La Invasión Parte II

¡Hola! Espero que les guste este capítulo

¡Disfruten!

Por cierto, voy a avisar en qué momento tienen que reproducir el video.

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"Es una regla shinobi, nunca muestres tus sentimientos mantén tu mente enfocada en tu misión contra todo sin importar cuánto dolor lleves dentro no soltarás una sola lágrima"

Pakun miró completamente sorprendido las invocaciones de esos tres niños.

Una temible serpiente, un sapo poderoso y un tigre espléndido.

No tenía dudas de que ellos serían grandes shinobi con el paso del tiempo, posiblemente reconocidos al igual que los Legendarios Sannin.

Misato vio un tanto sorprendida al tigre que había logrado invocar ya que nunca lo había conocido.

− Disculpe, señor tigre - comenzó la niña nerviosamente - ¿cómo se llama?

− Mi nombre es Hattori - respondió el tigre con voz profunda - soy el Rey de Sumatrae - la joven asintió - tú eres Misato Senju

− Hai

En ese momento, Gaara al ver las grandes invocaciones se deja poseer completamente por su bijuu Shukaku quién toma el control al instante.

− Eres tú de nuevo - resopló Gamabunta al ver a Naruto - ¿qué pasa? - el gran sapo vio al bijuu - miren eso, es Shukaku

− ¿Qué opina? ¿Pelearía a mi lado, Jefe Sapo? - preguntó Naruto emocionado

− Lárgate, ¿por qué me metería con alguien como él? - preguntó Gamabunta - no soy tonto

− ¡¿Qué?! ¡¿Está bromeando, dattebayo?! - gritó Naruto - ¡Usted me dijo que sería su secuaz!

− ¡Naruto! - llamó Misato ganando su atención - ¡Cálmate!

− ¡Pero, Misato-chan!

− Escuche, Jefe Sapo - comenzó la chica - sé que Shukaku es un rival poderoso porque bueno... es un bijuu pero entienda que necesitamos de su ayuda - Gamabunta la miró atentamente - además no estará solo, Hattori y la serpiente de Sasuke

− Se llama Aoda - interrumpió Sasuke con cara de palo

− Así es - siseó la serpiente

− Está bien, Hattori y Aoda - corrigió mirándolos - también estarán aquí para ayudarnos - continuó ahora mirando al Jefe Sapo - y le aseguro que un trío como este es potente

− Acepto, lucharé con ustedes contra Shukaku - asintió Gamabunta fumando de su pipa - ¡Vamos! - exclamó sacando su katana gigante de la espalda

Hattori también se puso en marcha sacando sus dos espadas mientras Aoda se elevaba amenazadoramente y siseando cual serpiente.

Gamabunta saltó con fuerza y atacó a Shukaku cortándole un brazo. Al instante, Hattori junto a Aoda se acercaron velozmente al bijuu. Aoda se enroscó alrededor de Shukaku inmovilizándolo mientras Hattori lo apuñalaba en el pecho.

Luego de ello, se alejaron al ver que el bijuu liberaba chakra pero algo los sorprendió.

− Interesante, no está mal - habló Shukaku con voz de Gaara - me impresionan, equipo siete pero ahora les demostraré el verdadero poder de la manifestación de la arena - dijo con cara psicópata

− Esas ojeras bajo sus ojos son evidencia de insomnio - habló Hattori - debido a que al tener a Shukaku en su cuerpo, lo atormenta en todo momento y no puede volver a dormir profundamente puesto que se apoderaría del cuerpo de Gaara y este moriría

− Lo ha hecho - dijo Gamabunta un tanto preocupado

− Esto no me gusta nada, Jefe Sapo - dijo Naruto mirando al rival - ¿qué va a suceder?

− Hizo el Jutsu de Muerte Falsa así que el Shukaku ahora está liberado - explicó Gamabunta

− ¡Soy libre al fin! - gritó Shukaku - ¡aquí estoy espero que estén listos para morir!

− ¡Saltemos!

