—KyungSoo tenía razón, no estaba enamorada— hablaba el oficial Kim, apoyando su rostro entre sus manos, dio un ligero bostezo.

El oficial Kim JongIn estaba sentado junto al oficial Oh en la recepción, listos para tomar nota de denuncias sobre delitos menores.

—Pero tienes que admitir que la escena final, dio mucho para pensar— comentó SeHun, imitando la posición de JongIn, con los codos recargados sobre la superficie plana más cercana, con el mentón encajado sobre sus palmas.

La puerta principal de la estación se abrió y tan pronto SeHun se había acomodado en aquella posición, volvió a sentarse recto y a guardar la compostura, JongIn lo imitó.

—Buenos días, director Kim— dijeron al unísono el par de oficiales.

—Buenos días, chicos— el director JunMyeon regresó el saludo sin entretenerse demasiado en el camino, llevaba el abrigo en uno de los brazos, en otra de sus manos llevaba el periódico local y un vaso alto desechable de café. Les había dirigido apenas la mirada, estaba apurado por llegar a su oficina, como se esperaría del director del departamento de policías de la gran ciudad.

Después de que SeHun y JongIn hubieran perdido el rastro del director Kim regresaron a tomar la cómoda postura que habían abandonado, también continuaron hablando sobre el final de temporada de la serie televisiva, pero tan pronoto como habían iniciado la conversación al respecto, la puerta principal del cuartel volvió a abrirse, esta vez para dejar entre ver a uno de los agentes principales de la estación.

—Buenos días, agente Park— volvieron a saludar al mismo tiempo.

—Oficiales— el agente Park hizo una ligera reverencia y sin tomarle demasiada importancia al saludo, siguió con su camino.

ChanYeol al igual que todos los días, llevaba el abrigo puesto, las manos ocupadas por dos vasos altos de café, seguramente el extra sería para su colega Byun.

El agente Park fue hasta la oficina donde sus investigaciones se llevaban a cabo, BaekHyun estaba trabajando en lo suyo, el joven agente Byun era puntual en exceso, solía llegar mucho tiempo antes de la hora de entrada formal. Él se excusaba diciendo que le gustaba tomarse su tiempo para iniciar labores.

—Buenos días— se anunció ChanYeol.

—¡Buenos días! — respondió animado el agente de castaño cabello, asomó su cabeza por encima de la computadora de escritorio y observó con entusiasmo como su colega llevaba un vaso extra de café —¿Eso es para mí? No te hubieras molestado Park, pero es realmente conveniente... resulta que la cafetera se dañó.

El agente Park soltó una risita mientras negaba con la cabeza —Te dije que debías cerciorarte de apagarla justo después de que terminar de usarla.

—¡Yo no fui el último en usarla está vez! — se excusó BaekHyun —Fue durante el turno de la noche.

ChanYeol levantó las cejas con sorpresa —De cualquiera manera, no es para ti.

—¿Vas a tomarte dos tazas de café? — preguntó el contrario con cierta molestia de saber que la bebida energizante no era para él.

—No— mientras hablaba, ChanYeol había dejado el par de vaso desechables sobre su escritorio, se había quitado el abrigo y lo había colocado sobre el respaldo de su asiento —Es para KyungSoo.

—¿Para KyungSoo? — se extrañó, el agente Byun deslizó su silla lejos del escritorio para poder ver mejor a su colega —Ese niño debe seguir dormido en casa ¿Por qué iba a necesitar café, KyungSoo?

—Es porque tuvo razón— comentó el agente tomando los papeles de su investigación en curso.

—¿Sobre qué?

—El final de temporada de Dark files— sonrió ChanYeol. Él mismo había visto en vivo y en directo la transmisión que causó revuelo en el bar la noche anterior.

—Viste una serie policiaca... vaya— BaekHyun se recargó cómodamente sobre el respaldo de su silla, poniendo sus brazos detrás de la nuca.

—Tenía que despejar mi mente un poco...— ChanYeol levantó uno de sus hombros y con un ademán de mano le indicó al agente Byun que estaba a punto de iniciar su trabajo para que no lo interrumpiera.

BaekHyun hizo lo mismo y regresó a su escritorio para seguir armando el cronograma de su propio caso.

ChanYeol por su parte, leía por décima vez el reporte del forense sobre las partes de cuerpo mutiladas, releyó el informe de los inspectores Kim y a cada renglón que pasaba, se convencía más que debía ir a la escena de crimen para investigar por cuenta propia.

Fue de esa manera que anunció su retirada de la oficina para ir hasta la escena del crimen, tomando una de las patrullas de encubierto fue directo hasta el bosque donde las pistas habían sido halladas. Llevó consigo una de las cámaras fotográficas, material para manipular cualquier pista que fuera a encontrar y cinta de advertencia.

