Luego de una semana los investigadores habían terminado de leer la mayoría de aquellas notas, que se encontraban en la pequeña caja que Emi Midoriya le entrego a Shoto. Y aunque el bicolor prometio no dejarse llevar por los sentimentalismos, no podía evitar sentirse furioso, triste y decepcionado de la familia de Izuku.

A cada hoja que leía se sentía mucho peor, pues en aquellos papeles se revelaba la precaria vida de la chica. A su familia no le faltaba el dinero, pero si que le faltaba amor, los abusos de sus hermanos, de sus compañeros de escuela, y hasta los de su progenitora se veían reflejados en cada página de aquellas hojas sueltas.

Shoto sufría demasiado, sentía que luego de leer eso el sentimiento de culpabilidad y de odio por aquellas personas crecía en su interior con rapidez.

Él no entendía como es que Izuku aun con toda esa mierda, pudiera tratar de ser feliz, no, Shoto no alcanzaba a comprender como a pesar de todo tenía la capacidad de ayudar a los demás.

¿Sería por eso que ella decidió estudiar Psicología?

¿Para ayudar a personas como igual que ella?

¿Para salvarlos como ella quería ser salvada?

Esas preguntas lo atormentaban profundamente, solo de recordar como siempre iba con ella en busca de consuelo cuando la situación de Izuku era peor, lo hacía sentir como una basura.

Los pensamientos de Shoto fueron cortados de tajo, por la brusca voz de Bakugo.

—Bastardo, espabila, tenemos un interrogatorio, es para el caso de tu noviecita — susurró burlón.

Todoroki se levanto con rapidez de la silla y encaro a Katsuki.

—¿Acaso Kirishima regreso ya? —pregunto con premura.

El de cabellos rubios cenizas chasqueo la lengua.

—No, pero encontramos a uno de los tipos sobre los que escribió la inútil mujer.

Shoto estaba ansioso de saber de quien se trataba, por lo que no reparo en lo que dijo su compañero.

—¿De quien se trata?

—Chisaki Kai, por cierto antes de que me sigas preguntando, mejor ve y entérate de lo que dice, que yo no soy tu maldito secretario —espeto ya molesto Katsuki.

—Lo siento, voy para allá ¿Me podrías cubrir? Solo me falta por leer lo que hay dentro de estos sobres.

—¿Sobres? No dijeron nada sobre eso.

—Si, es verdad, pero estaban escondidos dentro de la caja, son solo 5, no creo que sean escritos largos, se notan muy ligeros, es casi como si no contuvieran nada — murmuro el heterocromatico.

—Entiendo, no hay problema, yo acabo esto, ahora largate, estaban a nada de comenzar cuando yo me vine para acá.

—Vale, gracias Bakugo.

Todoroki no espero la respuesta del mayor, salio de prisa de aquella oficina y se dirigió con rapidez a la sala de interrogatorios.

Cuando llego se asombro de ver a Kaminari y Shinso en esta, pues usualmente esos dos eran los que llevaban a cabo aquella tarea.

—¿Quien llevara a cabo el interrogatorio? —cuestiono con verdadera curiosidad el bicolor.

—Aizawa —respondieron los otros dos a la par.

Shoto trago grueso al escuchar eso, pues su jefe tenia la fama de ser demasiado cruel en esa tarea, se paro a lado de los dos muchachos y se fijo en la persona sentada al otro lado del cristal, cuando lo observo sus ojos se abrieron de par en par, pues conocía a ese sujeto, por lo menos de vista.

No tuvo tiempo de decir nada pues Aizawa entro a aquella habitación, en cuestión de segundos comenzó con su interrogatorio.

—Buenas tardes, ¿sabe por que lo hemos mandado llamar? —Pregunto el mayor directamente.

El castaño ladeo la cabeza y negó con tranquilidad.

—Ya veo, vera hace más o menos tres semanas desapareció una persona, su nombre Izuku Midoriya, usted la conocía ¿No es así?

Una risa seca escapa de labios del castaño.

—Si, la conozco bastante bien. ¿Acaso soy sospechoso solo por conocerla? —pregunta burlón.

—Yo no diría sospechoso, yo más bien lo llamaría una persona de interés. Tenemos muchas dudas Chisaki, pensamos que tal vez tú nos ayudarías a resolverlas —murmura con tranquilidad el hombre de negros cabellos.