Los tres animales saltaron cuando el poderoso bijuu hizo un jutsu de viento bastante potente. Al instante, Gamabunta contraatacó haciendo un jutsu de agua específicamente balas de agua pero Shukaku las detuvo exhalando aire y pareciera que lloviera. Sin que Gamabunta pudiera prevenirlo, el bijuu atacó con otro jutsu de viento dejándolo un tanto débil.

− ¡Hay que despertar a ese chico lunático! - exclamó Aoda

− Exacto, así Shukaku volverá a su interior - asintió Gamabunta - no creo volver resistir otro ataque así - explicó haciendo referencia al ataque que recibió - por eso apenas nos acerquemos, ustedes tienen que despertar al muchacho

Los tres genin asintieron posicionándose sobre sus invocaciones listos para completar su misión. Los animales se miraron entre sí y procedieron a atacar nuevamente. Esta vez, Hattori mostró su poder realizando un poderoso jutsu de fuego en forma de dragón que atacó directamente a Shukaku sorprendiéndolo mientras Aoda aprovechaba la situación y se enroscaba nuevamente a su alrededor. Al ver que luchaba contra Aoda, el gran Sapo hizo nuevamente su jutsu de agua inmovilizándolo.

Luego del jutsu de agua, los genin con extremo cuidado pero con rapidez fueron a despertar a Gaara para detener todo esto. Shukaku los atrapó, succionando los pies en su piel de bijuu y al instante lanzándoles balas de viento pero fueron protegidos por Gamabunta que los rodeó con su gran lengua de sapo. Misato hizo una mueca ante la saliva pero poco duró ya que Gaara comenzó a gritarles.

− ¡¿Crees que soy tonto?! - gritó Gaara enfurecido mirándolos - los borraré de la faz de la tierra

La lucha continuó pero mientras Gaara y Naruto hablaban a los gritos, Sasuke y Misato intentaban sacar sus pies de la piel del bijuu pero era algo muy difícil.

− Maldición, es muy fuerte - dijo Sasuke frustrado

− Aaaaa, estúpido Shukaku - maldijo Misato tirando de su pierna

De repente, cuando Gaara quiso hacer el jutsu de nuevo. Naruto le gritó que lo dejara y que estaba harto de él. Los ojos de Gaara se pusieron en blanco dejando que Shukaku tomara nuevamente el control pero Naruto fue más rápido y le dio un cabezazo despertándolo para así terminar con esto puesto que ya no tenían chakra.

La forma de Shukaku de arena se rompió en pedazos de piedra. Misato estuvo a punto de caer pero Sasuke sostuvo su mano atrapándola mientras Aoda salvaba a Sasuke.

Las tres invocaciones se esfumaron en una bola de humo ya que carecían de energía por la dura batalla.

Misato cayó junto a Sasuke en un lugar con pasto por suerte evitando así una dolorosa caída ya que Aoda había desaparecido por falta de chakra. Los demás también.

La muchacha se dio cuenta de que Naruto no estaba por ningún lugar cerca ni tampoco Gaara. Eso la preocupó debían saber dónde estaban. Estando dispuesta a encontrarlos, decidió utilizar su kekkei genkai pero algo la detenía.

− Mmm, Sasuke - habló Misato nerviosamente con un rubor

− Hn - la miró con una ceja levantada

− ¿Po-odrías soltar mi mano? - preguntó aún más nerviosa

− Lo siento - dijo Sasuke soltando su mano rápidamente

Misato parpadeó al ver que Sasuke ahora le daba la espalda. Se encogió de hombros y procedió a realizar el sello. Los encontró a unos metros pasando unos árboles y al parecer estaban teniendo una pequeña lucha mientras hablaban, en realidad Naruto le hablaba con determinación. Ella decidió dejarlos pues solo Naruto tenía el increíble poder de cambiar a la gente.

− Vamos - ordenó Sasuke

− ¿Qué?

