POV - Narradora:

Luego de mucho tiempo, Edgar logró platicar tranquilamente con su familia, en esa misma habitación de la base de héroes. Surge les quizo dar espacio y salió de la habitacion, ellos tendrían mucho de qué hablar aparte, y el pelinegro iría cambiando su alimentación y estabilidad mental, pero claro, le tomaría algo de tiempo. Los meses que pasaron le fueron de gran ayuda para recuperarse, hasta después de que Surge cumpliese 19 y, la generación de Max ingresara a la universidad.

Surge seguía pensando sobre el trasfondo de Edgar, de que no simplemente bebía y cambiaba como persona porque se ganó influencia, había más. De todas formas se sentía alegre de que su amigo logró mostrar arrepentimiento a sus acciones. Ya siente un peso menos encima.
Durante los días que Edgar consiguió ayuda, se empezó a reconciliar con varios del antiguo grupo, más que nada con Leon y su hermana; aunque le quedaba a alguien con quien llevaba años sintiendo rencor, Fang.

De hecho Fang se enteró de todo el desastre, pero no de que Edgar quería cambiar como persona, así que no es que le dio mucha importancia. Fue en una reunión de amigos donde Edgar por cuenta suya quizo hablar personalmente con el asiático. El pelinegro esperaba que lo rechazara, pero no, logran generar una amistad luego de años de tensión, hacen las pases.

Durante esa reunión se celebró el cumpleaños de uno del grupo, se trataba de Poco, a quien no antes, Edgar también le dio unas disculpas y platicaron de eso pacíficamente. El adolescente se sentía vivo de nuevo y en paz. Sólo que, sobraba alguien, y durante las reuniones que empezó a ir Edgar, esa persona daba excusas para no ir, era Bea. Tampoco asistió a ese cumpleaños al saber que su ex iba a asistir, todavía necesitaba tiempo y, aunque Edgar no le dijo nada, él respetaba esa decisión.

De todas formas las reuniones entre ellos fueron bastante buenas, el ambiente se mantenía y todos aportaban algo.

En un momento Surge salió un momento la patio de la enorme casa de Poco para atender una llamada de sus padres; al terminar la llamada, admiró por un momento la vista, se admiraba un hermoso atardecer de tonos cálidos pero suaves a la vista. Llevaba puesto sus lentes, pero se los quitó al sentir el sol menos fuerte.
Tras suyo venía Lou con algo de pastel que le iba a dar a su novio, y notó al chico con cara de ensimismado.

---¿Qué fue?---
---Ah, nada.. Me distraje viendo el atardecer---sonrió levemente. Se sentaron un momento en el cesped del lugar y mantenían la vista al hermoso cielo resplandeciente. Surge posó su mano en la de Lou, y este un poco enrojecido sonrió, desviando la mirada con algo de vergüenza. Solo se esuchaban pájaros andando y el leve sonido de la música dentro de la casa.
El rubio se acercó más a él, y el contrario le dio un beso en la mejilla, de ahí dirigió su rostro a él y estaban por juntar labios cuando se escucha la puerta de cristal abrirse y sale Colette danzando y cantando acompañada con la música de fondo.

---🎵¡UNA LOBA EN EL ARMARIO, TIENE GANAS DE SALIR!🎵---  y tras suyo Leon exclama "Auuuu"---¡Vengan para acá, ándenle! ¿¡Jalan para un karaoke!?--- se encuentra bastante energética en esos momentos, y le contagia esa alegría a la pareja quien la acompaña riendo.

Primero empezaron con canciones de habla hispana a causa de que a Colette, Leon, Jacky, Poco y más les gustan bastante esa clase de música, cosa que al resto le agradó y varios seguían la letra de canciones, Poco en una tocó con su guitarra "San Lucas". Pero justo cuando estaba en la mitad de la canción y hasta Janet le hacía segunda voz en melodía y Emz escuchaba encantada a su novio, Colette pone en la bocina de karaoke una canción y empieza a cantar con Leon y Jacky.

Cantan los tres a la vez---🎵Botella tras botella ando tomando... Pa'olvidarme de ella🎵--- las risas se escuchan y Edgar voltea al escuchar una letra algo sospechosa, seguramente le pusieron esa canción bromeando.
---Pendejos...--- dice en voz baja y se aguanta la risa mientras los sigue oyendo cantar.
--- 🎵De ella, de ella Nomas hablo en todas mis pedas🎵...--- canta Leon.

Los que se reían también eran Surge, Max, Lou, Janet, Poco y la mayoría. Pasaron a otras canciones como baladas, salsa, todavía seguían con el habla hispana. Colette recordó que Lou era bueno cantando y le pasó el micrófono.

---Haber, canta una, Lou! Pero que no sea en inglés, luego vemos esas--- le dice la peliblanca, este toma el micrófono y mira hacia la computadora que conecta a la bocina, se acerca a buscar alguna que conozca de ese estilo.

