12. Coalición

—Buenos días— se anunció el detective Park a la mañana siguiente, había dejado su abrigo sobre la silla reclinable.

—Buenos días— devolvió el saludo su compañero de oficina —Ayer te fuiste tarde ¿Eh?

—¿MinSeok te lo dijo? — preguntó ChanYeol tomando asiento.

—Si— asintió el detective Byun —Estuve revisando a fondo tus anotaciones y creo que hay un hueco de información que puede ser cubierto por el reporte de los restos.

—También lo creo— asintió ChanYeol —¿A qué conclusiones has llegado?

—Pensé en lo que me dijiste— dijo BaekHyun —Sobre tras polar mi especialidad a esta investigación, y solo pude conjeturar...

ChanYeol puso atención.

—Creo que la persona que buscamos, sabe exactamente lo que hace— advirtió BakHyun.

—Eso es lo que pensamos de todos los criminales ¿No son llevados por un motivo?

—Me refiero a que...— el detective Byun se puso de pie y fue hasta la mesa de su colega —a que es una persona que es muy consciente de sí, la mayoría de las veces vamos tras gente que se escuda detrás de actuar fuera de sí, de actuar bajo las peticiones de otros o de actuar por una circunstancia muy específica y momentánea, pero la manera en la que planea sus ataques, como ve a sus víctimas, la manera en que ejecuta limpiamente cada crimen... definitivamente es consciente de lo que hace y tiene una metodología estricta... es... casi como el crimen que investigo.

—¿El crimen que investigas? — se extrañó ChanYeol.

—Organizado— señaló BaekHyun, apretó los labios —Estuve revisando también tus sospechosos descartados...

—¿Sobre la pistola .22? — ChanYeol asintió con la cabeza —Pensé que sería sencillo seguir ese camino pero fue en balde, fue como toparse con una pared.

—Si el criminal varió su modo de ataque entre la cuarta y la tercera víctima... saliéndose de su guion ¿Qué te hace pensar que no puede usar un arma diferente? Quiero decir... el tipo desmiembra los cuerpos, creo que es obvio que tendrá más de un tipo de arma.

—No tenemos otro tipo de arma que se relacione con él— comentó ChanYeol.

—No investigaste a una persona de esa lista.

Y antes de que ChanYeol pudiera responder la acusación, el resto del equipo llegó a la oficina, anunciando su llegada de manera efusiva. Los oficiales Oh y Kim fueron a tomar sus respectivos puestos, listos para recibir las ordenes de sus superiores más directos, siendo estos los agentes Kim, que anteriormente se encontraban trabajando de manera exclusiva para el departamento de desapariciones pero por el momento y por petición de uno de los detectives de la comisaría, estaban ahora involucrados en el equipo de investigación.

JongDae había llegado con una canasta reciclable llena de vasos de café extra grandes y los repartió a todos los miembros, mientras relataba lo caótico que había sido conseguir las bebidas.

—Parece que últimamente la gente es más fanática de la cafeína— contó el agente JongDae.

—Es porque a pesar de ser martes, este día se siente como un domingo laboral— exclamó SeHun haciendo perezosas flexiones de cuello, sentía una tensión tremenda en los músculos.

—Debe ser eso...— asintió MinSeok dando un largo sorbo a su café para después entablar conversación con un silencioso ChanYeol —¿Te han dado el informe preliminar?

—Aún no— negó, volviendo su mente a la realidad que lo rodeaba —Esperaba llegar y tener el reporte en mi escritorio, pero creo que no podemos presionar a un turno donde los recursos siempre están limitados, así que esperaré a que el preliminar esté listo en un par de horas más.

—¿Te quedarás entonces en la oficina? — preguntó BaekHyun esta vez —Podemos discutir lo que estábamos hablando hace un momento.

El detective Park se limitó a asentir con la cabeza, pero inmediatamente el tema de conversación fue remplazado.

—Ahora que el agente Kim y yo hemos cumplido con nuestra asignación...— había dicho JongIn —¿Cuál será nuestro próximo movimiento?

—Creo que será mejor que continúe la investigación de la desaparición universitaria al lado de MinSeok— comentó JongDae —SeHun y JongIn podrían quedarse en la oficina para ayudar en cualquier cosa que emerja.

—Podrían ayudarme a acomodar nuevamente el tablero— indició BaekHyun —Hay un par de cosas que me gustaría agregar.

—Eso suena bien— aceptó SeHun de manera encantada, estaba listo para pasar un tranquilo día en la oficina.

—De cualquier manera, figuro que ChanYeol irá a invadir la morgue en cuanto todos se vayan— aclaró el detective Byun, observando al mencionado que bufó con una incómoda sonrisa.

Y fue después de la nueva asignación de tareas que los miembros del equipo de investigación se escindieron para continuar con sus actividades, el dúo que saldría a investigar fuera era un dueto mucho más dinámico, así que seguramente obtendrían resultados favorables.

ChanYeol por su parte había ido, tal cual había objetado BaekHyun, hasta la morgue donde los forenses seguían afinando detalles del reporte preliminar, los especialistas del turno nocturno habían dejado inconcluso su trabajo pero faltaban solo un par de anotaciones para terminar, ChanYeol no quiso ser demasiado exigente al respecto y se mantuvo a la espera dentro del sótano, observando lo meticuloso del estudio forense.