No alcanzó a preguntar por qué ya que Sasuke la estaba arrastrando hacia donde estaba Naruto. Al llegar vio a Naruto arrastrándose hacia Gaara que estaba tendido en el suelo sin fuerzas.

− Naruto - llamó Sasuke al llegar

− Sasuke, Misato ¿están bien? - preguntó Naruto rápidamente

− Naruto, estamos bien - respondió Misato suavemente - tú no estás bien, déjame curarte

− Hai - asintió apoyando la cabeza en el piso

− No hay rastros de arena y Gaara no tiene chakra - informó Sasuke

− Qué alivio - suspiró Naruto al escucharlo

Gaara observó cómo su amiga lo curaba y el chico Uchiha le hablaba. Deseaba tener amigos como ellos.

En ese momento, Kankurou y Temari llegaron posicionándose al lado de su hermano con actitud de ataque.

− Suficiente, se acabó - dijo Gaara

− Pero Gaara - murmuró Kankurou viendo su extraña actitud y sonrió levemente - muy bien, Gaara - asintió tomándolo en sus brazos

Los tres miraron a los genin de la Hoja y sin más se retiraron. Ya no tenían más nada que hacer allí.

En el camino, mientras su hermano lo llevaba saltando de rama en rama, Gaara pensó en Naruto. El ninja hiperactivo de la Hoja.

− Temari, Kankurou perdónenme - se disculpó Gaara verdaderamente sorprendiendo a sus hermanos

− No te preocupes - dijo Kankurou

Mientras Misato curaba a Naruto de sus heridas y transfiriéndole un poco de chakra para que pudiera caminar sintió algo romperse dentro de ella. Levantó su mirada hacia la aldea, algo había sucedido. Tenía que saber.

− Sasuke, cuida de Naruto - dijo Misato rápidamente - tengo que ver algo

Sin esperar respuesta alguna, ella desapareció en un flash rojo. Se teletransportó al estadio donde estaban realizando los Exámenes Chunin. Vio que en las gradas, los civiles seguían dormidos y algunos shinobis estaban en el techo del Palco Hokage. Al instante, ella corrió hacia allí, algo malo había sucedido.

(Ahora click en el video para escuchar la música)

Al llegar, vio un cuerpo en el suelo. Miró a los ninjas presentes, estaba su sensei Kakashi, Jiraiya y los demás sensei de los equipos genin. Hasta Ibiki Morino y su escuadrón estaban presentes.

− ¿Qué sucede? - preguntó Misato al verlos

Ninguno respondió, ella miró al cuerpo en el suelo. Era el Tercer Hokage, Hiruzen Sarutobi. Estaba muerto. Misato se quedó congelada sin poder creer que lo que sus ojos veían, su sensei estaba muerto, lágrimas comenzaron a caer de sus ojos. Una tras otra sin parar.

− ¡No! - gritó Misato cubriendo su rostro con las manos - ¡No puede estar muerto! - gritó nuevamente entre lágrimas - ¡Sensei! - corrió hacia su cuerpo arrodillándose a su lado

Sin poder controlarse, Misato comenzó a aplicarle ninjutsu médico rápidamente. El chakra verde de sus manos no lograba nada, Sarutobi no reaccionaba. Unos brazos tocaron sus hombros en un intento de calmarla pero se los quitó de encima con furia.

− ¡No me toquen! - lloró la joven

− Misato-chan, Lord Hokage ha utilizado el Sello Consumidor de La Muerte - explicó Kakashi suavemente dando a entender que sus intentos eran inútiles

Lentamente, el chakra médico que ella aplicaba se fue reduciendo. Ella miró sus manos repletas de sangre del Hokage. Apretó los puños mientras las lágrimas continuaban cayendo.

Los shinobis presentes observaron el desgarrador momento del dolor de Misato Senju. Por supuesto que ellos se sentían tristes pero la chica había sido muy cercana a él.

