XI
Él me mira durante varios segundos, incluso tengo la necesidad de repetir la pregunta por si es que no me escuchó, pero evito hacerlo, no quiero que piense que le estoy faltando al respeto o algo por el estilo. Mientras tanto aprovecho su cercanía para ver a detalle su rostro, tiene varios lunares; sin embargo, el que más me gusta esta cerca de su boca, es lindo, podría decir que es incluso adorable. Me gustaría verlo aún más de cerca, creo que le luce hermoso y sensual, ¿se enojara si se lo digo? Es un simple cumplido, algo inapropiado aunque eso no quita que sea una especie de halago, pero no quiero incomodarlo.
-Yoongi, he estado afuera de la dulcería porque llamaste mi atención. -Empieza hablar de forma suave-. Te vi hace mucho tiempo, cuando fuiste con tu amigo a comprar unas paletas. Quede fascinado contigo, tu belleza, tu voz, todo; después me enteré que trabajarias ahí y tuve que controlarme para no ir desde el primer día.
-¿Eh? Espere... ¿cómo se enteró que trabajaría ahí? -Frunzo el ceño.
Hay muchas cosas que no entiendo de lo que dijo y que por supuesto me desconciertan; pero nadie más que mi madre y Jungkook sabían sobre ese trabajo. No entiendo cómo pudo enterarse de ese dato, no es como si Jungkook y yo hubiéramos gritado cuando conseguí el empleo, a Kookie no le gusta decir nuestros planes en voz alta por si alguien nos está escuchando. Pasaron varios días hasta que mi propio padre se enteró sobre esto a ño cual no se opuso, pero insistió en saber el lugar exacto donde estaría trabajando. Así que es demasiado extraño que este hombre se haya enterado de ese detalle, hay tantas cosas que quiero preguntar y al mismo tiempo tengo miedo de saber la respuesta; quizás sea algo demasiado turbio o tal vez no. Ya me esta doliendo la cabeza de pensar tantas posibilidades. Veo como levanta la mano y empieza acariciar mi mejilla, su camisa se levanta un poco y puedo ver un poco el tatuaje que llega hasta su muñeca, ¿qué será lo que tiene tatuado?
-Tengo mis fuentes -dice de tal manera que deja en claro que no quiero que replique.
-Eso significa que no me dirá. -Arrugó la nariz-. Bien, supongo que será en un futuro que me diga la respuesta. Ahora, sobre eso que dice que llame su atención...
-Lo mejor es que descanses. -Vuelve a rozar mi nariz con la suya y yo me tenso en mi lugar-. Después hablaremos de eso.
No puedo permitirme hablar en otro momento, debo sacar la mejor información ahora que está de buen humor. ¿Qué tal si después no nos volvemos a encontrar? No pienso quedarme con la incógnita y estoy seguro que Jungkook no me dejará ver a este hombre una vez que sepa toda la verdad.
-Señor, por favor. -Hago un puchero-. Solo deme unas respuestas más o pensaré que esto es un intento de secuestro.
-Si no haces lo que te digo esto si se volverá un intento de secuestro y mañana no te llevaré a tu casa.
Automáticamente me quedo en silencio, no puedo joder esto después de que lo convencí de que me llevará a mi casa. Asiento con la cabeza para que sepa que haré lo que dijo, sin embargo, no sé mueve; se queda justo donde está, incluso llega a acariciar de vuelta mi mejilla. Creo que me he sonrojado, porque vuelve a sonreír, él acerca un poco más su rostro al mío; sus labios empiezan a rozar ligeramente mi mejilla y solo soy capaz de sujetar con más fuerza su mano. Su aroma es tan envolvente que creo llega a ser adictivo; usualmente no me gusta tanto el aroma a cigarrillo, pero por Dios, podría volverme adicto a este si sigo percibiendo ese aroma de este hombre.