BaekHyun por otra parte se había quedado en la oficina, revisando el tablero de los hechos al lado del par de oficiales.

—Hay al menos de tres a cuatro semanas de diferencia entre un asesinato y otro— comentó BaekHyun analizando profundamente las fotografías tomadas de las escenas donde se habían encontrado los restos —Y pasaron cerca de cuatro meses entre los hallazgos de uno y otro crimen...

—¿Quiere decir que falta un par más de víctimas? — preguntó entonces SeHUn.

—¿Cómo?

—Si la diferencia es de tres a cuatro semanas... y el asesinato de la niñera ocurrió hace poco más de dos meses, significa que hay al menos otros dos asesinatos por descubrir...

BaekHyun asintió con la cabeza al darse cuenta de lo inferido por el oficial Oh.

—¿Cuáles fueron los criterios que utilizaron para buscar a los posibles sospechosos? — preguntó BaekHyun de repente cuando se topó con las fotografías de la bala encontrada en el cráneo de una de las víctimas.

—El detective Park fue explícito— comentó JongIn —nos pidió reunir la información de personas que poseyeran una arma calibre .22 y que además contaran con antecedentes de cualquier tipo.

—Al final no encontramos suficientes coincidencias así que solo incluimos a todos los que poseían un arma de ese tipo— aceptó SeHun —De todas maneras, todos los sospechosos se descartaron.

BaekHyun quería indagar al respecto, tenía una mala sensación respecto a un nombre ignorado en la lista que revisó.

—¿Por qué estaba KyungSoo en la lista?

SeHun soltó una risita de burla —Le encontramos un calibre .24— respondió después de recibir un codazo por parte de su colega Kim —Concluimos que era medianamente normal, después de todo era un empleado del departamento de transito...

—No sabía que los tránsitos podían portar armas— replicó JongIn de inmediato.

—No pueden— dijo BaekHyun lleno de escepticismo —¿Qué hicieron con el arma? ¿La confiscaron?

—Si— contó SeHun —El pobre tiene antecedentes psiquiátricos así que legalmente no debería portar un arma...— el más alto guardó silencio durante un par de minutos —¿¡Crees que sea por eso que lo rechacen de la academia?!

BaekHyun entrecerró los ojos —No lo dudo ni un poco— posterior a la declaración, regresó a ver el tablero y la cronología de los hechos —¿Qué clase de antecedentes psiquiátricos?

—No quisimos indagar demasiado... su madre estaba acechándolo— dijo SeHun, desde su asiento en la mesa más contigua.

El detective Byun volvió a quedar en silencio, analizando lo que tenía frente a él, mientras anotaba lo más transcendental en la pequeña libreta que usaba para sus investigaciones. Habían pasado alrededor de unos diez minutos antes de que BaekHyun saliera de la oficina con la excusa de ir a buscar información a los registros.

—Atiendan cualquier llamada— comunicó antes de cerrar la puerta.

Y una vez que el par de oficiales se habían quedado en soledad, comenzaron a comentar lo recién hablado.

—¿Por qué crees que nos preguntó sobre KyungSoo?

—Creo que vio su nombre en la lista de sospechosos— respondió JongIn —Pero el detective Park lo descartó él mismo ¿No?

—No vi las investigaciones sobre los sospechosos— confesó SeHun.

—Tampoco yo...— ambos se quedaron viendo un par de silenciosos segundos antes de buscar en el montón de documentos los relacionados a los interrogatorios hechos a los supuestos sospechosos.

Y mientras tanto, en la oficina de archivos, BaekHyun había tomado una computadora para indagar sobre aquello que seguía molestándolo. El detective Byun era una persona altamente perspicaz, una cualidad inigualable en el trabajo que desarrollaba, pero que lamentablemente, interfería demasiado en la manera en la que se desenvolvía en la vida diaria.

BaekHyun raramente confiaba en las personas, por mucho que las conociera o por mucho que las tratara. De esa manera su personalidad lo obligaba a permanecer a la defensiva constantemente, no era un secreto, por ello ninguno de sus colegas se molestaba cuando los manejaba entre la precaución y la rudeza. La primera vez que habló con SeHun pudo notar en la mirada del menor como sus sentimientos fueron heridos por un comentario hecho hacia él. El detective rio al recordar el momento.

Y el par de oficiales en general habían aprendido a tomar de buena manera los comentarios lanzados en su contra, con insinuaciones sobre acusarlos con el jefe JunMyeon o con él mismo llevarlos a juicio.

Mientras tecleaba en el buscador el nombre de la persona que seguía en sus memorias comparándolo con los cientos de criminales que reaccionaban de inesperada manera a su personalidad. BaekHyun en el pasado no le había prestado atención, pero después de haber revisado el caso de arriba abajo, aquella primera interacción hizo eco en su cabeza.

El detective Byun encontró la fotografía en los resultados y dio clic en su nombre mientras leía los datos básicos de KyungSoo.

En aquella ocasión, BaekHyun conocía al pelinegro solo por anécdotas contadas por SeHun y JongIn, luego empezó a escuchar su nombre salir de los labios de los agentes Kim, para finalmente toparse con su colega ChanYeol traerlo a colación en una conversación, la primera vez que lo vio había sido en la oficina, ChanYeol no estaba, así que él lo recibió con un bastante rudo "¿Qué estás buscando?" la indiferente mirada y la mueca de molestia desapareció del rostro del joven en milisegundos y fue remplazada por una reverencia pronunciada.