Vieron como Misato se sentó a su lado y tomaba su cuerpo con suavidad. La jovencita no dejaba de llorar mientras apoyaba la cabeza de Sarutobi en su pecho para poder así abrazarlo. Ella se ensució con sangre en el abrazo mientras murmuraba disculpas al hombre fallecido.

− Sensei, lo siento tanto - continuó llorando Misato cerrando sus ojos - lamento no haber estado aquí para ayudarlo, seguro habría podido hacer algo - lo abrazó más fuerte - lo siento, lo siento, lo siento - continuó murmurando tristemente

Kakashi observó a su alumna con tristeza, se dio cuenta de que ella en verdad quería mucho al Hokage. Deseó poder hacer algo para aliviar su dolor pero era imposible. No solo ella lidiaba con el dolor, él mismo sentía tristeza pero no podía culparla. Ella era joven y el Hokage estuvo mucho tiempo junto a ella.

Al día siguiente

Misato se despertó confundida. Miró a su alrededor y vio paredes blancas. Se sentó en su cama y se dio cuenta de que estaba en un hospital. Ella miró sus manos y estaban limpias.

− Sensei - susurró con tristeza

Lentamente, se puso de pie mirando a la ventana. Era un día completamente nublado. A los pies de la cama, vio un kimono negro y sandalias negras con una nota. Decía el lugar y hora del funeral del Tercer Hokage. La hora era cercana por lo tanto se apresuró en cambiarse de ropa y salir del hospital por la ventana.

Fue al lugar de encuentro de Naruto y Sasuke. Los tres se miraron y procedieron a ir juntos al funeral sin decir una palabra.

Al llegar al funeral, se posicionaron en la primera fila de pie mostrando respeto por los caídos durante la invasión. La imagen de Hiruzen Sarutobi estaba apoyada en un almohadón especial mostrándolo caído y a su lado imágenes de otros ninjas de la Hoja que también habían muerto.

Todos los ninjas de la Hoja estaban presentes vistiendo de negro, Misato vio a Konohamaru llorar desconsoladamente mientras Iruka intentaba consolarlo.

De repente, comenzó a llover. Misato miró al cielo, a las gotas caer en su rostro mientras se mezclaban con las lágrimas de sus ojos. Hasta los cielos lloraban por la muerte de Sandaime Hokage.

− Estamos aquí reunidos para honrar y recordar no solo al Tercer Hokage sino aquellos que se sacrificaron durante esta batalla - habló Homura Mitokado, Consejero y ex compañero de equipo del Tercer Hokage - para que nuestra aldea pudiera sobrevivir

De uno en uno, los ninjas comenzaron a dejar una rosa blanca sobre el santuario de los ninjas y Hokage caídos. Cuando el turno de Misato llegó, depositó una rosa blanca mirando su imagen y recordando su memoria.

Flashback

La puerta de la habitación en donde Misato se hospedaba se abrió dejando ver a un anciano vestido de túnicas y sombrero. Era el Tercer Hokage.

Él caminó por la habitación hasta llegar donde la niña estaba sentada. La miró con tristeza.

− Misato-chan, tengo que darte una mala noticia - dijo suavemente

− Están muertos, ¿verdad? - susurró la pequeña

− Hai, murieron en acción protegiendo la aldea del Kyubi - explicó

La pequeña niña de cabellos rojos comenzó a llorar la muerte de sus padres. Estaba muy triste. Sarutobi la abrazó mientras ella lloraba y se aferraba a su túnica blanca.

Fin Flashback

Misato sonrió con tristeza, desde el comienzo de su vida ese hombre había estado junto a ella dándole lo mejor. Buscando a Tsunade para que la cuidara cuando estaba sola, entrenándola con los mejores y preparándola para un futuro inevitable.

Flashback

Hiruzen Sarutobi sonrió al verla llegar nuevamente a la aldea.

− Misato-chan, ¿cómo has estado? - sonrió el Hokage

− ¡Muy bien! ¡Aprendí un montón de cosas con Tsunade-obasan! - exclamó Misato alegremente

− ¿Con que Tsunade-obasan, eh? - se rio

− Hai - murmuró la niña tocándose la cabeza mientras recordaba el golpe por haberla llamado así

Él se rio al verla bufar. Ella sonrió, siempre le alegraba hacerle sonreír.

