Algo más que el Chupacabras (Vampiros en Puerto Rico)

¡Hora de aplicarse el protector solar vampiros! Vamos directo al Caribe. A Puerto Rico para ser exactos.

Alli, rosaimee nos ha pedido encontrar algo más que el chupacabras que brindarles.

Si, la Isla del Encanto tiene la dudosa reputación de ser la cuna de esta leyenda urbana que se ha expandido desde el Suroeste de los Estados Unidos hasta los confines de Latino América.

El Chupacabras es una bestiecilla que elude descripción. Ehhh... digamos que los detalles de su avistamiento se hacen más coloridos con el aumento del volumen de alcohol en la sangre. En fin, a causa de tanta incertidumbre, su cambiante apariencia se ha convertido en el santo patrón de los perros sarnosos, los coyotes pelados y mapaches víctimas de bromas de desalmados colegiales a nivel del hemisferio.

¡Ah! Pero no hay razón para la desesperanza. Esta preciosa piedra amarrada al Caribe tiene más de quinientos años de historia y ha tenido cantidad de vampiros convencionales y no tan convencionales a través de los tiempos. Así que a un lado, alienígena, mutante, experimento genético, perro del demonio o cualquier otra invención auspiciada por mojitos y sangrías... Vamos a ir a corazón del mito.

Espíritus Nocturnos y Chotacabras:

Mejor conocidos como Guabairos, estas diminutas aves tienen una terrible reputación que precede a los a los tiempos coloniales. Todo comenzó de manera inocente. Estos pajarillos son aves nocturnas. Suelen anidar en tierra y ocultarse del sol para hacer todo un espectáculo en las noches con su presencia. Los guabairos compartían terreno de cría y nido con otras especies, incluyendo ganado. Cuando se presentaban sequías; los descendientes de nativos de la isla, viéndose cortos de productos lácteos y dotados de imaginación, recordaban historias donde estos pájaros se alimentaban de leche para poder mantener a sus criaturas. Pronto, el guabairo se vio protagonizando la versión Caribeña de la "strigga" (espíritus de naturaleza nocturna). Añada a eso una medida de folklore Africano en relación a los Impundulu, (vampiros que toman forma de ave para saciar su sed de sangre) y agregue una nota de narrativa europea y ya pronto se le se le hará algo difícil salir en las noches por esos caminos de Dios. Los españoles le dieron al guabairo el apodo de "Chotacabras". Si le suena familiar, pues si, se asume que son los precursores de la leyenda urbana más conocida en la Isla.

El Vampiro de Moca:

El vampiro de Moca es el reclamo legítimo de la Isla a la leyenda vampírica. Este ser, residente en la municipalidad del noroeste de Puerto Rico que le presta su nombre, ha estado en el ir y venir de la Isla por décadas.

Denominado "cambia formas" este vampiro se ha reportado manifestado en diversas maneras, desde un hombre pálido, parcial a las vestiduras negras, a un ave nocturna, a un hibrido humano con deforme apariencia y largas plumas oscuras con una inclinación a atacar el ganado vacuno.

De hecho, el vampiro de Moca era ya una leyenda respetada desde antes de que el chupacabras asomara su hocico en los años 90's y robara a la Isla de leyendas vampíricas.

Tan famoso (o infame) es el vampiro de Moca, que aparece documentado en los apuntes de un reconocido científico. ¡Toma esa, Chupacabras!

Frank Drake, astrónomo, fundador de SETI y creador de la Teoría Drake sobre la posibilidad de vida inteligente en el espacio; sirvió de director del radio telescopio de Arecibo durante los años 60's. Había llegado a la Isla para completar ciertos estudios y residió en Puerto Rico por varios años. Pues adivinen que... Durante su tiempo como director ocurrió un evento extraño, que muchos no dudaron en tachar de paranormal.

Se trató de una invasión de propiedad donde un hombre vestido de negro, felizmente pareció aparecer de la nada para darse una vueltecita por la periferia del radar, solo para volver a desaparecer de la misma manera en que llegó a las instalaciones. ¡Oh!, Olvide mencionar que el radio telescopio de Arecibo está suspendido sobre el vacío a más de 68 metros (225 pies) de altura.

¿Acróbata nocturno? ¿Vampiro amante de la astronomía? ¿Científicos y guardias de seguridad sufriendo los efectos alucinantes de un plato de lechón con viandas? Usted decide. Pero el encuentro fue tan descomunal que quedó plasmado en el libro "¿Existe Vida Allá Afuera?" de la autoría de Drake.

Así que creo que hemos logrado lo anteriormente inconcebible: destronar al Chupacabras y traerles algo de terror que merece respeto desde la Isla del Encanto.

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N/A: No sé qué encontraremos, pero de que nos vamos para España en la próxima, ¡nos vamos para España

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