POV de Ciel:

-Mi señor, le ha llegado una carta.- Dijo Sebastian mientras me entregaba una carta con un sello. Estaba tomando el desayuno con los invitados en el comedor.

-Una carta? De quien?

-De la reina, mi joven señor.

Cogí la carta y la leí:

Mi querido pequeño:

A las afueras de Preston, hay una iglesia Católica que hace mucho tiempo fue quemada y reconstruida, pero no ha estado en uso desde entonces. Pero un grupo de creyentes un tanto extraños han estado llegando a esa iglesia. Me ha llegado la información de que el líder de esta organización secreta tiene en su poder los "Doomsday Books" de todos sus seguidores. Ha habido rumores de que estos están planeando una revuelta contra el gobierno, y temo por la gente de Preston. Sería para mi un gran alivio si pudieras "encargarte" de ellos.

Un cordial saludo,

Victoria, Reina de Inglaterra.

-Prepara el carruaje. Ah... espera. Snake se lo llevó cuando fue a escoltar a Elizabeth...- Dije en voz alta al recordar que había mandado a mi lacayo a llevar a mi prometida, Elizabeth, de vuelta a su mansión.

-En seguida, mi señor. Snake volvió esta mañana muy temprano. El carruaje está disponible.

Eso me sorprendió. -Snake ya ha vuelto? Y volvió Elizabeth sana y salva?

-Por supuesto. Sabe que puede confiar en Snake.- Yo no le respondí nada.

-Snake? Creo que le conocí esta mañana...- Dijo Sakura.

-Jaja, más bien chocó con él. :3- Rió Mokona. Cómo era posible que los invitados se enteraran de cosas que yo no sabía en mi propia mansión?! Bueno, daba igual, tenía trabajo que hacer para la reina.

-Bueno, vosotros queréis venir o preferís quedaros aquí?- Pregunté levantándome.

-Creo que es mas útil acompañarte, ya que es más probable que así encontremos la pluma más rapidamente.- Dijo Fye.

-Bien, si fuerais tan amables de acompañarnos...- Dijo Sebastian sonriendo.

Llegamos a nuestro destino, la tienda del Enterrador. Prefería estar en cualquier lugar menos allí, pero no tenía otra opción. Si alguien sabía que ocurría en las sombras, era el Enterrador.

Sebastian abrió la puerta para que pasara con Fye, Kurogane, Sakura, Shaoran y Mokona.

-Ji ji ji! Bienvenido, pequeño conde.- Dijo el enterrador que estaba de espaldas a mí.

-Enterrador! He venido pedirte un favor.

-En ese caso...- Dijo el "Enterrador" dándose la vuelta, pero para mi sorpresa, vi que llevaba gafas... -Entrégame el amor de mi querido Sebas!!- Gritó corriendo y se estrelló contra la pared al apartarse Sebastian.

-Grell?!- Exclamé sorprendido.

-Otra vez este tipo?!- Preguntó Kurogane enfadado.

-Pero si tú eres Grell... donde está el dueño de esta tienda?- Preguntó Shaoran.

-Vaya, vaya. Hola, mi señor.- Dijo una voz conocida. Me acerqué a donde había venido la voz, que era un jarrón enorme. Y dentro, estaba el enterrador que estaba enterrado hasta en cuello en lo que parecía sal.

-Pero qué hace allí dentro?- Preguntó Fye con una sonrisa divertida.

-Dijo que no tenía miedo de un Shinigami por lo que lo enterré en Sal.- Dijo Grell acercándose. Pude ver las miradas extrañas de Shaoran y los demás a la palabra Shinigami.

-Qué es un Shinigami?- Preguntó Sakura.

-Es una larga historia y no tenemos tiempo para eso. Enterrador, necesito que nos cueles en la iglesia de Preston.- Dije rápidamente. Aunque en vez de hablar el Enterrador, habló Grell:

-Inglesia de Preston dices? Yo me dirigía justo allí. Will me ha mandado a investigar la desaparición de unas Linternas Cinemáticas. Al parecer varios han sido robados.- Dijo Grell. Se puede robar una Linterna Cinemática?

Esto no solo captó mi atención y la de Sebastian, sino que hasta el Enterrador pareció ponerse serio. -Normalmente te pediría un pago por la ayuda... pero creo que hoy lo haré gratis.- Dijo el extraño hombre enterrado en sal.

-Me pregunto qué es una linterna Cinemática?- Preguntó Fye.

-Son las "películas" que contienen los recuerdos del pasado de todos los seres que están destinados a morir. Los Shinigami los extraen de las personas y los almacenan en forma de libros en la "Gran Biblioteca de los Shinigami."- Dijo Sebastian.