Fin Flashback

Mientras Misato sonrió al recordar aquel recuerdo, unas lágrimas se deslizaron por su rostro. Aquel hombre no merecía morir así.

Flashback

Con sumo cuidado, Misato abrió la pequeña caja y esta reveló diez kunai especiales. Eran los kunai que habían pertenecido a Yondaime Hokage en el pasado. Ella tomó uno con manos un tanto temblorosas y los apreció. Eran hermosos.

Misato Senju no podía creer que una persona tan importante como el Tercer Hokage le confiara estos kunai tan valorados por el uso de un ninja tan impresionante como Minato Namikaze.

− Sé que los utilizarás para bien, Misato - sonrió el Tercer Hokage quitándose el sombrero para disfrutar de la brisa matutina

− Arigatou, Lord Hokage - asintió Misato con una pequeña sonrisa

Fin Flashback

Ella estaba agradecida de que Lord Hokage hubiera confiado en ella para heredarle aquel poderoso jutsu.

Flashback

El Tercer Hokage sonrió al ver a su discípula desperezarse de un sueño reparador.

− Veo que has despertado - comentó Sarutobi acercándose a ella

− Sí, mi chakra estaba agotado - Misato sonrió vergonzosamente

− No te preocupes, a todos nos ha pasado - tranquilizó Sarutobi - Misato-chan, ha llegado el momento de que sepas cuál es la otra técnica

− ¿Cuál es? - preguntó Misato muy curiosa

− Es el Sello Consumidor de La Muerte - respondió Lord Hokage sin rodeos haciendo que Misato ampliara sus ojos - también conocido como Shiki Fūin es un Fūinjutsu en el cual a costo de la propia alma del usuario se convoca a un Shinigami, el cual absorbe el alma del enemigo y la del usuario y las sella en el estómago de este último, aquellas almas selladas con este Jutsu están condenadas a sufrir por la eternidad en el vientre de la parca para jamás descansar en paz, allí las almas de los sellados y el sellador están entrelazadas por siempre, vinculadas por el odio enfrentándose en un combate sin cesar hasta el final de los tiempos. Constituye un kinjutsu, debido a que significa la muerte tanto para el rival como para el usuario - explicó el Hokage

− Hokage-sama - llamó Misato - ¿por qué quiere enseñarme esto?

− Misato, la razón por la que te doy el conocimiento de este jutsu es porque no voy a vivir por siempre y tú eres descendiente del Clan Uzumaki por lo tanto podrás hacer este fuinjutsu a la perfección - respondió Hiruzen Sarutobi - pero también porque sé que solo lo utilizarás cuando tu vida o la de alguien más corra verdadero peligro

− Hai, arigatou - agradeció Misato

− No me lo agradezcas, simplemente prométeme que usarás este jutsu en caso de vida o muerte, en donde debas salvar la vida de tus amigos porque al usarlo... - Hiruzen cerró los ojos por unos segundos y al abrirlos miró con extrema seriedad a su alumna - morirás

− Lo prometo, Lord Hokage - respondió Misato haciendo una reverencia

Hiruzen Sarutobi vio como la pequeña le hacía una profunda reverencia demostrando el respeto que le tenía. Cuando la vio por primera vez en brazos de su madre, vio a un bebé con mechones de pelo rojo ardiente. En ese instante, sintió una conexión con la pequeña porque algo dentro de ella era distinto. No sabía qué pero lo percibía.

Fin Flashback

Eran tantos recuerdos que llegaban a Misato, se sentía tan inútil por no haber hecho nada para salvarlo pero en el fondo sabía que no habría podido hacer mucho ya que Orochimaru era más fuerte que ella.

