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[Aiz Wallenstein – 12 años – Familia Loki.]

Fuerza: F 315.

Resistencia: E 401.

Destreza: D 626.

Agilidad: D 602.

Magia: B 701.

Hunter: I.

Espadachín: I.

Ariel.

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Entonces... soy Aiz Wallenstein.

Llevo 2 años en la familia Loki, y ahora estoy en el [Lv; 2].

Desde hace mucho tiempo, busco poder. Quiero poder para obtener la fuerza para matar a los monstruos. No me interesa nada mas solo deseo poder para matar monstruos.

Como siempre, estaba haciendo entrenamiento de esgrima en vigilancia de Rivéria.

Rivéria es una de las aventureras más fuertes en mi familia. Su principal ocupación es la magia y constantemente esta haciendo trabajo de llevar a la familia junto a Finn y Gareth.

Hice muchos avances, había terminado con un grupo completo de monstruos en un piso. Luego Rivéria dijo que deberíamos salir, pero yo no quería. Aun podía continuar, pero de nuevo ella dijo que debería descansar, y no puedo negar por ahora.

"Acepte, y empezamos a regresar".

Sin embargo, de repente... alguien apareció dando un salto.

"Plac". – Sus pies se estrellaron contra el piso, y estaba delante de nosotras. –

Aunque le avise a ella antes de que saltara, Riveria había quedado impactado, como si la llegada hubiera sido muy de sorpresa.

"¿Pasa algo Rivéria?" – Le pregunte. – Ella se limito a tomar mi hombro. –

"¿Este era un enemigo?" – Ante ese pensamiento saque mi arma, y la apunte hacia él, pero Rivéria me detuvo.

"Baja el arma Aiz".

– Obedecí. –

Ella le pregunto algo y el respondió con palabras simples.

Luego de eso Rivéria dijo que deberíamos irnos, empujando un poco atrás de ella. Pensé que estaba asustado por el chico, así que le pregunté. – Ella negó. – Bueno, fuese lo que fuese no era algo que me importase mucho.

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Al día siguiente, estaba siendo capacitado por Gareth. Normalmente el es mas del tipo de luchar en vez de las palabras, pero por petición de Rivéria, estábamos haciendo practicas de combate.

¡No podía aguantar más!

Decidí escapar, utilizando Airiel cree una distracción de papeles. Corrí por el pasillo. Gareth salido al instante con su hacha que había caído de lado.

El estaba listo para derribar algunas puertas en la persecución, pero no quería ser atrapada. Di vuelta por el pasillo y salte por la ventana.

Aiiiiiiiiiiiiz!!!

El corrió, atravesó de la vuelta del pasillo mientras yo ya estaba abajo. Salte a través de la pared que protegía la sede para evitar los guardias de la entrada.

Aun suspendida en el aire, vi un cabello blanco un poco lejos hacia mi derecha.

Era el chico de ayer en la mazmorra. Lo mire solo por un segundo, y al mirarlo bien...

"Él estaba mirándome". Tenia una sonrisa mientras miraba como salte el cerco. Pero pareció despreocupado, y continúo caminando.

Pero... y... ¿Qué acaso esa no es la dirección para la entrada a la mansión?

– ¿Por qué se dirige ahí? – No lo sé. – Pero, no importa. –

Fui a la mazmorra a practicar por mi misma. Ningún monstruo iba esperar que me hiciera más fuerte.

– Diablos!! –

Cuando estaba en la entrada de la mazmorra algo me agarro, y me levanto. Era Gareth, parecía bastante molesto por haber escapado de él. Le dije que estudiar mas era aburrido y que prefería continuar entrenamiento de espadas, pero el se negó.

"Debes nutrir tu mente para ser más fuerte". Las fuerzas y las tácticas son igual de importantes Aiz.

El parecía estar regañándome. En estas situaciones solo puedo aceptar eso.

Sabía que tácticas y habilidades son importantes, pero de verdad.

"¿Cuánto tiempo más debía estudiarlo?".

Lo e echo por un año. – "¿Acaso eso no era suficiente?" –

* Gruñido. *

Fui llevado por Gareth a la sede.

– "Pero... ¿Qué?" –

Cuando regresamos, Finn estaba caminando junto a ese chico.

Lo mire desde lejos en la ventana de arriba. Creo que esta vez no me ha notado.

Finn estaba bastante serio mientras decía algunas palabras, y luego nada. – Loki trato de morder al chico y el la detuvo con su mano en su frente. Loki se cayó como indefensa, aunque por alguna razón estaba roja.

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Al dia siguiente algo muy raro paso. La familia Freya estaba mudándose. Fue una gran noticia en la ciudad.

"¿Qué está sucediendo?" – Personas estaban preguntando, ¿porque estaba ocurriendo esto? – Pero la familia Freya mantuvo su silencio. – La diosa Freya también estaba de la misma manera.

Cuando fui a la sede por curiosidad, las puertas estaban totalmente cerradas.

Era un palacio de color blanco con un gigante jardín, tal y como lo recuerdo cuando estaba aquí con papá y mamá, pero la diferencia era que estaba totalmente desértico, y las puertas estaban cerradas.

Cruce la gran pared que dividía la calle de la mansión, y entre. No había nadie. Estaba desértico.

"Supongo que solo se aburrieron del lugar". – Fue eso lo que pensé. –

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Al siguiente día el chico apareció de nuevo por la mañana. Hablo algo con Finn, y luego se fue.

Rivéria quien también se había unido a ellos repentinamente, se volvió hacia la mansión.

