Habia entrado en un total panico cuando Bao me llamo diciendome que Corey se habia marchado molesto sin razon alguna del entrenamiento, habia preguntado si sabia donde se encontraba ya que no estaba en su hogar pero la verdad es que no tenia ni la mas minima idea. Por la confesión de Bao al parecer Corey era un total imprudente cuando estaba molesto y me hacía la idea de cuanto lo era.
Salí corriendo de mi hogar buscandolo en cada lugar que me parecía logico encontrarlo hasta que mi mente viajó hacia aquel parque donde habiamos charlado me era una buena opción y agradecí mucho a mis neuronas por hacerme recordar aquel lugar cuando lo visualice a lo lejos. Se veia angustiado, cansado y totalmente perdido, creí en lo que me dijo con respeto al pasado ya que sabia que el suyo no habia sido exactamente el mejor en especial porque problemas del pasado aun estaban presente, trate de hacerle recordar sus palabras y pense haberlo logrado cuando vi una pequeña sonrisa asomándose entre sus labios pero lo que nunca me espere o imaginé fue aquell pregunta.
Me quede en silencio pensando en quién le podria haber dicho y aunque me parecia bastante sorprendente Dallas no estab entre la lista de culpables.

─No exactamente ─le confesé apenada. Podia sentir la vergüenza inundando mi ser y las lágrimas amenazando con salir, no sabia exactamente a que le temía pero si sabia que aquella mirada que Corey me dedicaba me dolía bastante ─. Durante la fiesta nosotros lo ibamos a hacer pero, bueno, él símplemente se marcho a medio camino.

─¿Hasta donde llegaron?

─Ese tipo de cosas no se le preguntan a las ex novias de los hermanos ─mencione tratando de dejar el tema por olvidado pero Corey no dejaba de mirarme con seriedad.

─Él solamente me toco, pero nunca me penetro, me follo, me cojio, como quieras decirlo. Santo cielo, ¿por que me haces decir esto en voz alta? Es tan vergonzoso y penoso.

Le recrimine mientras sentia como las lagrimas por la pena recorrian mi mejilla. Corey solto un largo y cansado suspiro, entonces lo mire temerosa porque sentia que aquelli que habia temido se estuviese cumpliendo, pero en vez de sentir su rechazo o cualquier otra cosa parecida él me abrazo. Senti sus fuertes brazos rodear mi cintura para llevar una de mis manos a mi nuca para recargarla en su pecho, su abrazo era fuerte pero al mismo tiempo tenía cuidado de no lastimarme, podia escuchar el ritmo de su corazón el cual latía con tranquilidad y ante esta situación tan sorpresiva me senti bastante protegida y tranquila.

─Tenia miedo de qué el tambien te hubiese arrebatado algo tan importante despues de lo cruel que te trato.

─¿Por que tendría que importate algo como éso?

─Porque eres importante para mí.

El sonido de mi teléfono interrumpio lo que pudo haber sido algo bastante romántico, Corey me solto un poco pero solamente lo suficiente como para contestar mi teléfono.

─¿Lo encontraste? ─ pregunto Bao en cuanto contestó el teléfono.

─Si y esta perfectamente bien ─mencione mientras lo observaba como aun me sostenia por la cintura ─. Él solamente estaba sentado en el parque.

─Que alivio. Ahora se lo que mi madre sintio cuando me escape de casa para ir a una fiesta, jamas volvere a hacerle algo asi.

─El karma es sin duda lo mas confiable. En fin yo hablare un poco con él, nos vemos mañana.

─Antes que cuelgues Itzel, me gustaria decirte algo.

─¿Que sucede?

─Tan solo dejen el rodeo y salgan de una ves.

─¿Que? ─pregunte con confusión y sorpresa, pero al recordar la posición en la que me encontraba con Corey en este mismo momento decidi callar ─. Yo tan solo te veo mañana ─asegure antes de colgar y observarlo─. Corey.

─¿Si?

─¿Podrias soltarme? ─pregunte y él miro sus brazos que aun me sostenian para alejarse lentamente ─.Buen chico.

─Yo lo siento.

─No te disculpes, todo esta bien yo tan solo queria un poco para pensar en algo.

─¿Y que es ese algo? ─cuestionó mientras me miraba.

─ La verdad sobre lo aue sucedio aquella noche... Creo que es hora de contarte la verdad, asi que ve preparandonte mentalmente, compra un par de pañuelos y hablemos mañana.

─¿Mañana? ¿Quieres hablar sobre ello hasta mañana? ─pregunto con intriga y horror adornando su rostro.

─Corey e aprendido a conocerte y me doy la idea de lo que harás. Ahora mismo necesitas descansar un poco y llegar a tu hogar tranquilo, dejemos los problemas para mañana.