Misato apretó sus puños, se haría más fuerte y derrotaría a Orochimaru si volvía a atacar su aldea o cualquier mala intención que tuviera con la aldea. Hiruzen Sarutobi no merecía morir a manos de ese hombre corrompido.

Una nueva determinación nacía dentro de Misato Senju. Ella se secó las lágrimas, ya era tiempo de dejar de llorar.

− Iruka-sensei, ¿por qué la gente arriesga su vida por otros? - preguntó Naruto mirando la montaña Hokage

− Bueno, cuando alguien se muere es el final - comenzó Iruka - su pasado, su futuro... todos los sueños que llegó a tener desaparecen junto con él, eso es así aunque muera de forma honorable en batalla al igual que muchos - miró la montaña - todo lo que lo ata a la vida es desconectado menos algo, lo más importante de todo, la gente - sonrió levemente - padres, hermanos, amigos, amantes, la gente que fue importante para él y estas personas, las que se quedaron atrás están unidas en un gran círculo gracias a los recuerdos de él... un círculo de amistad, confianza y sacrificio que se hace más grande y fuerte con el tiempo. Es difícil de explicar, nos quedamos juntos en el círculo no tenemos opción. Es importante para nosotros - terminó

− Así que es algo obligatorio, entiendo - asintió Naruto - aun así me da tristeza

− Imagina lo que hubiera sido si su muerte fue en vano - comentó Kakashi - pero nos dejó algo invaluable - su equipo lo miró atentamente - tranquilos, ya lo entenderán algún día

− Oiga, no nos subestime. Entendimos muy bien - dijo Misato

Misato miró el cielo y vio que las nubes comenzaban a despejarse. Sonrió, la luz volvía a iluminarlos. Hiruzen Sarutobi se fue a descansar en paz. Eso la alegraba.

− Oi, Sasuke, Misato ¡vayamos a Ichiraku! - gritó Naruto - ¡por cierto, Iruka-sensei! ¡Hasta luego!

− Sasuke, no intentes escaparte - regañó Misato - vendrás con nosotros

− No me estaba escapando, tomaba una ruta diferente - respondió Sasuke con calma

− Sí, claro - bufó la joven pelirroja arrastrándolo para que no se fuera

"¿Lo ve, Lord Hokage? La voluntad de fuego es más fuerte que nunca, las chispas que dejó atrás han encendido una flama en las hojas de la siguiente generación... una flama poderosa, Lord Hokage... arderán con fuerza y su luz alumbrará nuestra aldea, le dará calor y seguridad en los años venideros y algún día, de esa flama surgirá un nuevo Hokage" - pensó Iruka viendo a Naruto y sus compañeros irse junto a su sensei pero también sonrió al ver a los demás genin

En las afueras de la Aldea

Dos ninjas vestidos de túnicas negras con nubes rojas estaban de pie sobre el muro de Konoha observando a la aldea. Sus rostros no se veían ya que llevaban sombreros de paja con una pequeña campana y tela en forma de flecos.

Uno de ellos llevaba una gran espada envuelta en vendas. Su contextura física era grande mientras que el otro era normal y su poder lo llevaba en sus ojos.

− Vaya, sobrevivieron... apenas - dijo el ninja de la espada - el daño es extenso

− No hace mucho fue la época de gloria - comentó el otro ninja - mira ahora

− Mmm, suenas algo triste - se burló el ninja de la espada - no me digas que aún extrañas tu antigua casa

− No, nada - cortó el ninja mirándolo con sus ojos rojos

El ninja de intensos ojos rojos con aspas negras miró a Konoha recordando su tiempo allí. Lo que hizo para salvarla pero no permitió que sus emociones se filtraran en su rostro.

Internamente se preguntó si su hermano estaría allí, también si la chica pelirroja estaría junto con su hermano. Completaría su misión y los encontraría.

Después de todo, él era... Itachi Uchiha.