Hubo una sosa presentación y BaekHyun lo condujo hasta la salida de la estación y luego de contarle a ChanYeol sobre el hecho, el detective se había echado a carcajadas, alegando que se había topado con KyungSoo y le había contado que su colega lo había corrido de la oficina. BaekHyun entonces comenzó a lanzar indirectas sobre un enamoramiento y es que una vez que KyungSoo se había presentado formalmente con él, las visitas a la oficina aumentaron y podía notar que la atención iba dirigida exclusivamente al detective Park.

Y jamás le molestó, de hecho lo fomentaba.

Hasta que vio su nombre escrito junto al resto.

KyungSoo había pasado tanto tiempo con ellos, comportándose de irritable manera que había olvidado por completo aquel incidental primer encuentro.

BaekHyun llegó a la parte del antecedente psiquiátrico en su expediente, pero al querer buscar más al respecto, la página lo enviaba automáticamente hasta el molesto anuncio de "No se encontraron resultados"

Intentó una y otra vez, pero el resultado fue el mismo.

—¿Por qué no aparece? — se preguntó a sí mismo, leyendo una vez más, el breve perfil de la biografía de KyungSoo en el archivo general.

Y a la par que el detective Byun insistía en los antecedentes del joven azabache, acontecían una serie de sucesos de manera simultánea.

Por un lado, los agente Kim habían obtenido por fin una copia de la cámara de seguridad de uno de los edificios de las residencias, del día que la estudiante había desaparecido y dispuestos a ver la grabación en la estación de policías, MinSeok recordó la plática que había tenido con ChanYeol un día anterior mientras esperaban por el levantamiento de los restos cadavéricos.

—ChanYeol mencionó algo sobre interrogar a la consejera universitaria— comentó MinSeok —Ya que estamos aquí, deberíamos dar una vuelta por ahí.

—Sí, de todas maneras, son solo un par horas de metraje por revisar, así que no hay lío si hacemos una parada extra— JongDae había salido al lado del agente Kim de la oficina de seguridad de la universidad y caminaron por el campus hasta llegar a la recepción universitaria.

Se encontraron en la recepción en cuestión de minutos.

—¿Debemos tocar la puerta o...?— mencionó MinSeok acercándose a la entrada detrás del mostrador.

—Es lo más conveniente— JongDae fue hasta su lado, MinSeok llamó a la puerta mientras JongDae inspeccionaba el detrás del mostrador frente a la puerta, una serie de lapiceros, libretas y pegatinas con el logo de la Universidad, imaginaba que la consejera los ofrecía después de una visita. JongDae observó los artículos y recordó entonces una observación por parte del oficial SeHun.

MinSeok llamó a la puerta una vez más al no obtener nada más que silencio.

La puerta contigua se abrió.

—No vino a trabajar— era la secretaria del director —Llamamos a su casa para preguntar por ella pues ayer tampoco vino a trabajar...

El par de agentes se quedaron viendo.

—Gracias— MinSeok hizo una reverencia, JongDae lo imitó y ambos salieron de la recepción universitaria.

—Dos días consecutivos...— señaló MinSeok.

—Justo cuando ChanYeol estaba a punto de entrevistarla...— objetivo JongDae.

—Le emocionará saberlo— sonrió MinSeok.

Ambos agentes dejaron la Universidad, con la cinta de seguridad lista para ser revisada. El metraje sería una pista crucial, pues la cámara estaba situada para dar una imagen del estacionamiento estudiantil, lugar que la compañera de cuarto de la estudiante clamó como el lugar predilecto de la desaparecida para salir a fumar.

Y al mismo tiempo, ChanYeol recibía el documento preliminar sobre los hallazgos en los restos de las chicas.

"Se lograron identificar las víctimas, de dieciocho y veintiún años... no se encontró una causa final de defunción, con estado de descomposición en fase de putrefacción activa... sin aparentes signos de agresión física... se encontraron en el dorso de la lengua signos tempranos de asfixia manual..."

Mientras leía el veredicto, había salido de la morgue y estaba en un área alejada de la oficina donde los oficiales Oh y Kim seguían leyendo los reportes de los sospechosos.

"Se encontraron, en la parte temporal izquierda, dos centímetros por arriba del hélix, orificio de entrada por proyectil de arma de fuego..."

La frecuencia cardiaca del detective aumentó.

"...las medidas corresponden a un arma de fuego de calibre veinticuatro..."

ChanYeol dejó de leer el reporte, levantó la vista y todo frente a sus ojos parecía ir en cámara lenta, el resto de trabajadores en la estación se ocupaban de sus asuntos, ignorando su existencia.

El lapso de tiempo siguió su curso, mientras BaekHyun continuaba batallando por encontrar los resultados que quería, los agentes Kim conducían de regreso a la estación y ChanYeol parecía haber quedado atrapado en un estado de negación del que no parecía no querer salir. El par de oficiales dejaron de husmear entre los interrogatorios que no concluyeron de leer cuando el timbrar del teléfono les sacó un buen susto.