Él me observo intranquilo pero tras respirar ondo comenzo a asentir lentamente con la cabeza antes de pasar su mano por su cabello carbón con un tanto de frustración y tranquilidad.

─De acuerdo, sera hasta mañana.

─Bien, ahora vayamos cada quién a su hogar y tratemos de preparnos mentalmente.

─De lo único que trato de mentalizarme ahora mismo es en no tratar de morir de la angustia y la frustración porque no quieres contarmelo. Me siento como una adolesente frustrada porque no conoce los secretos de su mejor amiga.

─Tal vez por que así es tu caso, amigo ─mencione utilizando aquel mismo tono que él habia utilizado aquella noche en el jardin de mi casa. Note como su ceja se arquearon mientras una sonrisa ladina se dibujaba en sus labios y es que aunque no dijese nada aquella mirada lo decía todo.

─Andando Coxx te llevare a casa.

Mencione mientras lo empujaba levemente de forma juguetona pero él seguia con atencion cada uno de mis movimientos.

─Andando Coleman ─mencionó mientras tomaba por un momento mi mano para despues soltarla para encaminarse en dirección a mi auto.

─Creo que yo misma me matare de un infarto un dia de esto ─me susurre a mi misma antes de ir detras de Corey.

Como siempre que ambos ibamos juntos en el auto colocaba mi repertorio favorito de canciones que casualmente también era el de Corey. Aunque no conversamos el ambiente era totalmente perfecto, cantamos casi en susurros las letras de las canciones pero cuando llegaba el coro lo haciamos a todo pulmón mientras haciamos movimientos con las manos fingiendo bailar.
Al llegar a su hogar observe a Dallas jugando con su balon en el estacionamiento, él nos observo sin dejar de rebotar su balon contra el suelo.

─Huy dejame intentar algo, asi que actua con naturalidad ─le mencioné a Corey mientras él bajaba del auto.

─Hey, hola cuñado ─le grite a Dallas mientras el encestaba el balón en el aro que tenia colgado en el techo de su cochera.

─Muy graciosa Coleman pero eres una mala mentirosa.

─¿Que te hace pensar que miento? ─cuestione mientras observaba como tomaba su balon para despues mirarme.

─Cada vez que mientes arrugas mucho tu nariz ─informó mientras señalaba su nariz, inconsciente lleve mi mano a mi nariz antes de observarlo un tanto sorprendida.

─No es cierto.

─Si lo es, cuñadita ─mencionó con burla antes de lanzar de nuevo el balón.

─Recuerda Itzel, no vale la pena ir a prisión tan solo por arrollar a Dallas con tu auto.

─Primero invitame un cafe ─mencionó Corey mientras se recargaba en el vidrio.

─Ya largate a tu casa.

─Pero que novia tan mandona ─mencionó con gracia y beso mi mejilla ─. Adios Coleman.

─Solo ve adentro ─le ordene a lo cuál él retrocedio antes de despedirse, coloque nuevamente el auto en marcha y gire para observar a Dallas quien parecia estallar de la ira en cualquier momento, le mostre mi hermoso dedo medio y con una sonrisa triunfante regresé a casa.

Al llegar a casa mire la oscuridad de mi hogar al parecer mis padres habia salido por lo cual significaba una cosa, ir a la nevera en busca de una nota y realmente había sido, habían salido a celebrar su aniversario de cuando se conocieron, quien diría que el haber golpeado a alguien por accidente con un tamal causaría una gran historia de amor que aun es bastante duradera. Después de todo tenia aniversarios para casi todo no solamente el de su dia de boda y era algo que admiraba de ellos, algo como recordar a detalle cada fecha importante donde realisastes cosas en verdad significativas con la persona que amas no es algo que cualquiera puede recordar debidamente o al menos no mientras el tiempo pasa. Subí a mi habitación en espera de un merecido baño pero mi vista se concentró en las cortinas que se movían al ritmo de la brisa me acerque confundida ya que yo nunca dejaba la ventana abierta sin mencionar que esta siempre la dejaba asegurada, abrí la cortina y observe una fotografía pegada a ésta, la mire con cuidado para observar a un Corey con un uniforme blanco con frangas azules mientras abrazaba a una chica rubia quien portaba un uniforme de porrista con los mismos colores que el uniforme de Corey, él sonreía mientras la Leila besaba su mejilla. Tome la fotografía para despegarla de mi ventana y la gire para observar como habia algo escrito con tinta roja.

¿Y si ella vuelve? ¿Que harías?