-Si vuelven a decirte que eres mi pareja dirás que sí -susurra contra mi piel-. Si alguien te pregunta si estás saliendo con alguien dirás que sí, les mencionaras el nombre de Vante.
-Sí, señor.
Las palabras salen por si solas, pero no pienso contra decirlo, algo dentro de mí me suplica que lo obedezca en todo lo que me pida. Quizás sea esa aura de autoridad que tiene, tal vez sea ese aroma que hace que quiera hundir ni rostro en su cuello o quizás solo sea el sonido de si voz; pero no podría decirle que no en estos momentos. Aunque hay otra parte que me grita que tenga cuidado, mas de suceder algo malo con este hombre ¿no me hubiera ocurrido desde antes? Digo, tuvo millones de oportunidades para atacarme. Ahora hay una parte más grande que me pide confiar en él. Esto debe estar muy mal, demasiado, pero ¿eso importa? Ya no creo que se pueda poner peor mi vida en estos momentos.
-Buen chico. -Siento como deja un diminuto beso en mi mejilla y se aparta de mí-. Tendrás todas las respuestas que necesitas, solo dame un poco más de tiempo. Duerme, me encargaré de tu regreso a tu casa y también de que Jackson te traiga la cena.
-¿Ya no estará aquí? -Pregunto inquieto.
-Volveré muy tarde, debo asegurarme de que estarás bien. -Hace que suelte su mano-. Descansa, Yoongi.
-No tengo sueño -digo con indiferencia-. Ya dormí mucho, además, creo que quiero ir al baño de vuelta. -Hago una mueca-. ¿Puede venir Jackson a ayudarme?
Creo que no debí tomar más agua cuando vino el doctor, ahora tengo que mear de vuelta. Aunque siento que no debi decirle a Taehyung -se siente tan raro decirle por su nombre-, estoy seguro de que se va a quejar por eso, se pone todo loco con cuestión de que yo me mueva de mi lugar. Quizás debía esperar a que él se fuera para ir al baño, así me hubiera parado yo para caminar un poco.
-Te llevaré yo. -Siento como pone sus manos sobre mí-. Espero que...
-¿Si sabe que cuando se vaya y tenga que volver a ir deberá venir Jackson o tendré que ir sólo? -Lo cuestionó-. Y no estará mal, vaya por Jackson, estaré bien con él.
Él me mira fijamente durante varios segundos, tal vez se enojo, pero tengo razón en lo que dije. Además, ¿qué espera? ¿Debo aguantarme hasta que él llegue? ¿Quiere usé esa mierda que me quita la poca dignidad que tengo? Obviamente no, prefiero mil veces que Jackson me cargue hasta el baño y de ahí de regreso o mínimo me arrastrare hasta el jodido baño. Aunque el doctor dijo que podía moverme muy lentamente, pero que podía hacerlo, solo necesitaria que Jackson me ayude a caminar hasta el baño.
-Todavía tengo tiempo para llevarte al baño.
-Bueno, aun así, llamele a Jackson. -Me encojo de hombros-. Me gustaría platicar con mi amigo.
-Bien, solo deja que me cambie y le llamo. -Camina hasta el armario qué está en la habitación-. No puedo irme así.
Tan solo veo como empieza a quitarse la camisa y siento que mis mejillas se sonrojan con violencia. Decido apartar la mirada para darle un poco de privacidad. No puedo estarlo espiando mientras se cambia, eso no es muy educado de mi parte; sin embargo, no puedo evitar querer ver que tantos tatuajes hay en su cuerpo, yo recuerdo que cuando lo ví esa noche sus brazos estaban cubiertos de estos, pero no logre ver a detalle como eran. Aunque no puedo estar pensando en eso, por mis muertos, debo calmarme.
-¿Yoongi?
-Dígame, señor.
-Primero, te dije que puedes decirme Taehyung. -Ríe un poco-. ¿Puedes verme?