El de orbes dorados ladea la cabeza y sonríe con suficiencia.

—Y bien, ¿que quiere saber?

—¿Como conociste a Izuku Midoriya? ¿Que tipo de relación tenían ustedes dos?

—Izuku, pensar en ella es recordar el olor de un campo lleno de flores.

—Eso no es lo que le pregunte.

—Espere, déjeme terminar, después puede sacar sus propias conclusiones —dice exasperado por la interrupción, Aizawa rueda los ojos con fastidio pero lo deja continuar, el hombre se sienta de modo despreocupado y prosigue con su relato—. Como le decía, pensar en Izuku es recordar un campo lleno de flores, más que nada por el olor de pureza que ella emanaba, pero ciertamente eso estaba muy alejado de quien en verdad era Midoriya. La conocí en un bar de mala muerte, es extraño sabe, yo detesto esos lugares, el olor de los cigarrillos y el hedor de los borrachos me repugna.

—¿Entonces porque estabas ahí? —cuestiona Aizawa.

—Todo fue culpa de Kurono, se enamoro de una prostituta de ese lugar, ese estúpido se dejo idiotizar por esa mujer, algo raro en él, aunque bueno eso no algo que usted quiera saber. En ese lugar fue que conocí a Izuku, al principio pensé que ella era una de esas chicas que cobraba por sus caricias, pues la forma en que iba vestida no dejaba nada a la imaginación, yo no soy fanático de ese tipo de mujeres ya que pienso que son sucias y tienen enfermedades, pero algo en aquella desconocida de verdes cabellos me llamo la atención, por lo que fui hasta ella. Recuerdo que fui directo al grano y le pregunte su precio, ella solo me sonrió y me dijo que eso se podía arreglar fácil, no lo pensé mucho y acepte, le pregunte a donde quería que la llevara y ella me dijo que me indicaría el lugar. Salimos de aquel lugar con prisa, en el camino solo hablamos para que me fuera indicando por donde irme, al final llegamos a lo que parecía una casa familiar, la verdad no le di mucha importancia, solo entrar a aquel lugar deje que mi deseo por ella me dominara, por lo que sin ningún cuidado termine teniendo sexo con ella en la entrada de aquel lugar, después de eso lo hicimos en la sala la mayor parte del tiempo. Todo abría quedado como un buen rato hasta que llego el momento final —ríe con nostalgia.

—¿Que pasó?

Chisaki suspira y recuerda aquel día.

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—Mierda eso fue bueno, ¿entonces cuanto te debo?

—No es nada —musita la chica con suavidad.

—Creo que no es bueno que des tus servicios gratis, ¿eso no te baja la reputación o algo asi? —cuestiona mientras se pone la ropa.

—Nah, y si asi fuera me da igual —responde.

Pero aquella respuesta no deja conforme al muchacho.

—Insisto, dime cuanto es, te daría dinero así sin más, pero siendo que nunca he usado un servicio de esto no se cuanto es lo justo.

—Umm, la verdad yo tampoco se nada de eso.

—¿Como que no sabes nada de eso? ¿Eres nueva acaso?

La chica rie y niega.

—No, a decir verdad yo no soy una de esas mujeres de la vida galante, sé que en el sexo tal vez soy como una, pero la verdad, es que yo simplemente soy una psicóloga clínica recién graduada.

El chico palidece y niega.

—¿Estas bromeando verdad?

—No, puedes ver si quieres mi titulo, está colgado en la entrada.

El castaño de forma automática va hasta la entrada del hogar y ve que en efecto es cierto, rápidamente palidece al darse cuenta del error que cometió, se da la vuelta y con vergüenza trata de disculparse.

—Oye, no era mi intención ofenderte, es solo que por la forma en que estabas vestida, bueno no es que tenga algo en contra de tu ropa, pero el lugar en el que estabas, y como te veías pues yo me confundí —susurra.

Izuku ríe fuertemente y niega.

—¡Hey! no me molesto, de hecho varios tipos antes de ti ya habían intentado algo conmigo pues pensaron lo mismo que tu, pero como es obvio los rechacé.

—¿Eh? ¿Entonces porque mi proposición si la aceptaste? —cuestiona sin entender.

