XII
—Tengo que admitir que no me esperaba eso. —Arrugo la nariz—. Esas disculpas por parte de las chicas son más falsas que nada que mi estabilidad emocional.
—De tu estabilidad emocional no sé nada, pero sobre las disculpas seguramente lo hicieron porque las regañaron —interviene Jackson—, hasta puede que les dijeran que si no se disculpaban las sacaban.
Tiene razón, seguramente les dijeron eso, incluso hay la posibilidad de que el mismo chef las haya amenazado. Siento que pudo tener más raiting si hubieran dejado que el chef siguiera enojado o que estuviera esa tensión en el aire. Es que fue absurdo lo que ellas estaban argumentando, hasta mamá pudo hacer mejor ese platillo, incluso Jungkook; a veces me sorprende ver como en serio se meten a esos programas y no saben una mierda de la cocina. Apenas volvimos a poner el programa, la razón es que debía comer y Jackson tuvo que ir por mi comida y mis medicamentos; aunque insistí que se trajera algo para que comiera conmigo. Una vez que acabamos él decidió poner de vuelta el programa.
—Ya quita esa temporada, veamos donde le rompe el plato a uno de los participantes. —Sonrío—. Se ponen bien violentos.
Jackson empieza a cambiar el programa; sin embargo, de la nada se queda estático. Me quedo atento a cada movimiento hasta que escucho que abren la puerta, ¿no se supone que estábamos solos? Eso me había dicho Jackson, joder eso no puede ser bueno. Con algo de esfuerzo me inclino para ver quien abrió la puerta y veo al señor Kim totalmente enojado caminando hacia nosotros. Jackson de inmediato se levanta de su silla y le hace una reverencia al señor; jamás pensé que fuera tan respetuoso, yo no me puedo inclinar, pero supongo que eso se pasa porque estoy malito o eso creo, no sé, solo espero que se vaya pronto el señor para poder ver la otra temporada de MasterChef, esa parte del plato me encanta. Bueno, supongo que también la podemos ver juntos, sería una buena idea conocer más a la persona que me estuvo cuidando todos estos días, ¿no?
—Yoongi —espeta.
—Señor. —Sonrío—. Hola, que bueno que vino rapido. Estábamos por ver la otra temporada de MasterChef, siéntese. Veamos la televisión juntos.
Le hago una señal de que se siente en la cama, estoy seguro que si cabemos si me aparto un poco, así podremos ver la televisión los tres. Aunque veo que no se acerca a la cama, sigue viéndome con una expresión molesta ¿ahora qué hice? Pocas veces me ven así y usualmente es para regañarme, pero estoy seguro de que hoy no hice nada, incluso le hablé bien. Quizás solo vino por algo y debe irse, posiblemente se siente molesto por eso, pobrecito; no tendrá descanso de nada, cuando me recupere le haré un pastel para agradecerle por todo lo que hizo por mi.
—¿No se va a quedar? —Pregunto desanimado—. Jackson apenas iba a poner otra temporada de MasterChef, es una lástima, sea en otra ocasión, ¿no? Señor.
—¿Si recuerdas lo que me gritaste por llamada? —Lleva su mano a su nuca.
En ese momento recuerdo lo que dije y abro los ojos abruptamente mientras abro ligeramente la boca; sabía que se me estaba olvidando algo. Intento sonreír un poco en una acción de aligerar las cosas, pero solo consigo hacer una mueca. Si cuando no llueve diluvia. Tengo una suerte para hacer tonterías y después no acordarme, ahora no puedo hacerme el tonto y fingir que nada sucedió. Mi plan era no hacer enojar a este hombre para conseguir salir vivo de este lugar y solo la jodi toda.
—No soy el mismo de hace unos minutos.
—Te quiero fuera de este lugar, Jackson.
Veo como el nombrado se debate entre quedarse e irse, incluso me mira como pidiendo ayuda para saber que hacer. Supongo que esto debo arreglarlo yo, fue mi culpa que ahora el señor Kim viniera y este molesto. Le hago una señal, a Jackson, para que se vaya. Me quedo viendo fijamente al señor para saber que hacer en esos momentos. Una vez que escuchamos como sale Jackson, el hombre frente a mi camina hacia la cama y se sienta a mi lado. Bien, Yoongi, es momento de usar ese método de manipulación que te enseño Jungkook; no le puedes fallar a tu mejor amigo. Debes usar cada técnica que se te mostró, el objetivo es sobrevivir estas horas antes de volver a casa.
—¿Usted verá la televisión conmigo? —Tomo su mano y le sonrío—. ¿Regreso de sus compromisos para estar a mi lado?
Él cambia su expresión y me mira detenidamente por varios segundos. Eso es, muerda el anzuelo. Jungkook estaría orgulloso de mí si ve como estoy actuando en estos momentos.
—Sabes a la perfección por qué vine.
—No sé. —Hago un puchero—. Le digo que ya no soy el mismo de hace unos minutos.
Antes de darme cuenta, él ya está inclinado sobre mí, se encuentra muy cerca de mi cuerpo. Dios, en verdad este hombre huele bien, tanto que quisiera hundir mi rostro en su cuello, si se lo digo ¿dejará de estar enojado? Bueno, será mejor que omita ciertos detalles, pero puedo decirle lo bien que huele. No puedo perder la oportunidad para conseguir que deje de estar molesto; además, no sé lo que pueda hacer cuando está en ese estado, lo mejor que puedo hacer es controlarlo.
—¿Le he dicho que huele bien? —Intento sonreír de forma tierna—. Usualmente no me gusta el aroma a tabaco, pero le queda bien ese toque.
—¿Estás coqueteandome?