¿Cómo le digo que eso va a estar difícil porque posiblemente no lo mire de forma decente? Además, algo me dice que no se ha puesto su camisa y no quiero que vea mi sonrojo, de acuerdo, somos hombres; pero eso no evita que me ponga totalmente tímido ante esta situación, sin mencionar que el que sea hombre no quita que no tenga emociones ni sienta. Aunque es extraño, jamás me he puesto nervioso cuando Jungkook se está cambiando, tiene un buen cuerpo, pero para mí es totalmente indiferente. Escucho que vuelve a decir mi nombre y debo contenerme para no decir una maldición. Me giro a verlo y él está apenas abotonando su camisa, en su pecho puedo notar algunas palabras tatuadas.
-¿Te ocurre algo? -Pregunta mientras se termina de arreglar su camisa.
-Por favor, dígame que no se cambiará de pantalón.
-¿Quieres que lo haga?
-¡No!
Él vuelve a reír y yo siento que mi rostro se vuelve aún más rojo. Me debo ver como un completo idiota, él se debe estar divirtiendo con la situación; me vengare algún día. Camina hacía a mí nuevamente, posiciona sus manos a cada lado de mi cabeza y a cerca su rostro a centímetros del mío. Muy cerca, demasiado cerca ¿a caso no conoce el espacio personal?
-Bien, pequeño, me iré -susurra-. No te portes mal, ¿de acuerdo?
-Ni al baño quiero ir ya -digo nervioso.
-No dejes que Jackson se te acerque demasiado o me enojare, ¿quedó claro? -Roza su nariz con la mía-. Te llamaré en un rato más, Jackson te dará un celular.
Aún en mi trance una duda surge en mi cabeza. Mi celular no lo tengo conmigo, ya era bastante raro que Jungkook no me estuviera atacando con llamadas. Además, debe de estar en está casa, ¿cómo mierda se iba a comunicar con él si no era de esa forma?
-¿Dónde está el mío?
Desde que desperté me quedé con esa duda. Si lo tuviera a la mano ya le hubiera llamado a Jungkook; estoy seguro de que mi amigo hubiera dicho que se trata de un ataque terrorista y que deben mandar unidades militares a esta zona. Aunque eso implicaría que después terminara siendo arrestado por mentirle a la autoridad; no quiero que llegue a esos extremos, así que estuvo bien que no tuviera ni celular. El señor Kim me mira serio durante unos segundos, así que frunzo el ceño; esto no me da una buena señal.
-Lo tiene alguien, te lo devolverán mañana. -Suelta un suspiro-. No tenía otra opción.
-Sigo insistiendo que ir al hospital era otra opción -susurro mientras desvío ligeramente la mirada-, pero como diga.
-Muy gracioso.
-¿Verdad? Y eso que no me a visto cuando estoy borracho -me burlo-, hasta bailar sobre la mesa me pongo.
-Tú no bebes -vuelve a rozar su nariz con la mía antes de alejarse.
-¿Nani?
Él no responde, tan solo me sonríe un poco antes de salir de la habitación. Esto es tan desconcertante, en verdad que no entiendo como me esta pasando esto a mi ¡a mi! Joder, yo soy el personaje de relleno en todas las historias, yo soy de esos de los que observan no de los que les pasan cosas. Escucho que la puerta ser abierta y cerrada con delicadeza, Jackson entra con cara de estar asustado.
-Que te lleve al baño, pero que no debo verte.
-¿Nani? Por dos.
Jackson se quedó conmigo después de llevarme al baño, encendió el televisor y acordamos en ver algo que nos gustaría a los dos; eso significa que nos pusimos a ver Master Chef. Adoro ver como los regañan porque no saben cocinar, que idiotas. No mentiré, me encanta ver como se ponen a llorar por los regaños del chef.
-¡¿Cómo mierda no sabe que son los frijoles refritos?!
-Quiero pegarles con un zapato -me quejo-, ojalá las regañen, están bien idiotas.