—Porque me atrajiste. Que te parece si olvidamos eso y empezamos de nuevo —Izuku sonríe y extiende su mano—. Mi nombre es Izuku Midoriya, gusto en conocerte, ¿cual es tu nombre?

—Kai Chisaki —responde en un susurro.

—Bueno Chisaki, es tarde ya y hace algo de frio, ¿te gustaría quedarte por esta noche conmigo? mi cama es muy grande —musita de forma provocadora la chica.

El chico asiente y se va detrás de ella hasta su habitación, en donde por algún rato más siguen disfrutando del contacto de sus cuerpos desnudos.

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—¿Entonces usted y ella fueron novios?

—Asi es, duramos algunos meses juntos.

—¿Cuanto?

—No lo se, menos de un año creo.

—¿Y porque terminaron?

El hombre resopla y soba sus sienes.

—Fueron muchas cosas, para empezar estaba el hecho de que comenzo a frecuentar mucho a un amigo de la universidad, me parece que trabajaban juntos.

—¿Entonces fue por celos que terminaron?

—No, yo no soy celoso, siempre le di su espacio a Izuku, pero algo en la relación de esos dos era diferente, la llamaba sin parar, ella le contestaba sin importar donde estuvieramos. Ademas poco a poco me fue robando su atención, el peor golpe para mi fue cuando ella no quizo formalizar nuestra relación ante su familia.

—¿Que excusa le dio para eso?

—Que aun era demasido pronto, que no se encontraba lista, pero yo se que fue por ese tipo, porque solo empece a saber de él y en cuestión de nada Izuku ya era otra.

—Comprendo, ¿usted aun mantenia contacto con ella?

—Si.

—¿Aun despues de todo eso?

—Yo se que tal vez no es logico, pero Izuku era una buena chica, yo realmente me enamore de ella, creo que uno de mis deseos más grandes fue verla convertida en mi esposa.

—¿Y eso no se pudo por?

—Embaracé a una mujer, me tuve que casar con ella gracias a la presión de mis padres, luego de eso mi contacto con ella fue estrictamente telefonico, ya sabe mensajes, una que otra llamada y ya.

—¿Hace cuanto que no la ve?

—Dos años aproximadamente.

—Bien, ¿sabe algo sobre el futuro matrimonio de la señorita? ¿Ella le conto algo?

El castaño muerde sus labios y rueda los ojos nervioso.

—No hablabamos mucho de eso.

Aizawa rapidamente se da cuenta que él miente, por lo que sonrie con malicia.

—¿Enserio? es curioso, segun lo que sabemos ella estaba sumamente emocionada por que llegara el día de la unión, antes de desaparecer le comento a su familia lo nerviosa y feliz que se encontraba ante la nueva vida que se le venia.

—¿A si? —pregunta tensamente.

—Si, de hecho le dire un secreto, lo que más preocupa al señor Iida Tenya es que la señorita Midoriya al momento de su desaparición estaba embarazada —susurra con falsa tristeza.

Aquello parece hacer enojar al hombre, pues se levanta de su asiento y golpea la mesa con fuerza.

—¡No es cierto! Izuku hace mucho que no se acostaba con ese sujeto, es más ella no lo toleraba, era un maldito mentiroso que no se la merecía, ese hijo de puta solo tenía suerte de tenerla amarrada con ese niño.

—Vaya, algo me dice que usted sabe más de lo pense.

Al darse cuenta de lo que dijo Chisaki se pasa las manos con frustación por el cabello.

—Mierda.

—Mira, en verdad necesitamos la información que tengas, cada día que pasa es más riesgoso, lo que más nos interesa es saber porque esta mujer desaparecio, y si alguno de sus allegados tiene algo que ver.

—Mierda, todo esto es una mierda. Escuche Izuku no se queria casar, al principio cuando su relación con este sujeto comenzo lo que más anhelaba era estar junto a él, aunque pronto todo fue cambiando. Solia decirme que él cada día la trataba más como una sirvienta que solo servia para cuidar al niño, si bien su relación comenzo por eso, volver a lo mismo fue un duro golpe para ella.

—Espere, espere, ¿como que su relación comenzo por eso?

—¿Él no se lo dijo? ¡Ah! No se porque me sorprende —musita con odio.

—¿Que se supone que el señor Iida me debio de haber dicho? —interroga Aizawa con seriedad.