—¡Contesta! — exclamó SeHun, guardando con prisa los documentos dentro de sus respectivas carpetas.

—¡Contesta tú! — retó JongIn acomodando las carpetas en el lugar donde las habían encontrado.

—¡Estoy guardando esto!

JongIn rodó los ojos, dejó la carpeta que faltaba por revisar y fue hasta el teléfono de la oficina.

—Departamento de investigaciones especiales— respondió JongIn sonriéndose a sí mismo.

...— no hubo más que silencio del otro lado de la línea.

—Las denuncias ciudadanas pueden ser atendidas en la línea de la estación— comentó JongIn tras no haber escuchado ni una solo sonido.

— ...¿JongIn? — preguntó entonces un familiar tono de voz.

—¿Quién habla? — preguntó el oficial de piel dorada, desconcertado.

—...— una tenue risa se escuchó del otro lado —Fui yo.

JongIn entrecerró los ojos, tratando de identificar la voz del otro lado de la línea.

—Le pedimos cordialmente que las denuncias ciudadanas las realice en la línea de la comisaría— y acto seguido colgó la llamada. Volvió a reunirse con SeHun quien había guardado todo el material que leían.

—¿Quién era? — preguntó SeHun, tomando asiento en el lugar del detective Park.

—No lo sé, una llamada de broma— JongIn se levantó de hombros y tomó asiento en el lugar del detective Byun.

Ambos voltearon a verse y en medio de miradas juguetonas, comenzaron a reír, al imaginarse que aquel par de puestos eran suyos.

La diversión terminó cuando el teléfono volvió a timbrar.

—Es tu turno— habló JongIn, señalando a SeHun.

El más alto hizo una mueca de desagrado y tomó el teléfono del escritorio.

—Departamento de investigaciones especiales— SeHun mantuvo la seriedad en su rostro mientras escuchaba solo una respiración.

Dejen de buscar...— se escuchó del otro lado.

SeHun levantó una ceja, reconociendo el tono de voz de la persona que llamaba —¿Es una broma?

No van a descubrirlo jamás— respondieron del otro lado —Les hago las cosas más fáciles, soy yo.

—Sé que eres tú— replicó SeHun con molestia —¿Qué quieres? Estamos ocupados, deja de molestar.

Una risita salió del auricular —Quiero decir... fui yo... yo lo hice, yo hice todo eso.

SeHun puso los ojos en blanco —No es un broma divertida.

No es un broma— respondieron de inmediato —Es una confesión, me estoy entregando.

—Dios, KyungSoo, deja de joder— SeHun colgó la llamada y volteó la mirada hasta un JongIn confundido.

—¿Era KyungSoo?

—Sí, solo llama para molestar, debe estar aburrido— contó SeHun —¿Y si lo invitamos?

JongIn negó con la cabeza —No creo que eso le agrade al detective Park.

Y antes de que pudiera responder con algún ingenioso insulto, SeHun escuchó el teléfono sonar de nuevo, en esta ocasión, no esperó para tomar la llamada.

Déjame hablar con ChanYeol— pidió KyungSoo de manera inmediata.

—¿ChanYeol? — habló SeHun —El detective Park— se aseguró de recalcar la posición de su superior —Está ocupado, no lo molestes.

Necesito hablar con él— KyungSoo insistió —Por favor, déjame hablar con él.

—No— se negó SeHun y antes de que pudiera cortar la llamada un estruendoso grito lo detuvo de hacerlo.

¡SEGUIRÉ LLAMANDO HASTA QUE ME DEJES HABLAR CON ÉL!

—Cielos, KyungSoo, regresa al psiquiátrico— SeHun colocó el teléfono sobre la superficie de la mesa y se dirigió a JongIn —Ve a buscar al detective Park.

—No va a venir, está esperando el preliminar...

—Mh— SeHun pensó al respecto —Dile que...— y obtuvo una convincente mentira piadosa —Dile que llama un testigo.

JongIn refunfuñó, pero terminó por obedecer las peticiones de su amigo.

—Viene en camino— habló SeHun contra el altavoz del teléfono.

Gracias— una voz mucho más aliviada salió de los labios de KyungSoo.

SeHun quiso seguir preguntando al respecto, pero debido a lo rudo de su último comentario, decidió dejar las cosas como estaban. Estaba arrepintiéndose de lo último que había dicho, solía molestar a KyungSoo, pero lo hacía de una manera amigable, en esa ocasión se había metido con algo realmente serio de su pasado, quería retractarse y pedir una sincera disculpa, veía el teléfono con remordimiento y antes de que pudiera implorar perdón, la puerta de la oficina fue abierta.

El oficial Oh dejó el asiento como resorte, no habían tardado nada en llegar.

ChanYeol ni siquiera le prestó atención a SeHun invadiendo su espacio de trabajo, fue directo hasta el teléfono y tomó la llamada.

JongIn y SeHun observaron la afectada expresión de ChanYeol, por lo que se recluyeron en un punto alejado de la oficina, escuchando con oído agudo, la llamada que estaba llevándose a cabo.

—¿Diga? — las palabras habían salido con dificultad, el detective Park había corrido a la oficina cuando se le informó sobre un potencial testigo.

ChanYeol...— una suave voz desde el otro lado de la línea provocaron un frío escalofrío en la espina dorsal del mencionado —Es KyungSoo.

