¿Quien pone las reglas?¿Quien es el que decide que es lo bueno o malo?¿Quien es?...

Vivir una vida deseando vivir otra,callando lo que tu corazón te grita,mostrandoles solo lo que quieren ver,solo lo que soportan,acaso eso es bueno...

Ser quien realmente eres,permitirle a tu corazón decir y actuar,vivir y morir si es necesario por tus propias reglas, acaso es ser malo...

No lo se...no se que soy...no se que somos.

Se que hay amor...¿No es suficiente eso?...¿No alcanza como razón o como justificación?.

No dicen...En la guerra y en el amor todo se vale...Todo...¡Mienten!.No aceptan ese todo...esta restringido por su moral,esta limitado por sus conciencias.

¿Y tu como lo ves?¿Que rige tu vida?...¿Las apariencias?...O te pareces a mi...Das todo,arriesgas todo,luchas ante todo...Te entregas...

Aun lo dicen las escrituras...Si diese el hombre todo... por ese amor,de cierto lo menospreciarían.

No le temo al menosprecio,ni al juicio,la burla o el rechazo,ni siquiera a las consecuencias que se que me alcanzaran tarde o temprano.Solo le temo a una cosa...y ese es mi mayor miedo...eso me aterra.

Solo le temo a perderlo.

La miro, ahí sentada en la reposera.Descansa,sueña,el sueño eterno del fin.Me da pena,realmente es lo que siento,ella fue como un avecilla con el ala rota que vino a nuestro jardín a morir.

Ya no respira,no hay aliento en su boca,su aliento se marcho como su vida,huyo de su pecho el soplo del creador y ahora solo es un envase,una envoltura,un deshecho.

Me siento a su lado.Quiero ver la mascara mortuoria una vez mas,quiero entender sus actos,los que dirigen los míos,los que me susurran que hacer y como hacerlo.

Un mes,la pequeña flor se marchito en solo un mes,ya lo dije y lo dire,Margareth simplemente se dejo morir. Quizás el levantarse a su lado le fue suficiente,el verlo dormir por las noches valió su sacrificio,el poder decirle por un ínfimo tiempo...mio.

Maggie no lucho,ese mes cuando duplique el veneno,cuando vio abandonar toda fuerza de su cuerpo,cuando el dolor solo le permitía estar en cama,cuando a gatas hablaba y si lo hacia era su voz solo un susurro angustioso.

Me apeno,fue la única por la cual sentiría eso.Pero la pena no fue tan grande como para detenerme,ni sus palabras...¿Las de quien?Las de el.Thomas al verla extinguirse así,de a poco y dolorosamente,se arrepintió,trato de convencerme,casi me rogó,no lo soportaba,su alma es y sera siempre débil.Pero no,el limite había sido cruzado,no había vuelta atrás,no retrocedería...tome su vida,se la arrebate y hoy aquí sentada a su lado,veo la sombra lejana de lo que alguna vez fue.

-Ella...esta..-escucho decir con voz titubeante detrás de mi.

-Si,Thomas,ha muerto-le respondo,sencillamente,como si fuera un niño al que no le puedo dar detalles.

-¿Que haremos ahora?-me pregunta.Como siempre la decisiones las tomo yo,el solo obedece.

-Llama a una ambulancia,claro,es hora de actuar, de nuevo...-le respondo con una sonrisa un tanto amarga.

Y así lo hacemos.La ambulancia llega y nos dice lo que ya sabemos,ha fallecido.

Cuando volvimos de Francia hace 3 semanas así lo planeamos.

Decidimos terminar aqui con ella,en nuestro hogar.

Aquí, teníamos cierto poder que se nos diluía afuera,nuestras decisiones o mejor dicho la mías,cobraban otro peso en mi propio hogar.Es como si fuese fortalecida para llevar a cabo lo que diseñe en ese ámbito mortal,los gritos antiguos quizás me alentaban,la sangre vieja quizás me esforzaba,el dolor pasado quizás...me poseía.

Nuevamente investigados.

Y adivinen quien nuevamente...si,el bello detective MacMichael nos volvía a visitar.