Siento que mis mejillas se sonrojan de golpe. De acuerdo, no pensé que él llegaría a tomar esto como un coqueteo, pero está más que claro que así suena. Que vergüenza, seguramente debo estar viéndome como un puberto desesperado. Este hombre debe de tener novia y yo aquí diciéndole estas cosas. Por desgracia no me puedo mover para salir corriendo y ocultarme por la vergüenza, huir de situaciones de estrés o incomodidad es mi pasión. Decido apartar un poco la mirada para guardar, aunque sea, una poca de mi dignidad. Esto ya es demasiado embarazoso. Debo pensar mejor en lo que voy a decir.
—No... yo solo... perdón es que...
—Porque si me estás coqueteando creo que puedo dejar de estar enojado solo un momento. —Me obliga a mirarlo nuevamente, roza mi nariz con la suya y de un momento a otro siento que sujeta mis muñecas contra el colchón—. Ya te he dicho que debes ser más gentil al hablar, pero veo que no me estas obedeciendo, ¿quieres que te enseñe como se debe hacer?
—Señor —digo con hilo de voz, quiero decir algo más, pero las palabras quedan atoradas en mi garganta.
—Adoro cuando me dices señor. —Siento como su aliento golpea contra mis labios—. Pero también me encanta escuchar mi nombre salir de tus labios.
Siento que mi respiración se acelera con violencia al escucharlo decir eso. Una parte se mi me sice que no debería permanecer en esa posición, que debo alejarme, pero no puedo apartarme. Aunque estoy seguro de que si pudiera hacerlo no lo haría, aún cuando esa voz en mi cabeza me pide hacerlo. La sola presencia de este hombre me cautiva a niveles que no debería ser correcto. Siento como vuelve a rozar su nariz con la mía y suelto un suspiro tembloroso, esto debe estar mal en muchos sentidos, ¿no? Pero ¿quién me puede decir que es lo que está bien en estos momentos? Nadie puede explicar lo que siento, ni ahora, ni cuando lo veía en la dulcería. Él está a punto de hablar cuando escuchamos como la puerta se abre de golpe y aparece Jackson con una gran sonrisa en el rostro.
—Encontramos a quien hirió a Yoongi.
El señor Kim se aparta de mi y mira fijamente a Jackson, escucho como le pide que lo lleve con el sujeto. Antes de que tan si quiera de un paso tomo su mano y lo obligo a permanecer a mi lado. No debe ir, quizás pueda salir herido y no puedo permitirlo. Ese hombre me hizo esto a mí, ¿y si esta vez consigue su objetivo de matar a alguien? No quiero que le pase nada al señor Kim.
—No vaya, señor, por favor. —Me aferro con fuerza a su mano—. Le puede pasar algo malo y yo.... no vaya.
—Yoongi, ese hijo de puta te lastimó —dice con molestia—. No voy a dejar que esto se quede así.
—Pero le pueden hacer daño a usted también —digo desesperado—. No vaya, por favor, no vaya. Me portare mejor, le diré Taehyung Hyung, pero no vaya... se lo suplico.
De solo imaginar que él puede resultar herido por mi culpa, hace que mi pecho se estruje. Él solo ha intentado cuidarme, ¿no? No es su deber exponerse de esta forma. Si puedo evitar que haga eso lo haré, así tenga que abrir mi herida para que él se quede todo el tiempo a mi lado. Con algo de esfuerzo hago que vuelva a estar sobre de mi, solo que esta vez deja su antebrazo junto a mi cabeza con el fin de no aplastarme. Si él está buscando no lastimarme, ¿por qué quiere exponerse así al peligro?
—No vaya —susurro—, quédese conmigo.
—Yoongi.
—Por favor, Taehyung Hyung. —Sujeto con más fuerza su mano—. Sé que quiere hacer algo en contra de los que me hicieron esto, pero yo preferiría que lo dejemos en el olvido. Estoy bien, estoy a salvo ahora, gracias a Jackson y a usted.
—Ellos pudieron acabar con tu vida. —Puedo ver en sus ojos una gran desesperación—. Yo...
—Estoy con usted... señor —murmuro—, no me iré a ningún lado. Todo estará bien.
Puedo ver un gran debate en sus ojos, es como si algo lo estuviera destruyendo por dentro. Con un poco de miedo acerco mi mano hacia su rostro y lo acaricio con lentitud, eso parece sacarlo de su debate. Su mirada cambia de forma drástica y por un momento eso me hace sentir aliviado.
—Bien, solo esta vez te haré caso. —Junta su frente con la mía—. Deja que hable con Jackson, es sobre la cena ¿si? El doctor me dijo algo más sobre tu dieta y quiero asegurarme de que todos están al tanto.
—¿Promete que no me miente? —Hago un pequeño puchero antes de volver acariciar su rostro—. No quiero que me engañe.
Jamás he sido así, no sé que me orilla a portarme de esta forma con este hombre. Papá seguramente estaría avergonzado de mi, simpre ha odiado este tipo de comportamiento, no le gusta verme de esa forma, como si fuera una especie de niño. Aunque al señor Kim no parece importarle, creo que le gusta eso, incluso accedió a quedarse conmigo. Veo que una sonrisa se posa en sus labios y, sin darme cuenta, deja un diminuto beso en la comisura de mis labios. Esa pequeña acción me deja sin aliento. Se aparta lentamente de mí y toma a Jackson del hombro para caminar juntos a la puerta.
—Vuelvo en un segundo, pequeño, me aseguraré de que todo esté en orden.
Asiento con la cabeza para tranquilizarlo y suelto un suspiro una vez que ambos salen. Bien, definitivamente tengo un problema con ese hombre.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top