El detective se tambaleó ligeramente, tuvo que apoyarse en el escritorio, nuevamente un espacio en blanco se apoderó de sus pensamientos y no dijo nada al respecto.

Siempre creí que podrías resolverlo— habló KyungSoo sin esperar ninguna otra palabra a cambio —Una parte de mí, deseaba que lo hicieras... que al menos... tú pudieras detenerlo...

ChanYeol escuchó cada palabra pronunciada, pero seguía sin poder articular frase alguna, la conmoción era demasiada.

Pero otra pare de mí... no quería que lo hicieras...— continuó relatando el joven de cabello negro —Pero todo se complicó... todo se volvió tan difícil...

Hubo un silencio por parte de ambos.

Después de pensarlo mucho...— prosiguió el prófugo —creo que estoy listo...

El detective Park frunció el entrecejo, tragó duro y dejó todas sus emociones de lado para poder hacer frente a ese momento —¿Para qué?

Para entregarme— respondió KyungSoo después de dejar salir un profundo suspiro —Te diré mi ubicación y aún si no me crees, puedes ir a casa... puedes, encontrar todo lo que estabas buscando.

No había mayor duda.

—¿Cómo sabré que estás donde clamas estar? — preguntó el detective Park.

Puedes confiar en mí...— un lastimero tono de voz se escuchó —Lo prometo.

—Necesito algo más— habló ChanYeol.

Ya te lo dije— volvió a hablar KyungSoo —Ve a mi casa. Puedes... buscar en mi habitación, pero no habrá mucho, puedes buscar en el resto de las habitaciones... tendrás que forzar una de las puertas...

—¿Por qué? — ChanYeol golpeó con el puño cerrado la mesa sobre la que se sostenía.

No entiendo que me preguntas...— respondió el joven —Las llaves de repuesto están bajo el tapete de bienvenida... intenta buscar rigorosamente debajo de todas las ventanas, del lado del jardín, estaré aquí hasta las seis de la tarde...— KyungSoo prosiguió a dar la ubicación exacta desde donde llamaba para colgar sin previo aviso.

ChanYeol se quedó pegado al teléfono después de escuchar el sonido de la llamada finalizada, el timbrar era el ruido de fondo de los recuerdos exprés que tuvo en ese momento. Todos los sucesos, cada una de las decisiones tomadas, todos los escenarios y los involucrados, atravesaron su memoria de manera fugaz, todo parecía tan obvio y él siempre había sido tan ciego.

Dejó el teléfono sobre el escritorio, aun desconcertado, no pudiendo creer lo que estaba sucediendo.

BaekHyun irrumpió en la oficina, derrotado por la investigación inconclusa, antes de emitir cualquier palabra observó al par de oficiales arrinconados, con una expresión temerosa que observaban a un ChanYeol ausente. El detective Byun fue hasta su colega para llamar su atención.

—¿ChanYeol? — colocó una de sus manos sobre sus hombros, observó su rostro. Sus miradas se cruzaron.

No hubo más palabras.

El detective Park tardó un tiempo en recobrar la compostura y tan pronto reconoció la oportunidad que se le había presentado, tomó el liderazgo de la situación.

—BaekHyun— llamó a su colega —Necesito que vayas urgentemente a esta dirección— le entregó el papel donde había anotado la ubicación de KyungSoo —Te acompañaran SeHun y JongIn, necesito que estés ahí lo más pronto posible.

—¿Qué es lo que pasa? — preguntó BaekHyun, sintiéndose perdido en la situación.

—Tienes que tener cuidado, los tres tienen que tener cuidado— advirtió ChanYeol —Arrestarán al responsable de los crímenes, llamó para entregarse.

—¿QUÉ? — BaekHyun fue sorprendido aún más —Pero... ¿Quién? ¿Cómo?

—KyungSoo— respondió con firmeza. Todos los presentes soltaron una expresión de asombro y antes de que las dudas fueran a intervenir, ChanYeol les dio instrucciones precisas en la manera de abordar al criminal, les explicó el escenario a groso modo.

—Iré a su casa, llamaré a MinSeok y a JongDae para que se me unan— los miembros del equipo de investigación presentes estaban de salida de la oficina.

El detective Park encomendó la importante tarea de arrestar a KyungSoo mientras él descubría la guarida del homicida. Antes de salir de la estación había pasado por la oficina del jefe JunMyeon para arreglar los permisos necesarios de manera inmediata, se solicitaron equipos de emergencia en caso de requerir apoyo y se preparó todo para el arribo del supuesto asesino.

ChanYeol aún se sentía incrédulo al respecto, la impresión no podía abandonar su cuerpo, las pistas halladas eran solo circunstanciales, no había ni una sola cosa incriminatoria, albergaba una diminuta esperanza de que aquello fuera una broma de muy mal gusto.

BaekHyun, SeHun y JongIn habían dejado la ciudad a bordo de dos patrullas, estaban listos para emprender el largo viaje hasta la ubicación dada por KyungSoo. Temerosos, impresionados y con los nervios a flor de piel.

El detective Park por su parte había ido hasta el domicilio de los Do en compañía de un par de agentes especiales. El camino le pareció eterno y para cuando finalmente estacionó el coche fuera de la residencia, no se atrevió a salir del auto e irrumpir en la morada.