D

onde preguntas que jamás había cruzado por mi mente pero que ahora mismo estaban grabadas junto con otras mas. Escuche un estruendo a mis espaldas, senti como mis manos comenzaron a temblar mientras dejaba la fotografia en el mueble que se encontraba a un lado de mi ventana, tome la lámpara que se encontraba sobre este mueble y gire con rapidez mientras apuntaba la lampara hacía la persona que habia causado aquel estruendo. Suspire con alivia al oír el maullido de señor Pikhu y yo tan solo deje la lámpara en su lugar antes de tomar el gato entre mis manos.

─Veniste a cobrar venganza por lo de la puerta, ¿verdad? Gato travieso, casi me matas del susto ─el gato comenzo a ronronear entre mis brazos y yo tan solo concentre mi vista en la ventana la cual aún seguía abierta, la cerre y volve a colocar el seguro pero aun asi la confianza ya no estaba y mucho menos ahora que me encontraba sola en casa ─. Que tal si vamos con tu dueña y de paso nos quedamos con ella.

Baje los escalones de mi hogar con prisa junto con el señor Pikhu entre mis brazos hasta llegar al hogar de la señora Burn toque el timbre en espera de que abriera puerta.

─Encontraste al señor Pikhu ─mencionó alegre la señora Burn mientras tomaba a su gato entre brazos.

─Si y casi me mata de un infarto por el susto que me dio.

─Es cierto, estas sola en casa.

─Si, ¿podria quedarme con usted?

─Este tipo de oportunidades se aprovechan, deberias llamar a Corey para ya sabes, charlar un poco ─mencionó la señora Burn mientras me guiñaba su ojo de manera complice.

─No hare eso señora Burn y mucho menos para "charlar" un poco.

─Pues que pena, bueno si tanto insistis en quedarte con esta anciana pasa, ¿pero estas segura que no quieres hablar con Corey?

─Muy segura ─le afirme mientras entraba a su hogar.

A la mañana siguiente volvi temprano a mi hogar para preparme para ir a la universidad, primero tome el desayuno y despues volvi a mi habitación. Aunque trate de ignorar el incidente de ayer mi mente aun divagaba en aquello por lo que me acerqué para observar nuevamente otra fotografía pero esta ves con la ventana cerrada, abri un poco la ventana para poder tomar la fotografía.
Mire aquella chica rubia que Corey tanto llego a amar como para sacrifircar tantas cosas en una cama concetada a tantos cables y con un rostro totalmente golpeado y con sangre seca, gire la fotografia y observe como algo estaba escrito pero esta vez con tinta azul.

Ten cuidado Itzel Coleman... 28

Senti como los colores de mi rostro desaparición al leer aquella oración tan corta, el sonido de mi puerta abriendose me alarmo tome la lampara con prisa y la lance contra la puerta, es escuche el grito de mi madre y entonces respire con alivio.

─Pero que susto me diste mamá

─¿Yo asustarte a ti? Cuando fuiste tu la que casi me asesina con su lampara, yo soy la que casi se hace pipi del suto chamaca ingrata. ¿Que demonios te sucede?

─Es que pense que eras alguien mas.

─La señora Burn me dijo que pasate la noche con ella y ahora ezte recibimiento tan violento, ¿que sucede Itzel?

Pregunto angustiada mientras me miraba fijamente, yo trate de actuar normal, guarde las fotografías en el cajon y fije mi vista en la lampara destrozada.

─Vi una pelicula de terror anoche y creo que en verdad me dejo traumada.

─Sabes que eres pesimas para las peliculas de terror y aún asi las veces, carino a veces eres tan estupida como tu padre. Ahora levanta tu desastre que quiero dormir un poco porque tu padre no me dejo hacerlo anoche.

─Que asco mamá, no necesitaba saber eso.

─Yo creo que si en especial despues de lanzarme esa lamapara como una ninja ─mencionó antes de marcharse y yo tan solo observe mi desorden antes de desviar mi vista hacia la ventana. Creo que compraría un candando a esa cosa.

Al llegar a la universidad, apague mi auto como costumbre y me encamine por el largo estacionamiento para dirigirme a mi casillero para ir en busca de mi cuaderno de repasos. Iba analisando cada clase que tendría y las posibles actividades que tendria pero en especial analizando el orden en el que tendria que decirle las cosas a Corey.

─¡Coleman!... ¡Itzel Coleman! ─grito alguien desde el pasillo. Levante la mirada para buscar el origen de aquellos gritos. Vi como el mellizo Hamilton se acercaba a mi mientras corria torpemente.

─¿Que sucede? ─pregunte y lo observe tomar una gran bocada de aire antes de que me arrebatara mi cuaderno para echarse algo de aire.

─Es.. Que...Uff, jamas habia... corri...do tanto en mi vi...da.

─Maldita sea, ¿que sucede Charlie?.

─Es Corey... Él esta en problemas.