunque se le hacia dificil.
Escucho las palabras e gritos de su entrenador y como pudo bajo con lentitud hasta la azotea.–buen chico. vamos, que yo preparare la cena.
tras decirle eso Drago le dio un abrazo moviendo bien rapido su cola.

–Jeje, si lo se lo hiciste genial hoy. hay que seguir practicando mañana ¿te parece? porque de momento hay que llenar esta panza de aqui.
Decia mientras se separaba de aquel abrazo escamoso pero suave y con su mano le acaricio levemente su panza, dandole pequeñas palmaditas.
Su Dragon asintio feliz por las caricias y decidieron regresar a su departamento.

Mientras El joven se preparaba su cafe mirando como su pokemon feliz comia su cena en la sala, se empezo a preguntar el como iniciaría su primer dia en la universidad. Era muy timido y aveces evitaba hasta hacer la mas minima pregunta a cualquiera, por miedo a
parecer un tonto (si aveces es un miedo bastante tipico en algunos. Me incluyo).
Los minutos pasaron con tranquilidad mientras ambos disfrutaban de su cena en el sofa de la sala.
Drago miraba confundido al joven por lo que hacia, el tenia el mando de la television en su mano y hacia la accion de cambiar los canales. Solo que la television estaba apagada.
Lo que mas le extrañaba era que el joven presionaba los botones y se podian escuchar muy claramente. No aguanto en protestar. 
"Grrraw!" le dijo para llamarle la atencion.

–Ah jeje, pense que caerias en la broma–le respondio dejando el control a un lado y pego un sorbo de su cafe.–cuando eras un Dratini
caías a la primera y pensabas que hacia una especie de magia.
Termino añadiendo tras acabarse su cafe.
Su pokemon le miro y segundos después esbozo una gran sonrisa tras recordar dicho suceso. Intentando parecer listo y devolverle la broma, el dragon ahora tomo el control de la tele. Pero lo que hizo fue prender la tele de manera literal.

–Jaja No drago, pero fue un buen intento.-le dijo para intentar quitarle el control de su pata pero este se negó.–vamos no seas un mal
perdedor, dame el control y otro dia te enseño el truco lo prometo.
Su dragon de manera traviesa alejo el control y le saco la lengua como todo un mal perdedor.

–Bueno como tu quieras dragon panzon.

Al pasar los minutos El dragon despues de dejar su plato en el fregadero, se fue a su habitacion, la que viene siendo la de huespedes, y se echo un rato a tomar una siesta. Por otro lado el joven se quedo lavando las cosas y ordenando la sala.

–Sera un olgazan, esta vez te saliste con la tuya al dejarme todo por limpiar...–mientras se quejaba alguien toco el timbre lo cual le extraño en un inicio.–veamos quien es.. de seguro sera un vecino a preguntar algo..y no a quejarse por algun motivo irracional.

Se seco las manos tras haber lavado los ultimos trastes y fue hacia la puerta, no sin antes mirar por el "ojo ciego" de la puerta para ver de quien se trataba. Había Una joven casi tan alta como el de cabello muy largo y liso, vestida de manera informal como viniera del gimnasio, buzo gris, playera blanca y zapatillas del mismo color, tambien claro llevaba audifonos.
El joven abrio la puerta despacio, dandose ánimos a si mismo para no ponerse timido o nervioso, como era de costumbre y espero a que Ella seterminara de quitar los audifonos.

–Eh..Buenas.

–Hey Dairo! Sabia que eras tu el nuevo !. Le respondió La joven rapidamente y muy energica.

–Eh..Ehhh?. Le miraba Totalmente conundido. 

–Espera... No me recuerdas?? no puede ser! soy yo Lucy!.  Le Seguia respondiendo a gritos.

–Lucy...Lucy...

–Ay La que te recomendo este edificio para mudarte por medio de las redes sociales, cabeza bruta.

–ah... Ah! no puede ser.–Dijo esto ultimo llevando su mano a la cara muy apenado por lo ocurrido.–Bueno nunca te vi en persona no esperes que al principio, pudiera reconocerte bien..