Uno de los agentes tuvo que llamarlo para que se animara a salir de la seguridad de su auto. Se habían puesto el equipo necesario por si sucedía un inesperado confrontamiento. Se había arrepentido entonces de su decisión para la asignación de tareas, BaekHyun era mucho mejor irrumpiendo en escenas de crimen activas.

ChanYeol salió del auto, aseguró su chaleco antibalas, acomodo las gafas sobre el puente de su nariz y enfundando la pistola, caminó al lado del par de agentes que seguían todos sus señalamientos. Tomó la llave del lugar indicado por KyungSoo, abrió la puerta lentamente, listo para cualquier situación, apuntando la pistola hacia el frente, listo para disparar si la situación lo ameritaba.

Pero la primera escena en recibirlo había sido, el cuerpo desangrado de una pálida mujer que yacía tirada sobre el suelo de la sala de estar.

Un vuelco en el corazón le provocó mareos, pero permaneció en la misma posición, indicó al par de agentes que revisaran cada una de las habitaciones para asegurarse de estar solos, mientras él caminaba sigiloso hasta la cocina, donde pudo percibir el penetrante aroma del cloro y el ambiente desordenado. Escuchó que la puerta de una habitación era abierta y mientras él buscaba rastros de vida humana, percibió a uno de los gantes batallando con una puerta.

Al no encontrar indicio de personas vivas en la cocina, salió de esta para revisar el baño donde se toparía con los muebles manchados de una opaca sustancia. Revisó con cautela cada rincón y mientras abandonaba el cuarto de baño, escuchó que uno de los agentes avisaba por la habitación libre.

Los tres se reunieron entonces en la puerta que estaba trabada, ChanYeol dio la indicación de derribarla, y de un golpe certero, el agente logró irrumpir.

El aroma a descomposición les dio la bienvenida a admirar una de las más cruentas y repugnantes escenas.

La mujer que ChanYeol había estado buscando el día anterior, posaba descuartizada en medio de la cama, las sábanas y el colchón empapados de sangre y la habitación hecha un desastre. Inspeccionó la recámara rápidamente y observó con horror la cabeza cercenada sobre uno de los muebles, ausente de globos oculares y destripada desde el cuello.

Y una vez que la casa se corroboró como solitaria, los agentes comenzaron a fotografiar cada centímetro de la casa que registraban.

ChanYeol seguía conmocionado por los hallazgos, pero se apresuró a buscar evidencia incriminatoria, la habitación de KyungSoo fue el primer sitio que piso.

ChanYeol se sentía tan fuera de lugar. La cama del menor estaba hecha, todo en el interior estaba en perfecto orden. No podía dejar de imaginar a KyungSoo atrapado entre esas cuatro paredes, no dejaba de imaginarlo acostado sobre el colchón, viendo al techo mientras recapitulaba sus crímenes.

Y mientras ChanYeol hurgaba en el armario, la llegada de MinSeok y JongDae dejó de hacerse esperar, el detective Park les encomendó la tarea de registrar el jardín poniendo atención a las áreas circunscritas a las ventanas, justo como había solicitado el homicida.

El par de agentes Kim hicieron lo solicitado y salieron de la casa.

El detective Park logró captar un par de prendas femeninas del interior del armario de KyungSoo, las guardó con cuidado dentro de las bolsas plásticas y siguió con su registro.

ChanYeol permanecía trayendo a colación a sus pensamientos al joven asesino, en la manera tan efectiva que había burlado la justicia justo frente a sus ojos, todo el tiempo lo había tenido al lado y él nunca lo había sospechado, ni siquiera como una loca teoría lo había imaginado.

La crueldad detrás de sus atroces crímenes debían esconder un profundo trasfondo, pero estaba demasiado ocupado tratando de aceptar la realidad como para siquiera empezar a formular alguna tesis sobre las motivaciones.

Reflexionó sobre como en las últimas semanas había empezado a exponer sus sentimientos a favor del menor, lo hizo menospreciar su propio juicio y discernimiento. Las ideas sobre lo mal empleado de sus deducciones empezó a atormentarlo. Detuvo la búsqueda, se recargó sobre la pared más contigua cuando todo a su alrededor empezó a dar vueltas, tuvo entonces que quitar el cubrebocas que llevaba puesto y empezó a respirar con mayor profundidad, tratando de tranquilizar las emergentes nauseas albergadas en la boca del estómago.

Su ejercicio de relajación fue interrumpido por uno de los agentes, MinSeok había entrado a la habitación de manera sorpresiva.

—Necesitamos que vengas— comunicó el contrario —Y...— el agente guardó silencio durante un par de segundos, no pudiendo encontrar la manera más adecuada de hacer conocer los hallazgos —...Y necesitamos que vengan más refuerzos forenses...

ChanYeol todavía recargado sobre la pared, giró la mirada hasta su colega, se incorporó suavemente y siguió a MinSeok, atravesaron la casa y salieron al jardín circundante donde junto a JongDae permanecían inspeccionando.

Caminando de manera apresurada, el detective Park pudo vislumbrar al agente Kim aguardando con los puños recargados sobre las caderas a un costado de la ventana del cuarto de la señora Do.

Los tres estaban reunidos entonces, ni una sola palabra fue dicha. JongDae se limitó a señalar con la mano el suelo sobre el que estaban parados.