En la aldea

Había pasado un día y Misato estaba bastante mejor. No se sentía tan triste, había cosas que hacer como ayudar en la aldea para construir casas que habían sido destruidas durante la invasión. Por lo tanto, ella estuvo ayudando con ello utilizando su elemento madera llamando la atención de los civiles ancianos que decían que era igual a Shodaime Hokage. Ella nerviosamente negó la comparación ya que todavía tenía mucho que aprender.

Ella paseó durante toda la mañana viendo si alguien necesitaba ayuda hasta que vio a Sasuke descansando sobre la terraza de la Academia. Misato sonrió con maldad, y se apareció sobre él asustándolo.

− ¡Misato! - exclamó Sasuke poniéndose de pie

− ¡Tendrías que haber visto tu cara! - se rio la muchacha - así que, ¿admirando las nubes?

− Hn

− Sabes jovencito, a mí no me hables así - regañó en broma Misato

− Hn

− Sasuke-chan, sé un buen chico para Misa-chan - arrulló Misato tironeando sus mejillas

− Ya basta - dijo Sasuke quitando sus manos

− Ow - puso mala cara

En ese momento, un águila se posicionó sobre ellos en el cielo llamándolos. Seguramente era su sensei. Algo querría.

− Kakashi, ¿qué rayos querrá? - se preguntó Sasuke

− Y yo qué sé, vamos a averiguarlo - dijo Misato mirando al águila

Los dos jóvenes comenzaron a correr en busca de Kakashi. Si los llamaba, era algo importante.

Saltaron de tejado en tejado hasta que llegaron a las calles principales de la aldea donde su sensei estaba, los genin caminaron lado a lado tranquilamente hasta que pudieron verlo.

En otra parte de Konoha

Jiraiya se encontraba espiando a las jóvenes muchachas riendo pervertidamente mientras murmuraba que las chicas de Konoha eran sensacionales hasta que la presencia de dos personas lo alertaron

− Por lo que veo sigues payaseando - habló Homura

− Solo investigo un poco - se rio Jiraiya para luego poner cara seria - díganme, Koharu y Homura sensei, ¿qué desean un par de Consejeros conmigo?

− No perdamos el tiempo, tu sabes bien de qué se trata todo esto - dijo Homura

− Oigan, ¿por qué esas caras largas? Sé que las charlas con la Aldea de la Arena fueron positivas - sonrió Jiraiya

− La Aldea de la Arena ha decretado públicamente que Orochimaru fue el responsable de todo, además le han ofrecido su apoyo total a la Aldea de la Hoja - explicó Homura tranquilamente - esto hace que no estemos seguros de su traición

− No tenemos más opción que aceptar sus disculpas con el objeto de fortalecer el poder en la región - dijo Koharu

− Así es - asintió Homura - hay que destacar que la fuerza de la Aldea de la Hoja ha sufrido un gran golpe, como están las cosas nuestra prioridad es prepararnos para los ataques violentos venideros

− No sabemos cuándo intentarán hacernos alguna jugada las naciones aledanias - explicó Koharu mostrando su preocupación - por lo tanto hasta que la aldea haya recuperado su fuerza, hemos decidido reunir a los mejores shinobi de cada escuadrón y conformar un comité ejecutivo de emergencia para manejar la situación pero primero necesitamos un líder fuerte y confiable - la anciana miró fijamente a Jiraiya - esto es más que solo Orochimaru, es un inicio de una larga y recia batalla

− Miren, no sé por qué se molestan en explicarme todo esto así que si me disculpan debo continuar trabajando - dijo Jiraiya mirando a las chicas

− Creo que nuestros planes te interesarán - hablo nuevamente Homura - nuestra aldea necesita un Godaime Hokage de inmediato

− Y ayer en una junta de emergencia con el Señor Feudal de la Tierra del Fuego, fue decidido - dijo Koharu seriamente - te elegimos a ti, Jiraiya como Godaime Hokage - sentenció

− Uhm, no lo sé... no es mi sueño en la vida - dijo Jiraiya

− Ha sido decidido, además si uno de los Legendarios Sannin no es el idóneo entonces ¿quién? - cuestionó Homura

− Si lo que les interesa es un Sannin, hay un tercero - detuvo Jiraiya con su mano - están olvidando a Tsunade - los consejeros se miraron

− La capacidad de esa mujer es dudosa - dijo Homura - pero además de eso, nadie sabe dónde está

− Yo podría encontrarla, ¿no tendrían problema con eso, verdad?