El agente Park estacionó el coche en la entrada al bosque y caminó durante largos segundos hasta el punto exacto indicado en el reporte oficial. Vio que la cinta de advertencia seguía puesta, el lugar estaba intacto, los montículos de tierra seguían al lado de las zanjas que se habían cavado para obtener las partes de los cuerpos.

Estaba en el sitio correcto, así que de inmediato el agente Park comenzó a inspeccionar a gran detalle cada lugar aledaño, buscando en la corteza de los árboles cercanos, en la tierra, en las hojas caídas de los árboles, entre las ramas de los arbustos, bajo lupa y con lento detenimiento recorrió el área.

Pero tal y como temía, después de cuatro meses cualquier indicio de pista había desaparecido.

Y estando a punto de marcharse, recordó uno de los puntos clave que tomó de la discusión de los oficiales Kim el joven Do.

"...Encontrando el resto de las partes del cuerpo podríamos llegar a conocer la identidad de las personas..."

Volvió a pensar el agente Park, está vez se aventuró más adentro del bosque, en busca de algún indicio que le hablara sobre un rápido trabajo sepulturero. Sin perros de rastreo iba a ser difícil que el encuentro sucediera, pensó también que de haber más partes dentro del bosque el binomio canino los hubiera encontrado desde el primer día.

ChanYeol se rindió a los cientos de metros después, miró el reloj sobre su muñeca y se dio cuenta de todo el tiempo que había pasado en un lugar que ya no tenía nada para ofrecer a la investigación, una completa pérdida de tiempo.

El agente Park regresó a la estación, derrotado. Seguiría basando su investigación en los únicos reportes existentes. Iba a ser más lento de lo que pensó.

Cuando llegó a la estación de policías, el relevo de oficiales en el mostrador se había dado, ahora estaba otro par al frente, con aquello, el agente Park supuso que tanto JongIn como SeHun estarían en el cuarto de descanso perdiendo el tiempo.

—¿Encontraste algo interesante? — preguntó BaekHyun en cuanto escuchó la puerta abrirse.

—No— respondió ChanYeol derrotado —¿Cómo vas?

—Excelente— sonrió BaekHyun —Mandé un par de patrullas por unos sospechosos, los interrogaremos está tarde.

—Uyy— ChanYeol hizo una mueca de desagrado, otra de las cosas más largas después de obtener información inicial era lograr una confesión lo suficientemente concisa para llevar el caso a juicio.

—Tengo confianza— mencionó BaekHyun, dando una gran mordida a la rosquilla que había estado reservando —¡Oh! Y antes de que lo olvidé, KyungSoo dejó una rosquilla para ti.

ChanYeol observó a su compañero con gran escepticismo, giró la mirada hasta su escritorio y observó el recipiente plástico con el bizcocho glaseado y con una justa porción de jalea de frambuesa. El agente Park tragó duro, su estómago gruñó, por haber estado tan ensimismado en su búsqueda había olvidado pararse para comer.

—Y le dije que le trajiste café, así que se llevó el vaso— hablaba el castaño con la boca llena de pan.

—Está bien, gracias BaekHyun— el agente Park fue hasta la rosquilla y sin querer parecer ansioso por devorar el bizcocho, fue cauteloso con sus acciones.

—¿Dónde consigue esas delicias?

Entonces el agente Park a punto de darle una buena mordida a su postre se detuvo ante su recuerdo.

—¿Pero por qué trajo rosquillas? Él tenía razón.

—Dijo algo sobre reconocer el intento ajeno— BaekHyun se levantó de hombros y regresó a su trabajo de inmediato.

ChanYeol se mofo de aquello, era una sutil manera de restregarles a los oficiales que él había tenido razón. El agente Park degustó con placer su primer alimento de la tarde.

Y justo como había inferido el mejor detective de la estación, KyungSoo había usado la imposición del castigo por si él perdía como una manera de victoria.

—Lo hicieron bien, chicos, quizás en el futuro...

SeHun puso los ojos en blanco, totalmente irritado, pero encantado con su rosquilla con relleno de mantequilla de maní.

—¿Y entonces como crees que comience la siguiente temporada? — preguntó JongIn intentando encender la cafetera.

—BaekHyun descompuso eso— indicó el inspector MinSeok que había escuchado el rumor de las rosquillas recién horneadas.

—No puedo saber cómo va a iniciar algo de lo que no tengo antecedentes, tampoco leo mentes, JongIn— rio KyungSoo con diversión.

Los presentes en el cuarto de descanso rieron también. El chico de lacios cabellos negros observó el reloj sobre una de las paredes y se apresuró a despedirse.

—Ya que sé que saldrán con una excusa para no dejarme ver las celdas...— había iniciado KyungSoo.

—¡Teniendo la razón como siempre! — exclamó SeHun dando una nueva gran mordida a su rosquilla.

—...será mejor que me vaya.

—Adiós, KyungSoo, gracias de nuevo.

—Gracias, KyungSoo, nos vemos después.