Análisis,pruebas,autopsia.Igual a nada,no tenían nada.

El veneno era indetectable,no tenían rastros,fui astuta en borrar todos y cada uno.Era sospechoso,claro que si,pero sin pruebas las sospechas solo eran eso ,sospechas,no conducían a nada,no condenaban.

Respondí cien preguntas mas,entre llantos por mi cuñada,que por alguna razón,eran un poco mas sentidos esta vez, realmente nunca supe porque.

Thomas respondio también lo que ensayamos tantas veces.

Y al fin,luego de un par de meses,no había nada en nuestra contra.A regañadientes,dejaron el caso atrás. Podía palparse la frustración de Alan,mezcla de impotencia y de una decisión de hacernos pagar algún día,lo que el creía era nuestra culpa.

Otra vez ricos,muy ricos pero no libres.No se porque pero algo nos atrapo esta vez.Una cierta oscuridad nos siguió de ahí en adelante,un peso se poso sobre nuestras almas.Esta muerte nos cambio, quizás fue su indefensión,su inocencia...la culpa nos siguió esta vez,para no dejarnos mas.

Los años corrieron,7 mas.Llegamos al 2011.Esta vez administramos mejor el dinero.

Nos recibimos,yo era bioquímica.Thomas Arquitecto.

Formamos nuestra propia empresa constructora,era nueva pero se iba haciendo de un buen nombre de a poco.Mi hermano era inventivo, creativo y talentoso.

Con sus 30 años cumplidos,era el partido perfecto,el soltero mas codiciado de toda Londres.Su belleza estaba en su punto perfecto.Era apabullante,donde iba, donde estaba ,donde entraba el,todas las miradas lo seguían.

No se si el remordimiento o la culpa que cargaba,lo habían hecho un hombre oscuro y distante,silencioso y pensativo,pero eso no le quitaba atractivo en realidad esa postura suya lo hacia mas deseable,mas inalcanzable.Un hombre inconquistable,tan anhelado como inaccesible.

Nos amábamos,eso no cambio jamas.El me daba todo de el,a mi y solo a mi.

Esa noche,lo oí llegar tarde,sus creciente empresa,nuevos asociados y proyectos le quitaban gran parte del día.

-Lucille..ya llegue-se anuncio como siempre.

-Voy en un momento cariño-le respondo desde el baño.

Mi voz sonó un poco temblorosa,pues era así ,estaba temblando.Estaba asustada,aterrada.

Los cinco minutos de espera parecían hacerse eternos.Trate de controlar mi respiración que estaba tan agitada como mi corazón.

No podía ser y lo sabia,era muy cuidadosa en ese asunto.Los dos habíamos decidido que así fuera.

Nunca,ni una sola vez,desde aquella primera,la pequeña píldora anticonceptiva había sido postergada o olvidada,era casi obsesiva con este asunto y ahora...

Suspire,no podía ser,solo era una falsa alarma,no podía ser.

Reuniendo toda la fuerza que pude,tome la varilla,la acerque hasta mi y mire.

Un sollozo se escapo de mi boca,un no incrédulo y desesperado.

Con 32 años,lo estaba,y era de el...de mi hermano.

Las lagrimas no tardaron,llenaron mis ojos,empaparon mis mejillas¿Como podía ser? Había sido tan cuidadosa,tan...¡Dios!¿Porque?¿Era una burla?¿Un castigo acaso?...¿Que?

Lave mi rostro y respire profundo, debía informárselo a Thomas.¡Diablos!

Maldije un par de veces mas en voz baja y luego salí.

Thomas,ya se había quitado el saco,y se había aflojado la corbata.

Por un momento me deje perder en su impresionante belleza.Sus ojos claros me miraron interrogantes.

-¿Sucede algo hermosa?-me dijo con una sonrisa que podría resucitar a un muerto de tan poderosa que era.

De nuevo respire aun mas hondo,saque de detrás de mi espalda lo que traía en la mano.

Se lo mostré,el pequeño test de embarazo con el increíble resultado positivo.

Solo fueron dos palabras las que dije,pero eran de esas palabras que lo cambiaban todo.

-Estoy embarazada-.