Luego de eso ella vino hacia mi, y dijo que tenia tiempo para una secion de calabozo. – "Estoy bien con eso, pero sentía algo de curiosidad". –

"¿Que hacia ese tipo aquí?" – Le pregunte a Riveria. – Ella me respondió, se llama Bell Cranell.

– El se acababa de unir a la familia. – "¿Entonces es un novato?" –

– Ciertamente, no parecía un novato por haber llegado al piso 11 ese día. –

"El no es un novato". – Riveria respondió. –

"¿Entonces, que nivel tiene?"

"No lo sé, Aiz".

El tipo era un misterio, pero... "¿Por qué me debe importar?"

– Mejor, iré a entrenar. –

– El resto de los días, Bell Cranell apareció, en mi grupo, en secciones de entrenamiento, y a veces en sesiones de estudio. –

– Aunque por lo general se la pasaba haciendo nada. –

Por ejemplo, al momento de las batallas contra los monstruos, se quedaba con los ojos cerrados en la esquina. Durante las sesiones de estudio, parecía estar durmiendo.

"¿Qué? ¿Por qué él puede dormirse en medio de una sesión de clases?" – Le pregunte a Rivéria. –

"No estoy dormido. Solo estoy escuchando en silencio".

"Mentiroso". – Le mande una mirada molesta. –

El negó. Luego de eso le dijo a Rivéria que parara, y empezó a explicar muy resumidamente cada cosa que había estado tratando de memorizar.

– ...

– Para aprenderse todo eso en tan poco tiempo, el tiene una buena cabeza sobre sus hombros. –

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Un día ocurrió otra cosa. Finn me llamo.

"¿Qué pasa finn?" – Le pregunte rápidamente. – Yo ya quería irme a entrenar, por lo que esperaba que no fuere otra sesión de estudio con la profesora Rivéria. Pero, lo que me dijeron me llego de sorpresa.

"Harás una misión, y el será tu acompañante".

El tipo de pelo blanco saludo con la mano sin cambiar esa expresión de – "no pasa nada la verdad". –

"Este tipo no me da muy buena espina".

– Luego de que pusiera mi mirada de regreso a Finn el empezó otra vez. –

"Me gustaría darles detalles, pero el gremio se encargará de eso".

– Fuimos al gremio, y entramos a un lugar al que nunca había ido. Un dios de cabello gris se posaba en un trono. –

La expresión seria cambio levemente cuando nos vio entrar.

"Estas aquí". – El dios hablo. –

"Dios Urano". – El chico respondió. –

Al parecer el dios y Bell Cranell ya se conocían. Se saludaron, me saludo y luego empezó detalles de misión.

– Al parecer ha habido un monstruo irregular en los pisos intermedios. Su nombre era el troll ensangrentado. –

"Confió en ti". – El dios le dijo eso al chico y luego el me dijo que nos pusiéramos en camino. –

– Pero no lo entiendo. El tomo la mochila que debía llevar yo como apoyo, y luego me dio una espada. –

"¿Mi espada?" – "¿No lo había dejado en casa?"

"La traje por ti, Aiz". Lucharas hasta que diga que te detengas.

– El me dijo que peleara. No era que no quisiera eso, pero... la dificultad de los pisos mas abajo era complicado si era solo yo. Aun así, creo que esta es una oportunidad. –

– Me las arregle para despejar camino rápidamente, haciendo uso mucho de Ariel como magia. Sin embargo, él dijo que estábamos yendo demasiado rápido. –

"No lo entiendo". – Le pregunte porque esto era muy rápido, pero el me miro un segundo y luego dijo, "continua". –

– Cuando atravesamos Rivira, momentáneamente descansamos y el saco comida. – "Me dio la mayor parte a mí, y se echó a dormir". Esta vez no lo iba a dejar escaparse así de fácil. –

"Oye!!"

"¿Qué sucede?"

"¿Cómo es que nos encomendaron una misión tan peligrosa a nosotros dos? ¿Quién eres realmente tú?"

– El se levanto lentamente dejando su peso sobre sus brazos. Su armadura plateada relució con la luz del día naturalmente echa por el calabozo. –

"¿Por qué?" – "Porque es peligroso para los demás si continua así". –

"Eso no es lo que..."

"Soy Bell Cranell, y soy un aventurero".

– ¡¡Eso tampoco era lo que quería escuchar!! – Este chico o se hacia el tonto, el era un tonto. Empezaba a preocuparme. – "¿Realmente estaba bien que nosotros fuéramos enviados?" "¿No hubiera sido mejor un grupo más grande?" – Y empecé a preocuparme aun mas cuando me dijo que seguiría peleando de aquí en adelante. –

– Este era el piso 18. Desde aquí las cosas iban a ser más difíciles y aun así... el me mando a luchar. –

– Ataque tan rápido como pude. Como siempre fui diricto a mi objetico para acertar el golpe mortal rápidamente. –

OoOOoOooOoOOh!!

– Balance mi puño y de repente... el monstruo fue rebanado. –

– Yo no lo había echo y estaba demasiado concentrada así que el movimiento de atrás me tomo por sorpresa. Luego una mano toma la mia, así que gire rápidamente. –

– El que me estaba sosteniendo era él. – "¿Por qué me detuvo ahora?" Después de tanto tiempo, y sentí que estaba empezando a dar lo mejor de mi, y que estaba mejorando para la siguiente actualización de estado. – "¿Por qué ahora?" – No se lo iba a preguntar, así que solo le dije lo que quería en ese momento. –

"¡Déjame luchar!"

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