ChanYeol reconoció de inmediato densos mechones de cabello sobresaliendo de la tierra.

Park ChanYeol era un detective ejemplar, uno de los mejores en toda la zona, otras jurisdicciones lo buscaban para consejería, había resuelto mucho más de la mitad de sus casos. Poseía una estabilidad emocional inquebrantable.

O al menos eso fue lo que se convenció a si mismo de creer.

Su corazón pareció detenerse. Las náuseas incrementaron. El mareo no ceso. Tuvo que darse la vuelta para volver a respirar profundamente hasta recobrar la compostura. No fue la escena del crimen tan explícita y sangrienta. Era el impacto personal que todo el caso estaba causando sobre su persona.

—¿Estás bien? — preguntó un preocupado MinSeok, colocando una de sus manos sobre el hombro más cercano de ChanYeol.

—Si...— mintió el más alto —Sólo... necesito unos segundos.

JongDae se acercó también.

—Podemos hacernos cargo de aquí en adelante— habló con seriedad —Puedes ir a la estación a agregar las primeras impresiones al tablero de los hechos y a comunicarle al director Kim sobre los hallazgos.

ChanYeol asintió de inmediato, no creía soportar ni un minuto más en la residencia Do. El detective se apartó del par de agentes, pidiéndoles extremo cuidado y absoluta seriedad sobre la escena del crimen, les comunicó que pronto estaría el equipo forense en la casa y que harían el levantamiento de cualquier resto cadavérico que se encontrara.

Él por su parte, regresó a bordo de la patrulla. Asqueado.

Continuaba saltando entre razonamientos sobre el caso que se le había asignado, viendo en memorias cada una de las ocasiones que se habían reunido con KyungSoo para discutir sobre el tema, la manera tan pulcra y despreocupada en la que propuso su propia teoría y como había hecho que ChanYeol la aceptara casi sin chistar y sin él mismo haberse dado cuenta. Se sentía derrotado.

El detective llegó rápidamente a la estación y después de haber comunicado al jefe Kim los por menores del allanamiento, fue hasta la oficina para tratar de estructurar la mejor manera de inculpar al asesino de forma eficaz. Aún con todo el torbellino de emociones discordantes en su interior, tenía que hacer su mejor esfuerzo por llevar justicia a cada una de las víctimas.

Y mientras ChanYeol reformulaba sus decisiones, el trío de oficiales que habían sido enviados a capturar al criminal, estaban cada vez más cerca.

—No puedo creerlo— había musitado SeHun, en el asiento del copiloto, iba en la misma patrulla que el detective Byun, quien conducía con extrema concentración.

—No lo subestimes— comentó BaekHyun —Pudo hacer todas esas atrocidades, así que tenemos que tener extremo cuidado en su captura.

—¿No deberíamos tener más refuerzos? — preguntó el oficial Oh bastante preocupado.

—Vienen en camino— respondió el detective observando por el retrovisor que la patrulla que iba a cargo de JongIn fuera detrás de ellos —No bajes la guardia.

SeHun negó de inmediato.

El resto del camino se llevó en completo silencio. Con las sirenas encendidas, la velocidad sobrepasaba el límite permitido y les tomó poco más de la mitad del tiempo llegar al alejado pueblo donde marcaban las coordenadas.

—JongIn, habla BaekHyun, apaga la sirena, disminuye la velocidad, cambio.

Entendido, cambio— había respondido el oficial Kim desde el otro auto.

A medida que se adentraban en las desérticas calles del pueblo, el camino fue transformándose lentamente en un camino de carretera nuevamente, a no más de doscientos metros, se encontraba el letrero de una gasolinera que había sido señalada como el punto de encuentro.

BaekHyun apretó el volante entre sus manos, estaba nervioso.

—JongIn, detén el auto, iremos a pie, cambio.

¿A pie?... — cuestionó el moreno con cierto temor impregnado en la voz —Cambio.

—Efectivamente, cambio— confirmó el detective, BaekHyun maniobró para dejar el coche cerca de una vieja caseta de teléfonos cercana, JongIn lo imitó.

Los tres salieron de las patrullas, enfundados en equipo de protección; chaleco antibalas, guantes y portaban una especie de casco.

Era una locura arrestar a un asesino de tal magnitud en aquellas condiciones, pero con todo lo precedido, era vital capturarlo bajo sus circunstancias.

BaekHyun dirigió el arribo, con las habilidades que lo respaldaban, pudieron acercarse al desgastado auto de KyungSoo sin mayor inconveniente.

El susodicho yacía dentro del coche en el asiento del piloto, plácidamente dormido.

El descaro de aquello hizo hervir la sangre de BaekHyun y tratando de permanecer apacible, tocó el vidrio de la ventana.

KyungSoo abrió únicamente uno de sus ojos y cuando distinguió las siluetas, se enderezó y bajó el cristal de su lugar.

—¿Si? — preguntó.

Los tres pudieron ver entonces, el semblante del joven. No distaba para nada de la cara que habían visto durante tanto tiempo. Una expresión tranquila, el cabello ligeramente desordenado y una adormilada mirada.

El detective Byun tomó un respiro antes de hablar, estaba a punto de someter bajo arresto al individuo que llevaban meses buscando.