-Osea, un Shinigami es... como una Parca?- Preguntó Shaoran.

-Así es. Soy el Shinigami Rojo Grell Sutcliff. Death~!- Dijo Grell haciendo el mismo gesto con sus dedos que en mi mansión.

El Enterrador nos escondió dentro de unos ataúdes que llevó a Preston. El plan era que nosotros entráramos sin que nos vieran mientras él distraía a los guardias. Lo que no nos esperábamos es que los guardias nos vieran y aun así nos dejaran pasar!

-Yo pensaba que iba a ser difícil!- Exclamó Kurogane.

-Yo tambien...- Dijo Sebastian.

Entramos dentro de la Iglesia, que estaba decorada con vidrieras de colores... pero había una que destacaba para mí... representaba la misma marca que me quemaron en la piel aquel día hace 3 años...

Una mujer vestida con el uniforme del lugar nos saludó en la puerta de la iglesia. -Veo por vuestra ropa que vosotros sois nuevos. Habéis venido para uniros al Coro Celestial? No os preocupéis. En cuanto estudiéis nuestras costumbres, vuestro cuerpo será purificado.- Dijo la joven mujer dirigiéndose especialmente a mí y a Shaoran.

-Disculpa?- Preguntó Shaoran.

-Esperad fuera, por favor. Yo voy a hablar con esta mujer. Grell, por favor acompaña a mi joven señor y a sus invitados.- Dijo Sebastian. Grell vaciló, pero finalmente asintió.

Esperamos un tiempo hasta que Sebastian volviera. Grell estaba furioso con la mujer por poder estar con Sebastian. Creo que estaban haciendo algo más que simplemente hablar. Finalmente, Sebastian volvió.

-Al parecer, solo chicos jóvenes son elegidos a este "Coro Celestial", en el que se les muestra su pasado, presente y futuro con el Doomsday Book. Eso quiere decir que si queremos ponerle fin a este caso, de nosotros solo 2 pueden entrar en ese coro.- Dijo Sebastian pensativo.

-Tiene razón. Tú, Kurogane, Grell y yo pasamos la edad. Sakura es una chica. Solo Ciel y Shaoran pueden entrar.- Dijo Fye.

-Y Mokona que?- Preguntó Mokona.

-Tú eres un bollo parlante! Tu eres el que menos de nosotros entraría!- Gritó Kurogane.

-Que ellos son los únicos? Tonterías! Mirad este traje! Yo podría pasar fácilmente al Coro Celestial~! Buenos chicos y chica, qué aspecto tengo?- Exclamó Grell, que llevaba un uniforme del coro, que le quedaba muy pequeño. Daba vergüenza solo con verle. Nuestras caras lo decían todo.

Y para el colmo, vimos a un niño del coro en ropa interior correr llorando: -Buaah! Me va a hacer impuro!!

En serio. ODIO a este tipo.

Pronto la ceremonia empezó en la iglesia. Nos sentamos en las últimas filas para pasar desapercibidos. En la sala entraron una joven mujer y un hombre que se arrodillaron delante del líder, quien recitó en voz alta los pecados que esos dos habían cometido. Vimos como el líder sacaba dos libros, los Doomsday Books, y comenzaba a recitar del libro mientras en las vidrieras comenzaron a salir imágenes de la vida pasada de esas personas! Esos Doomsday Books eran Linternas Cinemáticas? Esas dos personas gritaban de dolor durante todo el acto... Y las cosas que el líder recitó... yo los había oído antes!

-Ahora nuestro hermano y nuestra hermana son tan puros como la nieve recién caída.- Declaró el líder, y se marchó. Pronto solo quedamos nosotros en la iglesia.

-Habéis visto eso? Pero qué demonios era?- Preguntó Shaoran.

-Parecía que dolía...- Dijo Sakura.

-No lo sé. Lo que está seguro es que no eran Linternas Cinemáticas. Algún poder tenían, eso seguro.- Dijo Grell.

-Aún me cuesta creer que este tarado sea una parca...- Susurró Kurogane a Fye.

-Oye que te he oído! Más te vale tener cuidado o...- Amenazó Grell.

-O qué?- Preguntó Kurogane enojado.

-O te pondré en la Lista!- Exclamó Grell.

-Oh, aún estáis aquí, que alegría! Los ángeles os han sonreído, jóvenes. El líder os ha aceptado en el Coro Celestial!- Exclamó la mujer de antes muy emocionada, y nos entregó a mí y a Shaoran unos uniformes que constaban de unos pantalones cortos negros con una camisa negra de manga larga, una capa blanca alrededor de todo el pecho y la espalda que llegaba hasta la mitad de los brazos con una cinta roja alrededor de el. También había una borra blanca.

