El día de la verdad:Parte 3

Los nervios recorrían a Lis por completo; sudaba profusamente mientras caminaba con Conrado hacia la habitación de sus padres. Desearía dar media vuelta y retroceder. Sus amigos ya no estaban allí para respaldarla, y anhelaba esconderse de todo. Sin embargo, sabía que debía ser sincera antes de tocar la puerta de sus padres. Conrado, percibiendo su ansiedad, tomó su mano con cariño y le sonrió.

"No te preocupes, Lis. Estaré aquí para apoyarte, y solo contaremos lo imprescindible", dijo Conrado tranquilizadoramente

Lis asintió nerviosa. "No quiero dejar de ser tu mago favorito", añadió finalmente mientras le guiñaba el ojo antes de tocar suavemente la puerta.

------------------------------------------------------------------------

Eric y Julia descendieron hacia la Torre, sintiéndose aliviados por haberse quitado un peso de encima al decir la verdad. Sin embargo, experimentaban un sentimiento de culpabilidad al haber dejado a Lis sola, conscientes de que ahora enfrentaría un momento difícil al confrontar a sus padres, cuya reacción desconocían. Al llegar a la cocina, se encontraron con sus compañeros, todos sentados y expectantes. Al verlos bajar sin Lis, muchas caras reflejaron sorpresa.

Marcos fue el primero en preguntar por Lis, mostrando preocupación por la situación y por la joven.

"Los alumnos del lago de la laguna podemos estar tranquilos; parece que Conrado se ha tomado las cosas bien y nos ha perdonado. Pero también deberíamos disculparnos con Iris", informó Eric a sus compañeros, quienes asintieron aliviados.

"Lis debe de estar pasándola mal en este momento. Tenemos que hacer algo para apoyarla", expresó Marcos frustrado.

"No podemos. Conrado se la llevó para hablar con sus padres", informó Julia.

"Pufff, espero que la Torre no sea quemada por Salamandra", bromeó Raul.

"Raul, esto es serio. No es momento para bromas", reprochó Marcos frustrado.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------

En una sala de despacho, reinaba un caos característico. Mientras Lis y Conrado narraban los nuevos acontecimientos, Nawin escuchaba atentamente cada palabra, reflexionando sobre ello. Por otro lado, Jonás se sorprendía por cada detalle, sosteniendo a su esposa, quien parecía alterada y soltaba comentarios negativos ante cada suceso que no le agradaba.

Iris no estaba presente, ya que desconocían su papel en esta historia y preferían mantenerla aislada de la nueva información hasta conocer la realidad acerca de ella y los acontecimientos de los que Saevin hablaba.

"Por suerte, una persona rescató a Lis de los magos oscuros, y en ese momento regresó a la Torre sana y salva. Pero ya tenemos lo que..." comenzó Conrado, siendo interrumpido por Salamandra, visiblemente enfadada.

"¡¡¡¡Por suerte.... qué casualidad!!! ¡¡Si es que yo no sé ni por qué tenemos normas!! ¿Cómo se te ocurre hacer eso, Lis? ¡Ponerte en ese riesgo!", exclamó Salamandra, interrumpiendo enfadada.

Lis retrocedió asustada detrás de Conrado, buscando protección. Este continuó hablando con calma: "Como decía, lo bueno es que ya tenemos la ubicación de los magos oscuros y de Morderek..."

"DAME YA ESA UBICACIÓN, PORQUE VOY A IR A POR ESE MAGO SIN PENSÁRMELO DOS VECES", dijo Salamandra enfurecida.

"Bueno, calmémonos. Sabemos que esos magos oscuros tienen un gran potencial, no creemos que sea buena idea ir sin planear y atacarlos", intervino Nawin.

"ME DA IGUAL Y EXIJO SABER QUIÉNES SABÍAN DE TU PLAN Y NO NOS DIJERON NADA, PORQUE PIENSO HECHARLOS DE ESTA TORRE", expresó Salamandra con un tono de enfado.

"Mamá, no...", intentó decir Lis.

En ese momento, Salamandra iba a soltar otra respuesta, pero Jonás se lo impidió cogiéndola con fuerza y tratando de realizar el hechizo de teletransportación.

"Salamandra necesita tomar un poco el aire. Ahora vuelvo", anunció Jonás, mientras Salamandra forcejeaba con él para evitar que usara el hechizo de teletransportación. En unos segundos, ambos desaparecieron, permitiendo que Lis respirara algo más relajada.

"Solo necesitan un tiempo para asimilarlo, tranquila Lis", trató de consolarla Conrado.

"Conozco el enfado de tu madre. Ahora querrá que todo arda, pero en un rato se le pasará. No te preocupes", añadió Nawin, animándola también

-----------------------------------------------------------------------

En el bosque cercano a la Torre, Jonás y Salamandra se encontraban. En ese momento, Salamandra trató de deshacerse del agarre de Jonás, protestando con enfado por no dejarla seguir en el despacho. Salamandra intentó realizar el hechizo de teletransportación, pero no obtuvo respuesta. Al intentarlo una vez más, Salamandra pareció marearse y se sentó abrumada y enfadada por no poder salirse con la suya. Jonás, preocupado por su estado, se sentó a su lado, pero ella pareció alejarse emocionalmente.

-¿HAS SELLADO EL SITIO?, dijo Salamandra enfadada.

-Salamandra, por favor, cálmate", le pidió Jonás.

-¡NO!" Pero en ese momento, el mareo la hizo tocarse la cabeza, agotada.

-Ves, te estás generando malestar a ti misma. Por favor, para, insistió Jonás.

-¿Cómo te da igual? ¿Es nuestra hija?", protestó Salamandra.

-No me da igual. Yo también estoy decepcionado y enfadado, pero también me alegra que esté sana, y sobre todo, sé que en este momento no necesita que le gritemos. Mi amor por ella supera mi enfado", expresó Jonás.

En ese momento, Salamandra lo miró durante unos segundos. Su estado de enfado parecía haberse transformado en un llanto triste.

-Me siento tan mala madre. He tratado de darle siempre lo mejor, todo lo que yo no pude tener. La he educado con amor y la poca paciencia que tengo, y para nada. ¿Para que sea rebelde? ¿Para que se ponga en peligro? Y encima, no soy capaz de controlar mi enfado. Siempre hay algo que se me escapa, para que al final...", la Bailarina del Fuego temía tanto por su pequeña y la quería tanto, pero en ocasiones los nervios podían. En ese momento, Jonás la abrazó.

-Eres una madre maravillosa. No pasa nada si nos equivocamos; lo importante es que tratamos de hacerlo lo mejor posible".

Entonces, Jonás le acarició el pelo, la cogió del mentón con delicadeza, la miró a los ojos y se acercó para besarla. Sin embargo, justo en ese momento, escucharon un ruido en el bosque que se acercaba hacia ellos. Se miraron extrañados y buscaron a su alrededor para identificar el origen del sonido.

-Kai, si eres tú, déjalo. Sal ya", dijo Salamandra, pensando que se trataba de él, cogiendo el colgante, pero no hubo respuesta.

----------------------------------------------------------------

Comenten abajo antes de leer el siguiente capitulo de quien cree que se trata la primera persona que acierte, le hare un un capitulo especial sobre esto.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top