INKTOBER NARUTO #17

Palabra: TormentaPersonajes: Neji y Tenten, mención de Hinata.

.

.

.

Una luz partió el cielo en tinieblas iluminando todo a su paso como si el sol hubiera aparecido de pronto. Tenten cerró los ojos con fuerza preparada para lo que se venía a continuación. Un sonido ensordecedor llenó todo a su paso, haciendo retumbar ligeramente todo.

Intentó contener las ganas inevitables de llevar sus manos a sus orejas, por que no quería parecer una gata asustado. No ahora, no ahí, no con él. Considerando que en casa se metería en las sabanas con los ojos llorosos y unos audífonos en las orejas, esperando a que pasara todo. Pero ahora estaba en la escuela. Todo por desaprobar una materia.

Matemáticas.

Había decidido buscar un tutor y Hinata le había dicho, con una tierna e insinuante sonrisa la opción perfecta. Por que ambas sabían quien era el indicado para enseñarle. Neji Hyūga. El primo de Hinata que era dos años mayor.

Hinata sabía cuanto le afectaba su presencia a Tenten, pero antes de oponerse la tierna e inocente Hinata se lo había pedido. No tenía nada de inocente en ese pequeño cuerpo. Solía transmitir esa imagen, equivocada. Aquella vez Neji simplemente asintió, cosa que le pareció de lo más extraño. Por que Neji Hyūga ni a sus propios amigos ayudaba. Le parecía tedioso.

Había estado un par de días en la biblioteca, mientras él le enseñaba los procesos fáciles o más detallados de como hallar la respuesta. Dando algunos consejos o señalando los ejercicios que terminarían saliendo. Tenten no comprendía como podía estar seguro de eso.

―Kakashi-sensei siempre pone los mismos ejercicios. ― Dijo sin más.

El problema de todo esto era que Tenten estaba nerviosa. Muy nerviosa. La voz del Hyūga la ponía inquieta y más aún con esa mirada penetrante observándola con detenimiento en la espera de saber si había comprendido. Era un mar de nervios. Por que Neji Hyūga la atraía violentamente, su personalidad, su voz, su mirada. Todo de él.

Y Hinata lo sabía, y se reía ante la idea de que Neji fuese su tutor. Esperando algún acercamiento. Algo que no iba a pasar.

Otro gran trueno sacudió los cristales de la escuela haciéndola temblar ligeramente, cuestión que disfrazó con una incomoda sonrisa. Él simplemente la observaba.

Se habían quedado hasta tarde estudiando por que la prueba de recuperación era mañana. Pero el tiempo se fue volando y cuando decidieron salir una tormenta había detenido su partida. Pensaron que pasaría, pero la intensidad subió con el tiempo, viéndose encerrados ahí. No tenían algún paraguas y la intensidad de la lluvia era tal que dificultaba la visibilidad para pedir algún transporte. Debían esperar. Sin embargo, era demasiado para Tenten. Comportarse frente al Hyūga con una tormenta como tal, las cuales le daban pavor, era algo imposible.

Una luz iluminó todo de nuevo dejando entrever el rostro sereno del Hyūga y de la nada la oscuridad reinó cuando la luz se apagó. Sus labios temblaban al sentir la tormenta arrasando con todo su interior. Cerró los ojos preparándose para el sonido que la estaba rompiendo poco a poco.

En ese momento unos brazos enrollaron su cuerpo, aferrándola a su cuerpo para amortiguar el sonido que vino a continuación. Tenten sintió la calidez envolverla y su propio corazón se detuvo cuando el sonido pasó y se percató de su situación. Neji estaba abrazándola, con un sentido de protección.

Ella tragó saliva intentando pensar en que debía hacer a continuación. Intentó alejarse, aunque el abrazo de hierro del Hyūga detuvo su avance. Sintió el aroma masculino filtrarse por su nariz y sus manos sudaron por la abrumante ola de sentimientos que la embriagaban en ese momento.

Él estaba tan cerca, sintiendo la calidez de su cuerpo colarse por su ropa. Sintiendo sus manos atrayéndola hacia él. Se había dado cuenta de su terror a los truenos y buscaba reconfortarla. Hacer ese momento un poco más pasable. El temblor en sus manos y labios se calmó ligeramente al escuchar el sonido de las gotas caer disminuyendo.

Ella rogó por que él no la soltaría, no la dejará ir. Se aferró a su ropa intentando trasmitir aquel deseo. Un poco más, quería estar de esta forma un poco más.

Neji haciendo eco a sus pensamientos, la apretó más a su cuerpo, no iba a dejarla ir.