Hoy quiero dar un paso atrás, se acaba aquí tu voluntad. Ya no tendrás mis lágrimas, no quiero más este cuento del último aliento. Claramente tengo miedo de perder.

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La promesa no se llegó a cumplir. Magnus tenía un pedo encima que lo hizo dormirse fuertemente y para cuando Alec llego, solo había ronquidos. Se lo quedó mirando dormir hasta altas horas y luego se durmió el. Había tanto de qué hablar pero a la vez no quería hablar más.

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- Hey... - dijo Magnus asomándose en la cocina.

- Buen día... - le contestó Alec.

- ¿Hay café?

- Por supuesto. - Alec sirvió una taza a Magnus y la dejó a su lado para que Magnus se acercara. Este lo hizo muy lentamente y se sentó al lado de su novio.

- Deberíamos hablar. - sentenció Magnus.

- No se de que hablarte la verdad. Me siento tan desilusionado... No se por donde empezar.

- Vendes drogas Alexander.. Eso no está bien.

- Y vos las consumís... No solo eso, te escapaste, fuiste a un bar y estabas con una mina - Alec soltó una carcajada,

- No iba a consumir nada...

- Ni siquiera me negas lo de la mina.

- No hay nada con ella, es una ex.

- JA! Una ex, wow... Y te ibas a drogar con esa mina...

- No iba a drogarme, lo deje hace un montón eso.. Ya no consumo.

- Dios.. De quien me enamore...

- Alexander mírame.. - Magnus tomó el rostro de Alec y este lo miro.- Por favor no pienses así de mi, yo no soy así.

- ¿Como se que puedo confiar en vos? Ya no puedo.

- Amor por favor perdóname..

- No Magnus.. Ya no. - Alec giro su rostro, saliendo del agarre de Magnus y se levantó para ir a lavar la taza y un plato donde comió unos tostadas.

- Amor por favor que decís. - Magnus empezó a desesperarse.

- No quiero hablar más. Me siento traicionado de una manera que... No quiero ni pensar en nada...

- Alexander decime qué hacer.. Por favor.

Alec lo miró y fue todo. 

Todo cambio.

- Quiero que nunca más salgas y que no veas mas a tus amigos.

- Esta bien. - Dijo Magnus sin siquiera pensar.

- ¿Seguro? - Preguntó Alec y se acercó a él.

- Nunca mas voy a salir, no me importa mas nadie.

- Si, exacto ¿Para que queres estar con otros?

- No, no quiero.

- Me debes algo vos. - Alec acarició el rostro de Magnus y este respiro.

- Si... - Magnus lo miró y se acercó, tomando de la cintura a Alec.- Haceme tuyo... Soy tuyo mi amor...

- Si lo sos... - Tomó de la nuca con fuerza a su novio y lo acerco, lo miro a los ojos, este no dijo nada y lo besó con fuerza. Había ganado.

Que gane, que me importa el mundo si no lo tengo a él.