–Pero si por donde hablamos tenia una foto de perfil. Dijo encogida de hombros.

–Si pero en esa sales con una mascara de dia de brujas..

–ah... ups!.-Dijo Lucy con pequeñas risas.–Empecemos de nuevo entonces.

Los segundos pasaron y el joven como pudo la invito a pasar. Ella dejo su bolso en el sofa y se apoyo en la pared de la sala mientras el joven
preparaba un par de cafees en su maquina.

–Así que Dime. Aparte de empezar tu año universitario, ¿que mas te trae a esta parte del mundo?. Pregunto con gran curiosidad.

–Pues... como quiero ser un conocedor Pokemon, me gustaria aprender mas sobre donde vienen estas fantasticas criaturas.–Respondió mientras ajustaba la maquina para preparar un cafe con leche.-A la par de ello, tambien empezar una nueva vida y lo obvio no?.
Lucy sonrio como si le leyera la mente y econtro la respuesta.

–Tener un monton de aventuras. Tras eso Dairo asintio sin dudarlo.

–¿Y tu? ¿Tienes alguna otra meta que se diferencie de la mia?. Le pregunto ahora Dairo mientras se dirigia a ella con uno de los cafees listos.

–Ah pues, lo que me prepare el destino o las inesperadas situaciones de la vida. Lo que quiero decir es que de momento estoy conforme.

–mmm..Entiendo Lucy. Hubieras dicho mejor, iré a donde el viento me lleve.–dijo estas ultimas palabras intentando ser dramatico.

–No te pases de listo.–Le respondio dando un sorbo a su café sacando una pequeña sonrisa por el intento de chiste que armo Dairo.–Y pues la pregunta mas sencilla ¿cuantos pokemons llevas contigo?.

–Solo llevo dos conmigo. y uno de esos lo puedes escuchar roncar en la habitacion contigua.
Ambos se quedaron en silencio y se pudieron notar claramente los ronquidos largos del Dragonite de Dairo.

–Ah es verdad ahi esta jaja!.–Dijo muy divertida con todo lo que ocurria a su alrededor.–Y el otro pokemon?

–El descansa en su pokeball en mi bolso. Fue el mas nuevo en unirse Aun le cuesta un poco adaptarse.

–Espera.. ¿"Adaptarse"?. Lucy se quedo mirando a Dairo, este hizo una pequeña pausa y le respondio con una mirada seria.

–Lo rescate... en verdad el lo pasaba muy mal en donde lo encontre, como pude intentaba apoyarle aunque se notaba que el...despreciaba a los humanos, y entendia porque motivos, pero aunque me tomo tiempo, pude..convencerle de que viniera conmigo y ahora, lo cuido mucho.

–oh ya entiendo, la verdad eso estuvo bien. Espero que el se recupere.

–Gracias Lucy, y perdona que cambiara...radicalmente el tema, pero ahora mejor dime ¿cuales pokemons tienes tu?

–oh, mmm pues solo tengo tres. Un Magmar, una Glaceon a Una Snorlax.–le respondio y en eso ambos aprovecharon de nuevo para una pausa para beber sus cafés sin problemas.–Y pues Dairo. Se que estara de mas en preguntar, pero ¿Te gustan los combates pokemon?.

–tengo... sentimientos encontrados hacia los combates de ese estilo. Yo creo que cuando lleguemos a ver uno lo sabras.

–Mmmm no faltara mucho para que algo asi ocurra.-le dijo Lucy rapidamente mientras dejaba su taza vacia en el fregadero.–Pues en un par de días iniciara el semestre y pues... cuando vayas conociendo mas los rincones del campus, encontraras "puntos de arena" para combatir.

–¿Tu llevas cuanto tiempo aqui?. le pregunto de inmediato. Tras ya darse una idea de lo que Lucy le contaba.