Y en unos segundos empieza a soltar su melodiosa voz.
---🎵Mi buen amor🎵...--- varios voltean y se escuchan gritos al reconocer la canción, Poco y Janet lo acompañan con otros micrófonos, y Colette para dar más ambiente, jalonea a Surge y finge que danza con él, y él le sigue la corriente entre risas y cantando. En una de esas ella da una voltereta y Surge la sujeta de la mano y el brazo de ella se estira, y hace una pose dramática, haciendo reír al resto.

---¿Qué tal la de Lamento Boliviano, Surge? ¿Te acuerdas de cuando la cantaste en tus quince?--- le dice el esqueleto en lo que le pasa el micrófono, este accede sonriendo y Leon busca la canción, Colette se prepara para andar como intérprete en la siguiente canción. Todos están en la gran sala con los muebles pegados a las paredes para más espacio.

Surge se pone de pie y empieza a cantar y da alguna danza con ritmo, Colette quien está a su lado usa una escoba como si fuese un instrumento, y Leon al otro lado se pone una peluca rosada e inicia con un baile, Gus le sigue la corriente y se pone una pelucha de color verde, y encima una toalla que se amarró hasta el pecho como si fuese un vestido
; debido a esto Surge suelta unas risas y no puede cantar tanto, pero lo intenta, aunque esos dos parecen payasos alegrando al público y más al cumpleañero.

En el último coro de la canción el rubio le toma de la mano a Lou quien estaba en uno de los sofás y lo toma de la cintura, el resto chifla o hace booyah en juego. El peliblanco vuelve a ruborizarse pero trata de seguir los pasos de baile que solo es cosa de mover los pies hacia los lados pero a cierto ritmo.
Incluso Edgar quien según, afirmaba que no le gustaba esa clase de canciones terminó cantando con ellos unas de un tal Ricardo Montaner, un gusto culposo de parte de Poco.

Y así la pasaron teniendo una divertida tarde de karaoke y haciendo una que otra actividad hasta la noche que, algunos se fueron retirando y agradeciendo por haber sido invitados.

A Ricochet le tocaba ir por Lou y de paso, a petición de Byron, le dio un ride a los hermanos Edgar y Colette.
Solo que Lou le pidió si podía estar un rato en casa de Surge, por lo que le avisó a Mr. P e igual así le avisó por mensaje su hijo. Así se fue con Surge a su casa, aún se encontraban con algo de energía que ellos les pegaron y se encontraban riendo recordando cómo algunos se ponían a hacer alguna payasada.

Era fin de semana y ambos estaban descansando aparte de sus deberes de sus facultades, por lo que se sentían tan bien teniendo algo de tiempo para ellos. Se fueron en el vehículo del joven héroe. Llegando a su casa, las luces amarillentas abundaban y Surge al salir le toma de la mano al contrario y luego lo acerca hacia él delicadamente y lo abraza cálidamente. Era una noche con algo de viento frío.

Al entrar a la casa, Lou se quedó en la sala sentado en uno de los sofás. Mientras Surge fue a dejar algo del postre de la fiesta en la cocina. Volteó a ver a Lou y por un momento, pensar de nuevo en que su pareja es un amor de persona. No esperaba que él lo tendría como su acompañante y está tan contento por llevar un buen tiempo como novios, de repente se le vinieron ideas futuras, pero claro, debe mantenerse en lo que le pasa ahora; sólo que, aveces imagina una vida con Lou en la que ambos están en matrimonio, puede ser muy soñador, mas imagina hasta cuando lo tenga con ropa de novio o si antes él será el que le pida matrimonio.

Surge se sentó a su lado y, escuchó que su novio le hablaba.
---Mande, Lou--- y fue que el peliblanco se le acercó y le acarició de la mejilla, quedando ambos sentados en el sofá; la única luz prendida era una lámpara cerca de ellos y otra en la cocina, ambos de tonos amarillentos.

---Yo... ---no sabía si decirle lo que quería ya que, le daba bastante vergüenza, inmediatamente pegó su cara con el hombro de este y se encogió de hombros.
---Ah, ¿Qué fue, Lou?--- no sabía que el peliblanco quería pues, simplemente ir a su cuarto y encerrarse con él.
---...¿Podemos ir a tu cuarto?---preguntó nerviosamente, pero ese tono puso a Surge en el mismo estado, sintiendo la cara arder y abriendo algo más los ojos, ya entendía lo que quería, y no lo esperaba, una que otra vez sacaron el tema pero, de todas formas llevaban un buen tiempo sin darse amor más íntimo y ya traían ganas, no quería dejar de lado el momento.

---¿Estás... Seguro? Digo... No tienes que...---
---Sí--- todavía seguía encorvado y lo abrazaba con fuerza a causa de los nervios.
---Bien...--- en eso, tomó las piernas de su novio y con él lo cargó, y se lo llevó arriba, el otro estaba muerto de la vergüenza pero curioso por lo que sea que pasaría en esa habitación con ellos solos. El más alto dejó la puerta con seguro y su celular silenciado.