—Sigo sin entender cómo te dejan pasar, pero gracias por alimentarnos.

El bajito hizo una reverencia y salió del cuarto, recorrió la estación hasta la salida no sin dar un último vistazo al pasillo que dirigía a la oficina de los agentes Byun y Park, apretó con suavidad el envase plástico del café que había sido llevado exclusivamente para él y mostrando una suave sonrisa, abandonó el lugar de inmediato.

Se subió a su viejo auto y se puso en marcha.

El tráfico a esa hora era poco, por lo que llegar a su destino no fue complicado.

Un edificio de consultorios médicos, KyungSoo estacionó el coche y fue directamente hasta el establecimiento, tomó las escaleras en un intento por mejorar su condición física. En cuanto llegó al piso deseado esperó paciente a que la puerta de su consultorio se abriera.

Aún no era la hora de su cita, así que el otro paciente seguía dentro.

Fueron un par los minutos que esperó antes de que la puerta se abriera, escuchó al paciente despedirse y cerrar la puerta detrás de sí. Otro par de minutos pasaron y la puerta fue abierta de nuevo.

—Do KyungSoo.

El doctor salió del consultorio para llamarlo, el bajito se puso de pie y siguió a su médico hasta el interior.

La cita no fue nada fuera de lo común, KyungSoo se sentó durante una hora en el cómodo y elegante sillón y habló sobre nada en especial mientras el doctor lo escuchaba con atención y tomaba notas esporádicas en su libreta, preguntaba cosas impresas de vez en cuando.

Y para cuando la hora de cita se terminó, el doctor habló finalmente.

—KyungSoo— inició el sujeto —Creo que tu terapia ha surtido el efecto deseado.

—Si— asintió el bajito con una sonrisa —Me siento mucho mejor.

—Eso es parte de lo que buscábamos— comentó el doctor —En realidad habías cumplido con tu tiempo de terapia desde hace meses pero ante tu insistencia de continuarla... Lo que queremos es que estés bien— habló el médico —Y parece ser que llegó el momento de darte de alta.

—¿En serio? — preguntó KyungSoo, sin dejar la emoción de lado.

—Sí, incluso te daré de alta sin medicación...— el médico se levantó de su asiento frente a KyungSoo y fue a su escritorio para redactar la nota de alta de KyungSoo —Te daré este papel para que compruebes que has cumplido exitosamente con el programa.

—De acuerdo— las manos de KyungSoo estaban sobre sus rodillas, sonreía contento.

Después de un año y seis meses, iba a ser dado de alta de su terapia psicológica.

Como parte de su prematuro retiro del trabajo, fue exonerado a acudir a terapia de ayuda emocional. KyungSoo no había logrado entrar a la academia de policías pero había sido aceptado para formar parte del cuerpo de tránsito, no fue mucho el tiempo que duro en ello dado que había sido víctima de un accidente en motocicleta gracias a un imprudente conductor.

KyungSoo había sido despedido del cuerpo de transito bajo la excusa de que haber sufrido un accidente siendo él mismo un tránsito no tenía sentido. Así que interpuso una demanda por despido injustificado, el arreglo había sido que el departamento de transito retiraría a KyungSoo con paga de pensionado y que le ofrecería terapia emocional para superar el accidente que había tenido.

—De todas maneras... si tienes cualquier inquietud o duda, no tardes en venir— había mencionado el doctor mientras firmaba la nota.

KyungSoo se levantó de su asiento, tomó la nota que le era extendida y con felicidad observó el diagnóstico final.

"Emocional y físicamente apto para desarrollar las actividades que le competan"

El joven Do hizo una pronunciada reverencia y dejó el consultorio con una felicidad apenas contenible, estaba librado de tener que acudir a las sesiones semanales de atención psicológica, al principio le habían parecido buenas y hasta necesarias, pero después comenzó a aburrirse de ir, él se sentía bien pero debía de cumplir con lo impuesto por el juez, y hasta hace unos meses, había empezado a tener pánico de nuevo.

Su pasatiempo era conducir, así que con los últimos sucesos de desapariciones había estado más nervioso de lo normal por lo que volvió a pensar que la terapia era necesaria. Pero poco a poco, iba sintiéndose mejor, pensó que quizás estaba influyendo el que el personal del departamento de policías estaba empezando a verlo como un amigo más que como un estorbo.

KyungSoo bajo por las escaleras, animado.

Corriendo fue hasta su auto y abrió la cajuela, con una enorme sonrisa de por medio observó el fondo del maletero, estiró una de sus manos para tomar la chaqueta que había lanzado la noche anterior, se la puso sintiéndose todo un triunfador.

Cerró el portaequipajes de un golpe y fue directo hasta el asiento del piloto, listo para regresar a casa.

Teniendo la aprobación medica de desenvolverse con libertad, tenía tantas cosas en mente por hacer.

__♡__

Like, comment y subscribe (?)

Jajaja.

Nos vemos♡