Jackson esta a punto de responder cuando escucha que su celular empieza a sonar, suelta un bufido y lo saca, pero no aparta la mirada de la pantalla. Regreso mi vista al programa y sonrío al ver como empiezan a regañar a las chicas porque pusieron frijoles enteros a su platillo. Es que esos no eran frijoles refritos, hasta yo lo sé. Escucho como Jackson grita un "¿Qué mierda quieres?" Y después se queda en silencio, me giro a verlo cuando veo que le pone pausa al programa.
-¡Oye! Yo estaba viendo eso -lo reprendo-, si estas hablando con alguien es tu problema, deja que siga.
-Te hablan -dice en voz baja mientras me entrega el celular-. Por favor, has que no me maten.
-¿Eh?
Él no me dice nada, tan solo insiste que tome el celular. No sé quién sea, pero definitivamente también le voy a hablar como Jackson lo hizo, estoy viendo mi programa -ese para gente súper adulta y sofisticada-, y vienen a joderme el día; suficiente tengo con el dolor en mi costado como para que venga a molestar con la perra llamada. Le arrebato el celular a Jackson y lo llevó hasta mi oído.
-No sé quién seas, pero ya me hiciste enojar -siseo.
-No, Yoongi, no digas eso.
-¿Por qué te hice enojar?
Me giro a ver a Jackson y él me hace señas de que no hable así. Mierda, se me olvidaba que me iba hablar el señor. Ay, ¿qué hago? Ya la jodí, la contra rejodí, ya puedo ir saludando otra navaja o es posible que esta vez sea una puta pistola. Es que no me aviso este baboso de quien se trataba.
-Hola, señor -digo con voz nerviosa-, yo...
-Te dije que debes ser más respetuoso -su voz suena bastante sería-, creo que debo evitar que estés mucho tiempo con Jackson.
-No, no, señor. -Sé que no me ve, pero aún así niego con la cabeza-. Es solo que estábamos viendo un programa, pero estábamos tan metidos en el programa que no pensamos que era usted. -Miro molesto a Jackson-. Además, este baboso no me dijo que era usted, por eso respondi mal.
-¡Debiste suponerlo!
-Voy a suponer que cuando me recupere te daré una patada en el culo, advertido estás.
Jackson empieza a hacerme señas de que me va a matar y yo hago lo mismo. Seré pequeño, pero definitivamente bajo a este idiota a patadas y lo cacheteo; yo no me ando por las putas ramas. Todo fue culpa de Jackson, debió advertirme todo esto, pero no lo hizo; no le regalaré más dulces cuando vuelva a la dulcería.
-Suficiente, Yoongi, ¿qué te he dicho?
-Que no me portara mal o algo así, pero pues no me puedo levantar para patear a Jackson -me quejo-, espere a que me recupere.
-¿De esta forma pagas mi amistad? Para la otra no te voy a dar cambio.
-Mando a SeungHee a que te lo pida, tiene una escopeta.
O eso dijo ella, que su abuela le había regalado la escopeta de su abuelo, incluso se supone que ella sabe usarla. También quiero aprender, pero siento que al momento de disparar me voy a ir de culo por la fuerza; mejor ni lo intento. Aunque quiero ver como dispara SeungHee, debe verse muy bien; como una de esos sicarios que aparecen en las películas.
-Yoongi, suficiente, no hagas que regrese a casa solo para reprenderte y de paso para golpear a Jackson.
-Pues venga -digo molesto-, ¡me da igual!
No espero a que responda y corto la llamada, le lanzo su celular de vuelta a Jackson y miro hacia el frente mientras me cruzó de brazos. A mí no me va a venir amenazar, no señor, ya soy demasiado grande como para que venga a amenazarme con venir a regañarme; ¿a caso me vio cara de niño de seis años?
-Ponle al programa, no creo que nos vuelva a molestar -digo como si nada.
-Vamos a morir.
-No creo. -Le resto importancia-. Ponle de una vez, o te quito el celular para llamarle a Jungkook y que venga por mi.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top