—Do KyungSoo— comenzó a hablar el detective Byun —Quedas bajo arresto bajo los cargos de homicidio en primer grado— posterior a ello, BaekHyun nombró a cada una de las chicas cuyas muertes estaban bajo investigación.

El pelinegro cerró los ojos durante un par de segundos, suspiró y regresó la mirada hasta el trío de la ley para terminar de escuchar su aprehensión.

—Tienes derecho a guardar silencio— continuó hablando el detective mientras abría la puerta del coche, SeHun y JongIn se posicionaron listos para sostener al delincuente —Todo lo que digas podrá ser usado en tu contra en el tribunal.

KyungSoo no opuso resistencia alguna, dejó que el par de oficiales maniobraran con él y mientras JongIn y SeHun lo registraban contra el coche, el detective Byun revisaba el interior del auto, sin dejar de exponer sus derechos civiles —Puedes contar con la presencia de un abogado durante el interrogatorio, si no puedes pagar uno, la corte te asignara uno.

Después de aquello, todo permaneció en silencio. Los oficiales se tomaron su tiempo registrando al joven Do, asegurándose de que no llevara consigo nada más que las prendas de vestir. BaekHyun se inmiscuyó al interior del coche, encontrando un sinfín de pistas potenciales y no queriendo mover nada dentro optó por salir del interior para colocar el par de esposas sobre las muñecas de KyungSoo.

El azabache, permanecía en silencio, sin oponer resistencia, facilitaba las cosas, lucía bastante tranquilo.

BaekHyun lo sujetó y lo condujo junto al par de oficiales hasta la patrulla que él conducía. Lo encerró en los asientos traseros y se dirigió a SeHun.

—Necesito que traigas el auto— explicó —Debes tener absoluto cuidado de no manipular nada del interior— habló con seriedad.

—¿No es mejor que esperemos por los refuerzos? — preguntó, todavía temeroso de la situación. El haber palpado el cuerpo desprotegido del asesino lo tenía con los nervios de punta.

BaekHyun suspiró —Necesitamos revisarlo a fondo para que le den los cargos en cuanto antes— dijo el detective —Así que conduce con cuidado ahí dentro.

Y después de optar por la manera más adecuada de formación, los tres autos se pusieron en marcha.

Adelante iba la patrulla donde BaekHyun manejaba y que llevaba consigo al criminal. Le seguían SeHun y detrás de él, JongIn.

El camino fue silencioso, en todos los aspectos. BaekHyun revisaba el espejo retrovisor delantero con frecuencia, topándose con un KyungSoo abstraído en el movimiento de sus pies sobre el suelo de la patrulla.

Los refuerzos se encontraron con ellos a pocos kilómetros de haber abandonado el pueblo y se distribuyeron en las patrullas para mayor seguridad. Ahora la camioneta que había transportado al resto de agentes lideraba la caravana.

Había sido un día largo.

En la casa de los Do, el trabajo de los médicos forenses seguía su curso aun cuando el sol estaba por ocultarse, los agentes Kim seguían al mando, tomando evidencias de todo lo que ocurría.

ChanYeol, totalmente exhausto había logrado una conjetura inicial para imponer un cargo, conforme avanzara el proceso judicial y las investigaciones de las evidencias, podrían adjudicar todos los cargos correspondientes.

El detective Park había recibido la notificación sobre el arresto exitoso de KyungSoo.

Estaba sentado sobre su silla reclinable, con los ojos cerrados, intentando descansar un poco, cuando empezó a escuchar el bullicio afuera de la oficina, supuso de qué se trataba.

No quería verlo.

Pero tomó las fuerzas necesarias y después de levantarse de su asiento, fue hasta la entrada de la estación de policías.

Un grupo de patrullas y la camioneta blindada estaban estacionadas afuera, como era de esperarse, la prensa había aparecido de inmediato.

Él iba caminando por el pasillo, podía verlo todo claramente a través de los cristales de las puertas principales.

BaekHyun salió del interior de una patrulla, seguido de un agente especial. Abrieron la puerta trasera y luego de una ráfaga de luces de flash, el presunto asesino asomó la cabeza.

ChanYeol había salido al exterior y aguardaba en los escalones de la entrada, observando la escena con toda la impresión del mundo. Y el corazón latiendo acelerado.

BaekHyun seguía apresando a KyungSoo a su lado, sujetando las esposas, caminaron hasta la entrada, evadiendo los micrófonos y las cámaras.

KyungSoo elevó la mirada por primera vez desde que lo habían arrestado.

Sus miradas se cruzaron.

ChanYeol tragó duro, dio un paso atrás.

KyungSoo mostró una suave sonrisa media sonrisa y volvió a bajar la mirada.

El estruendo de los medios continuó.

El jefe JunMyeon había localizado de manera acelerada a un juez para imponer cargos inmediatos. No iba a haber duda alguna en la primera acusación.

Iba a ser una larga noche.

Y ChanYeol no sabía si estaba preparado para nada de lo siguiente.

__♡__

Uuuy, aquí viene lo bueno joven.

Muchas personas tuvieron razón, en que se entregó. Pero ¡¿Por queeeé!?

Sé que tienen la duda de cómo esto podrá ser (o no👀) ChanSoo... Ya, ya lo vamos a descubrir.

uwu para todos.

Nos leemos próximamente.

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