–Voy en Segundo año. Asi que no me molestaria ser tu "mapa" el martes, ya que como es el primer dia, solo los funcionarios internos darán el tipico discurso de bienvenida y te entregaran tus horarios. Cosas asi.
Dairo escuchandola fue a dejar su taza ahora al fregadero.

–Pues en verdad agradeceria ese apoyo de tu parte... para ese dia.–le respondio mientras empezaba a lavar las tazas.–ahora te digo, que
tengas cuidado por la espalda...
Le advirtio y Lucy lo miro confundida. Sin darse cuenta el Dragonite de Dairo le abrazo por la espalda, aprovechando para liberar un gran bostezo. Lucy casi pega un grito del susto pero al notar las patas del dragon se habia calmado un poco.

–G-Genial... el dormilon esta despierto!.–dijo Lucy muy feliz despues de que se le pasara el susto, mirando a aquel gran dragoncito.–Eres una maquina de abrazos!.
Lucy estaba muy feliz y el dragon en señal de sus tiernos cumplidos movia su enorme cola y antenitas. Dairo le hizo una señal con su mano
para que bajara a Lucy con cuidado, cosa que segundos despues asi lo hizo.

–jaja! me encanta!.–comento Lucy sin dejar de soltar risas nerviosas mientras se acomodaba un poco su cabello y su reloj emitio un
sonido de alarma.–Bueno Dairo, y maquina de abrazos, ya viene siendo mi hora de despedirme. Aunque ya tienes mi contacto para que pasado mañana vayamos juntos,
para hacerte un recorrido facil por el campus.

–oh.. de verdad gracias lucy, es amable de tu parte.-comento tras acompañar a lucy a la puerta de salida.–y pues ¿vives en este piso?.

Lucy se volteo para verlo una vez paso el marco de la puerta y le dio una sonrisa apuntando con su mano izquierda al final del pasillo.
–en ese de ahi vivo yo. Asi que casi literalmente somos vecinos.

–Ah.. genial. Fue un gusto compartir un poco de tiempo.. vecina. le respondio haciendole a un lado la timidez de siempre.

–igual yo me lo pase bien. nos vemos el martes. se despidio de los dos con un amable gesto con su mano y se retiro hacia su departamento.

Ya era muy de noche y Dairo estaba apagando todo, asegurarse de que las puertas y ventanas esuvieran con seguro. Apenas entro a su habitación drago estaba acostado pero en la cama de Dairo, la cama era de doz plazas asi que un dragon asi podia caber si se acostaba de manera horizontal.

–Ah vamos Drago, tu ya tienes tu camita. ve a dormir a ella.–intentaba decirle a su pokemon quien tercamente no le hacia caso y para
molestarlo un poco mas, con sus patitas movio las sabanas para arroparse en la cama.-Por dios..¿enserio?.
Su pokemon le miraba como si fuera un cachorro pequeño llegando a su nueva casa despues de ser adoptado.
Dairo solo suspiro ya que no podia ganar esta vez asi que dejo su bolso cerca de su mesa de noche, cuidando de que la otra Pokeball esuviera ahí. Saco su pijama del closet y partio al baño a cambiarse.
Una vez salió, drago de había acomodado en el lado izquierdo de la cama.
–bueno tendrá que ser así por esta noche.
Dijo tras acostarse en el lado derecho, dejando sus lentes ópticos en la mesa de noche.
Apenas se acosto del todo en la cama drago se acurruco con cuidado y libero un gran bostezo.
–bueno amigote panzón, es hora de descansar y veamos si mañana practicamos un poco más si está nublado.–le dijo y el dragón se le acerca con ternura para abrazarlo. Dairo sonrió por el gesto y le correspondió feliz, mirando a su pokemon antes de también bostezar un poco. En eso recuerda algo que le hizo suspirar ya que eso le daría una idea de lo que harían mañana.–se nos olvidó ir al súper a comprar... lo primero que haremos en la mañana ok ?.
Le dijo cansado ya después de aquel largo día. Luego ambos se empezaran a quedar dormidos.

Continuará....