Aceptamos los uniformes y Shaoran me miró nervioso. -Creo que no tenemos otra opción, verdad?

-No. Esta es la única forma de acabar con esto.- Dije en cuanto la mujer se había marchado.

Finalmente, yo y Shaoran nos acercamos solos al líder con los uniformes puestos mientras Sebastian y los demás esperaban fuera. El líder estaba allí junto con otro miembro de la iglesia que llevaba una capa.

-Ciel Phantomhive. Shaoran Li. Sí que tenéis un aspecto divino. Eso está bien. Ciel, acércate.- Dijo el hombre.

Yo miré a Shaoran que asintió, y me acerqué al hombre. -Bien. Ahora te leeré algo.- Dijo con una mano sobre el Doomsday Book y otra sobre mi cabeza. Su tacto me resultaba familiar. Era igual que... el de mi padre!

Entonces oí una voz y vi una extraña luz. Era una voz de una mujer. La voz venía de la vidriera con la extraña marca... pero que?

-Ciel cuidado!!- Gritó la voz de Shaoran, y sentí algo agarrarse a mi garganta. El líder me estaba estrangulando.

-CIEL!!!- Gritó de nuevo. Con mi visión borrosa, vi que Shaoran estaba siendo sujetado por el otro miembro. Si no hacía algo... -Sebastian! Esto es una Orden!! Mata a este hombre!!- Grité con todas mi fuezas.

-Yes, my Lord.- Dijo su voz, y él junto con Grell entraron de un salto atravesando la vidriera mientras Kurogane, Fye, Sakura y Mokona entraban por la puerta. Sebastian sacó un cuchillo y lo lanzó contra el hombre, que cayó muerto.

-Shaoran Li!! Exclamó Sakura. Este estaba luchando contra el hombre que antes le sujetaba, y por increíble que pareciera, este hombre era más rápido. Shaoran también era rápido, pero el encapuchado le superaba.

-Sebastian!- Exclamé, y este lanzó un cuchillo contra el encapuchado, que desapareció en un explosión de plumas blancas.

-Qué está pasando?!- Gritó Shaoran.

-Son plumas?- Preguntó Fye.

-Si, pero no de Sakura! Mokona cree que eso es...- Dijo Mokona, pero Sebastian terminó la frase.

-Debí suponerlo. Eras tú, Angela, la Ángel del Masacre.- Resultaba que el encapuchado era una mujer de cabellos cortos blancos, ojos violetas, vestido blanco y enormes alas de plumas blancas! Era un ángel?!

-Pero qué está haciendo un ángel aquí?!- Gritó Grell asustado.

-Ciel detrás de ti!- Gritó Sakura justo cuando sentí algo agarrase a mí y como me elevaban en el aire. Angela me tenía atrapado mientras sacaba un libro.

-Mirad! Eso es una Linterna Cinemática de verdad!!- Gritó Grell mientras que Sebastian parecía hasta asustado. Lo último que vi y oí antes de desaparecer con el ángel era una gran luz blanca y mi propio grito.

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Lo único que podía sentir a mi alrededor era el fuego, las llamas y el humo mientras corría a través de esos pasillos tan familiares ahora destruidos por el calor de las llamas.

-Madre! Padre!- Grité mientras corría. Yo ya conocía esta escena demasiado bien por mis pesadillas. La había visto tantas veces... llegué a una puerta delante de mi, y mi mano giró del pomo aunque yo no quise hacerlo... sabía lo que me encontraría allí.

Y allí estaba... mi padre atado a la silla, muerto, entre las llamas... como cada vez en mis pesadillas. Pero esta vez, había alguien más. Angela estaba allí, y me sonrió tiernamente mientras giró la cara de mi padre para que le viera la cara.

La mitad de su cara era la cara de mi madre! Y estaban cosidos juntos!! Sentí ganas de vomitar. Eso era algo que había olvidado con el tiempo, y por primera vez en 3 años, sentí lágrimas quemar en mis ojos y caí sobre mis rodillas, escondiendo mi cara en mis manos, llorando entre las llamas de mi pesadilla. No. De mi pasado.

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Hola! Aquí os dejo un cap extra largo :3 He tenido que resumirlo mucho y dejar una mitad para Angie porque es que era imposible hacerlo todo en un solo capítulo. Y también quiero decir que este cap está basado en el episodio 17 de la primera temporada de Kuroshitsuji, pero he intentado hacerlo con algunos cambios. Espero que os gustara :D

~Ninatigerlily