—La forma en que comenzo su relación con Izuku, tal vez asi entenderían porque ella quiere tanto a ese niño como para aceptar casarse con él.

—Entiendo, gracias por la información, seguiremos en contacto con usted para cualquier otra duda.

—Bien, por cierto antes de que me vaya le suguiero que entreviste a los amigos de Izuku, ahi uno de ellos que conocia a la perfección su situación.

—¿Sabe el nombre de esa persona?

—No, nunca me lo dijo, aunque por como se referia a esa persona quiero creer que es un hombre.

—Le agradezco el dato, lo tendremos en consideración.

—No es nada, espero que pronto puedan encontrarla.

Dicho eso el hombre se marcha sin más, luego de que él se va el trio de detectives entra a la sala de interrogatorios.

—Y bien, ¿que piensan de lo que dijo? —pregunta Aizawa.

—Yo creo que fue honesto —musita Hitoshi.

—Igual yo pienso lo mismo, no se ve como una persona muy agradable, pero sin duda por sus gestos y forma de hablar creo que estaba siendo muy honesto. Incluso cuando comenzo a recordar a la mujer parecia genuinamente nostalgico —indico Denki.

—¿Tu que piensas Shoto? —cuestiona el mayor mientras lo mira fijamente, ya que desde que lo vio entrar noto molestia en su rostro.

—Creo que miente.

—¿Por que piensas eso? —interroga con aburrimiento su mentor

—Porque yo ya habia visto a ese tipo, lo vi con Izuku un día, cuando yo le pregunte a ella quien era él, me dijo que solo era un amigo con derecho.

—Bueno, tal vez no se sentia comoda diciendote la verdad a ti —opina el rubio.

Más Shoto niega.

—Izuku fue muy especifica al decir que su relación se basaba simplemente en él tocandola, no creo que me haya mentido —refuta el bicolor.

—Bueno, yo creo que ella tenía grandes motivos para mentir —susurra el de cabellos purpuras.

—¿A que te refieres? —pregunta Todoroki.

Shinso bozteza y se rasca la mejilla con pereza.

—Despues de escuchar lo que acabas de decir es obvio que la persona que se entrometio en el noviazgo de Midoriya y Chisaki fuiste tu, si ella no te dijo la verdad es porque estaba interesada en ti. Teniendo en cuenta que ya la habias rechazado una vez, que te hace pensar que no tuvo miedo de volver a experimentar lo mismo —explica con aburrimiento.

Aquello se le hace logico a Todoroki, por lo que suspira con resignación, esta apunto de decir algo más es interrumpido por la voz de una de sus compañeras.

—¡Aizawa, tenemos un problema! —exclama la mujer con preocupación.

Este no hace más que bufar y poner una mala cara.

—¡Y ahora que!

—Es Katsuki, Tamaki y Neito, alguien los dejo inconcientes.

—¡Que! espera un momento, ¿me estas tratando de decir que alguien estuvo merodeando por aqui como si fuera su casa?

—¡Si Aizawa, eso te quiero decir!

—Mierda, ¿ya revisaron las camaras?

La chica de cabellos azules gruñe y suelta un suspiro de frustración.

—Ese es otro problema, no se como es posible, pero esa persona antes de entrar logro apagar las camaras de seguridad.

—¡Por un demonio! ¿Ya revisaron si falta algo?

—En eso estamos.

De repente Todoroki recuerda los pequeños sobres que no alcanzo a leer, por lo que sin decir palabra alguna va hasta la oficina donde estaban las pruebas, cuando llega revuelve los demas papeles en busca de aquellos, más no los encuentra, una maldición escapa cuando se da cuenta que esas pequeñas cartas podrían haberlos ayudado a resolver esa situación lo antes posible, pero aquel tipo que secuestro a Izuku se los habia arrebatado tambien.

—Mierda, mierda. ¡Sin importar como voy a descubrir quien eres, maldito bastardo! —brama con odio el muchacho.

Pues una mala corazonada le indica que aquel tipo que secuestro a Izuku esta loco, eso solo lo hace estar más nervioso, pues una persona asi es mucho más peligrosa que un criminal en busca de dinero.

Perdon los horrores de mi ortografía, espero les guste.

Nos leemos pronto ♥

DI.