− Pues... - dudó Homura

− Tsunade tiene la cabeza necesaria y no es un holgazán como yo - afirmó Jiraiya - ¿qué dicen?

− Bien, pues vamos a pensarlo pero enviaremos tres cazadores especiales anbu para que te acompañen a buscarla - dijo Homura

− No se preocupen, no voy a salir corriendo - sonrió Jiraiya perspicaz - además sus hombres podrían estorbar... hay un chico y una jovencita a los que no les importaría acompañarme en el viaje, además esos niños y yo nos entendemos muy bien

Con Sasuke y Misato

Cuando por fin vieron a su sensei, se acercaron a él lentamente escuchando su conversación. Vieron que Asuma y Kurenai también pasaban por allí.

− Hola amigos - saludó Kakashi a sus compañeros jounin - ustedes dos cada vez se llevan mejor

− Idiota, Anko nos pidió que fuéramos por un poco de arroz para ella - dijo Kurenai avergonzada

− ¿Tú qué haces además de estar en tu profunda lectura? - preguntó Asuma con sarcasmo

− Aa, quiero comprar algo para ponerlo en una tumba - dijo Kakashi de repente serio - además acabo de encontrarme con alguien - fijó su mirada de reojo en dos shinobis con túnicas negras y nubes rojas dentro de la tienda de dango - y Sasuke junto a Misato no tardan en llegar

Dentro de la tienda de dangos, Itachi al escuchar el nombre de su hermano y la chica se inmutó levemente y al instante desapareció junto a su compañero.

− Uhm, tú no eres de los que se encuentran a alguien - dijo Asuma entendiendo el mensaje - ¿es por Obito?

− Mm, sí masomenos - respondió Kakashi

Como ya habían escuchado gran parte de la conversación, Misato y Sasuke hicieron su aparición llegando los dos juntos.

− Kakashi, es raro que usted aparezca antes - comentó Sasuke - comamos en otro lado, no se me antoja en este lugar - dijo al ver la tienda que tantos recuerdos dolorosos le traía

− Sasuke, Misato - saludó Kakashi - ustedes dos cada vez pasan más tiempo juntos - bromeó

− Baka - murmuró Misato con un rubor

− ¿Y qué? - preguntó Sasuke entrecerrando los ojos

− Aa nada, quizás estén enamorados uno del otro y no se atreven a confesarlo - respondió Kakashi simulando leer su Icha Icha

− ¡¿Qué?! - chilló Misato

− Chicos, ahora que lo pienso tengo un asunto qué atender - dijo Kakashi mirando a sus compañeros jounin y asintiendo - así que ustedes continúen su cita romántica, ¡nos vemos! - se despidió desapareciendo en una bola de humo

− Estúpido Kakashi - bufó Misato apenada

− Tengo que irme - murmuró Sasuke con sus mejillas rosas - hasta luego - se despidió rápidamente desapareciendo entre la calle

Misato parpadeó. Todos se habían ido. Suspiró, ahora que estaba allí se le antojaba ir comer dangos. El rastro de una presencia de chakra llamó su atención, alguien conocido había estado allí. Amplió sus ojos sorprendida, la esencia de ese chakra era inconfundible.

Era Itachi Uchiha. Estaba en Konoha.

Si venía como Akatsuki entonces buscaba a Naruto. Al instante, Misato saltó entre los edificios en busca de su amigo rubio. No podía dejarlo solo.

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Gente hermosa, les aviso que desde el 16 de enero hasta el 1 de febrero no podré publicar nuevos capítulos porque me voy de vacaciones a Mar del Plata. Eso es todo, ¡Hasta la próxima!

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